Entrevista al poeta Enrique Verástegui a propósito de su participación en la Fil de Guayaquil – Ecuador
ENRIQUE VERÁSTEGUI
«El prestigio que tenía la poesía quedó derruida por la caída del muro de Berlín»
Entrevista y fotos Raúl Heraud
Sábado 4 de la tarde, el vuelo que debía partir de Guayaquil a Lima había sido cancelado, inmediatamente fuimos devueltos al hotel ManGing ubicado en pleno centro de la ciudad; sin saber cuándo partiríamos de regreso a Lima, en la habitación 202, el maestro Verástegui nos recibía bebiendo café, dice que solo lo toma durante los recitales de poesía como una especie de ritual, mientras nos invita a pasar, observa CNN por un canal de cable, sorbiendo de a pocos la humeante infusión.
Enrique ¿qué te pareció la Fil de Guayaquil?
Aunque no recorrí por todos los stands debido a que no traje mucho dinero para comprar libros, vi algunos títulos interesantes; pero de lo que puedo hablar es de aquello que nos ha convocado acá, el espíritu nuestro frente a la feria, sobre todo frente al publico asistente; para mi es una bella aventura llegar hasta Guayaquil, lugar donde vivió el último Inca del Perú y desde aquí comprobar y ver cosas que pueden parecer no interesantes pero que son reales como por ejemplo encontrarse aquí en esta ciudad sobre la línea ecuatorial de todo el continente americano, donde no aparece el sol sino un cielo nuboso, algo que pensé solo era propio del cielo de Lima.
Ayer durante tu presentación leíste poemas de Extramuros del mundo ¿cómo tomas que estos poemas tengan tanto éxito aquí en Ecuador como en Perú con la gente joven?
Lo atribuyo primero a que el lector tiene admiración por el talento juvenil, y quien me ha venido leyendo todos estos años no hace otra cosa que alabar esta época que viví en San Marcos, pienso que estos lectores jóvenes son inconsecuentes, no son como yo que cuando admiro a un autor me leo toda su biblioteca, de tal modo, espero que en el futuro, cuando sea aún más viejo, encuentre a un joven intelectual que no solo se enamore de mi primer libro, sino de toda mi obra.
¿Cómo te sentiste frente el reconocimiento de los poetas y del público?
Lo que siento es gratitud, así como por este señor historiador que vino desde Venezuela a conocerme y a quien obsequié mis libros de poesía y filosofía; esto es simplemente la experiencia de encontrarse con un lector concretizado en esa persona que se te acerca y que puede significar una señal que no encuentras cuando en tu mente y en tu mano, escribiendo ante el escritorio, él se convierte en el lector ideal.
¿Después de cuántos años participas en un encuentro internacional de poesía?
Yo llegué de París en el 80, y regresé con la ilusión de algún día volver, de tal modo como en el pasado, yo había estado en Europa, pero todo fue tan complicado que se me ha pasado la vida soñando y esperando algún día volver; desde el año 80 no he vuelto ha salir del Perú, y en los años de la guerra civil, no sé como llamar esta guerra con el terror, no me quedó otra alternativa; además mi mujer y yo vinimos de París con una idea, la de irnos a vivir a la laguna de Paca en Huancayo, pero estalló el terrorismo y no pude salir de Cañete.
Pero invitaciones siempre hubieron, por qué no quisiste asistir…
Parte de mi configuración mental es la timidez, y el miedo a encontrar gente que no me comprenda, esas cosas han impedido que yo fuera más comunicativo y han comprometido mi asistencia a festivales de poesía, festivales a los cuales mi generación, para citar a un poeta peruano argentino como Reynaldo Jiménez, buscan hacer que se produzcan a través de estos un Woodstock en América Latina o en el país que sea; y esa es la experiencia que he tenido, quizá por temor, o por miedo a equivocarme es que no he viajado.
¿Por qué dices que has acabado con la poesía?
Es una pregunta compleja, tiene que ver con la práctica de la escritura, primero fue mi poesía, a la que le he dedicado mi juventud y mi madurez, y luego a los 46 años escribir una novela que complementara la visión del mundo que yo he entregado a través de la poesía, y a la vez, de algún modo, siento que la escritura es siempre una expresión y una búsqueda de placer, entonces he escrito novelas por razones políticas; lo que fue ayer, la poesía, dejó de ser en el 91 cuando se derrumba el comunismo, el prestigio que tenía la poesía quedó derruida por la caída del muro de Berlín, en ese momento, toda la gente en el planeta buscó expresarse a través de la novela, por ese motivo histórico, y pensando en eso, además de una manera que puede ser absurda, en el sentido de practicar la vanidad a través de la escritura, es que he hecho novelas.
Me contabas acerca de una novela que será publicada el próximo año en España, que consta de 7 partes y tiene más de 700 páginas
Es una novela en la que he trabajado bastante, a la cual he querido aportar el trabajo de estilo y como te dije, determinar de algún modo el proceso de mundialización en la economía en el que vivimos, de tal modo que mi personaje, es un personaje mundializado y transcurre como aquella novela mía que has leído, La maquina del crepúsculo, transcurre simultáneamente en distintos lugares del planeta.
Has dicho que con ella te pondrías a la altura de Homero, ¿por qué?
Porque Splendor que es el titulo nuevo de Ética tiene 1300 páginas, y esta sería una especie de épica de la vida digamos, y luego la prosa y la reflexión serian la materia, esto seria el erotismo practicado de manera natural y superlativa, en tanto que mi poesía, si publican mi novela, pasaría a ser una pura experiencia del espíritu y la novela se convertiría en la experiencia del cuerpo.
Sin embargo tienes un libro de poesía que publicarás en breve
Una antología de doce páginas que será publicada en noviembre y que constituye el punto final, por un periodo de tiempo a la práctica de la poesía; este libro se expresa a través de los Koans, de las iluminaciones o la meditación trascendental, lo he hecho hace 3 0 4 años con mi libro Teoría de los cambios; La poesía de Splendor es una poesía lograda a través del trabajo sobre el lenguaje y mas concretamente a través de la disciplina del escritor, y Teoría de los cambios, se parece más a este libro último, busca la meditación trascendental a través de la poesía que se produce; yo leí en un libro de un gran escritor francés, quien publicó un libro de ensayos, y en él, uno sobre el pintor Fujita, que lleva ese apellido en homenaje al monte Fuji, que es el monte tutelar de Tokio, y dice que ha dedicado su vida, y que además ha sido larguísima, ha expresar, desde todas las perspectivas posibles, la belleza de este monte, al punto que ya en la vejez avanzada, Fujita opina que conforme va envejeciendo, va simplificando y volviendo elegante el trazo del monte Fuji, al punto que en la ultra vejez bastaría solo un punto en el lienzo para expresar toda la belleza y complejidad del monte Fuji, entonces a raíz de esta experiencia he escrito este pequeño libro que por el momento es lo último que he escrito en poesía.
¿Le temes a la muerte?
No le temo a la muerte, sino al transito, pasar de la vida animada, al estado inanimado, ese transito es lo que me da terror.
¿Y cómo podrías decir que ha transcurrido estos 62 años de vida?
Mi vida ha estadodedicada a escribir y estoy agradecido porque el lector me lo ha hecho sentir así, me lo ha agradecido de algún modo al entregarse a leer mi poesía.
¿Has tenido hasta hoy una vida plena o crees que te faltó algo?
Yo soy escritor, por tanto para mí lo pleno es la escritura.
Más allá de vivir
Vivir a través de la escritura.