Connect with us

Actualidad

«Universo», un cuento de Alfredo de Cossío

Published

on

La noticia me agarró por sorpresa. Caminaba por la calle Berlín, rodeado de turistas en busca de una dosis de alcohol diurno, cuando recibí el mensaje de texto que me anunciaba tu llegada a Lima. Me encontraba entusiasmado, acababa de comprar unos libros en El Virrey; por fin tenía en mi poder las novelas de Sebald que tanto quería leer y agregar como joyas literarias en mi cada vez menos austera biblioteca. Debo decir que esa noticia, aún caliente en mi teléfono, me distrajo, me sacó de esa mezcla de orgullo y satisfacción que siento cada vez que tengo un libro nuevo entre mis manos, y me hizo volar hacia atrás en el tiempo, no muy lejano, de unos cinco años atrás: de aquel año en Barcelona, a donde llegamos con la intención de ser parte de la escena literaria, aquella selva de letras y plumas, en el que todos los escritores, hasta los más nóveles, luchan por el derecho a unas pocas gotas de tinta. ¿Te acuerdas? Estoy seguro de que sí.

            Desde muchos años antes, desde nuestra adolescencia, soñábamos con escribir. Pero escribir de verdad. No hacerlo a escondidas, a oscuras, y sin que nuestros poemas y relatos salieran a la luz. La vida, al inicio, pareció traicionarnos, darnos la espalda en este viaje que aún no habíamos comenzando, ­­pero en el que ya nos sentíamos en pleno desplazamiento, al llevarnos por caminos profesionales más seguros, pero, definitivamente, más decepcionantes. Tú con la publicidad y yo con el derecho (que vergüenza). Sobrevivimos aquellos años, intentando no ahogarnos como un náufrago en medio del océano, cada año un manotazo más desesperado, haciendo lo posible para no dejarnos tragar por las aguas.

            Una maestría en creación literaria. Esa fue tu idea. No me siento seguro de mi escritura, me dijiste. ¿Por qué no intentarlo y, de paso, conocer gente nueva, escritores? No vale la pena contar el camino tortuoso por el que tuvimos que pasar para poder llegar finalmente a la tierra de los sueños a orillas del Mediterráneo. Lo importante fue que llegamos juntos, como los mejores amigos que fuimos, un apoyo, una muleta debajo del brazo del otro. Nuestros miedos e inseguridades rondaron esos primeros días, casi al punto de considerar la posibilidad de coger el primer vuelo de vuelta a Lima y regresarnos a los pocos días de haber empezado las clases. A ti te intimidaba la poesía, el poder simbólico del lenguaje, los sentidos, la búsqueda de la verdad; a mí me aterrorizaba el cuento, el formato corto, el engranaje perfecto, las estructuras circulares, la economía.

            ¿Te acuerdas de las clases? Cómo no te vas a acordar, si al inicio fuiste el más preguntón del salón. Algunos profesores te adoraban porque los hacías sentir escuchados, relevantes; otros, te detestaban porque no hacías más que interrumpir las clases con preguntas que, seamos sinceros, no siempre venían al caso. Tu sonrisa socarrona no era de ayuda tampoco. ¿La hacías a propósito o te salía natural? Me acuerdo cuando le dijiste al profesor del curso de novela que un escritor estaba obligado a matar toda tradición, y más aún a la nacional. Matar a Vargas Llosa, Alegría y Ribeyro, dijiste. ¡Maten a Borges y a Cortázar de una buena vez!, les gritaste a los argentinos del salón, influenciado por las tres copas de vermut que habías tomado en una de nuestras tantas excursiones post clases a bares. Tus ojos estaban encendidos, y cualquiera que no te conociera tanto como yo no hubiera dudado en asegurar que estabas ardiendo por dentro y que la violencia podría haberse hecho presente en cualquier momento. Todos nos quedamos mudos. A pesar de que te conocía, debo confesar que aquella noche vi algo en tu mirada que no había encontrado antes y sentí miedo. Sentí miedo de mi amigo. Desde aquella ocasión no fuiste bien visto por nuestros compañeros, pero yo permanecí a tu lado, como me correspondía. Para eso están los amigos, ¿no?

            Es un cliché, pero, a pesar de eso, a pesar de que, como escritor, en teoría, debería evitarlos —a veces es inevitable caer en algunos vicios—, puedo decir que conocimos hasta el último rincón de Barcelona. Lima era veinte veces su tamaño, pero nuestra nueva casa la sentíamos más grande, inacabable e inabarcable. Respiramos su aire como si cada bocanada fuera la última. Vivimos la ciudad hasta exprimirle el último soplo de vida, hasta casi matarla. Me acuerdo que tu lugar preferido era ese cruce anodino —diría anónimo— entre la calle Roselló y el Paseo Sant Joan. Te gustaba sentarte en una de las bancas del paseo y hablar de literatura, del futuro, de las novelas que publicaríamos y del futuro literario de nuestra amistad. ¿Nos matará la literatura?, te preguntabas —¿o me preguntabas a mí?— con la mirada fija hacia el oeste, quizá hacia Lima.

Recuerdo que fuimos asiduos de toda cantina en la que valiera la pena poner los pies. Las terrazas de los bares en las plazas del Sol, de la Virreina y de la Villa de Gracia, en el barrio del mismo nombre donde instalamos nuestra guarida. El bar de todo a un euro, en la calle Aribau, en Eixample, donde una noche me tomé quince cañas y tuviste que llevarme cargado hasta el piso. Los chiringuitos en La Barceloneta, el Razzmatazz y el Hi Jau, en el Poblenou, un hueco en el que escuchábamos a bandas de la movida indie catalana. Y las turistas. Las suecas, inglesas, alemanas y rusas. ¿Viajamos miles de kilómetros para buscar a las de fuera y no a las locales?, te quejabas. Pero conocías mi debilidad por las rubias, las teutonas; tú te inclinabas por las catalanas. Esa misma suerte no nos acompañó con nuestras compañeras de clases, pero con las de la maestría en edición otro fue el cantar. La chilena para ti y la argentina para mí, recuerdo que me dijiste. Intentaste en varias oportunidades impresionarla —aún te puedo oír— hablándole de literatura, acerca de autores de culto alemanes, austriacos y rusos; yo, por mi parte, le hablaba acerca de los latinoamericanos, pero más acerca de su compatriota Bolaño, de cómo el autor chileno había escrito en España la gran novela mexicana, y que yo, un peruano, iniciaría mi carrera literaria escribiendo una novela acerca de Bolaño. Un peruano en España escribiría una novela acerca de la vida de ese chileno que años atrás escribió en España la gran novela mexicana.

Pero, finalmente, lo que nos importaba eran los libros. Esa era nuestra misión: la literatura. No dejamos pasar una sola oportunidad de ser parte de aquel mundo que desde Lima nos parecía lejano, imposible. Pasábamos horas en las librerías, saltando de estante en estante, revisando novelas que casi nunca —por falta de medios— llegábamos a comprar. La Central, en la calle Mallorca, y Nollegiu, en Pons i Subira, fueron como un segundo hogar para nosotros, donde convivíamos casi diariamente con nuestros héroes. Aparte de las charlas y clases que nos daba la universidad, fuimos asiduos a toda presentación de libros —recuerdo que te presentabas como escritor, a pesar de que nunca habías publicado nada—, conferencia, conversatorio, muestras y demás eventos literarios y culturales a los que podíamos poner nuestros pies adentro. Tal fue nuestro afán de participación que varios de los asistentes, frecuentes como nosotros, empezaron a reconocernos. O al menos eso creíamos, o queríamos creer. Éramos como estrellas, cuerpos luminosos que llenaban de luz todo lugar al que nos presentáramos, una luz cargada con nuestra juventud y nuestros sueños, y de la que nadie podía librarse.

Y si, finalmente, lo que importaba eran los libros, lo que importaba más aún eran los propios; o aquellos que escribiríamos, debería decir, porque todavía no habíamos escrito ninguno. ¿Fue ahí, acaso, donde todo se fue al diablo? ¿Ese fuego que se siente al escribir, ese calor intenso en la boca del estómago que sienten los creadores al entregar todo lo que tienen dentro fue demasiado para ti? Escuchaba tus gritos, los insultos dirigidos ti mismo desde el interior de tu habitación. Mientras más avanzaba con mi novela que, al igual que tú, debía entregar, por lo menos una primera parte, al final de la maestría, más encerrado te mantenías, hermético; te veía cada vez menos o, mejor dicho, te veía deambular por el piso, pero en silencio, lívido y flotante, como si estuvieras ausente. Otra vez sentí miedo de mi amigo. Recuerdo que, durante los últimos meses, cuando nuestra aventura europea estaba llegando a su inevitable final, no querías salir a tomar una copa ni ir a buscar chicas o ir a presentaciones. Salía solo —una luz solitaria—, sintiéndome culpable de no poder hacer nada más por ti. Pero ¿qué podía hacer? No se le puede ayudar a alguien que no quiere aceptar ayuda, no me importa que digan lo contrario.

El tiempo de regresar a casa, a Lima La Horrible, como te gustaba llamarla a veces, había llegado. Entregué ochenta páginas de mi novela, la que sería mi opera prima, con un resultado del que no me pude quejar. Tú no entregaste nada. Mientras mi entusiasmo, mezclado con una cuota de exaltación, iba creciendo cada día más con cada página que llenaba de palabras, tu desazón con la maestría y conmigo —ahora que lo recuerdo, me parece que también— llegaba a sus picos más altos. Intenté ayudarte a que terminaras tu trabajo, pero de partir de cierto momento ya ni me dejabas ver tu texto. Terminé tirando la toalla. Nunca había visto a una persona tan frustrada —y frustrante— en mi vida. Una tarde, caminando por Via Laietana, me dijiste que te quedabas, que no volverías a Perú. Te respondí que ese no era plan, que la idea era llegar juntos e irnos juntos, que más valía intentar vivir de las letras, de la escritura y de la literatura en nuestro país, donde conocíamos gente, y no ahí, donde éramos unos simples estudiantes latinoamericanos. Serás un sudaca más tratando de sobrevivir, te increpé. Mis consejos y advertencias fueron en vano. Tus últimas palabras antes de irme al Prat, a tomar el avión de vuelta —al menos eso recuerdo— fueron que preferías ser un sudaca en Barcelona que un perdedor en Lima.

Con el tiempo, por algunos amigos en común —la verdad es que poco a poco he ido dejando de ver a muchas caras de nuestra juventud—, me fui enterando de tu vida. Me contaron que trabajaste de mesero, luego de cajero de supermercado; que a los pocos meses de mi partida conociste a una catalana, te enamoraste y terminaron viviendo juntos; que gracias a ella acabaste trabajando como asistente en el estudio de abogados de su padre. De todos modos, eso no duró. Que automáticamente volviste a los trabajos de medio pelo, sirviendo mesas y manejando cajas registradoras, hasta que otra mujer entró en tu vida, una sueca que vivía en Barcelona —¿no era turista? — con la que te casaste y tuviste dos hijos. No recuerdo mucho detalle acerca de lo que me fui enterando con el pasar de los años, pero lo que sí puedo recordar, sin problema, es que nada de lo que escuchaba tenía que ver con la bendita literatura ni mucho menos acerca de algún intento de tu parte en escribir o de publicar por lo menos un cuento.

Te puedo decir que mi camino tampoco ha sido fácil. ¿Escribí? Sí. ¿Publiqué? Eventualmente. Ahora soy un humilde profesor de colegio y me dedico día a día a enseñar lo poco que he aprendido a niños y adolescentes. No es la vida que me había imaginado, pero el sueño se ha mantenido intacto todos estos años, a pesar de que me faltara aquella muleta que me ayudaría a no tropezar durante tiempos difíciles, a pesar de que el amigo que mejor entendía los miedos que sentimos las personas que nos dedicamos a este ingrato oficio ya no estuviera conmigo. ¿Cómo así se pierde la magia de un día para otro? ¿Eres feliz sabiendo que abandonaste tus sueños y que lo tiraste todo por la borda? Por lo menos, y a pesar de todo, durante todos estos años logré que mi estrella siguiera brillando, sentirme un cuerpo luminoso; y tuve la certeza de que esa luz, cargada aún de mis sueños y de mi juventud, que emanaba, que iluminaba el mundo, no solo llenaría de fulgor mi camino, sino que trascendería el reino terrenal y viajaría por el cosmos, hasta posarse como una supernova en medio del universo.

Comentarios

Alfredo de Cossío Miranda (Lima, Perú) 1982. Comunicador y escritor. Estudió Comunicaciones en la Universidad de Lima, donde desarrolló una afición por la narrativa; además de escribir y dirigir cortometrajes. Después de dedicarse por algunos años al sector corporativo, en el 2015 se propuso escribir su primera novela Tiempos de David, que terminó siendo publicada por el Grupo Editorial Mesa Redonda y presentada en la FIL de Lima en el 2017. Radicó en Barcelona donde estuvo escribiendo su segunda novela y cursando el máster en Creación Literaria en la Universidad Pompeu Fabra. En la actualidad vive Lima.

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Actualidad

Dictan 6 meses de prisión preventiva a sujeto que vandalizó la Piedra de los 12 Ángulos [VIDEO]

En tanto, el Mincul solicitó más de 5 millones de soles como reparación civil contra Gabriel Roysi Melanio.

Avatar photo

Published

on

Durísima sanción. Seis meses de prisión preventiva de la libertad dictó ayer el Poder Judicial (PJ), a través de la Corte del Cusco, contra Gabriel Mariano Roysi Melanio, de 30 años, investigado por atentar contra la Piedra de los Doce Ángulos en el centro histórico de la ciudad del Cusco.

La decisión fue dispuesta por el Segundo Juzgado Penal de Investigación Preparatoria Transitoria de Flagrancia del Cusco.

Será investigado por el delito de destrucción de bienes culturales, daño ocasionado con un martillo. Cabe recordar que la ciudad del Cusco es protegida al ser Patrimonio Cultural de la Nación desde 1972 y Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco desde 1983.

Por su parte, el Ministerio de Cultura (Mincul), a través del procurador público Henmer Alva Neyra, solicitó como reparación civil e indemnización 5 millones 350,000 soles al imputado de dañar con un martillo la Piedra de los 12 Ángulos.

El fiscal del caso sustentó la medida coercitiva a partir de las pericias del Mincul y de la Policía Nacional que confirman que tras el impacto metálico hubo pérdida de material y hendiduras, que fue calificado como “muy grave” al haber “alteración irreversible en un bien arqueológico de alto valor histórico y cultural”.

Además, hubo “una alteración en la fisura superficial comprometiendo la estabilidad del elemento y exponiendo a un deterioro. El daño compromete no solo la integridad física del bien, sino también su valor histórico, estético cultural al modificar su percepción visual y su autenticidad”.

fuente: tv peru.

El dato:

Un turista que observó los daños reportó la agresión a una tienda de la zona y tras visualizar los registros se constató que Roysi Melano golpeó tres veces el bien cultural y luego se fue. El mismo día, alrededor de las 10:40 horas, la Policía Nacional y la fiscalía ubicaron y detuvieron al causante en la calle Suytuhatu del barrio de San Blas.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Norvial anuncia que suspenderá temporalmente el cobro de peajes en Pasamayo y Serpentín [VIDEO]

Desde primeras horas de la mañana de hoy se observa a los vehículos pasar sin pagar el peaje.

Avatar photo

Published

on

Luego de varias protestas por parte de los transportistas que usualmente se dirigen hacia el norte del país, denunciando que la empresa concesionaria Norvial aún continuaba cobrando el peaje en la Variante de Pasamayo y el Serpentín de Pasamayo, pese a que más adelante se encuentra derrumbado el puente Chancay, Norvial informó la suspensión temporal de dicho cobro.

La concesionaria de la Red Vial 5 de la Panamericana Norte precisó que la medida estará vigente por seis días calendario o hasta que se culmine con la instalación del puente modular que permita recuperar la transitabilidad en el kilómetro 76+200 donde se ubicaba el colapsado puente Chancay.

Sostuvo que la medida se adoptó en virtud del Oficio N° 0658-2025-MTC/19 expedido por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), en aplicación del numeral 9.9 del Contrato de Concesión.

A través de su cuenta oficial en Facebook Norvial dio a conocer este comunicado donde reiteró su compromiso por la seguridad y transitabilidad en la vía.

Como se recuerda, el jueves 13 de febrero, cerca de la medianoche, se produjo el colapso de una de las vías (de norte a sur) del puente Chancay lo que provocó la caída de un bus interprovincial lleno de pasajeros y de un automóvil particular. El accidente dejó tres personas fallecidas y cerca de 40 heridas, algunas de ellas aún se encuentran internadas.

Ante el colapso del puente, que obligó a suspender el tránsito en ese tramo de la Panamericana Norte, el titular del MTC, Raúl Pérez Reyes, anunció que un puente modular reemplazará a la infraestructura dañada. La instalación del citado puente demandaría entre ocho a 15 días.

fuente: exitosa.

Ante la suspensión del tránsito vehicular en Chancay, los transportistas que salen o se dirigen a Lima toman como ruta alterna el camino que conduce a la ciudad de Huaral para luego dirigirse a Aucallama y en este lugar retomar la Panamericana Norte.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Concesionaria Norvial continúa cobrando peajes en Ancón y Huacho pese a colapso de puente Chancay [VIDEO]

Choferes se muestran disconformes en cobro de peaje, tomando en consideración el derrumbe del puente y la altísima congestión vehicular en la zona.

Avatar photo

Published

on

Siguen cobrando pese a un servicio deficiente. El director de la Cámara Internacional de la Industria del Transporte (CIT), Martín Ojeda, denunció que se sigue cobrando peaje a pesar de las limitaciones del tránsito vehicular, tras el colapso del puente Chancay, en Huaral, que se registró la noche del jueves, 13 de febrero.

En entrevista para RPP, Ojeda señaló que persiste el cobro en los peajes de Ancón y Huacho, por lo que exigió la suspensión del pago hasta que culminen los trabajos de remediación después la caída del puente Chancay, a la altura del kilómetro 75 de la Panamericana Norte.  

También dijo que los transportistas son desviados del peaje de Ancón hacia Huaral, por una vía de trocha que dificulta el tránsito y, además, genera una congestión vehicular de entre una a cuatro horas.

fuente: exitosa.

Para ejemplificar el panorama que brindó Ojeda, un conductor se comunicó en vivo con RPP y relató que, en su trayecto de Lima a Chancay, estuvo más de tres horas atascado en el tráfico. 

“Y en el mejor de los casos, cuando no hay tráfico, se demora hora con veinte minutos. Y el día de ayer, en la noche, se ha demorado de tres a cuatro horas. Hay una larga fila de buses porque nos meten por calles que no son carreteras, no son autopistas, es una ciudad… lo peor de todo, que nos cobran los peajes”, declaró Martín Ojeda.

“La fluidez y la conectividad se rompió y están cobrando el peaje de norte a sur y de sur a norte en Huacho; y están cobrando el peaje en Ancón, norte y sur, sur y norte”, agregó.

El director de la CIT comentó que en los peajes se cobra 10.40 soles por eje y los camiones tiene hasta seis; por lo que un transportista podría llegar a pagar 62.40 soles.

“Eso es lo que nos están cobrando: por nada”, enfatizó.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Atentado cultural en Cusco [VIDEO]

‘La piedra de los doce ángulos’ forma parte de un Palacio Inca en la calle Hatun Rumiyoq y hoy fue seriamente vandalizada por una persona que con un objeto contundente la golpeó fuertemente. Como se recuerda, hace 11 años dos vándalos chilenos pintaron el gran bloque e hicieron un grafiti con sus iniciales.

Avatar photo

Published

on

La madrugada de este martes la ‘piedra de los doce ángulos’ ubicada en la zona monumental de la ciudad de Cusco, sufrió un grave atentado. Lima Gris accedió a imágenes exclusivas del momento del acto vandálico, cuando una persona en aparente estado de ebriedad golpea fuertemente la piedra con un objeto sólido que sostiene en su mano. Funcionarios del Ministerio de Cultura llegaron hasta el lugar para evaluar los daños.

¿Dónde está ubicada exactamente la ‘Piedra de los doce ángulos’?

La piedra de los doce ángulos es un bloque de piedra de la cultura inca que forma parte de un palacio ubicado en el centro de la ciudad, en la calle Hatun Rumiyoq (que junto con otras calles se unen a la plazoleta de San Blas con la plazoleta de la Almudena) en la zona monumental de Cusco, Perú.

El gran bloque de arquitectura inca y que está compuesta por una formación diorita presenta un gran acabado y bordeado perfeccionista, al no existir asimetrías en sus uniones. Y actualmente es considerado Patrimonio Cultural de la Nación del Perú. Asimismo, la piedra forma parte de la sede del Palacio Arzobispal de Cusco, que anteriormente fue la residencia de Inca Roca, el sexto soberano del Curacazgo del Cusco.

Hace 11 años sufrió un acto vandálico

Como se recuerda, el 8 de marzo de 2014 la piedra sufrió un grave atentado mediante una irresponsable pinta que significó un acto vandálico, pese a la constante vigilancia de los ciudadanos cusqueños. En dicha fecha, dos sujetos chilenos desadaptados hicieron un grafiti con sus iniciales. Felizmente, los servidores de la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco lograron borrarlas sin dañar la superficie.

Lima Gris accedió a estas exclusivas imágenes captadas por Darwin Santander.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Taxis por aplicativo sí podrán ingresar al nuevo aeropuerto Jorge Chávez, según nuevas indicaciones de la ATU

Asimismo, precisaron que los buses “AeroDirecto” estará permitido el traslado de maletas tipo ‘carry on’.

Avatar photo

Published

on

Taxis y malestas, sí, pero ahora solo falta cómo ingresar. La Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) informó el pasado fin de semana que los taxis por aplicativo sí podrán ingresar al nuevo aeropuerto internacional Jorge Chávez, que se inaugura este 30 de marzo.

A través de un comunicado, precisó que este tipo de autos sí podrán ingresar con pasajeros al nuevo terminal de Lima y que “el control y la seguridad de estos vehículos estarán a cargo tanto de la entidad como de la Policía Nacional del Perú”.

Es así que vehículos de los aplicativos como como Uber, Yango, Cabify, Didi y Easy Taxi podrán ingresar al terminal con pasajeros.

Para operar en el nuevo terminal aéreo, los taxis por aplicativo deberán cumplir con varios requisitos de seguridad y formalización. Las unidades deben estar debidamente identificadas con la placa correspondiente al servicio de taxi y contar con la autorización de la ATU.

Además, los conductores deberán tener una licencia de conducir vigente, contar con el SOAT obligatorio y pasar una inspección vehicular actualizada. Entre los implementos de seguridad exigidos se incluyen un botiquín de primeros auxilios, un extintor y señales distintivas como casquete y cartilla informativa.

Detalló asimismo que los buses de “Aerodirecto” son vehículos de transporte público urbanos de pasajeros, como los que prestan servicio en la ciudad, en los cuales está permitido el traslado de maletas tipo carry on (con ruedas) y mochilas de viaje, es decir, el equipaje que suele ir en la cabina de los aviones”.

Finalmente, la ATU reiteró su compromiso de apoyar los servicios de movilidad urbana hacia y desde el nuevo aeropuerto Jorge Chávez dentro de los estándares de formalidad que la autoridad exige, a la par de ir implementando nuevos servicios que permitan un desplazamiento seguro de los ciudadanos y visitantes.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

A propósito del Día del Amor y la Amistad: cada vez más peruanos prefieren casarse pasados los 30 años

El año pasado se realizaron 68,559 matrimonios, situándose casi a cifras prepandemia.

Avatar photo

Published

on

Dar el “sí, acepto” es una de las decisiones más importantes de la vida y para muchos se tienen que dar ciertas condiciones para pasar el resto de sus vidas que su ser amado. Los tiempos han cambiado y ya no se frecuenta ver bodas entre jóvenes veinteañeros, sino a dos adultos de 35 años para arriba.

Y es que varios factores entran a tallar para la unión ante Dios. Muchos jóvenes dan prioridad a su vida profesional y laboral, dejando en segundo plano las nupcias. Otro factor importante es el soporte económico ya que muchas de las nuevas parejas buscan un hogar donde habitar que no sea el segundo piso de la casa de sus padres. Otro detalle a considerar es que muchos de los encuestados no se sienten emocionalmente preparados para “dar el salto” a la fila de los recién casados, prefiriendo entre otras cosas su libertad como solteros, su juventud y su etapa donde no son tan responsables.

Según información del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) en 2024 se han registrado 68,559 matrimonios; lo que indica una recuperación con respecto a los números prepandemia. En 2019 la cifra fue de 73,802, y evidentemente por la coyuntura de la crisis por Covid-19 en 2020 se redujo a 43,608 bodas. En años posteriores la cifra se fue recuperando, teniendo un pico alto en 2022 con 80,605 matrimonios.

En los años posteriores esa cifra no se mantuvo, reduciéndose considerablemente: 2023 con 66,142 bodas, y 2024 con 68,559.

El año anterior más de 39 mil peruanos se casaron entre los 30 y 59 años; siendo Lima, Arequipa y Cusco las regiones que lideran este ranking por rango de edad.

Ciudadanos ahora priorizan otros aspectos de su vida como la profesional, emocional o económica antes de casarse. Foto: El Peruano.

Día del Amor, día de casarnos

Por otro lado, Reniec informó que en el 2024 se registraron 757 matrimonios el 14 de febrero, fecha en la que se celebra el Día del Amor o Día de San Valentín. Esto representa una disminución del 25.6% versus el 2023, cuando se casaron 1018 parejas a nivel nacional.

En comparación con el año prepandemia (2019), se experimentó una caída del 38.7% en el número de matrimonios inscritos que fueron 1234.

Reniec también señaló que, en los últimos seis años, un total de 4892 parejas eligieron contraer matrimonio el Día de San Valentín.

Las parejas que han unido sus vidas y sellado su amor en esta fecha especial son las siguientes: en 2019 (1234), 2020 (1476), 2021 (14), 2022 (393), 2023 (1018) y en 2024 (757).

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Dos personas fallecidas y decenas de heridos tras caída de Puente de Chancay [VIDEO]

Bus interprovincial cayó al turbulento río Chancay. Entre los heridos se encuentran tres menores de edad.

Avatar photo

Published

on

Un país sin puentes. Resulta sumamente preocupante la falta de planificación y monitoreo de los puentes del país. Han pasado más de dos años y un puente en Huachipa aún no se puede terminar de construir; peor aún, no existe un puente de acceso al nuevo aeropuerto Jorge Chávez; diversos puentes vienen siendo golpeados en sus bases por buses y tráileres de carga pesada, dificultando la transitabilidad de los demás vehículos; y qué decir de los demás puentes en el interior del país que cada año son debilitados tras la llegada de un huayco, sin que exista un control posterior de las autoridades competentes sean distritales, regionales o centrales; y ahora último el Puente de Chancay se ha caído al río, llevándose consigo dos personas inocentes fallecidas.

De acuerdo con información del titular del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), Raúl Pérez – Reyes, un bus interprovincial cayó a las aguas del río Chancay a la altura del kilómetro 75 de la Panamericana Norte, luego de que el puente se desplomara. Posteriormente, se tuvo conocimiento de que un auto particular también cayó a la corriente fluvial.

El hecho ocurrió aproximadamente a las 11:55 p.m. del último jueves, cuando la infraestructura cedió justo en el momento en que una unidad de la empresa Cruz del Norte y un automóvil de color negro transitaban por la vía.

Bomberos y agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) trabajaron en conjunto para rescatar a los pasajeros atrapados dentro del ómnibus, algunos de los cuales quedaron entre los fierros retorcidos. Con herramientas especializadas, lograron abrir paso entre los restos del vehículo, mientras otros socorristas brindaban primeros auxilios. Los afectados fueron trasladados a los hospitales de Chancay y Huaral.

Por otro lado, se conoció que en el mes de noviembre se realizó mantenimiento al puente derrumbado, sin embargo, no se han brindado mayores detalles sobre el tipo de mantenimiento. Desde el año 2003 la empresa encargada del mantenimiento del puente es Norvial.

fuente: latina.

Ministro de Transportes acudió hasta el puente derrumbado

Ante esta emergencia, el ministro de Transportes llegó hasta Chancay en horas de la madrugada para intentar buscar alternativas de vías de comunicación debido a que se ha paralizado la carretera en sentido norte a sur producto del colapso del puente. 

Los pobladores de la zona se mostraron totalmente indignados con su presencia y llegaron a increparle en el lugar. Sin embargo, el titular del MTC se concentró en mencionar que lo importante era salvaguardar la vida de las víctimas

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Usuarios del Metropolitano se bajan de los buses debido al asfixiante calor [VIDEO]

Unidades de transporte no cuentan con aire acondicionado, eso sumado a la gran conglomeración en hora punta hace que muchos de esos vehículos vayan repletos de pasajeros.

Avatar photo

Published

on

El sofocante calor se siente en muchas partes de la capital, registrándose en algunos distritos temperaturas por encima de los 30 grados, teniendo sensaciones de calor los 33 o 34 grados. Si eso calor se suma estar en un lugar cerrado y con poca ventilación como los buses del Metropolitano dicha temperatura fácilmente puede bordear los 37 o 38 grados, resultando para muchos una “olla a presión”.

Anoche, en la estación Naranjal del Metropolitano, decenas de usuarios de ese servicio de transporte no pudieron más el intenso calor y decidieron bajarse de las unidades a modo de protesta por la escasa implementación de aire acondicionado o sistemas de ventilación.

Y a pesar que anoche se registró una intensa lluvia en gran parte de la capital, la sensación de calor no se redujo, teniendo una media de 25°C incluso hasta altas horas de la noche.

“No es ventilado, la verdad. Como todos los días, es algo normal que haya aglomeraciones. El calor está muy fuerte”, dijo a Panamericana TV una pasajera que aguardaba abordar en la estación Naranjal. Otra usuaria agregó: “Es un horno estar en el trayecto. La gente está apiñada, no hay ventilación. Las ventanas no sirven de mucho porque son pequeñas y algunas están malogradas”.

fuentes: bdp.

En esa estación los pasajeros debieron esperar al menos 45 minutos debido a la congestión generada por el mal tiempo. Sin embargo, el panorama se replicó en otros puntos, donde usuarios reportaron que la lluvia generó desorden y acumulación de suciedad en los embarques.

Los peatones también manifestaron que las estaciones no están diseñadas para soportar precipitaciones prolongadas. En varias de ellas, se registró acumulación de agua en el piso, lo que dificultó el acceso y generó riesgo de resbalones.

Comentarios
Continue Reading
Advertisement

LIMA GRIS TV

PUBLICIDAD

PRNEWS

PARTNER

 

CONTACTO

Síguenos en Twitter


LIMA GRIS RADIO

Trending