Opinión
Otra vez el Chile de Boric: «error de caja» en presupuestos regionales
6% es el error de cálculo de la Dirección de presupuestos que ha significado un terremoto para los gobiernos regionales chilenos que no pueden pagar a proveedores. Medios santiaguinos se han hecho de un tibio eco mientras la titular a cargo, Javiera Martínez evidenciaría una falta de capacidad de gestión del organismo.

La alerta la percibí no por los medios grandes chilenos sino por un usuario de la red de negocios LinkedIn, Eugenio Ponisio, ingeniero informático experto en gestión, quien compartió en su red la noticia que, si fue cubierta por los medios y portales de provincias, dicha situación evidenciaría a un gobierno por debajo de la altura de su deber. Un gobierno que más parece las prácticas pre profesionales de unos universitarios.
Distintos medios de comunicación de provinciales, pero muy pocos medios capitalinos, informaron de una extraña irregularidad en un tema tan vital como el presupuesto. Todo empezó cuando la Asociación de Gobernadores Regionales de Chile arremetió contra la Dirección de Presupuestos a cargo de Javiera Martínez, al indicar que les generaron un “problema de caja” ya que no han recibido los recursos comprometidos para 2024 y por ende la situación se ha vuelto insostenible. Mientras tanto la oposición ha mandado citar para el lunes al ministro de Hacienda, Marcel al Congreso para que dé cuenta de los fallidos pronósticos económicos en materia de recaudación fiscal y el impacto que esto está generando a nivel nacional, según indicaron. También señalaron que de acuerdo al Consejo Fiscal Autónomo se recaudó cerca de US$ 4.400 millones menos de lo previsto. Lo cual agrava la situación para el correcto funcionamiento de los servicios públicos a cargo de las autoridades regionales. Cabe mencionar, que los gobiernos regionales y locales son el primer frente de acción que directamente incide en los ciudadanos, por lo que “errores de caja” impactan para mal en la ciudadanía y en su confianza a sus instituciones.
Según informó el medio chileno ExAnte, durante más de una hora se sostuvo una reunión este martes en La Moneda entre la Asociación de Gobernadores Regionales (Agorechi) con la todavía ministra del interior, Carolina Tohá, y no fue sólo para plantear sus discrepancias con el nuevo Ministerio de Seguridad Pública (inventado literalmente ayer), debido a que este otorga nuevas y mayores atribuciones a los delegados presidenciales (¿Más centralismo?); sino también por otro motivo del encuentro, el cual fue manifestar la grave crisis que existe en las regiones por la falta de financiamiento y traspaso de recursos comprometidos para la ejecución de proyectos de 2024, asunto del que responsabilizan directamente a la directora de Presupuestos, Javiera Martínez (Frente Amplio). O sea, como diría Mocciati: no hay plata.
Según lo expuesto por las autoridades, 16 gobernaciones se encuentran con “problemas de caja” y endeudamientos con proveedores y que Dipres (Dirección de presupuestos) mantiene retenidos los fondos en algunos casos desde septiembre.
Si la situación ya de por sí es grave, el problema se agrava cuando los gobernadores del Bío Bío y de Atacama señalaron que Tohá les habría confirmado que existió, y léalo muy bien, límpiese las legañas, un “error de cálculo”. Error. [Un error fue botarlos] Error de cálculo en la recaudación fiscal de este año.
Mientras tanto en Interior (dónde no atrapan ni una mosca en la cara de la Orellana) niegan que la ministra haya utilizado esa expresión en el encuentro (como si cambiar la expresión cambiara el hecho de lo grave del asunto). No obstante, la secretaria de Estado gestionó una reunión de los gobernadores con la directora de Presupuestos en que también participaron las subsecretarias del Hacienda, Heidi Berner y de Desarrollo Regional, Francisca Perales (¿Por qué no hay hombres?) además del equipo técnico de Dipres para intentar llegar a un acuerdo. El encuentro se realizó la tarde de ese mismo martes.
Misterioso silencio de los grandes medios de capitalinos
Salvo Radio Bio Bio, los medios de Santiago no difundieron la noticia. En mi caso me enteré por un usuario en LinkedIn que alertó de esta anómala situación.
Fue la prensa regional la que se hizo eco de este error de caja que ha exacerbado los reclamos de los gobernadores por la falta de financiamiento. El Diario Concepción da cuenta que en el Gobierno Regional del Biobío no se han concretado traspasos de noviembre y diciembre debido a la irresponsabilidad de Dipres.
El gobernador Rodrigo Díaz presentó un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Concepción contra la Dipres.
El diario El Día señala que el gobernador Darwin Ibacache envió un documento a Javiera Martínez señalando que la situación es “insostenible” en la Región de Coquimbo. “No existe disponibilidad de recursos para hacer cumplimiento de obligaciones de este gobierno regional, ya que tenemos facturas emitidas por empresas contratistas asociadas a obras de infraestructura, como también el pago de facturas por la adquisición de activos no financieros”, señaló. En la región no reciben remesas de Dipres desde ¡¡¡septiembre!!! En resumen no hay plata porque Dipres no ha enviado los recursos.
Para el gobernador de Atacama esto significa un “portazo a la descentralización”. Lo cual conlleva un deterioro del diálogo entre el Estado central y los gobiernos regionales.
Serias responsabilidades
Lo que se ha mencionado como un error de cálculo del Ministerio de Hacienda es más serio. Chile viene creciendo menos y los ingresos también se han vuelto menores lo cual afecta el normal funcionamiento de áreas críticas. Según el gobernador Rodrigo Díaz indicó que “quien hizo la propuesta de presupuesto para el 2024 hizo un cálculo errado y eso entonces ha significado que Chile ha tenido menos recaudación y nosotros dijimos que en cualquier empresa el que hace un cálculo malo lo que tiene que hacer es dar un paso al costado porque si calcula mal los ingresos obviamente eso genera un problema”. Corrección, Díaz peca de educado, en cualquier empresa privada un error semejante exige el despido inmediato y un enjuiciamiento por daños y perjuicios.
El problema con los chilenos es que o son pacientes como monjes martirologios, o no les importa empeorar en una espiral de empobrecimiento institucional.
De acuerdo a presentes en una tensa reunión entre los gobernadores y Javiera Martínez, ella les dijo que, según los datos de la Dipres, los gobiernos regionales disponían de $ 300 mil millones de pesos. “Le aclaramos a la directora de Presupuestos que eso eran platas de garantías para resguardar el fiel cumplimiento de las obras y que ese dinero no lo podemos utilizar. Le dije a la directora que los datos que ella manejaba eran erróneos”, afirmó Díaz a un medio local.
Ya tiempo antes Javiera ha recibido ínfulas centralistas cuando dijo que las gobernaciones no estaban ejecutando la totalidad del presupuesto. En lugar de una actitud de diálogo ha optado por el enfrentamiento como fiel hija de la teoría del conflicto.
Finalmente, según informan los medios regionales se llegó a un principio de acuerdo para que Dipres les deposite una fracción de lo adeudado a los gobiernos regionales, lo que se materializaría durante estos días. Oremos.
Según el medio ExAnte, los diputados Miguel Mellado y Frank Sauerbaum, de la Comisión de Hacienda de la Cámara, citaron al ministro Mario Marcel a la sesión del lunes para que de cuenta de los errores de cálculo y fallas en las proyecciones de recaudación fiscal que acusan. Según señala ExAnte, el fisco ha percibido US$4.400 millones menos de lo previsto, de acuerdo al último informe del Consejo Fiscal Autónomo. Ya este mismo ente advirtió que el gasto no podía expandirse más allá del 1,6% debido a la debilidad de los ingresos, sin embargo, el gobierno central vive sujeto a presupuestos de fantasía. «Hoy vemos como estas malas decisiones comprometen el financiamiento de hospitales, municipios y gobiernos regionales”, afirmó el diputado de la oposición Sauerbaum.
El diputado señaló que, si bien el trabajo técnico en las proyecciones de recaudación los realiza Javiera Martinez desde la Dipres, el responsable político es y solo es el ministro de Hacienda.
El error es técnico a causa de un registro erróneo a nivel contable-presupuestario erróneo que incrementó el concepto de Otros ingresos en $688.535 millones de pesos. Es decir, los presupuestos calculados hechos en 2023 para el año 2024 fueron mal contabilizados o acaso hubo exceso de optimismo ideológico para evitar recortes, ello significó que llegado fin de año no haya plata.
Sin embargo, el ministro Marcel ha defendido la labor de Javiera Martínez. En agosto de 2023, el titular de Hacienda declaró que “la directora de Presupuestos Javiera Martínez, en mi opinión, yo que he conocido a todos los directores de Presupuestos desde la vuelta a democracia, es probablemente la mejor directora de Presupuestos que hemos tenido por su conocimiento, dedicación y por su honradez”. Pues honrada no sé si será, pero dedicada y con conocimiento es difícil de creer con este ejemplo.
Si uno revisa la carrera de Javiera, veremos qué hizo una notable carrera, pero en política, en cuanto a gestión y dirección de organizaciones su experiencia o es nula o está por debajo de lo necesariamente exigible para estar en la dirección de cualquier organización. Alguien como la política de izquierda, Macarena Lobo, cuando tenía la edad de Javiera estuvo en Dipres pero como asesora jurídica no como directora, y prácticamente tenía la misma trayectoria.
A esto se suman las bajas en las proyecciones de crecimiento y lo peor la política miope de un presidente que obstina a subir los impuestos a la riqueza, esto en un contexto de menor crecimiento, disminución del consumo y por tanto de la recaudación de impuestos. Otra vez, no hay plata.
Debido a esto, Hacienda ha utilizado el Fondo de Estabilización Económica y Social FEES, contemplado para emergencias como la pandemia. En la reciente discusión presupuestaria se acordó que ahora deban pedir autorización al Congreso para utilizarlo.
Es como si este gobierno fuese una pandemia, pero de huidas de capitales. Repita después de mi: no hay plata.
Cómo dicen en Perú, la pita se rompe por el lado más débil. En agosto, en medio de los bajos índices de recaudación, Martínez acordó la desvinculación de David Duarte, quien era jefe de la división de finanzas públicas de la Dipres, a cargo de la ejecución de presupuesto y los cálculos de los ingresos de la Nación. Tal vez otra debió ser la despedida.
Opinión
¿La sociedad de minería y su títere de palacio buscan criminalizar la protesta minera?
Buscarían crear las condiciones para generar caos y violencia con elementos infiltrados y así justificar la captura de sus principales dirigentes y asesores para descabezar a la CONFEMIN.

Por Jorge Paredes Terry
En los últimos años, los gobiernos de turno han perfeccionado un método represivo para neutralizar las demandas sociales: la criminalización de la protesta. Bajo el pretexto de mantener el «orden público», se estigmatiza a los movimientos sociales, se infiltran agentes provocadores, y se judicializa a los dirigentes legítimos.
Hoy, este riesgo acecha a la Confederación Nacional de la Pequeña Minería y Minería Artesanal (CONFEMIN) quienes se encuentran en una movilización pacífica frente al Congreso de la República.
El pretexto: un informe policial sospechoso.
Según el Memo 012-2025 de la Dirección de Seguridad del Estado, se alerta sobre una supuesta «toma violenta» del Congreso por parte de los mineros artesanales, argumentando que habría «infiltrados» para generar caos. Este lenguaje es clásico en los manuales de criminalización: se sataniza la protesta antes de que ocurra, justificando una represión desmedida.

Lo grave es que, tras este operativo, podrían estar las grandes compañías mineras y consultoras de seguridad internacional, interesadas en debilitar a los pequeños mineros para imponer sus proyectos extractivos sin resistencia.
El objetivo: descabezar el movimiento.
El verdadero peligro no es solo la represión en las calles, sino la detención selectiva de dirigentes y asesores, acusándolos de sedición, disturbios o terrorismo. Así se busca quebrar la organización, sembrar miedo y desarticular la lucha.
Llamado a la prudencia y la resistencia legal.
Frente a esto, los mineros deben:
1. Mantener la protesta pacífica, sin caer en provocaciones.
2. Documentar todo acto represivo (grabaciones, testimonios).
3. Exigir veeduría internacional para evitar abusos.
4. Preparar defensa legal anticipada, ante posibles detenciones arbitrarias.
El pueblo no olvida. Si el gobierno insiste en reprimir en lugar de dialogar, quedará claro quiénes defienden al pueblo y quiénes protegen los intereses de las grandes mineras.
Que la lucha no se apague con la cárcel, sino que crezca con la verdad!
Opinión
Caso Cócteles: entre el show de Domingo Pérez y el blindaje a Keiko Fujimori
El caso “Cócteles” dejó de ser un simple proceso judicial y se ha convertido en el reflejo de una guerra política que agota al país. ¿Hasta cuándo la opinión pública tolerará esta disputa interminable entre caviares y conservadores, donde la justicia sirve de arma política?

El caso “Cócteles” lleva años arrastrándose en el sistema judicial peruano, y lejos de aclarar responsabilidades o establecer verdades jurídicas, se ha convertido en otro episodio de la agotadora pugna política entre los bandos que dominan el debate nacional: los autodenominados «caviares» y la derecha conservadora.
Esta semana, el fiscal José Domingo Pérez volvió a aparecer ante los medios con nuevas acciones persecutorias contra Keiko Fujimori, en el marco de la investigación por presunto lavado de activos a través de falsos aportes a su campaña presidencial del 2011. Según la fiscalía, los llamados “cócteles” sirvieron como fachada para ingresar fondos irregulares, incluyendo donaciones de la empresa Odebrecht.
Aunque la gravedad de las acusaciones no debe minimizarse, el estilo del fiscal Pérez sí genera cuestionamientos. Su permanente exposición mediática, sus frases calculadas para el impacto, y la forma teatral con la que presenta sus argumentos, alimentan la idea de que no busca solo justicia, sino protagonismo. El Ministerio Público no puede comportarse como una figura televisiva. Si la intención es desarticular redes de corrupción, la sobriedad institucional debería ser la regla, no la excepción.

En abril pasado se cayó el juicio oral contra Keiko Fujimori por el caso ‘Cócteles’, tras anulación del PJ.
Sin embargo, la crítica no puede quedarse en el plano del Ministerio Público. Cada vez que Keiko Fujimori enfrenta un revés legal, sus aliados de la derecha conservadora reaccionan con indignación automática. Invocan una supuesta persecución política, acusan al sistema de querer bloquear su participación electoral, y construyen un discurso victimista que choca con su habitual defensa del “orden” y la “legalidad”.
Hay algo profundamente incoherente en esa defensa cerrada, casi corporativa, de una figura con tantos cuestionamientos judiciales. El “espíritu de cuerpo” con el que blindan a Keiko no es un gesto de principios democráticos, sino una estrategia para mantener una figura útil al statu quo conservador.
Así, el caso “Cócteles” ya no es solo un expediente fiscal, sino el reflejo de una guerra política que cansa y divide al país. ¿Hasta cuándo la opinión pública debe tolerar esta disputa interminable entre caviares y conservadores, donde la justicia se usa como arma y escudo según convenga?
Lo que el Perú necesita es un sistema judicial que no sea espectáculo ni herramienta política. Y una clase política que entienda que la corrupción —venga de donde venga— no se combate con discursos hipócritas ni con defensas interesadas, sino con coherencia y respeto por la ley.
Opinión
El sueldo de la vergüenza
La presidenta Dina Boluarte gobierna sin resultados, pero cobra como reina. En plena crisis nacional, se premia con un sueldo de S/35 mil mensuales, demostrando un profundo cinismo y total desconexión con un pueblo que sobrevive con migajas.

En medio de un país herido por la inseguridad, sumido en la informalidad laboral, con servicios públicos colapsados y una clase trabajadora que sobrevive con el salario mínimo, la presidenta Dina Boluarte Zegarra ha decidido que su prioridad no es el pueblo que dice representar, sino su propio bolsillo. Su reciente aumento de sueldo a más de S/35,000 mensuales, convalidado por el ministro de Economía Raúl Pérez Reyes y refrendado en Consejo de Ministros, revela no solo una desconexión absoluta con la realidad, sino una clara señal de desprecio hacia la ciudadanía que día a día se esfuerza por sobrevivir.

Este gesto, que supera el 125 % de incremento respecto al salario presidencial vigente, no solo es inoportuno, sino profundamente inmoral. Mientras los ciudadanos son víctimas de extorsiones, asesinatos y desempleo, la presidenta ha optado por priorizar la valorización de su cargo como si se tratara de una ejecutiva en una multinacional, y no de una funcionaria pública al servicio de una nación en crisis. ¿Cuáles son los méritos para semejante retribución? ¿Qué logros justifica semejante gasto en medio de recortes y deudas externas?
Desde el 2006, cuando Alan García corrigió el abuso cometido por el corrupto Alejandro Toledo al imponerse un sueldo presidencial de S/42,000 mensuales, todos los sucesores –incluido Pedro Castillo– mantuvieron el salario en S/15,600. Fue un gesto político que por lo menos marcó un mínimo de respeto institucional. Pero Dina Boluarte, cuya gestión se caracteriza por su precariedad técnica, falta de transparencia, represión social y opacidad administrativa, ha elegido romper con absoluta indolencia ese pacto tácito con el sentido común. Con apenas legitimidad política, sin partido, sin bancada sólida y con un país sumido en múltiples crisis, la mandataria parece decidida a asegurarse su propia prosperidad mientras el país se desangra.
Lo más grave es que este aumento no fue transparente. Un documento fechado el 10 de febrero de 2025 (Oficio N.º 001180-2025-DP/SSG) enviado desde su propio despacho a la Presidencia del Consejo de Ministros da cuenta del inicio del proceso que terminaría en el Decreto Supremo que oficializa su nuevo sueldo. Primero negaron su existencia y luego intentaron ocultarlo bajo la figura de “documento confidencial”. El cinismo de este mandato presidencial no conoce límites.
El ministro de Economía, Raúl Pérez Reyes, con un discurso timorato, justificó el aumento comparando el salario de Boluarte con el de otros mandatarios latinoamericanos. Lo que no dijo es que esos países, en su mayoría, tienen economías más estables, mejores índices de seguridad ciudadana y servicios públicos más eficientes. El argumento del “salario competitivo” no aplica para una presidenta cuyo gobierno reprime y no da explicaciones de sus investigaciones a la opinión pública, cuyo liderazgo es inexistente, y cuya gestión ha endeudado al país por más de S/13 mil millones para adquirir 24 aviones de guerra que ningún conflicto bélico actual justifica.

Este aumento, además, podría marcar un nefasto precedente. Si la presidenta chalhuanquina puede duplicar su sueldo sin mayor oposición, ¿qué impide que ministros, directores, gerentes públicos y demás funcionarios empiecen a reclamar lo mismo? No se trata de populismo ni de demonizar el gasto público, sino de responsabilidad política y ética. En un país donde el sueldo mínimo apenas alcanza los S/1,025, donde la canasta básica se vuelve inalcanzable, y donde la desigualdad se acentúa día tras día, este tipo de decisiones son provocaciones directas al pueblo.
¿Y después qué? ¿Una pensión vitalicia de S/35,000? Aunque la Ley n.º 26519 establece S/15,600 mensuales para los expresidentes, la práctica política peruana ha demostrado que lo legal importa poco cuando el poder se ejerce sin escrúpulos. Si expresidentes de transición como Merino y el ‘morado’ Sagasti intentaron cobrarla, ¿qué impedirá a Boluarte hacerlo, ahora con un sueldo duplicado?

Dina Boluarte Zegarra pasará a la historia no como una lideresa, sino como un símbolo de la desconexión del poder. Una mandataria más interesada en los beneficios personales que en el bienestar colectivo. Gobernando entre vuelos diplomáticos y decretos ocultos, mientras el Perú se incendia, y la clase trabajadora –la verdadera columna vertebral de esta nación– es ignorada, despreciada y ahora, burlada.
Opinión
Ministro Schialer, ¿con la Fiscalía y la transparencia o con el secretismo y el poder oculto?
Lee la columna de Rafael Romero

Por Rafael Romero
¿Hay un poder oculto en el Ministerio de Relaciones Exteriores (MRE)? Es innegable a estas alturas de las investigaciones del Ministerio Público sobre funcionarios de la Cancillería (Carpeta Fiscal N° 506015505-2025-144-0).
Por la salud de la República y la diplomacia peruana, no se puede seguir mirando de costado desde el sillón ministerial, especialmente cuando la Casación N° 18558-2024 del pasado 2 de abril, emitida por la Primera Sala de Derecho Constitucional y Social Transitoria de la Corte Suprema, confirmó la nulidad del procedimiento administrativo abierto por Popolizio y De Zela contra el embajador Fortunato Quesada, debido a graves irregularidades, a la vulneración del debido proceso y la confirmación de que hubo un complot desde el MRE para destituirlo.
No le queda más alternativa al canciller Schialer que cumplir los principios de la administración pública: legalidad, veracidad, integridad, probidad, honestidad, transparencia y ética en la función pública, y con ello estará cooperando institucionalmente con la Fiscalía, entidad que investiga a altos funcionarios diplomáticos por un supuesto tráfico de influencias.
Empero, urge una mirada más profunda y pesquisas contundentes por parte de la Fiscalía pues habría otros delitos y no solo el de tráfico de influencias; y si bien la Primera Fiscalía Provincial Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios – Quinto Despacho, viene haciendo un importante trabajo, bien podría valorar y ponderar hechos y declaraciones que configurarían más ilícitos que se habrían cometido por parte de los investigados en la Carpeta N° 506015505-2025-144-0.
Así, una serie de declaraciones atestiguan la existencia de un poder oculto y una argolla que vendría actuando por años y por encima del ordenamiento administrativo del MRE, y esto es peor a partir de un diálogo entre el funcionario Pedro Rubín y el fenecido José Boza, tal como consta en el expediente administrativo disciplinario abierto por la Cancillería contra el embajador Quesada. Asimismo, está la declaración del chef Jesús Alvarado Zegarra del Carpio, que trabajó en la embajada del Perú en Israel, y es fundamental su carta pública del 1 de abril del 2025, donde señaló con nombre propio quiénes son los funcionarios de la Cancillería que habrían actuado fuera de la ley.
Efectivamente, urge valorar por parte del Ministerio Público la confesión reveladora, mediante entrevista periodística del referido señor Jesús Alvarado, que consta en fuente abierta y puede verse en la red social YouTube, con su respectivo enlace web: https://www.youtube.com/watch?v=E26xNCzhYKQ&t=194s, titulado: “CHEF JESÚS ALVARADO CORROBORA COMPLOT CONTRA EMBAJADOR QUESADA”.
También se justifica un mayor análisis y nuevas pesquisas a la luz de los siguientes hechos todavía no valorados, contenidos en el artículo del periodista Herbert Mujica, jefe de la Unidad de Investigación del Diario UNO, del lunes 24 de febrero del 2025, titulado “Quesada, complot y escándalo y no hay culpables”. Igualmente, resulta revelador su otro artículo titulado “Sacan de Egipto a embajador peruano José Betancourt”, cuyo enlace web es:
https://senaldealerta.pe/sacan-de-egipto-a-embajador-peruano-jose-betancourt/. Pues, los hechos estarían en relación con los supuestos delitos de omisión funcional y organización criminal, y debe ponderarse la nota periodística de la agencia de noticias INFOBAE, del 20 de setiembre del 2024, escrita por el periodista Ricardo Mc Cubbin, y titulada: “Perú retira a su embajador en Egipto luego de acusaciones de mal comportamiento con altos funcionarios”, y cuyo enlace web es: https://www.infobae.com/peru/2024/09/20/peru-retira-a-su-embajador-en-egipto-luego-de-acusaciones-de-mal-comportamiento-con-altos-funcionarios/
Porque en medio de todo esto resultan contradictorias las Resoluciones del MRE, pues por un lado retira al embajador José Betancourt de Egipto, mediante Resolución Suprema N° 151-2024-RE, del 10 de setiembre del 2024, cuyo enlace web es: https://www.gob.pe/institucion/rree/normas-legales/6207474-151-2024-re; y, por otro lado, la Cancillería lo premia en un puesto dorado, de asesor especializado de Recursos Humanos en Lima, mediante Resolución Ministerial N° 0871-2024-RE, cuyo enlace web es: https://www.gob.pe/institucion/rree/normas-legales/6200953-0871-2024-re.
Esta blandura puesta en perspectiva, y a la luz de toda la documentación de la Cancillería existente en sus Oficina de Recursos Humanos (ORH), evidencia el trato desigual brindado a José Betancourt, exembajador peruano en la República Árabe de Egipto, respecto del abusivo proceso disciplinario impuesto contra el entonces embajador Fortunato Quesada, quien tenía función representativa oficial de nuestro país en Tel Aviv (Israel).
Es más, una profunda investigación de la Fiscalía no podría dejar de lado el testimonio y las aseveraciones del referido diplomático de carrera, Fortunato Quesada, brindadas al Canal N, sobre el complot en su contra y cuyo enlace web es el siguiente: https://canaln.pe/video/cuentas-claras/fortunato-quesada-exembajador-peru-israel-responsabilizo-al-excanciller-popolizio-y-zela-complot-su-contra-n5476, pues con ellas se tiene un panorama claro del supuesto “iter criminis” en su contra y la relación de los investigados en la Carpeta Fiscal N° 506015505-2025-144-0.
También existe abundante documentación oficial en la sede del MRE sobre LOS 31 FOLIOS OCTUBRE DEL 2020 donde se evidenciaría la organización y programación de un escándalo mediático e ilegal, usando los cargos públicos para llevarlo a un programa dominical (“Panorama” de Panamericana Televisión); y también en el INFORME (ORH) N. 011 DE DICIEMBRE DEL 2020, donde la propia Cancillería señala el nombre de cuatro funcionarios involucrados en la trampa (Popolizio Bardales, José Boza, Pedro Rubin y Hugo de Zela) y que se habría configurado una serie de ilícitos penales, los mismos que hoy tienen que ser esclarecidos por el Ministerio Público.
Incluso, más recientemente, siendo un hecho público la nota del diario Perú 21 sobre la Casación del Poder Judicial frente a un posible complot, sería pertinente que la Fiscalía a cargo del doctor Néstor Rivera Navarro, pondere el contenido de la noticia titulada: ”Según investigación, audios fueron manipulados. Embajador Fortunato Quesada gana juicio a la Cancillería y deberá ser repuesto”, cuyo enlace web es: https://peru21.pe/politica/embajador-fortunato-quesada-gana-juicio-la-cancilleria-0/, publicada el 11 de junio del 2025, donde se hace referencia a audios manipulados.
En suma, lo recomendable es profundizar en cada aspecto y trazar nuevas líneas de investigación hacia otros posibles delitos (omisión de funciones, abuso de autoridad, organización criminal, falsedad genérica, etc.) ya que no solo existiría el de tráfico de influencias. La pelota está en la cancha de la Cancillería, pero el ministro Schialer, ¿será el árbitro, un jugador o solo un espectador desde la tribuna? Por lo pronto mantiene como su asesor ad honorem al embajador Hugo de Zela, cuando hay una sentencia judicial de la Corte Suprema en su contra (que le anuló una resolución arbitraria y abusiva). No es esto una seria contradicción moral y ética.

-¿Crees que tu opción -la de hacer cine sin dinero, sin ayudas de fondos, con cámaras baratas, sin guion, con trabajos con toques experimentales (por decir lo menos) y sin una narrativa que acaricie los hábitos mentales de espectadores promedio- tiene sentido?
-Para mí no es ni siquiera una opción, te diría que, a la luz de las circunstancias (externas e internas) es la única opción para mí. He llegado a pensar que mis razones son acaso muy distintas a las de la mayoría de gente que conozco, quiero decir ‘la gente de cine’ aquí en mi país.
No soy, no llego a ser plenamente un cineasta experimental; como bien dices, hay aspectos experimentales en lo que hago, pero aún no me atrevo a ser todo lo radical que debería ser, si de algo sirve la confesión.
Me interesé en el cine pasados los 25, llegué tarde a la fiesta. Me puse a ver películas como un poseído. Conforme fui avanzando en el conocimiento me di cuenta que la gente de por aquí no valoraba las obras de vanguardia, no les interesaban o no las entendían. No eran para ellos. Luego me di con la palabra perfecta: colonizados. No había vida, casi no había cine para ellos, más allá de Hollywood. Hasta hoy siento vergüenza ajena por eso. Siento incluso una repulsión íntima por la miseria de este entorno…
-Ya. Déjame adivinar. Entonces ¿te creías más que los demás y pensaste que podrías dar un aporte real para mejorar ‘el estado de las cosas’?
-No niego que al tener una formación mínima en literatura y filosofía y una cierta cultura digamos en sentido general, percibía ciertos huecos bastante vistosos entre ‘la gente de cine’. También pude notar que cosas tales como la fama, el dinero, el poder, la figuración social, estaban lejos de serles indiferentes a varios. ¿Pero gente, esto no trataba de cine?
También acabé desertando de la cinefilia entendida y vivida como una auténtica enfermedad. Había editado y escrito en revistas, programaba y exponía en cineclubs y hasta formé parte de un festival. Nada de lo anterior me terminaba de hacer sentir feliz.
¿Qué me faltaba? Expresar algo más de mí, quizá lo principal. Y eso no tiene precio. No lo cambio por nada. Así que métanse sus ansias de minucias por donde les quepa. Porque no hay nada como crear.
Películas
https://www.youtube.com/@marszproject7155/videos
Críticas
https://limagris.com/author/mario-castro-cobos

Me llaman por teléfono para decirme que Milenka O’Brien ha partido. Desde muy joven se dedicó a la poesía, incluso tengo un libro escrito a dos manos con ella. Nunca lo publicamos. Éramos todavía adolescentes. Pero ahí están los papeles trazados a puño y letra. La leo y se me nublan los ojos. Teníamos solo 16 o 17 años.
La conocí en el Museo de Arte de Lima, ella seguía unos talleres de poesía con el profesor Baldeón y yo pasaba por ahí con una vieja guitarra. Eran los tiempos del Rockacho, la No Helden y el Hueco. Y un día la encontré bailando en círculo, mirando el cielo por Paseo Colón. Nos hicimos muy amigos y caminamos por Lima buscando no sé qué.
En las redes sociales le escribí esto: Adiós, Milenkita, adiós. Me quedo con nuestra adolescencia entre poemas, guitarras y cigarrillos. Me quedo con ese día en el cafetín de Arte, todavía niños y tú mirándome a los ojos mientras caía la lluvia y preguntándome si era músico. Y yo diciéndote que sí, solo porque admirabas a esos roqueros sin afeitar de casacas de cuero, solo porque te gustaba esa música estridente para olvidarlo todo. Y así me enseñaste tus primeros poemas y así nos quedábamos días y noches en mi casa de Lima o en tu casa de San Felipe. O venías a las cinco de la mañana para ir a Bellas Artes en el jirón Ancash a tomar desayuno con los tickets que nos daban los que sí eran artistas. Y aprovechábamos que eras rubia y así se nos abrían las puertas para todos lados hasta una vez que en una batida policial nos levantaron y pensaban que eras turista y nos soltaron y hasta nos dieron para nuestros pasajes. Y yo fui el primero que te llevó al jirón Quilca un día y el viejo declamador Hudson Valdivia se nos acercó y te dijo un poema y tú te subiste a la mesa y bailaste, danzaste con tus manos estiradas hacia arriba y varios poetas te dedicaron páginas enteras, hasta sé que apareces en varias novelas y en un texto que escribió Carlitos Rengifo: La Morada del Hastío. Y así un día me dijiste, “Rodolfo, me voy”. Y te fuiste.”
Dicen que Milenka se durmió el 15 del presente. El 24 hubiera cumplido 56 años. La vamos a extrañar.

En los universos expansivos que produce la literatura, la obra del americano David Foster Wallace (1962-2008) es una suerte de big bang. Desmesurado, inclasificable, frontal. Si bien su obra inicia representando la visión posmoderna del mundo (una prosa erudita y visceral), termina siendo un escritor dostoievskiano, es decir, ético y crítico con su realidad.
En Todas las historias de amor son historias de fantasmas (Debate, 2012) el periodista D.T. Max realiza un preciso viaje al origen del autor cuyo suicidio lo emparentó con Kurt Cobain. En más de cuatrocientas páginas, Max nos presenta un Foster Wallace en crecimiento. El ser hijo de intelectuales (que se leían a Joyce antes de acostarse), con una madre obsesionada con hablar correctamente, impactará en la sensibilidad y personalidad del joven autor. Aparte del estudio, su otro vicio es el tenis, quizás el único deporte cercano a su personalidad individualista-competitiva.
Después pasamos por la etapa académica en la universidad privada de Amherst. La escoba del sistema, su tesis —que después se publicará como novela— es una narrativa donde se deliberan temas relacionados a la lógica y a la filosofía, dos ejes de su escritura. Pese a su innegable brillantez, no deja de ser un joven tímido, ensimismado, y ya fumador ocasional de cigarrillos de marihuana y bebedor de cerveza. También sufre de depresión, con pensamientos suicidas.
Por estos motivos, dejará la universidad un par de veces e incluso (en su etapa en Harvard) tendrá que internarse, asunto que se dilatará por un año e iniciará sus más de diez años de abstinencia. Estas circunstancias —el internado, el dejar el campo universitario— serán de vital influencia para su obra principal, La broma infinita (1996), donde, en más de mil páginas, se revisa las adicciones modernas, sea a la imagen o a las sustancias.
Si bien empezó como autor de culto, se tornó una voz generacional. Reactiva al realismo minimalista de McInerney o Ellis y cercana a las propuestas de Pynchon, DeLilllo o Franzen.
D.T. Max nos lleva por el universo Wallace para conectar desde adentro con una sensibilidad que ya muestra en alta definición las formas de vivir y sentir de nuestra época.
Opinión
La difícil decisión de hacer política en el Perú
Hacer política en este país no es un acto de ambición. Es un acto de resistencia.

Por: Jorge Paredes Terry
Desde el primer instante en que decides alzar la voz, sabes que firmas un pacto con la adversidad. Los enemigos no duermen. Escarbarán en tu pasado, torcerán tus palabras, magnificarán tus errores y, si no encuentran nada, inventarán. Atacarán a los tuyos, mancharán tu nombre, te llamarán corrupto, traidor, inepto. Te acusarán hasta de lo que no has hecho, porque aquí la política no se juega en las ideas, sino en el barro.
Y entonces, ¿por qué hacerlo?
Porque alguien tiene que hacerlo. Porque mientras los poderosos siguen repartiéndose el país como un botín, hay millones que no tienen voz. Porque hay madres que caminan horas para llevar un plato de comida a sus hijos, jóvenes que estudian bajo la luz de una vela, ancianos que mueren esperando una pensión que nunca llega. Porque este sistema está diseñado para que unos pocos vivan bien y muchos sobrevivan mal.
Yo no vine a la política por un título. Vine porque nunca perdí la capacidad de indignarme. Porque no puedo quedarme callado cuando veo cómo nos humillan, cómo nos roban, cómo nos ignoran. No hay ideología que valga más que la lucha. No hay discurso que reemplace el caminar junto al pueblo, el sudar con ellos, el sufrir con ellos.
Por eso me lanzo al Senado. No con un partido de trajes elegantes y sonrisas falsas, sino con Pepe Luna, un provinciano como yo, que sabe lo que es levantarse sin privilegios, que conoce el sabor de la tierra y el peso de la injusticia. Juntos, sin banderas prestadas, sin miedo a decir lo que duele.
Sí, es peligroso. Sí, intentarán destruirnos. Pero el que nada debe, nada teme. Yo no tengo cuentas en paraísos fiscales, no tengo mansiones compradas con coimas, no tengo miedo. Tengo convicción. Y si el pueblo me da la oportunidad, no iré al Senado a enriquecerme, sino a romper el silencio.
A los jóvenes les digo: el Perú necesita valientes. No los que buscan poder, sino los que están dispuestos a perderlo todo por cambiar las cosas. Si no somos nosotros, ¿entonces quién? Si no es ahora, ¿cuándo?
La política en este país puede ser un suicidio, pero prefiero morir de pie que vivir de rodillas.
-
Política5 años ago
Las licencias de Benavides [VIDEO]
-
Política5 años ago
La universidad fantasma de Benavides
-
Actualidad5 años ago
Richard Swing: «Con esta conferencia he dado un gran aporte a nuestra institución y a la humanidad»
-
General5 años ago
Dan ultimátum de 48 horas al presidente Sagasti para derogar Decreto que atenta nuestra Soberanía Nacional
-
Política4 años ago
Altos oficiales de FF.AA a través de comunicado exigen la salida de Jorge Luis Salas Arenas
-
Actualidad2 años ago
Carlos Alcántara: «Crees que voy a pretender hacer una película como Tarantino. Hay que ser huev… para pensar que voy a querer algo así»
-
Cultura5 años ago
MINISTERIO DE CULTURA PAGÓ 175 MIL SOLES AL CANTANTE RICHARD SWING
-
Cultura4 años ago
«Es que somos muy pobres», por Juan Rulfo