Connect with us

Cultura

Alejandra Pizarnik, la cantora nocturna de los abismos

Eterna viajera de espejos rotos, niña de los ojos de fuego que corre alrededor de un jardín, cenizas aladas en el vientre de la noche. Alejandra, Alejandra, mantra de amores huérfanos, tu poesía es un cementerio luminoso en medio de una herida.

Avatar photo

Published

on

Hay escritores a los que se les debe leer antes de cumplir cierta edad, ya que el tiempo funciona como elemento polisémico respecto a la recepción de una obra. Hay libros de juventud y libros de madurez. Las primeras te hacen estallar en irreverencias, rebeldías y locuras. Las segundas te exigen calma, reflexión y sosiego. Leer la poesía de Alejandra Pizarnik entre los quince y veinte años, hablo desde mi experiencia, debe ser uno de los momentos más fructíferos y perturbadores de la vida. Entrar a ese mundo gótico, hiriente, desamparado y frenético resulta muy atractivo para alguien que recién está empezando a sentir los estragos del tiempo y de la realidad. Ya no hay más burbujas, ahora toca enfrentarse al mundo.

En 1956 publicó su segundo poemario titulado “La última inocencia”. Un año antes lo había hecho con “La tierra más ajena”. Tenía tan solo dieciocho años y una vida solitaria plagada de cicatrices, fármacos y angustias. Haber hecho todo ello a tan corta edad puede ser una aberración o una genialidad. Ninguno es el caso de Alejandra, ya que ambos libros son un tránsito necesario para llegar a algo mucho más significativo, y no hablo de literatura, sino de la vida, de lo que verdaderamente importa.

La poesía de Alejandra está dividida en etapas, los dos libros mencionados junto a “Las aventuras perdidas”, publicado en 1958, formaría parte de lo que se ha denominado “etapa nacional”, ya que todos esos poemarios iniciales fueron escritos en Argentina, antes de emprender un viaje a París en 1960. Allí se quedaría hasta 1964, trabajando como traductora de grandes escritores franceses.

Estos tres primeros libros resultan fascinantes, ya que su poesía se encuentra en una incipiente efervescencia plagada de mucho dolor juvenil. Encontramos errores, pero mucha candidez. No es para menos de alguien que en su juventud adolecía de distintos males (en ocasiones tartamudeaba, era asmática, sufría problemas de acné, era propensa a subir de peso con facilidad y una posible represión de sus gustos sexuales) que deterioraban su personalidad y que fueron formando a la Pizarnik madura de “Árbol de Diana” (1962), “Los trabajos y las noches” (1965), “Extracción de la piedra locura” (1968).

Seis libros publicados a los treinta y seis años reflejan muchos aspectos de su psicología. Existe la sensación de que hay una entrega total a la luminosa dualidad de vida-poesía, se percibe un gran apuro en escribir, un prematuro afán por lograrlo todo antes de que sea muy tarde, como si la vida se acortara rápidamente y tuviera que expulsar todo lo que lleva adentro, angustias, soledades, frustraciones y dolores, con el objetivo de que la muerte la encuentre pura y vacía, y de esta forma pueda ser correspondida. Estamos hablando entonces de una poesía que sirve como terapia ante su creador, una concepción artística donde hay una apuesta total por el desenfreno que linda entre la belleza y el horror. Pizarnik hereda esta postura de otros escritores malditos que prefirieron caminar entre los bordes del abismo, antes que en la infértil seguridad de una vida sin riesgos.

¿De dónde aparecen todos estos elementos que se van entrecruzando hasta formar un laberinto poético? De muchos aspectos, claro está, todo autobiográficos. Los padres de Alejandra fueron inmigrantes judíos de origen ruso y eslovaco que huyeron del horror del holocausto, dando origen al tema del exilio y el extrañamiento. En sus diarios, la poeta menciona un pasaje curioso de su vida en el que canta de forma inconsciente una pequeña canción trágica respecto al destino de los judíos, que le habían cantado en sus primeros años de vida.  Estas penosas circunstancias marcaron su personalidad de Alejandra, ya que es constante el desarraigo y la no pertenencia en su poética. Otro aspecto serían las enormes depresiones que siente en su adolescencia, lo cual le incita a recurrir al consumo de una fuerte medicación y a una terapia psicoanalítica. Este sentimiento de inferioridad lo llevaría por el resto de su vida, desembocando en un irremediable suicidio.  Y por último, hay que mencionar a los grandes autores que influenciaron en su concepción de vida y en su escritura, entre ellos podemos nombrar a Rimbaud, Verlaine, Mallarmé, Leautreamónt, Artaud, Bretón, Michaux, entro otros.

Para poder tener un conocimiento más amplio de la poética de Alejandra hay que mencionar que su poesía se nutre de dos vertientes: el romanticismo y el surrealismo.

Sobre la primera vertiente es inevitable no darse cuenta de que hay ciertas figuras románticas y oscuras que son utilizadas con frecuencia: silencio, muerte, cenizas, cementerio, noche. A estas se les suma otras como jardín, cuerpo, pájaros, espejos, viento, noche, luz, niña, etc. Además de esto, habría que añadir ciertas características que son compatibles entre los autores románticos del siglo XIX y Alejandra: la exaltación de los sentimientos y de la subjetividad – el culto al yo y al individualismo – nostalgia por el pasado.  No hay que olvidar la entrega total al furor de la creación que tuvieron algunos autores románticos, y que se adapta muy bien a la biografía de la argentina.  

Sobre la segunda vertiente, se puede decir que la poética de Pizarnik se alimenta del surrealismo, tanto en la técnica como en su doctrina, ya que se tiene como credo que la concepción poética va más allá de la escritura concreta del poema. La vida y la poesía forman un solo corpus. Respecto a la técnica, la poeta argentina utiliza el automatismo psíquico, esto consiste en “intentar expresar el funcionamiento real del pensamiento en ausencia de cualquier control ejercido por la razón, al margen de cualquier preocupación estética o moral”. El producto de esa técnica se refleja en la yuxtaposición de imágenes poéticas, entrelazadas a las concepciones freudianas del subconsciente. Estas características de la poesía de Alejandra permiten visualizar la carencia de una trama o historia, ya que lo que más sobresale es lo onírico y lo irracional.

De los tres primeros poemarios de su primera etapa, el que me conmueve y emociona más es “La última inocencia”, ya que Alejandra lo escribe en pleno tratamiento psicoanalítico con León Ostrov, a quien dedicaría el libro. Recurre a aquel para tratar de ordenar sus emociones y frustraciones, lástima que todo fue interrumpido. El afán por llegar hasta los límites y extremos de la vida pudo más que la prudencia y la sensatez. Va construyendo su figura de autora maldita en medio de una sociedad de clase media recatada y pudorosa, donde la feminidad significa inocencia. Por ello el nombre del poemario representa un sentido adiós. No hay nada más hermoso que una joven desamparada en medio de una tormenta.

De este libro se pueden explayar muchas ideas, pero resulta clave para nuestro análisis el saber que el proceso de su escritura de desarrolló en una de las etapas más fuertes y problemáticas de su vida (ya se ha mencionado lo del tratamiento con Ostrov). Los desequilibrios mentales son cada vez más constantes y la desesperación crece inconmensurablemente.

El libro está formado por dieciséis poemas, en su mayoría muy cortos y en verso libre. El centro poético es la noche, este elemento tiene significados opuestos, ya que se representa de forma positiva y negativa en uno o varios discursos. Con respecto a lo primero, es una representación de la muerte. Encontramos cierto afán de los distintos locutores a entregarse libremente a ese espacio poético, con el objetivo de encontrar el equilibrio emocional y espiritual. Pero ese trance ese doloroso, y en algunos casos incierto, mientras más se está próximo a llegar, mayor desgarro se siente. Por ello el otro elemento central es la figura del viajero, cuya génesis biográfica se ha mencionado anteriormente en la travesía de sus orígenes judíos. Otra acepción que se le puede dar al tópico de la noche es la figura de la madre, ya que este espacio representa la protección del yo lírico. Con respecto a lo segundo, se puede mencionar que la noche posee una gran carga negativa de represión y de sufrimiento, llegando a representar el infierno mismo.

Esta contraposición de significados respecto a un mismo tópico deja muy claro que uno de los recursos líricos que ha utilizado Alejandra Pizarnik en la escritura de sus poemas es el de la simultaneidad de voces en un mismo discurso. Este nos va a servir para poder explicar de forma más clara y precisa el desequilibrio emocional de la poeta argentina.

En la mayoría de sus poemas se percibe una lucha y una confrontación entre dos voces, donde una quiere subordinar a la otra, imposibilitando la armonía. Hay una fragmentación psicológica en la exaltación del yo lírico.

Para que el análisis sea mucho más claro, voy a tomar como punto de referencia la teoría de la polifonía de la enunciación que elabora Ducrot, apartir de lo propuesto por Bajtin. Esta concepción se caracteriza por la confrontación de diversas perspectivas en el mismo enunciado, estas se yuxtaponen y se oponen, según el sentido que van adquiriendo. Todo el proceso de la enunciación es concebido como una representación teatral, como una polifonía en la que hay una presentación de diferentes voces abstractas, de varios puntos de vista y cuya pluralidad no puede ser reducida a la unicidad del sujeto hablante. En este análisis polifónico se hablará de tres figuras esenciales vinculadas con el sujeto hablante: se trata del sujeto empírico, el locutor y los enunciadores. La estructura es la siguiente:

Sujeto empírico à Locutor à Enunciador 1, Enunciador 2 …..

El sujeto empírico es el autor efectivo que produce el enunciado o el texto. En este caso se trataría de Alejandra Pizarnik. 

El locutor, pertenece al ámbito netamente lingüístico, ya que se trata del presunto dueño del enunciado, a él se le atribuye la responsabilidad de la enunciación. Comúnmente es designado en primera persona, y en el campo literario es ficcional. En todo discurso hay un solo locutor que es el responsable del sentido polifónico. Como el autor de una puesta en escena o acto teatral en miniatura, organiza los puntos de vista – enunciadores- identificándose con uno de ellos, y oponiéndose a otros.

Los enunciadores son los distintos puntos de vista o perspectivas que yacen inmersos en el enunciado. Estas voces confrontan y luchan respecto a lo que se propone alcanzar en el discurso.

Esta teoría nos va a servir para desentrañar el carácter dialógico y confrontacional en los yo líricos utilizados en el libro de Alejandra Pizarnik. Ya se ha mencionado anteriormente la fragmentación psicológica que estaba sufriendo la escritora en esa época de su vida y que se verá reflejada en su discurso poético. Para que no sea tan extenso, voy a considerar solo dos poemas del libro. El primero se titula “Noche” y está compuesto por 26 versos. En este poema aparecen al menos dos enunciadores, uno que transmite una visión positiva y esperanzadora respecto a la aparición de lo nocturno, y otro que la confronta y critica toda la romantización que se ha hecho respecto a la imagen de la noche.

En el primer verso se puede percibir esa lucha entre dos concepciones distintas respecto a una misma realidad.

Tal vez esta noche(E1) no es noche (E2) el primero trata de afirmar algo, el segundo lo niega rotundamente y se apodera del discurso poético desde una perspectiva dolorosa:

Debe ser un sol horrendo, o/ lo otro, o cualquier cosa …/ ¡Qué se yo! ¡Faltan palabras, falta candor, falta poesía/ cuando la sangre llora y llora! (E2).

Se percibe un total dominio del discurso por parte del segundo enunciador, manifestando un sentido trágico de la vida. Recurre a la incertidumbre y a la afirmación de las carencias de la existencia donde solo hay espacio para el sufrimiento y la falta de libertad (falta poesía).

Esta visión negativa del discurso poético se ve contrastada con la reaparición del primer enunciador, ya que intenta añadir una cuota de esperanza:

¡Pudiera ser tan feliz esta noche!/ Si sólo me fuera dado palpar/ las sombras, oír pasos,/ decir “buenas noches” a cualquiera/  que pasease a su perro,/  miraría la luna, dijera su/ extraña lactescencia tropezaría/ con piedras al azar, como se hace. (E1)

Este enunciador da una posibilidad de subsanar todo lo negativo, utilizando enunciados desiderativos con el objetivo de alcanzar una plena felicidad.

Nuevamente en el discurso poético aparece el segundo enunciador para tratar de apagar todo buen deseo:

Pero hay algo que rompe la piel,/ una ciega furia/ que corre por mis venas./ ¡Quiero salir! Cancerbero del alma./ ¡Deja, déjame traspasar tu sonrisa! (E2)

El uso del conector lógico de oposición refleja toda confrontación hacia el primer enunciador. Para el segundo es imposible alcanzar el equilibrio emocional, por ello utiliza referencias a lo corporal con el objetivo de unirlo con lo psicológico. El cuerpo es un espacio de dolor y desencuentros. En los últimos versos se percibe al espacio nocturno como una cárcel o hasta el infierno mismo.

Por último aparece el primer enunciador para querer luchar contra todo lo expuesto por el segundo enunciador, para ello recurre a una visión positiva de la noche:

Pudiera ser tan feliz esta noche!/ Aún quedan ensueños rezagados./ ¡Y tantos libros! ¡Y tantas luces/ ¡Y mis pocos años! ¿Por qué no?/ La muerte está lejana. No me mira./ ¡Tanta vida, Señor!/ ¿Para qué tanta vida?/ (E1)

Aún existe una pequeña posibilidad de la armonía: recurrir a los ensueños, a los libros, a las luces, incluso se menciona que la muerte está lejana, y que no se percata de su presencia. Por lo tanto aún queda mucho tiempo para alcanzar la felicidad; sin embargo, en el último verso se refleja el total condicionamiento del locutor ante la visión pesimista del segundo enunciador. ¿Para qué tanta vida? ¿Para seguir sufriendo?

El poema refleja la doble concepción de la noche en el yo lírico, es una voz luchando contra otra, lo curioso es que ambos nacen del mismo personaje. Gran referencia a los problemas psicológicos que estaba pasando la poeta argentina en esos años.

En el siguiente poema titulado “Cenizas” también se percibe la confrontación entre dos enunciadores que tienen concepciones distintas respecto a una misma realidad.

El primer enunciador refleja lo doloroso y lo negativo. El segundo, lo candoroso, bello y esperanzador.

Cabe mencionar que este poema utiliza como la imagen del viaje como elemento de redención. Posiblemente influenciado por sus raíces judías. El título del poema puede ser una gran referencia al holocausto.

 La noche se astilló de estrellas / mirándome alucinada/ el aire arroja odio (E1)

Embellecido su rostro con música/ Pronto nos iremos/ Arcano sueño / antepasado de mi sonrisa

 (E2)

El viaje aparece como contraste al horror del aire y de la noche. Es la única forma de salvación y de felicidad.

El mundo está demacrado/ y hay candado pero no llaves/ y hay pavor pero no lágrimas. (E1)

Este último verso es interesante porque propone una posible deshumanización del enunciador, además de que no hay alternativa de solución para los grandes problemas que se presentan.

¿Qué haré conmigo? Porque a Ti te debo lo que soy (E2)

El segundo enunciador se resiste a ser vencido por el pesimismo y la desesperanza. El siguiente cruce de voces es totalmente conmovedor

Pero no tengo mañana (E1)

 Porque a Ti te… (E2) Este enunciado entrecortado da a entrever un problema entre lo físico y lo mental, dando la sensación de que toda forma de salvación es imposible.

La noche sufre. (E1) El locutor se identifica con el primer enunciador, ya que en todo el poema hay un predominio por la angustia y la frustración.

“La última inocencia” es uno de los libros más dolorosos, autobiográficos y pesimistas de la poeta argentina. Que lo haya escrito antes de los dieciocho años y en medio de una terapia psicoanalítica da entrever un mundo juvenil lleno de dolor y desesperanza.

Alejandra siempre será aquella adolescente introvertida, triste y solitaria de la que estamos enamorados, pero que preferimos mirar desde la lejanía, ya que si decidimos dar el primar paso hacia su encuentro, el fuego terminaría por consumirnos (y pensar que la adolescente suicida de “Sobre héroes y tumbas” lleva su nombre).

Comentarios

Joe Guzmán Rodríguez. (Trujillo, 1991) Docente. Estudió la carrera de Educación Secundaria, en la mención de Lengua y Literatura, en la Universidad Nacional de Trujillo. Autor de El devenir de lo incierto (Paloma Ajena Editores, 2014). Segundo (2010) y primer (2012) puesto en los Juegos Florales Interuniversitarios de la Universidad Nacional de Trujillo; segundo puesto en el Concurso Nacional de Relato Corto “A toda página” de El Cultural (2012); y menciones honrosas en el Concurso Nacional de Poesía (2016) organizado por la Feria Internacional del Libro de Trujillo, el II Concurso Nacional de Poesía Huauco de Oro (2017) y el XVII Concurso Nacional Juvenil de Cuento “Germán Patrón Candela” (2017)

Cultura

Mincul acepta la renuncia de la directora de la DDC de Pasco tras cuestionamientos

La arqueóloga Cinthya Gloria Cuadrao Mallqui renunció a la dirección de la DDC de Pasco, en medio de cuestionamientos del personal por su escaso impulso a las industrias culturales, la falta de apoyo a artistas locales y la ausencia de diálogo con las comunidades nativas de la región.

Avatar photo

Published

on

El Ministerio de Cultura (Mincul) aceptó la renuncia de Cinthya Gloria Cuadrao Mallqui al cargo de directora del Órgano Desconcentrado de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) de Pasco, función que asumió desde el 25 de junio de 2024, durante la gestión de la entonces cuestionada ministra Leslie Urteaga Peña.

La aceptación de su renuncia fue oficializada mediante la Resolución Ministerial N° 000157-2025-MC, firmada el 30 de junio por el actual ministro de Cultura, Fabricio Valencia Gibaja.

Resolución Ministerial N° 000157-2025-MC, firmada el 30 de junio del 2025.

Cuadrao Mallqui es arqueóloga por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y trabajó previamente en el Proyecto Qhapaq Ñan del Ministerio de Cultura, donde estuvo a cargo de la gestión del tramo La Raya–Desaguadero, en Puno. Además, figura como accionista de la empresa Cika Construcciones Generales S.A.C. y fue socia de Imaina Consultores SAC.

Cuadrao Mallqui asumió la dirección de la DDC de Pasco hace más de un año.

Sin embargo, su gestión durante un año en la DDC de Pasco generó críticas internas. Fuentes consultadas en el Ministerio de Cultura señalan que Cuadrao Mallqui mantenía una relación conflictiva y de discordia con parte del personal, y que existieron tensiones relacionadas con contrataciones de locadores (politólogos, antropólogos y comunicadoras) cuyos resultados habrían sido insatisfactorios. También se le atribuye haber maltratado a subordinados, incluidos colegas arqueólogos.

Asimismo, indican que solicitó licencia del 16 de junio al 15 de agosto para dedicarse a su proyecto de investigación. Según información a la que tuvimos acceso, los proyectos que se desarrollaban en Oxapampa quedaron bajo la supervisión del arqueólogo Alex Guevara Liau, sin mayor participación de otros colegas especialistas como se hacía anteriormente. ¿Por qué solo se enviaba a Guevara Liau?

Otro punto crítico fue la aparente falta de coordinación con comunidades nativas, con quienes, según norma administrativa, se deben realizar mesas de trabajo para garantizar el enfoque intercultural. Además, no se habría promovido suficientemente a artistas, danzantes u otros gestores culturales de la región, lo que generó descontento en el sector.

La salida de Cuadrao Mallqui deja a la DDC de Pasco nuevamente sin una dirección estable, en un contexto donde se reclama mayor cercanía con las comunidades y el impulso real a las expresiones culturales locales.

Comentarios
Continue Reading

Cultura

Entrevista: Luis Castellanos nos habla sobre su infancia, su paso por Bellas Artes y su exposición por sus 30 años de trayectoria [VIDEO]

En el nuevo episodio del podcast de Lima Gris, tuvimos como invitado al talentoso artista plástico Luis Castellanos, quien viene presentando una exposición individual en el ICPNA del centro de Lima.

Avatar photo

Published

on

Hay artistas que pintan por oficio, otros por catarsis, y unos pocos —los más raros, los más necesarios— que lo hacen como quien respira o sueña. Luis Castellanos pertenece a esa casta secreta. En el nuevo episodio del podcast de Lima Gris, conversamos con él, en medio de la melancolía y la lucidez, sobre su infancia, su paso por Bellas Artes y la manera en que la vida —esa vieja maestra caprichosa— lo fue modelando con la paciencia de un escultor.

Su más reciente exposición, La intuición de la extrañeza, presentada en el ICPNA del centro de Lima, no es solo una muestra, sino una retrospectiva íntima, donde confluyen los fantasmas y las revelaciones de treinta años de creación. En cada trazo hay una interrogante suspendida, una sospecha del mundo. Castellanos no busca retratar lo visible, sino ese temblor invisible que habita en las formas y se escapa de las palabras. Su obra es una meditación estética, un lenguaje de lo incierto, una poética de la duda.

Escuchar a Castellanos es como mirar uno de sus cuadros: uno sale distinto, con una inquietud nueva, con la impresión de haber asomado a un espejo que devuelve algo más que el reflejo.

El dato: la presentación del libro de la muestra de Luis Castellanos será el 11 de julio a las 7 pm en el ICPNA del Centro de Lima.

Aquí la entrevista completa.

Comentarios
Continue Reading

Cultura

Trabajadores del Ministerio de Cultura de Cusco anuncian la toma de Machu Picchu [VIDEO]

La ciudadela inca se encuentra en una lista negra y a punto de ser tomada por los propios trabajadores del Ministerio de Cultura del Cusco ante la inoperancia del ministro Fabricio Valencia.

Avatar photo

Published

on

La problemática del Ministerio de Cultura se intensifica. No solo hay cuestionamientos contra el ministro de Cultura Fabricio Valencia Gibaja. Además, los empleados de la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco, exhaustos y humillados, claman a la presidenta Dina Boluarte que lo reemplace. Y como si el drama fuera aún poco, lo último que se sabe es que estos trabajadores planean tomar Machu Picchu. No por vandalismo, sino por desesperación. Porque el Estado los ha dejado solos, igual que al Santuario.

A esto se suma que Machu Picchu ha sido incluida en la lista negra por el portal Travel and Tour World, que recomienda no visitar la ciudadela inca.

Mediante una comunicación telefónica, Andy Ancasi, representante del Sitracas, nos da todos los detalles de lo que viene sucediendo en Cusco.

Aquí el video del programa.

Comentarios
Continue Reading

Cultura

Julio Barco Premio Juegos Florales de la UNI

El poeta peruano recibe reconocimiento en los Juegos Florales Túpac Amaru de la UNI.

Avatar photo

Published

on

En una ceremonia cargada de símbolos y solemnidad, el poeta Julio Barco fue galardonado con el segundo puesto en los Juegos Florales La Familia Túpac Amaru, organizados por la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), una de las instituciones académicas más prestigiosas del Perú. El reconocimiento fue acompañado por un premio de S/. 4,000 y una ovación cálida por parte del jurado, autoridades y asistentes.

La distinción no solo celebra el talento literario de Barco, sino también la creciente necesidad de reconciliar la ciencia con la sensibilidad, la técnica con la poesía. Que una universidad dedicada históricamente a la formación de ingenieros rinda homenaje a la palabra escrita es, sin duda, un signo de que el arte aún pulsa en los espacios más racionales del país.

Con más de treinta libros publicados, Julio Barco ha construido una obra intensa, vital, crítica. Su participación en este certamen reafirma su compromiso por llevar la poesía al centro del debate cultural peruano. «Este premio me impulsa —dijo al recibir el reconocimiento—. Tengo tantos proyectos para revolucionar el arte en nuestro país. La poesía no ha muerto, solo está esperando que le hablemos desde otro ángulo».

El evento se realizó el 27 de junio de 2025 en el campus principal de la UNI. La entrega de premios fue precedida por palabras de homenaje a la familia Túpac Amaru, símbolo de lucha, dignidad y resistencia cultural —valores que resuenan también en la poesía de Barco—.

Con esta distinción, el autor de Me da pena que la gente crezca y Cantar de Chancay suma un nuevo capítulo en su incansable travesía por devolverle a la poesía peruana su fuerza originaria.

Comentarios
Continue Reading

Cultura

MINCUL: La cuestionada designación del CAS de Karla Alarcón

¿Cómo ganó el concurso? la arqueóloga Alarcón no cumple con el requisito clave: haber dirigido intervenciones arqueológicas. Su experiencia se limita al trabajo técnico de oficina dentro del Ministerio de Cultura, sin evidencia de liderazgo en campo ni dirección de PMA, evaluaciones o gestiones de CIRA.

Avatar photo

Published

on

La convocatoria CAS N.° 216-2025-MC, lanzada en abril de 2025 por el Ministerio de Cultura (Mincul), tenía como objetivo contratar a un(a) Coordinador(a) para la Dirección de Certificaciones. Se trataba de un puesto clave, pues esta dirección es responsable de coordinar, planificar y ejecutar acciones orientadas a preservar, proteger y conservar el patrimonio arqueológico inmueble del país.

Fuente: Mincul.

Entre sus principales funciones, figura la revisión, aprobación y seguimiento de Certificados de Inexistencia de Restos Arqueológicos (CIRA) y de los Planes de Monitoreo Arqueológico (PMA), documentos indispensables para el desarrollo de proyectos de inversión pública y privada.

Concluido el proceso en mayo, la arqueóloga Karla María Alarcón García fue anunciada como la ganadora del concurso. Hasta ahí, nada fuera de lo común. Sin embargo, una revisión detallada de los requisitos y de la trayectoria de la ganadora revela una serie de inconsistencias que comprometen la transparencia del proceso y siembran dudas sobre su legitimidad.

¿Se cumplían los requisitos?

El perfil exigido para el cargo incluía, como mínimo, título universitario en arqueología con colegiatura vigente, formación complementaria en gestión o patrimonio cultural, así como experiencia general de al menos siete años en el sector público o privado. Más aún, se pedía una experiencia específica de al menos cuatro años en funciones vinculadas al cargo, o tres años en el sector público en áreas similares. Pero lo más importante: el postulante debía acreditar dos años de experiencia en la dirección de Planes de Monitoreo Arqueológico y/o Proyectos de Evaluación Arqueológica y/o gestión de CIRAs.

Karla Alarcón no cumple con requisitos de 2 años como directora de PMA y CIRA.

Este último punto no es un detalle menor. Se trata de un filtro clave, pues quien asume la coordinación de la ‘Dirección de Certificaciones’ debe tener conocimiento de campo y experiencia comprobada en dirigir intervenciones arqueológicas. No basta con conocer los documentos, hay que haber estado en terreno. De otro modo, resulta inviable liderar técnicamente la instancia más estratégica del sector.

¿Y cómo pasó Karla Alarcón la evaluación?

Según los documentos revisados, la arqueóloga Karla Alarcón no cumple con el requisito específico de haber dirigido intervenciones arqueológicas. Su experiencia laboral no evidencia dirección alguna de PMA, proyectos de evaluación ni gestiones de CIRA en campo. Es más, su trabajo ha sido siempre de oficina, como técnica dentro del propio Ministerio. Sin embargo, en su ficha de postulación, consignó haber ejercido la “gestión de CIRAs”, una frase y/o formulación ambigua que se asemeja a una leguleyada y parece haber sido suficiente para que pasara la evaluación curricular, etapa que por norma es eliminatoria.

Karla Alarcón se amparó en una palabra, para validar su postulación.

Aquí surge la primera gran interrogante: ¿cómo validó el comité evaluador esa experiencia? ¿Desde cuándo dar conformidad a documentos administrativos desde un escritorio equivale a dirigir una intervención arqueológica en el campo?

La respuesta no es técnica, es política. Lo que aquí se ha validado es una interpretación forzada del término “gestión”, que abre peligrosamente la puerta para que personas sin experiencia real en campo postulen y ganen puestos clave, mientras otros profesionales con trayectoria probada quedan fuera.

Una plaza con nombre propio

El contexto del concurso no ayuda a disipar las dudas. Según fuentes cercanas al proceso, la convocatoria habría estado originalmente dirigida a Ruth Quispe Calderón, amiga cercana de la viceministra de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales, Moira Novoa Silva. Sin embargo, ante la filtración de esta información, se habría descartado ese nombramiento para evitar un escándalo mayor. Como alternativa, se habría optado por Karla Alarcón, quien ya se desempeñaba como directora encargada de la Dirección de Certificaciones y, por tanto, era una figura “de confianza” dentro del sector.

Viceministra Moira Novoa, la misma que firmó la Resolución Viceministerial para el recorte de las Líneas de Nasca y Palpa.

En este punto, el proceso se vuelve aún más cuestionable. La convocatoria fue ganada por Luis Felipe Mejía Huamán, pero mediante una fe de erratas se corrigió el resultado, otorgándole el puesto a Alarcón García en calidad de accesitaria. Mejía no habría llegado a firmar el contrato, y en un giro curioso pero conveniente, Alarcón asumió el cargo de forma oficial, pasando de ganar S/4,500 a más de S/11,264 mensuales.

El CAS fue ganado por Luis Felipe Mejía Huamán, pero luego corrigieron el resultado.

¿Quién dio la orden?

La pregunta es inevitable: ¿quién intervino para asegurar que Karla Alarcón se quedara con el puesto? Todo apunta a decisiones tomadas desde las más altas esferas del Mincul. Tanto la Oficina General de Recursos Humanos como la Alta Dirección —es decir, el ministro Fabricio Valencia y la viceministra Moira Novoa— estarían al tanto del proceso. Con el nombre de Ruth Quispe ya comprometido, y para no arriesgar la llegada de un profesional externo, se habría optado por consolidar a una figura que ya venía ejerciendo el cargo sin concurso y que, además, respondería fielmente a los intereses de quienes manejan el sector.

El 11 de junio convocaron como ganadora a Karla Alarcón García.

El cargo más codiciado

No se debe olvidar que la Dirección de Certificaciones es la joya de la corona del Ministerio de Cultura. Por esa oficina pasan todos los proyectos de inversión del país que requieren una evaluación arqueológica previa: minería, infraestructura, hidrocarburos, construcción, telecomunicaciones. Cualquier obra pública o privada necesita un CIRA o un PMA. Es decir, quien dirige esa oficina no solo tiene poder técnico, sino capacidad de incidencia en decisiones multimillonarias.

Por eso resulta tan preocupante que el proceso de selección no haya sido riguroso, ni transparente. En lugar de optar por la meritocracia, se ha preferido perpetuar prácticas que favorecen el amiguismo y el control político de una dirección técnica. Y si se valida como experiencia el trabajo administrativo desde una oficina, pronto veremos a otros funcionarios, sin experiencia real, disputando cargos estratégicos bajo el mismo criterio.

¿Y ahora qué?

Lo ocurrido en la convocatoria CAS N.° 216-2025-MC debe ser revisado con seriedad por los órganos de control del Estado. No se trata solo de un concurso más, sino de un proceso que compromete la legitimidad del sistema de contrataciones públicas, la credibilidad del Ministerio de Cultura y, sobre todo, la adecuada protección del patrimonio arqueológico del país.

Porque si quienes deben garantizar la conservación del patrimonio no saben ni siquiera cómo se ejecuta una intervención en campo, ¿Qué nos queda como ciudadanos? Solo mirar desde lejos cómo el poder se distribuye a puertas cerradas, mientras las formas legales se ajustan, como siempre, al tamaño de los intereses.

Comentarios
Continue Reading

Cultura

Machu Picchu en la lista negra: el precio de la desidia

Machu Picchu, orgullo milenario del Perú, se tambalea bajo el peso de su propio éxito: hoy, más que una joya cultural, es una advertencia global sobre el turismo desbordado.

Avatar photo

Published

on

El esplendor de Machu Picchu, esa ciudadela suspendida entre la niebla y el abismo, ha dejado de ser solo un símbolo de orgullo nacional para convertirse, lamentablemente, en ejemplo de lo que ocurre cuando el patrimonio se subordina al lucro. La reciente inclusión del santuario inca en la lista de destinos que “ya no valen la pena visitar”, elaborada por la publicación internacional Travel and Tour World, es mucho más que una advertencia: es un grito de auxilio.

Junto a destinos igualmente emblemáticos como Venecia o Bali, Machu Picchu aparece ahora en un índice vergonzoso: el de los sitios donde el turismo masivo ha comenzado a erosionar lo que una vez se admiró. Las razones son contundentes: sobresaturación de visitantes, tarifas desproporcionadas y un impacto ambiental alarmante. A ello se suma la advertencia de la Unesco, que evalúa declararla Patrimonio en Peligro si el Estado peruano no actúa con urgencia y decisión.

No es una exageración. Según informes recientes, rutas diseñadas para no recibir más de 450 personas al día han llegado a registrar hasta 700 ingresos. El resultado es predecible: senderos desbordados, piedras milenarias al borde del colapso y una experiencia cada vez más parecida a la de una feria caótica que a la contemplación sagrada de un legado ancestral.

La Contraloría General de la República, por su parte, ha emitido un informe demoledor: aforos incumplidos, ausencia de fiscalización y una Aguas Calientes convertida en una máquina de exprimir turistas, donde los precios suben, pero la calidad se desploma.

El problema, claro está, no es el turismo, sino su pésima gestión. Especialistas en conservación han exigido una reestructuración del sistema de ingreso, la implementación de límites reales y no simbólicos, y un nuevo modelo de turismo sostenible que reconcilie el desarrollo con la protección. No se trata de clausurar el acceso a la maravilla, sino de salvarla de su propia fama.

La inclusión de Machu Picchu en esta lista negra debe interpelarnos como país. ¿Vamos a permitir que uno de nuestros mayores legados se pierda en manos de la improvisación y la codicia? ¿O tendremos, al fin, el coraje de actuar antes de que la historia nos pase la factura?

Mientras tanto, el ministro Fabricio Valencia continúa en su búnker solucionando sus problemas y haciendo seguimiento a la investigación de la fiscalía por el caso Shirley Hopkins.

Comentarios
Continue Reading

Cultura

Ministerio de Cultura de Ica: ¿concursos CAS a medida?

Nuevas movidas en la DDC de Ica buscan coronar la dedocracia.

Avatar photo

Published

on

Por Luis Huertas

Desde hace años, las convocatorias CAS en el Ministerio de Cultura, tanto en la sede central como en sus Direcciones Desconcentradas, han sido señaladas por beneficiar a personas del entorno de confianza de ciertos funcionarios. Lo preocupante es que esta práctica no parece detenerse, y ahora el foco está sobre la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) de Ica.

Surgen preguntas inevitables: ¿Desde cuándo la DDC Ica ha sido terreno fértil para estas maniobras irregulares?, ¿A quién favorecen realmente estas contrataciones?, ¿Por qué en medio de la grave crisis por las Líneas de Nasca, se lanza una convocatoria que despierta tantas sospechas?

Primer intento: CAS N°072-2025-MC

El 4 de febrero de 2025, se publica en la web del Ministerio de Cultura un concurso CAS para cubrir el cargo de subdirector/a de la DDC Ica. El puesto exigía un perfil técnico exigente, con experiencia específica, título en arqueología y colegiatura vigente. El sueldo: S/ 6,906 nuevos soles. Todo parecía estar en regla, hasta que el concurso desapareció.

Fuentes internas revelaron que, el concurso fue retirado tras una denuncia desde la misma DDC Ica, advirtiendo que la subdirección es un cargo de confianza y no debería concursarse vía CAS. Así, el proceso fue abruptamente anulado. Coincidentemente, semanas después, el entonces director Alberto Martorell presentó su renuncia mediante Resolución Viceministerial N° 069-2025-MC. ¿Este CAS era algún premio, orquestado por algunos “amiguitos” para cierto funcionario de la sede Ica? Y todo con el aval del ex director Martorell, hoy involucrado en algunos chats internos con el ministro Valencia. Luego de su renuncia, asume el abogado Víctor Injante la dirección de la DDC Ica y, sorprendentemente, se vuelve a insistir con el mismo CAS pero maquillado con otras aristas.

Fuente: Ministerio de Cultura.

Segundo intento: CAS N°296-2025-MC

El 10 de junio —en plena tormenta por la reducción del área protegida de las Líneas de Nasca y la crisis de gestión en la DDC Ica— se lanza una nueva convocatoria. Esta vez, el puesto se denomina “Coordinador/a de Subdirección de Patrimonio Cultural, Industrias Culturales e Interculturalidad”. En la práctica, el mismo cargo de subdirección, pero con otro nombre. Lo curioso es que los requisitos ahora son más flexibles:

  • Experiencia general: de 6 a 5 años
  • Experiencia específica: de 4 a 3 años
  • Experiencia en el sector público: de 3 a 2 años
  • Sueldo: de S/ 6,906 a S/ 6,000

Fuente: Ministerio de Cultura.

Como para hacerlo más accesible, solo se exige haber sido “especialista” durante un año. ¿Coincidencia? Difícil de creer. Todo apunta a que, presuntamente, esta nueva convocatoria estaría hecha a medida para la actual subdirectora Jeanette Gutiérrez, quien pasaría de ganar S/ 3,000 a S/ 6,000, con una plaza concursada y mayor estabilidad. Algunos señalan que podría incluso pedir licencia sin goces de haber, de su puesto actual y postular, sin riesgo alguno. Desde hoy se puede postular a este CAS, y todo puede pasar.

Fuente: Ministerio de Cultura.

¿Puestos a la carta?

Lo más preocupante es el trasfondo: ¿Por qué insistir tanto en este puesto? ¿Por qué reducir los requisitos? ¿Por qué en medio de una crisis de credibilidad en la gestión cultural? La DDC Ica no necesita una coordinación adicional, ya que la actual subdirectora cumple esas funciones. Entonces, ¿por qué insistir?

Mientras los titulares nacionales apuntaban al escándalo de las Líneas de Nasca, en silencio se gestaba una convocatoria que huele a favoritismo. El patrón es claro: flexibilización de requisitos, coincidencias con cargos en funciones, y beneficios personales.

Una llamada a la reflexión

Este tipo de maniobras no son nuevas en el aparato estatal, pero es hora de ponerle freno. Si el Estado sigue siendo usado para beneficiar a ciertos círculos de poder, sin meritocracia ni transparencia, estamos condenando la institucionalidad.

La ciudadanía exige respuestas, pero sobre todo decencia en la gestión pública. Desde Lima Gris seguiremos vigilantes. Porque el patrimonio no solo se protege en el terreno, también se defiende en la transparencia de quienes lo administran.

Comentarios
Continue Reading

Cultura

Presentación del libro «El misterio de las aves kanchu» de Lizbeth Pretell Romero

El miércoles 25 de junio en la Casa de la Literatura Peruana se presentará el libro “El misterio de las aves kanchu” de Lizbeth Pretell Romero, gestora cultural e investigadora luriganchina, y publicado por el sello editorial Jukucha Ediciones.

Avatar photo

Published

on

Este libro nos permite conocer la historia de las aves kanchu, míticas aves sagradas de quienes se toma el nombre para crear el vocablo Rurikanchu, que a su vez da origen a la denominación del distrito de San Juan de Lurigancho. Un relato que muestra personajes y hechos con trascendencia histórica y ficticia; fruto de una investigación basada en los manuscritos del padre Francisco de Ávila, el libro “Ritos y tradiciones de Huarochirí”, así como en evidencias arqueológicas halladas en el distrito.

El proyecto fue concebido desde el área de museo del Centro de Cultura, Recreación y Educación Ambiental Huiracocha (CREA Huiracocha), el cual estuvo ubicado en el parque zonal del mismo nombre en el distrito de San Juan de Lurigancho. La sala permanente Ruricancho, más conocida entre sus pobladores como el museo de San Juan de Lurigancho, tuvo como propósito difundir y revalorizar la historia del distrito (ubicado en un territorio con aproximadamente 11 000 años de historia) entre sus pobladores y el público en general, mediante visitas guiadas y talleres de educación patrimonial. Gracias a estas actividades y de manera lúdica, se realizaron también jornadas de cuentacuentos para niños, con relatos basados en la historia de la comuna.

En la presentación participarán Lizbeth Pretell Romero, autora del libro; Ricardo Puga Huamán, ilustrador; y Alan Concepción Cuenca, bibliotecólogo. Además, se contará con la participación especial de Gerardo García Chinchay, director de la Dirección de Lenguas Indígenas del Ministerio de Cultura del Perú. La cita es el miércoles 25 de junio a las 6:30 p.m. en el auditorio de la Casa de la Literatura Peruana, ubicada en jirón Ancash 207, Centro Histórico de Lima. Ingreso libre con aforo limitado.

El libro podrá ser adquirido el mismo día de la presentación o a través de las redes sociales de la organización cultural Quebrada Canto Grande.

Comentarios
Continue Reading
Advertisement

LIMA GRIS TV

PUBLICIDAD

PRNEWS

PARTNER

 

CONTACTO

Síguenos en Twitter


LIMA GRIS RADIO

Trending