Rodolfo Hinostroza siempre destacó por su original
poesía y polifacéticos escritos, él era la mayor síntesis de su sensibilidad
humanista. En el Cusco lo vimos por última vez un 10 de abril del 2015. Yo
cumplía, contra todo pronóstico, 30 años y ese día se inauguraba la Casa de la
Cultura del Cusco en la Casona San Bernardo. Los mismos “enerolovers” que hoy promueven la vigésimo cuarta versión del Enero
en la Palabra, inauguraron una sala para la poesía entre otras dedicadas a
otras artes. Ese día, mi obsequio de cumpleaños fue conocer a Rodolfo
Hinostroza, gracias a otros poetas como Vladimir Herrera y Carlos “El Chino”
Velásquez. Tuve el privilegio de beber con él y fumar un cigarro de aquellos
que te llevan a las estrellas y te dejan estupefacto. Su estela me llevó a los
mismos lugares y amigos en Puebla, México. Al terminar, hace poco, de leer su “Poesía
Completa” editada por Tribal Poesía el 2013, no pude evitar llorar de gratitud
pero también de emoción ante el último pasaje de su vida que retrata a sus
ancestros y familia. Todos aquellos que vivieron en “Casa Grande” aquella casa del
“abuelo Isidro que enterró su fortuna en una mina de oro”.
“Memorial de Casa Grande” se publicó por primera vez
el 2005 luego de un prologando mutismo que presagiaba esta “lágrima negra”
recordando aquella casa barrida por los infortunios de la familia y el
deslizamiento de uno de los frentes de Huascarán en 1970. En fracción de
segundos dejó 70 mil peruanos sepultados en lo que ahora conocemos como el
Campo Santo de Yungay. El libro empieza con “Los tíos de Huaraz” retratando su
éxodo y uno a uno a los hermanos y hermanas de su padre, aquellos que siempre
trataron de estar juntos:
“En el infierno de Lima ya instalados / Los 11 hermanos fueron solidarios en la pobreza y se dieron la mano cada vez que pudieron / Creían que “la unión hace la fuerza” / Y siempre trabajaron y vivieron en mancha / Y donde iba uno, iban todos los tíos.” (Pp. 223) Barranco es un paisaje recurrente como la vida en familia y en barrio: “Tía Isabel, Chapica, la segunda, se casó / con un capitán Solis, de la caballería, / que le hizo puras hijas mujeres: / Camucha, que a su vez se casó con un aviador, Alicia, que terminó por casarse con mi tío Rodolfo, / Esperanza, que se casó con Hugo, / Mañuca, que era epiléptica, con unos espectaculares ataques teatrales / de espuma por la boca que mantenían a la familia en vilo / mejor que la radionovela de la una de la tarde / y nunca se casó, y por último Bertha, la malcasada…”
Editorial Tribal.
“A Bertha el marido Miguel le pegaba a la mala. / Le
pegaba con el puño cerrado, como a hombre, / hasta desfigurarle el rostro a
puñetazos / con zapatos blanquinegros de caficho la pateaba, / Con hebilla de
correa le pegaba, con encono la pisaba, / Ante sus 8 hijos aterrados / que
recibían su parte de violencia / En casas miserables que olían a caca, a leche
y a meados / Y después que no nos hablen de la baja autoestima de los peruanos…”
Esos terribles episodios contrastan con los gratos recuerdos entre verso y
prosa. Entre horror y alegría la imagen inmaculada de la casa paterna brilla…
“El apacible Huaraz de mis abuelos / desapareció, con sus antiguos fastos / sus
fundos, sus casonas, sus saraos, / sus añosas familias, sus costumbres…”
“Las bodas de tía Luchita” es otro poema extenso que
rememora el cariño que uno de niño siente por aquellas figuras maternas que a
veces sobrepasan los límites de la ternura. Luego de leerlo, cómo no recordar a
la entrañable “tía Chofi” de Jaime Sabines. Y cómo no recordar a “Los Hijos de
Clausen”, el retrato de la familia materna donde nunca se halló y donde tal vez
se suscitaron los más crueles traumas para un niño. Relata la nefasta herencia
del abuelo danés para llegar a la figura de la madre y hablar del amor que se
tuvieron sus padres y también cómo se rompió. Hoy en día ser hijo de padres divorciados
no es problema de otro mundo, sin embargo a este poeta le llegaron las pesadumbres
desde niño y esta catarsis versada es un fiel testimonio de lo que el arte
puede hacer por nosotros. Sanar, reinventar, encontrar las palabras más
sencillas y dulces para explicar los trágico y complejo. Entendí aquella
conversación del 2015 cuando nos hablaba de astrología y gastronomía, de la
política como una experiencia no como un dogma. Recuerdo su amena conversación
henchida de experiencias, libros, amigos. Al leer este libro que reúne su
Poesía Completa, no pude evitar evocarlo y también recordar su “antropología de
los gigantes” y como no, las recurrentes referencias a Octavio, el poeta que
había desaparecido durante años y a quien tuve la suerte de conocer gracias a
“Los huesos de mi padre”, otra vez, gracias maestro:
“Los huesos de mi padre”
Serán éstos los
206 aristocráticos huesos de mi padre?
Todos completos,
con su maxilar inferior, su frontal,
sus falangetas,
su astrágalo,
su vómer, sus
clavículas?
No se habrán
confundido
en la Fosa Común
con los de un
vagabundo
de esos que
abundan en las calles de Lima,
y mueren sin un
grito? Cómo voy a confiar
en que sean
éstos los huesos de mi querido padre,
don Octavio,
Tachito,
si en la Fosa
Común donde lo echaron
puede ocurrirle
cualquier cosa
a los huesos de
uno?
Su hermano, tío
Reynaldo había jurado
encontrar a mi
padre, y recorrió toda esta Lima a pie
durante un año,
para hallar a mi padre, el poeta,
que se había
perdido en la ciudad,
como suele
ocurrirles a los ancianos y a los locos.
Todos los días
salía, después del desayuno,
a buscar al
hermano mayor,
a aquel poeta
provinciano,
talentoso,
desgraciado y perdido
por los barrios
de Lima. Llevaba
una vieja foto
de mi padre, amarillenta,
donde aparecía
con su pelo ya blanco,
sus ojillos
brillantes de inteligencia, sus mejillas flácidas
labradas por
años de inútiles batallas
contra lo que él
llamaba su destino adverso
cuando se
hallaba de un ánimo blasfemo,
dispuesto a
enrostrarle a un Dios
en el que no
creía,
sus continuos
fracasos.
La boca grande, elocuente.
La frente alta y
despejada. Con un terno marrón, creo,
a rayitas. Esa
imagen debió corresponder
a una época
feliz, tal vez la de Huaraz,
cuando estábamos
todos juntos, mi hermana
mi madre y yo,
mucho antes
del divorcio.
Reynaldo la
mostraba
a la gente, los
interrogaba venciendo
su enorme
timidez: “¿Ha visto a este hombre?”
indesmayablemente
a pie,
tío de a pie
como un remoto soldado de una guerra perdida,
raso, humilde,
cumplido,
indagando en los
parques, en los hospitales,
en las
estaciones de autobús,
en los mercados,
pues quería
encontrarlo,
ésa era la
misión que se había impuesto
antes que la
muerte se lo lleve.
Pero la muerte
se llevó primero a tío Reynaldo
de un cáncer al
estómago,
sin saber que mi
padre lo había precedido en el último
rumbo,
y no fue sino
mucho más tarde que mi hermana
al fin encontró
a mi padre
en una Fosa
Común del cementerio de Miraflores
donde sus huesos
misteriosamente habían venido a dar
porque nadie
había reclamado su cadáver.
La muerte
que con callado
pie todo lo iguala
lo había
sorprendido en un asilo municipal
donde llevan a
los locos que vagan por las calles de Lima
y había muerto,
enloquecido y solo,
él, Octavio,
Tachito, el poeta, el hermano mayor
que había nacido
en cuna de oro.
Siempre pensé
que moriría rodeado
como Maese
Manrique
de sus hijos,
hermanos y criados
reconciliado con
su terco destino
y cesaría la
angustia
la loca angustia
que desorbitaba sus ojos
porque no quería
morir como un fracasado
y su muerte le
cerraría para siempre
las puertas de
La Gloria.
No reposó un
instante en vida
acechando a la
suerte en todos los caminos,
en todos los
concursos,
esperando un
cambio del destino
un premio, algo
definitivo
que sacase su
nombre del anonimato
y le diese la
paz. Ya no soñaba con el Premio Nobel,
sino con la
publicación de sus poemas
que eran
profundamente hermosos
y cada día más
bellos
cuanto más
desgraciada era su vida.
Se sentía en
deuda
con nosotros sus
hijos,
y los recuerdos
de nuestra infancia feliz lo atormentaban
hasta hacerlo
sangrar
como un patriarca
loco que ha perdido
el paraíso
inadvertidamente
por una mala
mano en el tresillo
un mal consejo,
o una debilidad de temple
inconfesable.
Entonces quería
estar solo, huía
de la familia,
se confundía
en Lima entre
los vagabundos, le aterraba
y le atraía como
un destino escrito
la mendicidad al
final del camino. No aceptaba
el rol que todos
querían para él:
el del abuelo
sabio y respetado
que mora y
aconseja en el hogar de su hija: prefirió
seguir en la
batalla hasta el final,
irse a la calle
esperando un
milagro.
Sus despojos
fueron a dar a
la Fosa Común
hasta que el
proceso
de putrefacción
termine, en cosa de tres años
y sus huesos,
mondos, nos fueron entregados
en una caja de
zapatos, con una etiqueta identificatoria.
Ahora reposan en
el Cementerio el Ángel
en una de esas
fúnebres bibliotecas de huesos
a pocos bloques
de donde mi madre duerme su sueño eterno.
La muerte,
piadosamente,
ha acercado los
huesos de dos seres que la vida separó,
PAVEL UGARTE CÉSPEDES
Cusco - Perú / La Convención, Quillabamba, 1985
Antropólogo, escritor y poeta. Premio Regional de Cultura Cusco 2015, con el libro de poesía “Repatriación de las Aves”. Su último poemario “Andesground” ha sido traducido al inglés, francés e italiano en una edición realizada por la editorial mexicana Valkiria el 2019.
Es parte de las antologías “El Color de las Palabras” (Antología del Festival Internacional de Poesía Jauría de Palabras, 2019); “5to Festival Caravana de Poesía” (Amarti, 2018) “PACHAMAR” (Antología de Poesía Latinoamericana, Chile, 2018), “Enero en la Palabra” (Municipalidad Provincial del Cusco, 2018), “Antología de los Ganadores del Premio Regional de Cultura Cusco” (DDCC, 2017); “Enero en la Palabra / Memoria Impresa”, (Biblioteca Regional Cusqueña, 2015), La Lira Rebelde Libertaria (Lima, 2014), “Tratado de la página en blanco” (Cusco, 2012) y “Convergencias / Muestra de Poesía Peruana Contemporánea”, Editorial Río Negro (Lima, 2011).
Ha publicado los libros “Animal Urbano y la Otra Ópera” (Cascahuesos Editores, 2011), “Vermut” (Compilación del Premio Nacional Juvenil de Poesía Javier Heraud, 2012), “Rareza Dura” (Cusco, 2012), y plaquetas como Cementerio de Hallazgos (2009), Vermut (2008), Animal Urbano en la Noche Mineral (2007). Recientemente, el escritor Juan Alberto Osorio, ha reseñado su poesía en el libro “Literatura Cusqueña”, editado por la Dirección Desconcentrada de Cultura Cusco (Chaska Mayu, 2018).
Ha escrito para museos de suma importancia en la ciudad del Cusco y también a nivel nacional, como el Lugar de la Memoria de Huancayo (2015), el Coro Alto del Templo de Santo Domingo Qorikancha (2016) y el Museo de la Capilla Loreto en la Compañía de Jesús el 2018.
Ha vinculado sus estudios de antropología con la producción literaria editando publicaciones como el Mapa Literario del Cusco (2017, 2018) donde cristaliza una apuesta por la historia, antropología y cultura impresa. Es columnista de la revista cusqueña Ideario como también de la revista web Lima Gris. Junto a otros jóvenes profesionales ha conformado el Centro de Investigaciones Bibliográficas CVSCO, con quienes realiza el rescate bibliográfico de la ciudad capital histórica del continente. Parte de su trabajo se encuentra registrado en el fanpage Pavel Ugarte / Poesía Peruana como en diversos sitios de la web. En la actualidad se desempeña como gestor en el Área Cultural de la Corporación Educativa Khipu en el Cusco.
Con el corazón encogido y una rabia que quema las entrañas, exigimos justicia. La tragedia ocurrida en Trujillo no es un «accidente inevitable», sino el resultado de una cadena de negligencias, omisiones cómplices y privilegios que protegen a los que jamás rinden cuentas. Intercorp, su vocero Neuhaus y el gobernador César Acuña tienen nombres y apellidos: deben responder ante la justicia y la sociedad por permitir que un centro comercial con graves fallas estructurales siguiera operando, poniendo en riesgo miles de vidas.
La inspección que nadie escuchó
En diciembre de 2023, la Municipalidad Provincial de Trujillo realizó una inspección técnica en el centro comercial de Intercorp. Los hallazgos fueron alarmantes: deficiencias estructurales, sistemas antiincendios inoperantes, salidas de emergencia bloqueadas y materiales de construcción precarios. Las órdenes fueron claras: cerrar y reparar. Pero Intercorp, en lugar de acatar, desplegó su maquinaria legal y mediática para presionar, desacreditar al alcalde y burlar la ley. Mientras tanto, el gobernador César Acuña, más ocupado en sus viajes que en su deber de proteger a la ciudadanía, guardó silencio.
Hoy, las grietas en las paredes se convirtieron en grietas en familias enteras. ¿Cuántas personas murieron aplastadas? ¿Cuántos niños, madres, trabajadores quedaron atrapados en un edificio que ya estaba condenado?
La sangre derramada es responsabilidad directa de quienes priorizaron el lucro sobre la vida.
El juego sucio del poder: ricos vs el pueblo
Este caso expone una realidad perversa: las corporaciones y sus aliados políticos operan en un sistema de impunidad estructurado. Cuando la municipalidad intentó hacer su trabajo, Intercorp respondió con abogados, campañas de desprestigio y presiones a autoridades complacientes. Neuhaus, como rostro público de la empresa, minimizó los riesgos y vendió una imagen de «seguridad» falsa. Mientras, Acuña, ausente y negligente, demostró una vez más que su prioridad no es Trujillo, sino sus intereses.
¿Por qué siempre es igual? Los informes técnicos se archivan, las multas se reducen a migajas y las víctimas son reducidas a estadísticas. Mientras los poderosos se protegen entre sí, el pueblo paga con su vida su codicia.
Exigimos acciones, no condolencias
No basta con lamentos. Demandamos:
1. Sanciones drásticas contra Intercorp, incluyendo la incautación de activos y la prohibición de operar hasta garantizar estándares de seguridad.
2. Procesamiento penal para Neuhaus y César Acuña por omisión de funciones y posible homicidio culposo.
3. Una fiscalización nacional urgente a todos los centros comerciales de Intercorp en el país. ¿Cuántos otros «megaplazas» son bombas de tiempo?
4. Depuración de autoridades corruptas** que permiten estos crímenes de cuello blanco.
Ni un minuto de silencio, toda una vida de lucha .
Trujillo llora, pero también se levanta. Esta tragedia no puede quedar en el olvido mediático. Honremos a las víctimas convirtiendo el dolor en acción. Basta de complicidades, basta de empresarios que juegan a ser dioses y políticos que miran hacia otro lado.
¡Exigimos justicia! Porque cuando los ricos incumplen la ley, los pobres entierran a sus muertos. Que esta vez no sea igual.
Durísima sanción. Seis meses de prisión preventiva de la libertad dictó ayer el Poder Judicial (PJ), a través de la Corte del Cusco, contra Gabriel Mariano Roysi Melanio, de 30 años, investigado por atentar contra la Piedra de los Doce Ángulos en el centro histórico de la ciudad del Cusco.
La decisión fue dispuesta por el Segundo Juzgado Penal de Investigación Preparatoria Transitoria de Flagrancia del Cusco.
Será investigado por el delito de destrucción de bienes culturales, daño ocasionado con un martillo. Cabe recordar que la ciudad del Cusco es protegida al ser Patrimonio Cultural de la Nación desde 1972 y Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco desde 1983.
Por su parte, el Ministerio de Cultura (Mincul), a través del procurador público Henmer Alva Neyra, solicitó como reparación civil e indemnización 5 millones 350,000 soles al imputado de dañar con un martillo la Piedra de los 12 Ángulos.
El fiscal del caso sustentó la medida coercitiva a partir de las pericias del Mincul y de la Policía Nacional que confirman que tras el impacto metálico hubo pérdida de material y hendiduras, que fue calificado como “muy grave” al haber “alteración irreversible en un bien arqueológico de alto valor histórico y cultural”.
Además, hubo “una alteración en la fisura superficial comprometiendo la estabilidad del elemento y exponiendo a un deterioro. El daño compromete no solo la integridad física del bien, sino también su valor histórico, estético cultural al modificar su percepción visual y su autenticidad”.
fuente: tv peru.
El dato:
Un turista que observó los daños reportó la agresión a una tienda de la zona y tras visualizar los registros se constató que Roysi Melano golpeó tres veces el bien cultural y luego se fue. El mismo día, alrededor de las 10:40 horas, la Policía Nacional y la fiscalía ubicaron y detuvieron al causante en la calle Suytuhatu del barrio de San Blas.
Luego de varias protestas por parte de los transportistas que usualmente se dirigen hacia el norte del país, denunciando que la empresa concesionaria Norvial aún continuaba cobrando el peaje en la Variante de Pasamayo y el Serpentín de Pasamayo, pese a que más adelante se encuentra derrumbado el puente Chancay, Norvial informó la suspensión temporal de dicho cobro.
La concesionaria de la Red Vial 5 de la Panamericana Norte precisó que la medida estará vigente por seis días calendario o hasta que se culmine con lainstalación del puente modular que permita recuperar la transitabilidad en el kilómetro 76+200 donde se ubicaba el colapsado puente Chancay.
Sostuvo que la medida se adoptó en virtud del Oficio N° 0658-2025-MTC/19 expedido por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), en aplicación del numeral 9.9 del Contrato de Concesión.
A través de su cuenta oficial en Facebook Norvial dio a conocer este comunicado donde reiteró su compromiso por la seguridad y transitabilidad en la vía.
Como se recuerda, el jueves 13 de febrero, cerca de la medianoche, se produjo el colapso de una de las vías (de norte a sur) del puente Chancay lo que provocó la caída de un bus interprovincial lleno de pasajeros y de un automóvil particular. El accidente dejó tres personas fallecidas y cerca de 40 heridas, algunas de ellas aún se encuentran internadas.
Ante el colapso del puente, que obligó a suspender el tránsito en ese tramo de la Panamericana Norte, el titular del MTC, Raúl Pérez Reyes, anunció que un puente modular reemplazará a la infraestructura dañada. La instalación del citado puente demandaría entre ocho a 15 días.
fuente: exitosa.
Ante la suspensión del tránsito vehicular en Chancay, los transportistas que salen o se dirigen a Lima toman como ruta alterna el camino que conduce a la ciudad de Huaral para luego dirigirse a Aucallama y en este lugar retomar la Panamericana Norte.
Siguen cobrando pese a un servicio deficiente. El director de la Cámara Internacional de la Industria del Transporte (CIT), Martín Ojeda, denunció que se sigue cobrando peaje a pesar de las limitaciones del tránsito vehicular, tras el colapso del puente Chancay, en Huaral, que se registró la noche del jueves, 13 de febrero.
En entrevista para RPP, Ojeda señaló que persiste el cobro en los peajes de Ancón y Huacho, por lo que exigió la suspensión del pago hasta que culminen los trabajos de remediación después la caída del puente Chancay, a la altura del kilómetro 75 de la Panamericana Norte.
También dijo que los transportistas son desviados del peaje de Ancón hacia Huaral, por una vía de trocha que dificulta el tránsito y, además, genera una congestión vehicular de entre una a cuatro horas.
fuente: exitosa.
Para ejemplificar el panorama que brindó Ojeda, un conductor se comunicó en vivo con RPP y relató que, en su trayecto de Lima a Chancay, estuvo más de tres horas atascado en el tráfico.
“Y en el mejor de los casos, cuando no hay tráfico, se demora hora con veinte minutos. Y el día de ayer, en la noche, se ha demorado de tres a cuatro horas. Hay una larga fila de buses porque nos meten por calles que no son carreteras, no son autopistas, es una ciudad… lo peor de todo, que nos cobran los peajes”, declaró Martín Ojeda.
“La fluidez y la conectividad se rompió y están cobrando el peaje de norte a sur y de sur a norte en Huacho; y están cobrando el peaje en Ancón, norte y sur, sur y norte”, agregó.
El director de la CIT comentó que en los peajes se cobra 10.40 soles por eje y los camiones tiene hasta seis; por lo que un transportista podría llegar a pagar 62.40 soles.
“Eso es lo que nos están cobrando: por nada”, enfatizó.
‘La piedra de los doce ángulos’ forma parte de un Palacio Inca en la calle Hatun Rumiyoq y hoy fue seriamente vandalizada por una persona que con un objeto contundente la golpeó fuertemente. Como se recuerda, hace 11 años dos vándalos chilenos pintaron el gran bloque e hicieron un grafiti con sus iniciales.
La madrugada de este martes la ‘piedra de los doce ángulos’ ubicada en la zona monumental de la ciudad de Cusco, sufrió un grave atentado. Lima Gris accedió a imágenes exclusivas del momento del acto vandálico, cuando una persona en aparente estado de ebriedad golpea fuertemente la piedra con un objeto sólido que sostiene en su mano. Funcionarios del Ministerio de Cultura llegaron hasta el lugar para evaluar los daños.
¿Dónde está ubicada exactamente la ‘Piedra de los doce ángulos’?
La piedra de los doce ángulos es un bloque de piedra de la cultura inca que forma parte de un palacio ubicado en el centro de la ciudad, en la calle Hatun Rumiyoq (que junto con otras calles se unen a la plazoleta de San Blas con la plazoleta de la Almudena) en la zona monumental de Cusco, Perú.
El gran bloque de arquitectura inca y que está compuesta por una formación diorita presenta un gran acabado y bordeado perfeccionista, al no existir asimetrías en sus uniones. Y actualmente es considerado Patrimonio Cultural de la Nación del Perú. Asimismo, la piedra forma parte de la sede del Palacio Arzobispal de Cusco, que anteriormente fue la residencia de Inca Roca, el sexto soberano del Curacazgo del Cusco.
Hace 11 años sufrió un acto vandálico
Como se recuerda, el 8 de marzo de 2014 la piedra sufrió un grave atentado mediante una irresponsable pinta que significó un acto vandálico, pese a la constante vigilancia de los ciudadanos cusqueños. En dicha fecha, dos sujetos chilenos desadaptados hicieron un grafiti con sus iniciales. Felizmente, los servidores de la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco lograron borrarlas sin dañar la superficie.
Lima Gris accedió a estas exclusivas imágenes captadas por Darwin Santander.
Taxis y malestas, sí, pero ahora solo falta cómo ingresar. La Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) informó el pasado fin de semana que los taxis por aplicativo sí podrán ingresar al nuevo aeropuerto internacional Jorge Chávez, que se inaugura este 30 de marzo.
A través de un comunicado, precisó que este tipo de autos sí podrán ingresar con pasajeros al nuevo terminal de Lima y que “el control y la seguridad de estos vehículos estarán a cargo tanto de la entidad como de la Policía Nacional del Perú”.
Es así que vehículos de los aplicativos como como Uber, Yango, Cabify, Didi y Easy Taxi podrán ingresar al terminal con pasajeros.
Para operar en el nuevo terminal aéreo, los taxis por aplicativo deberán cumplir con varios requisitos de seguridad y formalización. Las unidades deben estar debidamente identificadas con la placa correspondiente al servicio de taxi y contar con la autorización de la ATU.
Además, los conductores deberán tener una licencia de conducir vigente, contar con el SOAT obligatorio y pasar una inspección vehicular actualizada. Entre los implementos de seguridad exigidos se incluyen un botiquín de primeros auxilios, un extintor y señales distintivas como casquete y cartilla informativa.
Detalló asimismo que los buses de “Aerodirecto” son vehículos de transporte público urbanos de pasajeros, como los que prestan servicio en la ciudad, en los cuales está permitido el traslado de maletas tipo carry on (con ruedas) y mochilas de viaje, es decir, el equipaje que suele ir en la cabina de los aviones”.
Finalmente, la ATU reiteró su compromiso de apoyar los servicios de movilidad urbana hacia y desde el nuevo aeropuerto Jorge Chávez dentro de los estándares de formalidad que la autoridad exige, a la par de ir implementando nuevos servicios que permitan un desplazamiento seguro de los ciudadanos y visitantes.
Dar el “sí, acepto” es una de las decisiones más importantes de la vida y para muchos se tienen que dar ciertas condiciones para pasar el resto de sus vidas que su ser amado. Los tiempos han cambiado y ya no se frecuenta ver bodas entre jóvenes veinteañeros, sino a dos adultos de 35 años para arriba.
Y es que varios factores entran a tallar para la unión ante Dios. Muchos jóvenes dan prioridad a su vida profesional y laboral, dejando en segundo plano las nupcias. Otro factor importante es el soporte económico ya que muchas de las nuevas parejas buscan un hogar donde habitar que no sea el segundo piso de la casa de sus padres. Otro detalle a considerar es que muchos de los encuestados no se sienten emocionalmente preparados para “dar el salto” a la fila de los recién casados, prefiriendo entre otras cosas su libertad como solteros, su juventud y su etapa donde no son tan responsables.
Según información del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec)en 2024 se han registrado 68,559 matrimonios; lo que indica una recuperación con respecto a los números prepandemia. En 2019 la cifra fue de 73,802, y evidentemente por la coyuntura de la crisis por Covid-19 en 2020 se redujo a 43,608 bodas. En años posteriores la cifra se fue recuperando, teniendo un pico alto en 2022 con 80,605 matrimonios.
En los años posteriores esa cifra no se mantuvo, reduciéndose considerablemente: 2023 con 66,142 bodas, y 2024 con 68,559.
El año anterior más de 39 mil peruanos se casaron entre los 30 y 59 años; siendo Lima, Arequipa y Cusco las regiones que lideran este ranking por rango de edad.
Ciudadanos ahora priorizan otros aspectos de su vida como la profesional, emocional o económica antes de casarse. Foto: El Peruano.
Día del Amor, día de casarnos
Por otro lado, Reniec informó que en el 2024 se registraron 757 matrimonios el 14 de febrero, fecha en la que se celebra el Día del Amor o Día de San Valentín. Esto representa una disminución del 25.6% versus el 2023, cuando se casaron 1018 parejas a nivel nacional.
En comparación con el año prepandemia (2019), se experimentó una caída del 38.7% en el número de matrimonios inscritos que fueron 1234.
Reniec también señaló que, en los últimos seis años, un total de 4892 parejas eligieron contraer matrimonio el Día de San Valentín.
Las parejas que han unido sus vidas y sellado su amor en esta fecha especial son las siguientes: en 2019 (1234), 2020 (1476), 2021 (14), 2022 (393), 2023 (1018) y en 2024 (757).
Un país sin puentes. Resulta sumamente preocupante la falta de planificación y monitoreo de los puentes del país. Han pasado más de dos años y un puente en Huachipa aún no se puede terminar de construir; peor aún, no existe un puente de acceso al nuevo aeropuerto Jorge Chávez; diversos puentes vienen siendo golpeados en sus bases por buses y tráileres de carga pesada, dificultando la transitabilidad de los demás vehículos; y qué decir de los demás puentes en el interior del país que cada año son debilitados tras la llegada de un huayco, sin que exista un control posterior de las autoridades competentes sean distritales, regionales o centrales; y ahora último el Puente de Chancay se ha caído al río, llevándose consigo dos personas inocentes fallecidas.
De acuerdo con información del titular del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), Raúl Pérez – Reyes, un bus interprovincial cayó a las aguas del río Chancay a la altura del kilómetro 75 de la Panamericana Norte, luego de que el puente se desplomara. Posteriormente, se tuvo conocimiento de que un auto particular también cayó a la corriente fluvial.
El hecho ocurrió aproximadamente a las 11:55 p.m. del último jueves, cuando la infraestructura cedió justo en el momento en que una unidad de la empresa Cruz del Norte y un automóvil de color negro transitaban por la vía.
Bomberos y agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) trabajaron en conjunto para rescatar a los pasajeros atrapados dentro del ómnibus, algunos de los cuales quedaron entre los fierros retorcidos. Con herramientas especializadas, lograron abrir paso entre los restos del vehículo, mientras otros socorristas brindaban primeros auxilios. Los afectados fueron trasladados a los hospitales de Chancay y Huaral.
Por otro lado, se conoció que en el mes de noviembre se realizó mantenimiento al puente derrumbado, sin embargo, no se han brindado mayores detalles sobre el tipo de mantenimiento. Desde el año 2003 la empresa encargada del mantenimiento del puente es Norvial.
fuente: latina.
Ministro de Transportes acudió hasta el puente derrumbado
Ante esta emergencia, el ministro de Transportes llegó hasta Chancay en horas de la madrugada para intentar buscar alternativas de vías de comunicación debido a que se ha paralizado la carretera en sentido norte a sur producto del colapso del puente.
Los pobladores de la zona se mostraron totalmente indignados con su presencia y llegaron a increparle en el lugar. Sin embargo, el titular del MTC se concentró en mencionar que lo importante era salvaguardar la vida de las víctimas.