Connect with us

Actualidad

¡MADRID, YA ESTOY AQUÍ!

Published

on

Llegaron al amanecer a la estación sur. El viaje no había durado más de seis horas, contando la parada a medio camino para que el chofer descansara y los pasajeros estiraran las piernas. Un bar de carretera en el que hacía tanto frío que se le descompuso el estómago. No era capaz de dormir en los autobuses y mirar por la ventana en un trayecto nocturno era estar horas mirándose al espejo.

Tampoco podía leer porque apagaron las luces para que los demás durmieran tranquilos, así que se había pasado seis horas intentando averiguar qué podía esperar de aquella aventura. Un año antes tomó la decisión de ser director de cine, tenía la cabeza llena de ideas originales y transgresoras y muchas historias que contar, sólo le faltaba aprender a hacerlo.

Quería emular a Almodóvar o a Alex de la Iglesia. El primer paso era irse a Madrid y entrar en la escuela de cinematografía. Las clases empezaban en octubre y había preferido llegar unos meses antes para instalarse y acostumbrarse a la ciudad. Los cambios bruscos le costaban un esfuerzo psicológico extra. Además debía buscar trabajo para pagarse los gastos. En principio iba a vivir en casa de uno de los hermanos de su padre así que no tendría que preocuparse por el alojamiento por un tiempo y eso le daba más margen de maniobra.

Se encendieron las luces y poco a poco los pasajeros se fueron desperezando. Brazos por todas partes, bolsas y mochilas saliendo de los compartimentos de equipaje. Todo el mundo parecía tener prisa por salir de allí. Él no, siguió sentado esperando a que se calmara el enjambre. Estaba cansado, dolorido por permanecer en la misma postura tanto tiempo, con los ojos hinchados por la falta de sueño. Se bajó del autobús atontado, mareado y mirando a todas partes buscando una cara conocida. Su tío le recibió con una palmada en la espalda, una sonrisa de oreja a oreja, y esperó a que recogiera su equipaje.

No venía de visita sino a quedarse. Y aquella estación tan fría, inhóspita, fue su primer contacto con la capital. Su tío parloteaba sin parar sobre las increíbles oportunidades que tendría en aquella ciudad tan grande. Él había llegado hacía veinte años y aunque los comienzos fueron duros, las cosas le iban francamente bien. Veinte minutos más tarde paró el taxi y le invitó a bajar. Le abrió el maletero y le entregó su macuto.

-Te he buscado un hostal. Estarás más cómodo que en casa. Si necesitas cualquier cosa llama. Tienes mi teléfono. ¿Ves el cartel? Está justo ahí. La paloma. Pregunta en recepción. Tienen una habitación a tu nombre-

-Gracias- contestó aún incrédulo. La amabilidad de la familia siempre le sorprendía.

El hostal tenía un aspecto triste y abandonado por fuera, ni siquiera se quería imaginar como sería por dentro. En recepción, una chica muy delgada que se limaba las uñas con fricción le entregó la llave y le mandó escaleras arriba, al segundo piso. El ascensor no funcionaba. Las paredes desconchadas del pasillo, en aquel tono verde mostaza descolorido, le deprimieron lo suficiente como para no sentirse completamente hundido al entrar en la habitación. El retrete inexistente le confundió. Descolgó el teléfono y oyó la carcajada de la recepcionista.

-La primera puerta a la derecha nada más llegar a la planta es el excusado- y colgó.

Un solo cuarto, sin intimidad ninguna, la persiana a media altura y las cortinas ausentes. El lavabo y el cubículo de la ducha frente a la cama. La colcha oscura que la cubría no hacía el entorno más acogedor. Sin embargo, estaba muerto. Abrió la cama y se tumbó vestido. Necesitaba dormir aunque solo fueran unas horas.

Ya había pasado un mes de su llegada a Madrid y por lo menos tenía casa. Un piso de 50 m que compartía con Oscar, un actor depresivo al que conoció por un anuncio que estaba pegado en la puerta de la cafetería donde desayunaba cada mañana. Llevaba días buscando piso por la zona pero su presupuesto no daba ni para meterse en el más infecto cuchitril. Él no era delicadito y cualquier cosa le parecía mejor que seguir en el hostal. Aquella mañana el camarero tardaba en hacerle caso y él se dedicó a mirar hacia la puerta y lo encontró.

Un grito de auxilio. Una habitación en alquiler a un precio bajísimo y ni se lo pensó. Llamó desde la primera cabina que encontró y una voz cadenciosa le respondió con desidia. Aunque cambió el tono en cuanto le empezó a preguntar por la habitación, se volvió meloso y atento y se pusieron de acuerdo sin verla siquiera, sin conocerse de nada. Esa misma tarde se presentó allí. El no 25 de la calle Artistas, muy cerca de su hostal. Un edificio de color rojo de tres plantas. Llamó al portero del 2oA y le abrieron enseguida. Sin ascensor, tampoco era un gran problema, sólo eran dos tramos de escaleras. Oscar, el tipo con el que había hablado, le esperaba con la puerta abierta.

Una escultura de Giacometti de piel extremadamente blanca, rasgos suaves, mirada indescifrable y pelo rubio platino. Le invitó a entrar tras un apretón de manos cuando menos confuso por lo sutil. Desplazaba su cuerpo con tal parsimonia que el recorrido de escasos tres metros de aquel pasillo azul que les conducía al salón se hizo eterno. Quiso ver su habitación antes de nada y Oscar abrió la puerta a la izquierda del pasillo. Un cuarto cuadrado con las paredes pintadas de color albero y una ventana que daba al patio interior, con rejas para evitar intrusiones. La cama era de hierro, ancha y espaciosa, pero dejaba la habitación convertida en nada, medio metro a cada lado para moverse, una mesilla de noche minúscula y un armario de madera antiguo y chirriante tras la puerta.

Por lo menos limpia y ordenada, pulcra como toda la casa. La cocina funcional, estrecha y bien equipada. El baño cumplía las necesidades básicas. El salón con decoración minimalista, una alfombra y muchos cojines de colores, una mesa baja y algunas estanterías llenas de libros. Daba a la calle y tenía terraza, tan espaciosa que solo cabían ellos dos. El trajín de la Glorieta de Cuatro Caminos quedaba atrás, era una zona tranquila. Desarmó el macuto, metió su ropa en el armario y sacó la foto enmarcada de Lolo. La puso sobre la mesilla. Cómo le echaba de menos, llevaban juntos tantos años. Todavía no podía traérselo del pueblo. Oscar era alérgico a los perros y él se sentía tan solo sin su compañero.

El dinero que trajo de casa se le acababa y seguía buscando trabajo en lo suyo. Se defendía como fotógrafo, era un buen dibujante y tenía talento para las artes plásticas. Oscar no era exigente con los plazos y él intentaba estirar todo lo posible el pago del último mes de alquiler para no quedarse a cero. Por fin consiguió un encargo de un diseñador de modas muy conocido con fama de quisquilloso pero también de pagar bien. Tenía que hacer los bocetos de la última colección que había preparado. Fueron semanas dedicado a dejarlos perfectos, a ajustarse a cada detalle que se le exigía. El día que los fue a entregar, orgulloso de su trabajo, se los recibieron y quedaron en avisarle para hacer el pago. Espero y esperó y el teléfono no sonaba nunca así que se presentó allí. Necesitaba el dinero de verdad, Oscar se impacientaba. La secretaria le puso mala cara cuando le vio y tardó más de una hora en atenderle. Recibió una llamada y le recomendó que volviera otro día. Él era capaz de entender que estaban muy ocupados así que hizo lo que le indicaron, sin embargo, después de varias visitas infructuosas, se hartó y preguntó directamente a aquella mujer que le observaba incómoda cual era el problema. Ella ni se inmutó, descolgó el teléfono y lo volvió a colgar. Con voz autoritaria le informó que su trabajo no cumplía los requisitos necesarios pero los bocetos eran propiedad del diseñador, por supuesto no le iban a pagar. Pálido, confuso y sin saber como reaccionar se fue.

Consiguió trabajo en un sex-shop de la calle Montera poco después, hacía el turno de mañana. Los primeros días iba de susto en susto. Aunque dos semanas más tarde ya se había acostumbrado a todo. Era un local pequeño con una puerta de entrada y otra de salida con más trafico que una estación de metro, pero no eran clientes precisamente, el cañi, el mueco, Leoncio, la fauna de la esquina, pasaban corriendo, juntos o de uno en uno, delante de la policía, delante de otros camellos, delante de la puta a la que acababan de timar o de su chulo, o de los dos. Él saludaba y seguía a lo suyo. Le animaban la mañana por lo menos.

Al llegar todos los días veía a la puta del portal de al lado y ella le saludaba sonriente. Hasta que un día la conoció. La Chari entró en el sex-shop con dos cafés en la mano y ganas de charla. Se había instalado en aquel portal el mismo día que él entró a trabajar allí y ella lo veía como una señal. Le cayó bien, la saludaba todos los días. En realidad era el único que lo hacía, le parecía un chico moderno y educado. No le gustaba desayunar sola y le pareció la mejor manera de hacer las presentaciones. Los primeros días solo hablaban del frío, del calor, de la contaminación de Madrid, de la poca clientela que tenía el sex-shop a esas horas, de lo complicado que era hacer la calle desde que había tanta puta junta. Los vecinos les daban el coñazo porque estropeaban la imagen del barrio.

-Pero si ha sido la calle de las putas de toda la vida, ¡Coño!-.

La Chari venía de un pueblecito de Burgos. Una mujer de formas rotundas, muslos gruesos, pechos grandes y caderas amplias y redondeadas. Sus carnes, un poco descolgadas, se bamboleaban a cada paso que daba. Enfundada en un vestido estampado de leopardo, bien pegado a la piel, y con unas sandalias de tacón que resonaban en la calzada cuando pasaba, se contoneaba aleteando un bolsito rojo como si fuera marca de la casa. Tenía una voz atiplada y unas pestañas falsas muy largas. Se pintaba los ojos con colores estridentes y sus voluminosos labios de un rojo brillante. No tenía más de treinta años, los ojos marcados por profundas arrugas, puro desgaste de falta de sueño y cansancio.

No era fea, tenía rasgos suaves y ojos bonitos, aunque uno de ellos se distraía de vez en cuando. Él trataba de no mantenerle la mirada mucho tiempo. Intentando averiguar cuando volvería ese ojo a su lugar perdía la concentración y dejaba de escucharla. Le gustaba hablar de sus clientes, no tenía chulo y no trabajaba en cualquier antro porque había descubierto que haciendo la calle por su cuenta los ingresos eran más altos. Tenía clientes fijos que la llamaban por teléfono, hacía jornadas de ocho horas, mañana y tarde, y los servicios los hacía allí mismo, en el portal, porque ellos siempre tenían prisa. En invierno era más jodido por lo del frío y alguno que otro le salía remilgado y tocaba alquilar habitación por horas. Había un hostal a la vuelta de la esquina que usaban todas las putas de allí y les hacían precios especiales, aunque si el cliente pagaba la habitación tocaba rebajarle la tarifa y no salía a cuenta.

-A otras les pasa, pero a mí no se me va ninguno sin pagar- decía, riéndose y levantando el puño amenazante.

Su tos áspera y constante, cuando encendía uno de aquellos cigarillos que fumaba en boquilla, le preocupaba y más de una vez intentó convencerla de que dejara de fumar, pero la Chari era cabezona.

-Si no fumo tanto, sólo con el café. Y la tos es porque tengo los pulmones debiluchos por culpa de una tuberculosis que me cogí hace diez años. Un vaso mal lavado. ¡No te jode! Si estoy hecha una mierda-. Otra carcajada y luego se atascaba tosiendo y tragándose el humo como una profesional.

Hacía una pausa para aclararse la garganta y darle un par de sorbos al café y seguía hablando.

-Tengo un niño, vive con mis padres en el pueblo. Lo tuve de jovencita. Ya tiene 12 años. Es más guapo, se parece al cabrón de su padre pero tiene mis ojos. Casi me muero cuando lo parí. Tuve preclansia o algo así. La tensión se me subió a lo burro y desde entonces no puedo coger peso ni hacer esfuerzos demasiado exagerados-.

-¿Pero con tu profesión?-.

-Eso no es nada, mientras no tenga que cogerlos en brazos no hay problema, Jajaja. Ya llegó Mateo me tengo que ir, es un habitual-.

Y salía corriendo dejando los vasos de plástico vacíos encima del mostrador. No estaba seguro de si ella tenía algún problema de atención porque escuchaba la misma historia cada mañana.

Los primeros meses Oscar y él apenas se veían pero cada vez pasaba más tiempo en casa y hablaban de vez en cuando. Nunca fue un charlatán pero si un buen oyente y Oscar pasaba por una mala racha, cansado y desencantado de su profesión. Ya no buscaba papelitos en obras de teatro, ya no se conformaba con hacer de figurante ni con aquella única línea que le permitía salir al escenario. Un amigo le había conseguido un espectáculo en un local de ambiente y recitaba un monologo allí tres veces por semana.

Aunque al principio le entusiasmó la idea, después de unos meses se sentía un verdadero fracasado. Cinco años antes había llegado desde Vitoria esperando convertirse en una estrella, debutar en un teatro cómo el María Guerrero y ver su nombre en letras grandes junto a actores consagrados, sin embargo, estaba confinado en un antro oscuro representando el papel de un vampiro que solo daba discursos sobre la muerte y el miedo a envejecer. Eso pagaba sus gastos pero no sabía cuanto tiempo podría seguir haciéndolo.

-Tener que preocuparse por cosas tan mundanas como pagar la renta o rellenar la nevera no es propio de un artista. Creí que encontraría un mecenas que se ocupara de mí pero no pasó-. Un largo suspiro y se tumbaba en la alfombra.

Se quejaba continuamente de lo difícil que le resultó dejar su casa, las discusiones interminables que tuvo con su padre defendiendo su talento como actor, ahora todo eso no tenía sentido. Los días que la conversación iba por esos derroteros, aunque intentara hacerse la víctima, en su tono de voz había cierto desprecio por la gente común, la que no tenía su talento, su sensibilidad.

-A lo mejor mi padre tiene razón y debería ocuparme de gestionar el negocio de la familia como hizo él cuando el suyo se jubiló. Es una pequeña empresa de tejidos que ha sobrevivido a muchas crisis, mi abuelo era un genio y mi padre se defiende bien-. Él seguía dibujando mientras Oscar no dejaba de hablar. De pie, yendo y viniendo de la terraza hasta su habitación.

-¿Sabes qué trabajé como un perro para pagarme los cursos de interpretación? Fui camarero, sólo al principio, pagaban mal. Luego me llamaron para ser relaciones públicas de una discoteca de alto standing, de esas a las que solo se entra con invitación, en la zona VIP por supuesto, el sueldo era muy bueno pero lo tuve que dejar porque vivir de noche y dormir de día es muy malo para la piel. El trabajo más divertido que tuve y el mejor pagado fue en una línea erótica. Era un local con veinte cubículos diminutos.

Había de todo, hombres, mujeres, gordos, flacos, eran tan feos todos pero las voces no estaban nada mal. En realidad era lo único importante. Eso me lo enseñó Marta. 100 kilos de mujer adulta con voz de Lolita que causaba sensación. Su teléfono no dejaba de sonar. Aprendí de ella frases, trucos, ideas originales que aplicaba en su justa media. Ella era muy vulgar y yo quería dar más clase a mis conversaciones, aunque el tema no daba para mucho. Los demás creían que mataría de aburrimiento a mis clientes pero mi teléfono sonaba. ¡Como tengo la voz tan bonita!- Sonreía y se miraba al espejo del pasillo. Había puesto espejos por toda la casa.

La primera vez que le despertó a media noche gritando y llorando se asustó.

-Me acabo de suicidar- le dijo y él se incorporó de inmediato.

-Vamos al hospital. Te tienen que hacer un lavado de estómago. Llamaré un taxi o mejor una ambulancia-.

-Me he tragado un frasco de pastillas, ¡Ya no aguanto más! ¡No hagas nada!-.

Él, desesperado, fue al baño a comprobar que nivel de estupidez había hecho Oscar. El frasco seguía sobre el lavabo, lleno hasta la mitad. No era tan grave, aún así le obligó a vomitar y se quedó a su lado hasta que se durmió. Desde entonces cada quince días se repetía la escena y él se portaba como un autómata. Café con sal y palmaditas en la espalda hasta que el estómago de Oscar se quedaba completamente vacío. Y un día Oscar decidió que no merecía la pena sufrir de esa manera, hizo las maletas y se volvió a su casa. Le dejó una nota en la puerta de la habitación: ¨El mes está pagado. Gracias por todo. A lo mejor vuelvo cuando esté más tranquilo. Un abrazo. Oscar¨.

-¡Qué cabrón!- fue lo primero que se le pasó por la cabeza.

Dos meses antes de la fuga de Oscar conoció a las vecinas del 3oB. La primera vez que las vio fue un viernes. Oscar llegó tan borracho que pasó la noche delante de la puerta de casa, tumbado todo lo largo que era como un felpudo del carne, envuelto en su capa vampírica de forro rojo bermellón, con el maquillaje aún perfecto. El salía con prisa como todas las mañanas y lo encontró tirado. Por un momento pensó en dejarlo allí, saltar por encima y largarse.

Tenía llaves. Ya entraría cuando se despertara. Fue una iniciativa fugaz, no era capaz de hacerle eso. Así que a rastras, porque la diferencia de tamaño y el peso muerto que era Oscar en aquel momento no le permitía hacer otra cosa, le llevó al salón y le dejó sobre la alfombra, desmadejado pero seguro. Le iba a doler todo cuando se levantara. El pasillo era demasiado estrecho y habilidad para manejar fardos no tenía. Le tapó con una manta y salió disparado escaleras abajo.

Estuvo a punto de arrollar a las chicas, se disculpó pero ellas ni siquiera le escucharon, le saludaron con desgana y siguieron subiendo con una pachorra agónica, ojerosas, derrotadas. Iban maquilladas, nada excesivo, aunque de eso debía hacer muchas horas, probablemente venían de una fiesta y no muy contentas. No sabía por qué pero una le recordaba a un cocker spaniel y la otra a un galgo. Le gustaban los perros y siempre acababa identificando a las personas con alguno de estos animales. Desde el primer día pensó que Oscar era un dálmata y la Chari un Chow Chow.

Esa tarde las volvió a ver en el supermercado del final de calle, trabajaban de cajeras por las tardes. Atendían a los clientes una con gesto de fastidio, el galgo, y la otra atenta y amable. Y por la noche las vio bajarse de un taxi, cargando unos bultos envueltos en papel de embalar y sujetos con cuerdas, debían pesar demasiado porque hicieron turnos de guardia para ir metiéndolos en el portal. Él contemplaba la escena desde la terraza y decidió bajar a ayudarlas. Desde que llegó a Madrid las únicas personas con las que hablaba eran la Chari y Oscar.

No era mala idea ampliar su círculo. Aceptaron su ofrecimiento, eufórica una, condescendiente la otra, y fue entonces cuando supo que se llamaban Elena, la chica amable, y Clara, la distante. El traslado por las escaleras fue duro, apenas había espacio y aquellos paquetes pesaban de verdad y se desvencijaban continuamente. Le explicaron que eran cuadros y los traían de una exposición. Clara intentaba entrar en Bellas artes y Elena sólo quería vivir de su trabajo. Cuando llegaron por fin a su piso le invitaron a tomar algo para agradecerle el esfuerzo y el aceptó encantado. Las chicas prepararon algo rápido y los tres comieron como limas sin apenas cruzar palabra. Luego vino el café y las confidencias.

Nunca entendió por qué todo el mundo le contaba sus penas sin conocerle de nada pero se limitaba a sonreír y a escuchar, a veces hasta ponía cara de confesor. Ellas habían conseguido hacer su primera exposición después de meses de duro trabajo. En una galería modesta y mal situada pero eso no era lo importante. Empezaron a desembalar los cuadros y los fueron alineando en el salón para enseñárselos. Elena era la encargada de ir mostrándolos uno a uno, le llamó la atención hasta que punto valoraba la obra de Clara y que poca confianza tenía en la propia.

Los precios, aún indicados en el marco de los cuadros con una etiqueta blanca. Los de Clara demasiado altos como si el valor de la obra se lo dieran los ceros, los de Elena demasiado bajos como si necesitara venderlos a cualquier precio, pensando más en cubrir costes. Las dos buscaban el reconocimiento, ser descubiertas, pero no tuvieron suerte. Los visitantes entraron en la galería para protegerse de la lluvia y observaron los cuadros con escaso interés. Recibieron elogios de amigos que se acercaron a apoyarlas y hubo ausencias destacadas. El dueño de la galería se quedó con un cuadro de cada una como pago por las molestias y aún se quejaban por los que había elegido, sobre todo Clara.

-Al final ni siquiera compensamos los gastos en materiales pero hemos dado un primer paso- decía Elena, poco convencida, Clara seguía con aquel gesto agrio al recordar el fiasco. Ellas soñaban con exponer algún día en Arco y él nunca supo si llegaron a hacerlo. No volvieron a coincidir y cuando se fue ya se habían ido.

Ingresó en la escuela de cinematografía y, aunque la especialidad de dirección era terreno vedado, se hizo un hueco en escenografía gracias a los trabajos anteriores que acumulaba en su book. El primer día de clase tuvo que presentarse en la escuela con el macuto en la mano. La fuga de oscar le complicó la vida de tal forma que estaba otra vez ejerciendo de indigente. Con su sueldo del sex-shop no podía pagar el alquiler completo y el casero le había puesto de patitas en la calle el día anterior. Sólo consiguió una noche de gracia.

Su presupuesto le permitía pagar unos días en un hostal pero poco más. Metió el macuto con dificultad en la taquilla que le fue asignada y tardó en darse cuenta de que le observaban. Esmeralda, una veterana, diez años mayor que él se le acercó y le interrogó con soltura intentando averiguar si tenía problemas de alojamiento. Él no era muy dado a ventilar sus dramas pero acabó confesando y ella le ofreció posada. Esmeralda asistía a la escuela de vez en cuando, más para conseguir contactos que para terminar la carrera.

-Este oficio se aprende sobre el terreno. Todo se basa en los contactos, ni siquiera en tus habilidades. Los títulos no sirven de nada-. Ella era amable pero animando al personal era única.

Vivía en un piso fantástico de la Latina y él se instaló esa misma tarde. Lo que en principio iban a ser solo unos días se volvió permanente, a Esmeralda le encantaban los perros y le permitió traer a Lolo a la primera oportunidad. Estaba muy bien relacionada y viajaba mucho así que él le cuidaba la casa. Le consiguió trabajo en una serie como ayudante de vestuario y ahí empezó su verdadera andadura en el mundo del cine y la televisión.

Habían pasado 15 años y seguía siendo ayudante de vestuario, ahora tenía un nombre e incluso había sido jefe de vestuario en más de una ocasión, en producciones pequeñas. Había trabajado con muchos directores conocidos nacionales e internacionales y estaba muy desencantado de la profesión. Demasiados arribistas, demasiada mierda que había tenido que aguantar. Era un trabajo inestable, bien pagado pero no todo el año. A veces trabajaba durante tres meses y vivía de eso otros tres y cuando ya creía que le llegaba la soga al cuello algo surgía de la nada que le cubría los gastos los próximos meses.

Seguía viviendo en el piso de la Latina pero Esmeralda se había ido hacía un año, se trasladó a Londres como la mayoría de sus conocidos. Les iba bien y le intentaban convencer de que siguiera sus pasos pero él se aferraba a esa casa, a Madrid, esperando que le llegara su gran oportunidad. De momento, con algunos trabajos esporádicos y alquilando el cuarto de Esmeralda a turistas, al más puro estilo cama caliente, pagaba los gastos.

En un ataque de nostalgia volvió a Cuatro caminos pero ya nada era como antes. El comedor subvencionado era ahora una peluquería. La de veces que había comido allí cuando andaba muy mal de presupuesto. El puente había desaparecido. La vagabunda de los gatos debió irse antes, ella vivía allí. Desde el primer día la observaba con curiosidad. Con aquella mata andrajosa de pelo blanco, un vestido negro que le llegaba por los tobillos y le permitía imaginar lo escuálida que era, arrastrando un carro de supermercado lleno de cajas, alambres, desechos varios y entre unas mantas una camada de gatitos chillones. Aquellos animales no crecían nunca, pasaban meses y seguían siendo crías.

Nunca quiso pararse a pensar que hacía con ellos. Sin embargo, ella era un referente de la Glorieta. Taciturna y solitaria. Paseando bajo el puente, sentada junto a su carro, mascullando en voz baja. Desde la mañana a la noche. Más vieja que el puente parecía. Se fue ella, se fue el puente y toda la Glorieta se transformó. Así había sido su periplo por Madrid. Ahora se planteaba dejarlo todo. Volver al pueblo a dar clases. Tenía suficiente experiencia acumulada para empezar de cero. Camino de la parada de metro, cabizbajo, recordó que acababa de inscribirse en un curso de maquillador de muertos, le habían dicho que en ese oficio había trabajo de sobra y tampoco era tan terrible. Visto un muerto, vistos todos.

Comentarios

Estefanía Farias Martínez. Cartagena, España (1970). Doctora en Filología Árabe por la Universidad de Granada. ¨Lo que hace un nombre¨ en Los omniscientes (julio 2014); ¨Yolanda¨ en Revista Contra Estudio y -¨Un acuerdo sin palabras¨ en Periódico Irreverentes.

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Actualidad

Ingresó con gripe a la clínica SANNA y terminó con muerte cerebral [VIDEO]

Exigen justicia por la muerte cerebral de Alejandra Landers en la clínica SANNA: ¿negligencia e impunidad?

Avatar photo

Published

on

La tragedia que ha golpeado a la familia de Alejandra Landers ha dejado una profunda herida no solo en sus seres queridos, sino también en la sociedad, que observa con creciente indignación la posible negligencia médica que pudo haber causado su muerte. Alejandra, de solo 26 años, ingresó a la clínica SANNA de San Borja con un simple resfrío. Sin embargo, tras recibir un suero fisiológico contaminado, su estado empeoró rápidamente hasta llegar a la muerte cerebral. Su padre no escatima en palabras: “Mi hija llegó sana y me la entregaron muerta”, declaró, denunciando la aparente falta de cuidado y vigilancia médica en el tratamiento de su hija.

La historia de esta joven, que parece un error evitable, plantea serias dudas sobre la gestión de la clínica y el control de calidad de los insumos médicos que se suministran a los pacientes. De acuerdo con el relato de la madre, Eliana, la joven fue admitida en urgencias a las 9:17 p.m. Sin embargo, horas después, presentó síntomas graves, como convulsiones y pérdida de conciencia. La desesperación de los padres aumentó al ver que la clínica tardó tres horas en realizarle exámenes, a pesar de la evidente gravedad de su condición. “Cuando la toqué, su cara estaba mojada de saliva y su cuerpo orinado”, narró Eliana entre lágrimas, destacando la falta de una respuesta rápida y adecuada.

La situación no solo pone en evidencia una aparente falta de protocolos médicos adecuados, sino que también subraya un sistema de salud que parece proteger más a las instituciones involucradas que a las víctimas. La familia de Alejandra ha denunciado, además, la burocracia que ha rodeado la posibilidad de iniciar acciones legales contra los responsables de este trágico suceso. Su abogado denuncia que, a pesar de los esfuerzos por presentar una denuncia penal, las autoridades se niegan a aceptar el caso, alegando problemas de competencia. Es un ejemplo más de la obstrucción al acceso a la justicia, en la que las víctimas y sus familias se enfrentan a un laberinto legal que favorece la impunidad.

Para colmo, el Ministerio de Salud cambió en 2024 la normativa relacionada con la notificación de reacciones adversas a medicamentos, extendiendo el plazo para reportarlas de 24 horas a 7 días. Esta medida, que podría haber sido pensada para aliviar la carga administrativa, en la práctica podría favorecer la impunidad, al dificultar el rastreo oportuno de situaciones como la ocurrida con Alejandra, donde la contaminación del suero fue el detonante de su muerte cerebral.

A pesar de la gravedad de los hechos, tanto la clínica SANNA como la farmacéutica Medifarma han ofrecido cubrir los gastos médicos y han mencionado la posibilidad de una indemnización. Sin embargo, el padre de Alejandra rechazó cualquier compensación económica, buscando únicamente la verdad. “No queremos dinero, queremos la verdad”, afirmó contundente, dejando claro que la justicia y la responsabilidad de los involucrados son lo que realmente importa para la familia.

Este caso plantea una reflexión profunda sobre la falta de responsabilidad y el sistema de salud que parece más preocupado por proteger su reputación que por rendir cuentas ante hechos tan graves. La familia de Alejandra y la sociedad en su conjunto exigen justicia y que este tipo de tragedias no queden impunes. Es esencial que se asuman responsabilidades, se tomen medidas preventivas y se garanticen los derechos de los pacientes, para que casos como este no se repitan.

Panorama conversó con los padre Alejandra. Aquí todos los detalles.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

La soberbia mata señores de Poderosa: tres asesinatos más en Pataz

Hace unos días, las Rondas Campesinas de Pataz llegaron hasta Lima con un pedido desesperado: apoyo para enfrentar a la delincuencia que azota su tierra. Armados apenas con varas y palos, estos hombres y mujeres, guardianes de sus comunidades, buscaron ayuda en las mineras y el Estado. La respuesta de Minera Poderosa fue fría, indiferente: les cerraron la puerta en la cara. Hoy, la sangre vuelve a teñir la tierra de Pataz.

Avatar photo

Published

on

Por Jorge Paredes Terry

Tres jóvenes trabajadores de Poderosa  han caído en una emboscada de la delincuencia organizada y muchos más ciudadanos anónimos en toda la provincia están siendo masacrados.

¿Cuántos muertos más hacen falta para que la soberbia de unos pocos se derrumbe? ¿Cuántos ataques, cuánto dolor debe soportar la población antes de que las empresas y las autoridades entiendan que sin la unión con la gente organizada, la batalla contra el crimen está perdida?  

Las Rondas Campesinas no piden limosnas, piden herramientas, recursos, colaboración. Son la primera línea de defensa en una zona donde el Estado brilla por su ausencia. Mientras tanto, la delincuencia avanza, mejor armada, más violenta, más audaz. Cada rechazo, cada desdén, es una victoria para las hordas criminales que ven cómo sus enemigos están divididos.  

La soberbia mata. Mata cuando las empresas privilegian sus protocolos sobre la vida de las personas. Mata cuando el Estado responde con burocracia a una emergencia. Y mientras tanto, en Pataz, los ronderos siguen plantando cara a los balazos con nada más que coraje y palos.  

¿Hasta cuándo? La respuesta debería ser hoy. Porque mañana, el costo será mas. Comparto con ustedes parte de la propuesta entregada a las compañías mineras y al gobierno central.

Propuestas para una Estrategia Integral

1. Comités de Seguridad Mixtos

   – Crear mesas de trabajo conformadas por líderes ronderos, mandos policiales, representantes del Ejército y delegados de las mineras. Estos comités diseñarían operativos conjuntos con inteligencia compartida, evitando la duplicidad de esfuerzos y garantizando una respuesta rápida ante ataques.  

2. Financiamiento Compartido

   – Las mineras, en vez de gastar millones en seguridad privada para sus instalaciones, deberían destinar un porcentaje a fondos mancomunados con el gobierno regional. Estos recursos financiarían:  

     – Equipamiento básico: Radios, chalecos antibalas, drones de vigilancia y botiquines de emergencia para las Rondas.  

     – Infraestructura: Puestos de control en zonas críticas, con tecnología de monitoreo y alerta temprana.  

3. Capacitación y Legalidad

   – La Policía y el Ejército deben entrenar a los ronderos en:  

     – Primeros auxilios.  

     – Protocolos de detención sin violencia excesiva.  

     – Uso de tecnologías de rastreo.  

     – Uso de armamento no letal o escopetas

   – A cambio, regularizar su estatus jurídico para que su labor sea reconocida y protegida, no criminalizada.  

4. Operativos «Escudo Andino»

   – Desplegar unidades móviles combinadas (Policía, Ejército y Rondas) para patrullajes en zonas de alta peligrosidad, con apoyo aéreo en casos de enfrentamientos.  

   – Establecer un número de emergencia exclusivo para alertas rápidas, con geolocalización.  

5. Programas Sociales como Prevención

   – Las mineras y el Estado deben impulsar proyectos en las comunidades para cortar el reclutamiento de jóvenes por el crimen: becas, talleres técnicos y empleos formales en lugar de migajas asistencialistas.

Nos unimos o nos  derrotan

La soberbia empresarial y la indiferencia estatal ya han costado demasiadas vidas. Pataz no necesita discursos, necesita acción. Si las mineras y el gobierno no se unen hoy a las Rondas, mañana no habrá operativo que detenga el avance de las hordas criminales.  

La pregunta no es si pueden hacerlo, sino si quieren. Porque mientras deliberan, los pobres siguen poniendo los muertos.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Repugnante: encuentran vellos en comidas enlatadas del programa Wasi Mikuna, ex Qali Warma

Producto enlatado fue abierto en presencia de los padres de familia, causando la sorpresa e indignación.

Avatar photo

Published

on

Primero carne de caballo, luego alimentos en mal estado, y ahora ¡vellos! Un terrible caso se ha dado en la Institución Educativa n.° 016 del Centro Poblado Puentecillos, distrito de Santa Rosa, en Jaén, donde padres de familia han denunciado la presencia de vellos en las conservas de pollo distribuidas por el programa Wasi Mikuna (ex Qali Warma).

El incidente fue reportado durante la preparación de los alimentos escolares, en presencia de los padres de familia, docentes y personal de cocina del centro educativo.

«Se han encontrado vellos supuestamente. Son pequeños. Delante de padres de familia, de la directora y de las profesoras vimos. Yo pensé que eran gusanos. Al momento en que nosotros abrimos el pollo enlatado era prácticamente vellos», aseveró una madre de familia.

Ante la situación, los padres han solicitado la presencia de las autoridades responsables para inspeccionar los productos y garantizar que los alimentos sean aptos para el consumo. Advirtieron que, de no obtener una solución, rechazarán la recepción de estos productos en futuras entregas.

El caso ha reavivado cuestionamientos sobre el control de calidad en la distribución de alimentos escolares y la supervisión de los proveedores encargados del abastecimiento.

Foto: Radio Marañón.

La respuesta de Wasi Mikuna

En tanto, el programa Wasi Mikuna, a través del encargado de imagen institucional, mencionó que se vienen realizando las indagaciones en el centro educativo de conformidad a los protocolos, adelantando que se pronunciarán oficialmente cuando haya resultados.

Asimismo, el Ministerio de Inclusión Social y Desarrollo (Midis) pidió que no se consuma el producto hasta que exista un pronunciamiento al respecto.

«Ante esta alerta (…) sobre una presunta materia extraña en la conserva de pollo, el programa Wasi Mikuna informa que (…), al tomar conocimiento de manera inmediata, acudió a la institución educativa donde, en presencia de los integrantes del comité de alimentación escolar y comunidad educativa procedió a verificar el lote del producto. Se procedió a revisar el muestreo de los alimentos; en tanto, se suspendió el uso y consumo del lote involucrado», se puede leer en el documento.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Odisea en el circuito de playas por ‘cierre total’ de bajada de Armendáriz

Tras varios meses de paralizar una obra turística en Miraflores-Barranco, y luego del robo en la grúa abandonada en la quebrada de Armendáriz, los conductores no solo sufrieron congestión vehicular durante el verano, sino, que la supuesta fecha de entrega del puente peatonal, según informa la comuna miraflorina tras el reinicio de las obras, sería en junio.

Avatar photo

Published

on

En la bajada de Armendáriz una gigantesca grúa generó el rechazo y el malestar de transeúntes y conductores vehiculares no solo miraflorinos y barranquinos, sino de la capital, por encontrarse abandonada y varada hace varios meses en el lugar que ya debía haberse inaugurado un puente peatonal que uniría los distritos de Miraflores y Barranco. Sin embargo, gracias a la improvisación, esta obra quedó paralizada debido a las disputas y desencuentros entre la Municipalidad de Miraflores liderada por el alcalde de Renovación Popular, Carlos Canales y la compañía INCOT SAC Contratistas Generales.

Caos en el circuito de playas hasta el 01 de abril Así las cosas, la bajada de Armendáriz ha sido cerrada totalmente al tránsito vehicular desde altas horas de la noche del jueves 27 de marzo, hasta el martes 01 de abril. ¿Las razones? La municipalidad de Miraflores anunció que reiniciaron las obras del Corredor Turístico, que enlazará Miraflores con Barranco, con el puente tubular en la quebrada mencionada. En tanto, la Municipalidad miraflorina informó que, el cierre será total hasta las 5:00 a. m. del martes 1 de abril.

A partir de esa fecha, las restricciones continuarán según el horario aprobado por la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML): de lunes a domingo, se restringirá el tránsito de 5:00 a. m. a 9:00 p. m., y el cierre será total de 9:00 p. m. a 5:00 a. m. del día siguiente. Según informan, la medida es requerida debido al movimiento de la gigantesca grúa que ocupará parte de los carriles. Se espera que una vez finalizadas las obras—anunciaron que sería dentro de tres meses, a fines del mes de junio—la vía será completamente reabierta.

Alcalde Canales en 2024 canceló contrato y perjudicó a vecinos

Como se recuerda, en diciembre del 2024, la Municipalidad de Miraflores resolvió el contrato con INCOT S.A.C. Contratistas Generales debido al incumplimiento en la culminación de un puente peatonal en los malecones que uniría a los distritos de Miraflores y Barranco, el cual se denomina: proyecto “Mejoramiento y ampliación de los servicios turísticos del Corredor Turístico Malecón de la Reserva”. Sin embargo, INCOT se defendió y le echó la culpa a la subcontratista, la empresa metalmecánica AMENPROD STELL S.A.C. tildándola como la verdadera responsable de la paralización de la obra, por no cumplir con la entrega de la estructura metálica, pese a que estaba pagada en un 95%. E incluso, porque pedían más dinero para cumplir con la entrega.

Rutas alternas durante el cierre

Mientras dure el cierre, los conductores deberán tomar rutas alternas para aminorar en algo el congestionamiento que ya viene perjudicándolos. Para el desplazamiento de norte a sur, se debe tomar la Subida San Martín hacia la Av. Del Ejército, girar a la izquierda en la Av. José Pardo, continuar por la Av. Ricardo Palma y luego acceder a la vía auxiliar de la Vía Expresa en dirección sur. Otra alternativa es usar la Bajada Balta desde el Circuito de Playas, girar a la derecha en la Av. Óscar R. Benavides (Diagonal) y seguir hasta la Av. José Pardo.

De sur a norte, quienes vengan de Barranco pueden tomar la salida 2 (Av. 28 de Julio) hacia la vía auxiliar de Paseo de la República, girar a la izquierda en la Av. Ricardo Palma, seguir por la Av. José Pardo hasta la Av. Del Ejército y continuar hasta la Subida San Martín. Otra opción es tomar la Av. Reducto, continuar por la Av. 28 de Julio, girar a la derecha en la Av. José Larco, luego girar nuevamente a la derecha en la Calle Shell, lo que llevará directamente a la Bajada Balta en dirección norte.

Los vecinos miraflorinos y barranquinos y los ciudadanos en general, esperan que la municipalidad de Miraflores, con supervisión de la MML, esta vez cumplan con los plazos de entrega, ya que se han visto dilatados durante meses y es exigible que el famoso puente peatonal realmente sea culminado en el mes de junio, de acuerdo a lo anunciado.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Minsa emite alerta sanitaria por suero fisiológico defectuoso que hasta el momento ya habría causado la muerte de 3 personas [VIDEO]

En tanto, lote defectuoso de suero del laboratorio Medifarma se encuentra inmovilizado hasta determinar responsabilidades.

Avatar photo

Published

on

Muertes en los quirófanos. El Ministerio de Salud (Minsa) emitió la “alerta sanitaria” n.° 38 -2025 ante el reporte de varios casos de pacientes que registraron reacciones adversas al suero fisiológico proveniente de un lote en específico; la situación se agravó aún más cuando se informó sobre la muerte de tres personas de distintas regiones del país a consecuencia de la aplicación de ese suero. A detalle se trata de dos pacientes de la Clínica Sánchez Ferrer de Trujillo y uno más de una persona en Cusco que se había sometido a una liposucción.

De acuerdo con el Minsa, la alerta se activó tras la identificación de cuatro casos iniciales de reacciones adversas “no graves” en clínicas de Lima y Cusco, registrados el 22 de marzo de 2025 en la base de datos nacional de farmacovigilancia. Posteriormente, al 24 de marzo, el número de casos ascendió a diez, distribuidos en las regiones de Lima (4), Cusco (4) y La Libertad (2). Entre estos, dos casos graves fueron reportados en Cusco, lo que incrementó la preocupación sobre la seguridad del producto.

En tanto, la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid), entidad adscrita al Minsa, ha ordenado la retirada inmediata de todas las unidades de este lote en particular y procederá a su evaluación.

fuente: latina.

Clínicas deslindan responsabilidad

Por su parte, la clínica de Cusco Medical Network 02 emitió un comunicado donde deslinda toda responsabilidad médica en relación al fallecimiento de una paciente tras someterse a una liposucción. La clínica aclara que el médico que atendió a la paciente “no forma parte del staff permanente de nuestra clínica, sino que fue contratado directamente por la propia paciente para la realización de un procedimiento específico”. Asimismo, el mencionado centro médico indicó que tomará “acciones legales” contra Medifarma y M&M Productos Médicos y Farmacéuticos SRL”.

La clínica Sanna informó que desde el lunes se conoció que el laboratorio farmacéutico Medifarma había anunciado la presencia de un lote defectuoso de suero fisiológico. En ese sentido precisaron que este producto fue retirado ya de su red de clínicas.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Este 28 de marzo artistas confirman nueva manifestación ¡Marchamos todos! ‘No queremos Morir’

La movilización iniciará en el Parque Bustamante y Rivero, en San Isidro desde las 5 p.m. y se dirigirá hacia el Ministerio del Interior, con el fin de exigir al Gobierno de Dina Boluarte que tome medidas inmediatas contra la criminalidad.

Avatar photo

Published

on

Así como ocurrió el pasado viernes 21 de marzo, ciudadanos a través de diferentes plataformas han difundido una nueva convocatoria para manifestarse este viernes 28 de marzo, a las 5 de la tarde, en el Parque José Luis Bustamante y Rivero, en San Isidro. La protesta lleva como nombre ¡Marchamos todos! y en el cual los asistentes partirán desde el parque sanisidrino y se dirigirán a la sede del Ministerio del Interior, ubicada en la Av. Canaval y Moreyra.

Convocatoria ArtistasXlapaz para el viernes 28 de marzo.

Marcharán los artistas

Distintos artistas de salsa, cumbia, DJs, cantantes solistas y otros representantes del ámbito musical han compartido y difundido publicaciones sobre la convocatoria, e hicieron un llamado a la población a sumarse a la protesta. El objetivo de esta manifestación es exigir al Gobierno de Dina Boluarte, que tome acciones contra la criminalidad que día a día somete a la población a los más viles vejámenes y los asesina a mansalva, tal como ocurrió con la tragedia por el reciente homicidio del cantante Paul Flores.

Dina Boluarte advierte: “No descansaremos hasta devolverle al pueblo la seguridad que merecen”.

Hace 11 días asesinaron a Paul Flores

Apenas hace una semana, la reconocida agrupación Armonía 10 compartió un mensaje en redes sociales en memoria de Paul Flores (39 años), conocido como ‘Ruso’, quien perdió la vida la madrugada del domingo 16 de marzo, tras ser víctima de un atentado armado. Se presume que el crimen estuvo vinculado a extorsionadores que habrían amenazado a la banda de cumbia.

Por causa de este execrable suceso, la ola de indignación en la comunidad artística y en la ciudadanía en general creció enormemente, y se organizó una primera marcha (21 de marzo) en la que cientos de personas salieron a las calles para exigir al Gobierno que tomen acciones rápidas y efectivas contra el crimen organizado, para que “no los sigan matando”.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Nombramiento de sub oficial PNP en colegio Santa Rosa de Lima violaría convenio con Ministerio de Educación

Graves irregularidades frente a los ojos del Ministerio de Educación y del Ministerio del Interior.

Avatar photo

Published

on

En menos de diez días, una serie de denuncias sobre la gestión de la directora del colegio Santa Rosa de Lima, la suboficial PNP Flor Betzabé Cama Trebejo, ha llegado a la redacción de Lima Gris.  Hemos publicado aquellas respaldadas con documentos oficiales y testimonios de fuentes involucradas, entre ellas: la asignación irregular de vacantes, la construcción de tres aulas sin un expediente técnico con dinero de los padres de familia y la manipulación del proceso de contratación docente.

Ahora, hemos accedido al documento titulado Convenio Marco N° 002-2019-MINEDU entre el Ministerio de Educación y la Policía Nacional del Perú. Este convenio establece que la designación de directores en colegios administrados por la PNP debe recaer exclusivamente en un oficial PNP. Es decir, el nombramiento de la suboficial Cama Trebejo sería irregular y contrario a la normativa vigente.

En la cláusula quinta del documento, titulada “Compromiso de las Partes”, se especifica que la Dirección de Bienestar de la Policía Nacional del Perú tiene la obligación de designar en el cargo de Director, a un Oficial PNP. El convenio claramente señala: «podrán celebrar Convenios de Cooperación Institucional con la Dirección de Bienestar y Apoyo al Policía siempre, reconociendo como Director de II EE PNP, al Oficial designado por el Mininter (Ministerio del Interior)».

El nombramiento irregular de la suboficial Cama Trebejo no es un asunto menor; sería una violación directa a un convenio que busca garantizar una gestión adecuada en los colegios administrados por la PNP. Permitir que estas irregularidades se normalicen pone en riesgo no solo el cumplimiento de la normativa, sino también la calidad educativa de cientos de estudiantes.

En el mismo convenio, en la cláusula décimo segunda se señala: «En caso de incumplimiento, dentro de los 15 días calendario de producido el mismo, la parte afectada requerirá a la otra el cumplimiento de los compromisos asumidos, otorgándole un plazo de 15 días hábiles, bajo apercibimiento que el convenido quede resuelto de pleno derecho».

Es importante señalar que el convenio fue firmado por los exministro Daniel Alfaro y Carlos Morán. La educación no es un juego ni un espacio para la improvisación o el favoritismo. Es un derecho fundamental que debe ser protegido con responsabilidad y transparencia, y en este caso, es el Ministerio de Educación y el Ministerio del Interior quienes deben responder con acciones concretas.

No es posible que algunos integrantes de la Policía Nacional del Perú manejen espacios educativos como si fuera una chacra. Lo que más sorprende que esto sucede frente a los ojos del Ministerio de Educación y del Ministerio del Interior.

Comentarios
Continue Reading

Actualidad

Urgente: Peruanos en el exterior necesitan ayuda para adolescente accidentado en EE.UU.

Aviso de servicio público.

Avatar photo

Published

on

Por Rafael Romero

El pasado jueves 20 de marzo cuatro alumnos de la institución educativa Pinson Valley High School, en Alabama (EE.UU.), viajaban en una camioneta rumbo a sus casas cuando sufrieron un accidente por fallas mecánicas, estrellándose contra un árbol.

Las edades de los estudiantes fluctúan entre los 15 y 16 años y entre los heridos está nuestro compatriota Víctor Guerrero Marchena, quien se encuentra hace seis días en cuidados intensivos del Childrens Hospital de Alabama USA, con lesión cerebral y múltiples fracturas en la cara, nariz y cuerpo, necesitando múltiples cirugías y un proceso de recuperación largo y costoso.

No dejemos solos al adolescente Víctor Guerrero Marchena y la ayuda la pueden enviar a su familiar Javier Hip Marchena: cuenta ahorro soles Scotiabank Cuenta Ahorro Soles N° 0023473010 y Código de Cuenta Interbancario N° 00920220002347301037

Sus padres son músicos y como tantos peruanos hace unos años emigraron a Estados Unidos de Norteamérica en busca de mejores oportunidades. Este es el momento de ser solidarios con un chico estudioso y talentoso cuya vida está en riesgo y tiene tan solo 16 años.

Comentarios
Continue Reading
Advertisement

LIMA GRIS TV

PUBLICIDAD

PRNEWS

PARTNER

 

CONTACTO

Síguenos en Twitter


LIMA GRIS RADIO

Trending