Hoy se ve en el pleno el futuro de nuestros recibos de luz. El proyecto de ley lobista 4565 que se debate hoy en el Congreso tiene por narrativa el diversificar la matriz energética, descarbonizar la industria y garantizar la seguridad energética. Sin embargo, hay aspectos que generan desconfianza razonable sobre quiénes parecen impulsarla.
Una de las organizaciones que más viene impulsando este proyecto, naturalmente es la Asociación Peruana de Energías Renovables (SPR). En la web de esta organización se compartió un reciente artículo que decía: “En Perú, según el regulador Osinergmin, el PL 4565 permitirá que ocho millones de familias peruanas paguen un 16% menos en sus tarifas eléctricas”, esto según Brendan Oviedo, presidente de la SPR. No obstante, las buenas intenciones que pueda tener su organización, ésta sin embargo forma parte de un discurso nematológico medioambientalista. Suena bonito hasta que vez tu tarifa de luz.
En Chile, que es una ventana de nuestro futuro si seguimos por este camino, la tarifa eléctrica ha subido una media de 18% a causa de las energías renovables, que en buena parte son subsidiadas. A propósito Chile tiene un endeudamiento de alrededor del 41%, su gasto fiscal ha tenido que contraerse para el 2025 de 2,7% a 2,1% uno de los más bajos (esto porque lo saludable es que el gasto de presupuesto suba cada año a medida que la economía crece, el problema es que Chile ya no crece, la producción se ralentiza y las inversiones se van, y para 2025 faltan alrededor de 1100 millones de dólares para cubrir gastos, en resumen un desastre). Entonces, lo aconsejable según como se está moviendo la realidad es ser cautos respecto a las renovables. Alemania ha perdido mucha competitividad por una apuesta ciega a fuentes de energía poco estables y en muchas ocasiones más caras.
Las energías renovables elevaron las tarifas de electricidad en Chile.
Poderosos y cuestionables aliados
Asociación Peruana de Energías Renovables (SPR) tiene entre aliados y socios a una gran cantidad de organizaciones internacionales que promueven este tipo de energía. Según aparece en su web, una de estas es la empresa Lader Energy, la cual en febrero 2022 la autoridad chilena declaró inadmisible un proyecto fotovoltaico de 340 MW en el país de Prat y Balmaceda. Según medios locales, “el emprendimiento que pretendía montarse en la Región de O’Higgins, y movilizar inversiones por 200 millones de dólares, no cumplía con ciertos requisitos impuestos por la SEA. El Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) declaró al Parque Fotovoltaico Los Llanos Solar, de la compañía Lader Energy, como “No Admitido a Tramitación” por una serie de inconsistencias en la documentación presentada”.
Los justificativos de regulación chilena fueron los siguientes (esto es bastante técnico así que la cita es textual):
«La Dirección Regional del Servicio de Evaluación Ambiental de la Región de O’Higgins (SEA de la Región de O’Higgins) advirtió una serie de aspectos ambientales que Lader Energy deberá tener en cuenta para poder avanzar con este proyecto. Entre ellas, que la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del Parque Fotovoltaico Los Llanos Solar “no presenta los antecedentes de conformidad a lo establecido en el Título III Párrafo 3°, del D.S. N°40/2012 RSEIA, sobre Contenidos mínimos comunes de los Estudios y Declaraciones de Impacto Ambiental”, según lo dispone el artículo 15. Además, señaló que el Capítulo 9 de la DIA (Relación del Proyecto con las Políticas, Planes y Programas de Desarrollo Regional y Comunal) “no se indica información sobre la compatibilidad del proyecto con el uso del territorio, en función del Plan Regulador Comunal de Placilla, donde se emplazará el proyecto, según lo descrito en el numeral 1.3.2. del Capítulo N°1 de la DIA “Descripción de Proyecto””. Como tercer elemento, la SEA indica que “el proponente no presenta la información técnica que permita determinar y justificar el área de influencia, conforme se establece en el artículo 18 del D.S. N°40/2012 del MMA, para el Componente aire, ya que, según lo presentado en el Anexo 11 de la DIA, “Caracterización de Emisiones Atmosféricas”, no se muestra el área de influencia de las emisiones atmosféricas del proyecto; por consiguiente, no cumple con los contenidos mínimos de una DIA, estipulados en el Párrafo 1º del Título III del Reglamento del SEIA”. Asimismo, en el numeral N°3.3.4. del Capítulo N° 3 de la DIA “Plan de cumplimiento, legislación ambiental aplicable, permisos y pronunciamientos”, se presenta el listado de los permisos y pronunciamientos ambientales sectoriales aplicables al Proyecto. “Al respecto, se presentan indicadores de cumplimiento para los artículos 119 y 155 del D.S. N°40/2012 del MMA, cuyos contenidos técnicos y formales no se presentan en la DIA ni en sus Anexos; por consiguiente, no cumple con los contenidos mínimos de una DIA estipulados en el Título III; como asimismo en el Título VII, ambos del Reglamento del SEIA”, advierte la SEA».
Este dictamen hace pensar en uno de estos socios o aliados de la organización de renovables en Perú, como una empresa que requiere ser vista con mayor detalle. Si bien inconvenientes como estos son frecuentes en el campo de las inversiones, requiere del Estado y la ciudadanía una mayor cautela ante inversiones que directamente inciden en nuestra producción económica y vida doméstica.
Sobre esta empresa, en 2022 PV Magazine publicó un artículo: «Una joint-venture recibe la concesión temporal de estudios de factibilidad para un proyecto de 200 MW en Perú», haciendo referencia a como «Cordillera Solar I, sociedad vehicular de Lader Energy y Euder Energy, realizará estudios de factibilidad para proyecto Central Fotovoltaica Sol de Talara, según ha publicado el Diario Oficial de Perú». Luego continuó indicando que ese año «El Ministerio de Energía y Minas de Perú (Minem) otorgó a la empresa Cordillera Solar I SAC una concesión temporal para desarrollar los Estudios de Factibilidad relacionados a la actividad de generación de energía eléctrica para el proyecto Central Fotovoltaica Sol de Talara, que tendrá una capacidad instalada estimada de 200 MW».
Hace un mes diario Gestión informó que «Cordillera Solar II proyecta parque eólico de US$320 mllns en Lambayeque y Piura». Según el medio «Cordillera Solar II es una sociedad constituida por Euder Energy y Lader Energy, que está encargada de la ejecución del proyecto Parque Eólico Vientos de Sechura de 200 MW y una línea de transmisión 220 kV».
Bienvenidas las inversiones, pero siempre atentos con as transnacionales de las supuestas energías limpias que más parecen recordar la sombra de la International Petroleum. Porque como dijo Chesterton, los problemas no se acaban, solo se transforman.
Otro aliado estratégico de la sociedad de renovables de Perú es la todopoderosa The Nature Conservancy, la cual, en 2003, The Washington Post publicó una serie de investigaciones sobre esta organización con acusaciones de tratos indebidos y otras irregularidades que The Nature Conservancy impugnó. En parte, el Post alegó que The Nature Conservancy había comprado, una y otra vez, extensiones de tierra ecológicamente significativas, les había impuesto algunas restricciones de desarrollo y luego las había revendido a fideicomisarios y partidarios a precios muy reducidos. Las ventas fueron parte de un programa que limita el desarrollo intrusivo, pero generalmente permite a los compradores construir casas en el terreno. Los compradores luego le dieron a The Nature Conservancy dinero en efectivo que era aproximadamente equivalente al monto de los descuentos. Eso permitió a los nuevos propietarios tomar deducciones fiscales significativas por donaciones caritativas
Después de este reportaje del Post, The Nature Conservancy suspendió una serie de prácticas poco después de que se publicaran los artículos.
Luego hace pocos años la misma organización volvió estar en el ojo de la atención mediática, cuando Nature Conservancy designó a la ex secretaria del Interior de Obama como director general interino, Sally Jewell mientras la organización buscaba un nuevo liderazgo en medio de las consecuencias de una investigación por acoso sexual y presunta mala conducta en el lugar de trabajo de un anterior ejecutivo.
La entonces ex funcionaria de la administración Obama que formó parte de la junta directiva de la organización ambientalista, asumió el cargo durante un período de agitación para el grupo que ha sido amigo de la administración demócrata, las corporaciones estadounidenses y los gobiernos nacionales, esto según explica Zack Colman en uno de los pocos artículos críticos sobre esta organización. Ahora bien, Jewell, fue también ex director ejecutivo del gigante de artículos para actividades al aire libre REI y también trabajó como ingeniero en Exxon Mobil. Es decir, alguien que viene del petróleo, que pasa por la política y va a una organización proteccionista. Interesante.
Aunque esto fue hace unos años, no deja de producir suspicacia los grupos globales que apoyan esta transición energética que se impulsa con desbocada vehemencia y lo más extraño de todo, con prácticamente cero críticas.
HANS HERRERA NÚÑEZ. (Lima, 1985). Vivió parte de infancia en Costa Rica, de regreso a Perú estudio Derecho en la Garcilaso y luego literatura. Se especializa en la obra de Roberto Bolaño y Chesterton. Ha colaborado con Dedo Medio y actualmente escribe en Lima Gris. También co-conductor del programa en radio Lima Gris de "Mirada Critica". Además ha aparecido en el celebrada película de ficción de Gustavo Meza, "Ciudad Ausente" (2015).
En medio del escenario del desmoronamiento institucional, resulta chocante e injusto meter en el mismo saco el escándalo de las “Chibolinas” de la Corte superior de Justicia de Lima y de las cocineras Peralta de la Fiscalía junto a los desatinos de una cofradía impune en el Palacio de Torre Tagle, pero dada la gravedad de la situación es inevitable hacerlo.
La verdad monda y lironda nos dice que el caso del embajador José Betancourt Rivera, cuyo retiro se dio por Resolución Suprema N° 151-2024-RE, del 10 de setiembre del 2024, es absolutamente diferente al complot perpetrado el 2018 por altos funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores en contra del diplomático Fortunato Quesada, quien entonces representaba al Estado peruano en Israel.
Sobre esos hechos se puede hacer un paralelo que ayude al gobierno nacional y a la Cancillería a matar sus fantasmas y poner las cosas en el lugar que les corresponde con el único provecho de alcanzar la justicia institucional y la integridad en la administración pública.
En primer lugar, el embajador Betancourt cometió hechos públicos reprochables según lo señaló la propia República Árabe de Egipto y por eso notificó el incidente al Perú; mientras que el embajador Quesada jamás ofendió ni agravió al país donde prestaba servicios diplomáticos, en Israel (Tel Aviv).
En segundo lugar, pese a que Egipto pidió el retiro del embajador Betancourt, el trato dado hoy por la Cancillería peruana a dicho funcionario es absolutamente laxo, benévolo y lento, pues hasta ahora no se le abre proceso administrativo ni se le ha traído al Perú; mientras que el trato practicado con el embajador Quesada fue diametralmente opuesto, al ser doloso, perverso, tramposo e indigno, con un proceso administrativo exprés y donde el mismo Ministerio de Relaciones Exteriores fue parte de un complot.
En tercer lugar, mientras la alta burocracia del Estado tiene en torno al caso Betancourt a una presidenta como Dina Boluarte y a un canciller como Elmer Schialer, sucede que el embajador Quesada tuvo sobre su cabeza al Lagarto Vizcarra y al entonces canciller Néstor Popolizio, siendo este uno de los principales denunciados por el chef Jesús Alvarado, en el sentido de que, junto a José Boza, Pedro Rubín y Hugo de Zela, orquestaron una trampa para sacarlo del puesto de embajador en Israel.
En cuarto lugar, el caso del embajador Betancourt no ha sido abordado debidamente por la prensa pese a que resultó ser un escándalo porque dicho embajador maltrató a los funcionarios de Egipto, lo que disgustó al gobierno árabe y fue este el que se quejó ante el Perú. No obstante, en paralelo, el caso del embajador Quesada fue más estridente para la Cancillería porque un grupo de sus funcionarios estaba dedicado a complotar contra el citado diplomático, contando incluso con un programa dominical a través del cual condicionaron su destitución en menos de 10 días, consagrando así una venganza personal que por lo menos provenía de un desencuentro entre Ricardo Luna y Quesada acaecido en agosto del 2016.
Es decir, el complot lo hicieron a sabiendas de que todo iba a pasar de antemano con un escándalo mediático en el programa dominical Panorama. Como se puede apreciar estos dos casos son dignos de análisis y útiles para la nueva generación de diplomáticos que está en pleno estudio y formación académica. Ahora bien, sin ir muy lejos, a propósito del reciente tema del presidente de Argentina, se sabe que Milei ha cambiado personas en la Cancillería gaucha, y ha dejado en claro que la política exterior de un país debe alinearse con la visión y los objetivos del gobierno en funciones.
Pero, ¿qué pasa en Perú con los casos Betancourt y Quesada? Sencillamente el gobierno no tiene cuidado ni preocupación por mantener la coherencia entre ambas instancias de cara a sancionar cualquier ilegalidad, como esa de armar complots o de perdonarle la carrera a otros que encima no sólo generaron un desencuentro con Egipto, sino que el mal proceder de Betancourt también arrastró al Perú a no contar con él como embajador en el Reino Hachemita de Jordania y en la República Árabe Siria.
Es decir, la impunidad reinante en la Cancillería le genera al país un alto costo y una pésima imagen internacional. Por eso, a partir del paralelo entre el caso Betancourt y el caso Quesada, bien le conviene a la presidenta Boluarte y al canciller Schialer ordenar la casa para mantener un Ministerio de Relaciones Exteriores sólido, íntegro, confiable y ético. Esto implica también asegurar que las acciones diplomáticas reflejen valores y prioridades nacionales en el ámbito internacional.
Por eso la utilidad y pertinencia de analizar los casos Betancourt y Quesada puesto que, cuando hay falta de coherencia, se generan señales contradictorias, injusticias, impunidad y se debilitan, quiérase o no, las relaciones con otros Estados y la mala percepción del país en el mundo, pues así ocurrió al maltratar al embajador Quesada cuando él cumplía funciones en Israel.
Sin embargo, las cosas se presentan al revés en el caso Betancourt, en Egipto, pues allí no hubo ninguna víctima de una conspiración tejida y ordenada desde Lima con el objetivo de destituirlo de la carrera diplomática, sino que Betancourt se quemó solo al maltratar a los funcionarios egipcios, lastimando la imagen del país. Empero para la Cancillería eso resulta moco de pavo, pues solo dice bien gracias y buenas noches los pastores porque, pese al tiempo transcurrido, a Betancourt no lo han traído a Lima ni le han abierto proceso administrativo.
Malograr la imagen del país, y así lo acaba de reflejar Javier Milei, presidente de Argentina, es cometer acciones traicioneras al violentar la moral, los valores y los principios de la Cancillería (¿cómo Popolizio, De Zela y Rubín en Perú?). Así el presidente Milei apuntó contra la “casta diplomática” (Modino y sus colaboradores en la burocracia albiceleste) y dijo “estoy para echarlos a todos, son traidores a la patria. Estamos viendo el formato legal por el cual echarlos y hacerles pagar”.
Además, Milei acusó a la “casta diplomática” de “vivir una vida parasitaria” y de ser “un conjunto de imbéciles que se creen que le pueden manejar la vida al resto”, dándole el encargo a su nuevo ministro Gerardo Werthein de hacer una purga en la Cancillería. ¿Dina Boluarte pediría algo similar en Perú? ¿La presidenta peruana es parte del problema o de la solución?
Pero aquí dejamos un dato histórico para el Perú. La Embajada de Egipto en Lima entregó una nota diplomática señalando que las autoridades egipcias, en la persona de su Canciller, agradecen el retiro del embajador José Betancourt. Este hecho es inédito en la diplomática peruana, toda vez que implica tácitamente una declaración de “persona non grata” respecto del funcionario Betancourt.
Hoy se vota en el pleno el proyecto de ley lobista 4565 impulsado por el ministro de Energía y Minas Rómulo Mucho, que promueve el uso de renovables, sin embargo, mientras el Ejecutivo insiste testarudamente por las RER, el resultado de las elecciones en EE.UU. empieza a repercutir en países como Alemania, cuya alianza de gobierno se rompe al no ponerse de acuerdo sobre una mayor flexibilidad energética.
Perú que tiene una brecha energética solo comparable a su brecha en infraestructura, debería comprender que su reciente afán de impulsar unas fuentes energéticas poco seguras como son las energías renovables, tendrá unos costos enormes y los más perjudicados será el más del 30% de peruanos en la pobreza, a los que supuestamente las nuevas políticas energéticas impulsadas por el Ministerio de Energía y Minas busca beneficiar.
El relato del ministro Mucho se podría resumir así: Perú tiene la tercera tarifa residencial más alta de América del Sur y con riesgo a seguir incrementándose debido a la posibilidad de usar más diésel en la generación eléctrica. Dependencia en un 92% de generación eléctrica en base a hídrico y gas natural (relato para diversificar las fuentes de aprovisionamiento eléctrico). El déficit hídrico de los años 2022 y 2023 que impactó negativamente el precio de generación eléctrica, elevándolo de 40 dólares el MW a 200 dólares el MW.
Ahora bien, este relato no corresponde del todo a la realidad. La diversificación no es crucial para un mejor y más eficiente servicio eléctrico, toda vez que Perú necesita más exploración de yacimientos de gas y petróleo que si tiene, pero que no se explotan. El problema es que no hay una adecuada promoción para la puesta en marcha de estos recursos dormidos. Sobre el déficit hídrico este se debe menos al cambio climático y más a una falta de gestión del agua. Según el embajador Guillermo Russo Checa, se requiere en Perú una autoridad centralizada del agua, cosa que no existe. La crisis hídrica en todo caso es resultado de una ausencia de gestión. Y esto podemos suponer ocurre por una voluntad firme, y es que tanta ineptitud respecto con Petroperú como con la gestión de agua, se debería a causa de intereses particulares enfocados a vendernos las renovables como panacea energética. Lo cierto es que esta política nos está resultando más parecida a un veneno.
En resumen, nuestra política energética es mediocre, miope y no se percata que podría acabar afectando la seguridad nacional de Perú.
Lecciones del mundo
Ayer mismo llegó a su fin la alianza del gobierno federal alemán entre liberales, socialdemócratas y verdes, ante una política económica que no corre ni camina. El gobierno semáforo (rojo, amarillo y verde), muere en un contexto de ralentización de la economía alemana aplastada por una política energética nefasta. Recordar que el gobierno de Merkel (CDU), cerró las plantas nucleares y se entregó a depender del gas ruso, después con la guerra de Ucrania y el bloqueo a Rusia, Alemania solo ha conseguido dispararse a los pies.
Esto sumado al cierre de plantas de carbón ha llevado a un suicidio energético que los hizo depender de recursos energéticos renovables que no han demostrado en la experiencia real poder sostener el aparato productivo alemán que viene perdiendo competitividad ante China y otras potencias emergentes. Resultado de esta ineficiente política energética es el auge de propuestas políticas radicales como es el ascenso de AFD, esto como consecuencia de una perdida de confianza ante un futuro cada vez más incierto. Hay que recordar que los alemanes se han visto obligados a pagar cada vez tarifas más altas de electricidad, especialmente en invierno, esto junto a la deuda amenaza a Alemania a convertirse en una Italia del norte.
Los altos costos de energía podrían llegar a Alemania a una recesión entretanto las renovables no levantan el aparato productivo de uno de los países que más ha invertido en este tipo de fuentes de energía. Y es que las energías renovables además de un negocio de pocos subvencionado con el dinero de muchos, es también un dogma medioambiental, solo un pensamiento dogmático puede explicar semejante necedad de sacrificar al pueblo frente a un combate al cambio climático que por otra parte es irreversible y natural, y a la que más bien se deben las economías adaptar en lugar de pretender una guerra moral.
Suavizar las regulaciones climáticas son una de las causas de la ruptura del gobierno federal alemán, el cual parece adelantar el calendario electoral mientras el parlamento alemán deberá reorganizar el gobierno en enero próximo. Cómo sea, en la ecológica Alemania el viento no sopla y el sol no sale para recargar las baterías de un gobierno agotado.
Por otra parte, el triunfo de Trump es visto como un gobierno poco amigo de una hegemonía energética verde, mientras los precios de los mercados de crudo tuvieron una ligera subida. Está claro que las renovables entran en un proceso de crisis, por lo que el tema de energía para Perú exigirá a su actual gobierno ver con mucho cuidado su política, sobre todo en un momento en que Perú está empezando a ganar un protagonismo en la región con el puerto de Chancay. Hacen falta más exploraciones de yacimientos de gas y su explotación, cosa que Bolivia sí hace y Perú viene quedándose atrás, tal como Chile, que cometió el error de apostar por energías renovables poco seguras y además caras.
Con el nombre de “Caprichos” el joven artista Sebastián Cruz – Ledesma nos abre las puertas de su producción creativa en la Galería Martín Yépez, segundo piso, sito en la Av. Nicolás de Piérola 938 (Plaza San Martín).
La cita involucra un especial acontecimiento artístico limeño y la inauguración de la exposición individual de Sebastián, la que está fijada para este viernes 8 de noviembre, a las 19 hrs.
Esta es una buena noticia porque nos confirma que hay talento en el país, también nos dice que el arte no ha muerto en el centro de Lima y al mismo tiempo asegura una propuesta artística interesante que refresca la pintura y el dibujo nacionales.
Sebastián Cruz – Ledesma nació el 7 de septiembre de 1999. Es un artista visual especializado en pintura y dibujo, y él mismo refiere que marca sus obras “con una gran carga emocional, con una impronta conceptual y con luz espiritual”.
Cruz – Ledesma ha recibido el prestigioso Premio Winternitz en Pintura, de la Pontificia Universidad Católica del Perú, su alma mater, en cuya facultad de arte estudió del 2017 al 2023.
Sebastián ya no es una promesa con talento artístico, sino toda una realidad; y le dice al arte nacional que habrá pintura para rato y de la buena.
Ministro Rómulo Mucho fue cuestionado por los parlamentarios en el Congreso
Solo dejó dudas la participación del ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, ayer en la Comisión de Presupuesto y Cuentas Generales. Prácticamente ningún congresista se manifestó satisfecho con el ministerio en cuestión.
El ministro de Energía y Minas se presentó a la comisión de presupuesto y pidió el apoyo de los congresistas para el proyecto de energía renovables que se viene impulsando: «a veces no avanzamos en la medida que queremos. El Perú no lo merece, tenemos cerca del 30% de pobreza. Y tenemos que avanzar a una velocidad de crucero y es urgente de parte de ustedes el apoyo de la modificación de la ley 28832 que incrementa la ratio del porcentaje de las energías renovables. No vaya a suceder como en Ecuador que no tiene energía o Colombia que están racionando la electricidad (…) Necesito su apoyo este jueves en el pleno».
Fue una sesión larga y extenuante ante una comisión escéptica que escuchó con pocas esperanzas y muchos reclamos la presentación del ministro de energía y minas hoy en la comisión de presupuesto. Para el congresista Bazán existe una seria preocupación del debate próximo del Reinfo y su presunto vínculo de algunos sectores de la minería informal con el crimen organizado. Bazán jaló las orejas al ministro cuando le increpó: «Se requiere hoy una ley Mape que el ministerio ofreció. Iba llegar a julio al Congreso. Producto que eso nunca ha llegado hoy se debate la ampliación de Reinfo condicionada al envío de la ley Mape que ustedes ofrecieron. Me parece una falta de compromiso, una irresponsabilidad».
Y no se quedó allí, Bazán exhalando fuerte mencionó con voz aquilina a la vez que pedía que el ministro enviara la ley Mape al Congreso: «Hoy yo adelanto mi posición, me voy a oponer a lo que se debata en la comisión de energía y minas, porque resulta incomprensible que este congreso amplíe el Reinfo sabiendo cuanto daño hace esto al país».
Menos amable fue la congresista por Cusco, Katty Ugarte, «en su plan han mencionado sobre la masificación del gas en el sur, pero Cusco no está considerado. ¿Qué pasa, de dónde sale el gas ministro? ¿No es del Cuzco? (…) Por eso es que los conflictos sociales se levantan en mi región. Una vez más [ha sido] discriminada mi región». Luego refirió la incapacidad de los gerentes regionales, «el desconocimiento que hay en las gerencias regionales en cuanto a su trabajo (…) personal que no ha hecho nada. Aquí lo inicio que falta es tomar decisiones políticas», mencionó en alusión a la inoperancia del Ejecutivo.
Por su parte, la congresista Karol Paredes, reclamó el gasto respecto a Petroperú «Se ha hecho un rescate financiero de 2500 millones de dólares, cuando esos recursos deberían estar justamente para ese gran lema de «objetivos para transformar el mundo para 2030″. ¿Cómo vamos a transformar al mundo o al país si estamos invirtiendo en una empresa que no demuestra utilidades?».
Por su parte la congresista Trigoso se quejó de no recibir respuestas a sus oficios enviados al ministerio en cuestión respecto al tema energético en su región, San Martín.
En un momento mientras un miembro del equipo técnico del ministro hablaba sobre energías renovables, se fue la luz. Por accidente alguien había apagado el interruptor, pero el simple hecho fue muy simbólico.
Ya pues: raro según quién. Es Ocaña… Él mismo. ¡Y ya! Nadie como él. Absoluto y concreto, una pura vitalidad. Uno que se atreve a ser un individuo. Ser quien eres poco no es. Y ves, bien claro, que los disfraces usados así y asá (la gente cree que los travestis son los otros, cuando todos vivimos disfrazados) -muchos, muchos disfraces, aunque básicamente el mismo- o son exteriorizaciones de los seres internos pugnando por emerger, contribuyen a una fundamental y ‘definitiva’ desnudez. Física; y ontológica también y más. La utopía, hasta qué punto realizable, del no hay nada que esconder. Uy, pero ¿si luego ya no hay más que desnudar? Entonces ¿qué vamos a hacer?
Así (si la estrategia existencial resulta, si el método provocativo funciona) se respira bien y mejor. No es tanto la negación de la intimidad como su libre expresión. Ocaña tal cual es una práctica triunfante y no una -arrinconada o enterrada o en su torre acobardada- teoría. Anda y hazlo. Ve hasta el fondo. Tiene su valor. Artista. La palabrita manoseada. Y de remate, sí, un marginal. No precisamente un niño mimado (minado) por la institución.
Podrías decir que es super rutinario, el formato de una entrevista cualquiera. Un poco, bastante sí. Pero a este tipo tienes que dejarlo simplemente hablar, te diría. Directo y sutil. Fijar su imagen. Contemplar la corriente de su conciencia. Y hay un tono de confesión; y de culpa, nada.
¡Ah y la imaginación lujuriosa de la fiesta religiosa popular! A la que él se une. Y si Dios fuera Eros, el non plus ultra de lo sensual. Mira tú. Bueno sería.
Ahora, para dar la contra y equilibrar. Qué tan simplonas e infantiles (aunque graciosas, vistosas) o si quieren digo naif, eran sus pinturas. ¿Si era crítico, eso cuánto se nota en su arte, tanto como en su discurso explícito?
Dudas. Y si ahora es cool ser raro y más raro y si se puede el más raro. Si ahora ya nada ni nadie es raro. O ya da lo mismo. Si la provocación ahora ha sido engullida y es, más que nunca, parte del negocio. Y ahora: qué revolución es posible, cuál liberación es la consecuente y verdadera, ¿qué hay que hacer para no amar las cadenas?
Kamala Harris y Donald Trump son ambos neoliberales que defienden el capitalismo y están convencidos del destino imperial de los Estados Unidos. Harris y el Partido Demócrata aparentemente buscan la cooperación internacional y el libre comercio mundial; sin embargo, sirven a los intereses transnacionales del capital financiero de Wall Street, de la oligarquía bancaria mundial, de la industria transnacional de Silicon Valley, de la poderosa industria cultural de Hollywood y de la gran industria farmacéutica norteamericana.
Trump, en cambio, promueve un nacionalismo económico que supuestamente rechaza la globalización, pero lo hace promoviendo un capitalismo orientado hacia la protección de los intereses norteamericanos y de sus élites económicas locales. Los republicanos tienen como objetivo que las grandes empresas estadounidenses consoliden su riqueza mediante políticas fiscales y aranceles que los protejan de la libre competencia mundial. Esto no significa una ruptura con el sistema neoliberal, sino un rumbo de la política económica mundial a favor de los capitales norteamericanos.
Ambos usarán el dólar como una herramienta del poder imperial, porque el neoliberalismo globalista de Harris y el capitalismo nacionalista de Trump necesitan el dólar para afirmar su influencia mundial y controlar las finanzas internacionales que les permiten a Estados Unidos imponer sanciones unilaterales en nombre de la democracia y la libertad occidental, manipular el comercio mundial y condicionar políticamente a Europa y al Tercer Mundo. No olvidemos que el dólar es la moneda de reserva internacional y que el Banco Mundial y el FMI están subordinados a los intereses norteamericanos.
La aparente polarización en temas como el aborto, la migración y otros asuntos culturales son una distracción, un espectáculo circense de demócratas y republicanos. Esta “polarización” se repite en todas las elecciones norteamericanas, que siempre promueven temas sensibles que dividen a los norteamericanos y al mundo como una estrategia de marketing político. Los candidatos quieren aparecer como los verdaderos defensores de la nación, la familia, la vida y las fuerzas armadas, y mantienen el conflicto cultural e ideológico para ocultar los problemas económicos de la inmensa mayoría y conservar la estructura de poder intacta.
Barack Obama fue la esperanza de millones de migrantes; sin embargo, fue el presidente norteamericano que más latinoamericanos expulsó, por eso los líderes latinos lo llamaban: “Deporter in chief” (deportador en jefe). Cuando llegan al poder, las promesas electorales se diluyen y casi siempre las diferencias entre demócratas y republicanos no son tan grandes, y en medio de la encarnizada lucha política siempre armonizan intereses.
Demócratas y republicanos saben que la guerra es un negocio y un instrumento de poder que promueve la industria armamentística norteamericana. Ambos partidos están subordinados a sus intereses. La guerra se convierte en una extensión de las políticas económicas imperiales; es un medio para asegurar mercados y recursos naturales en beneficio de empresas y corporaciones aliadas al poder, independientemente de que el gobierno de turno pontifique sobre los valores de la democracia, la libertad o las “amenazas” a la seguridad nacional como justificación de su política imperial.
La diferencia esencial entre el neoliberalismo global de Harris y el capitalismo nacionalista de Trump es la forma de administrar el poder, más que por principios económicos o sociales. Aquellos ilusos que ven diferencias entre Trump y Harris son víctimas de la gran maquinaria de prensa y marketing político. No se dan cuenta o no quieren ver que el imperialismo norteamericano es una realidad, un hecho económico, social y político que se impone a las buenas o a las malas. Nada cambiará en el mundo gane Trump o Harris.
Un acontecimiento importante en el primer cuarto del siglo XXI es el regreso del Partido Cívico OBRAS (PCO), inscrito oficialmente en el registro de Organizaciones Políticas del Jurado Nacional de Elecciones el 15 de julio del 2024.
A continuación, presento los antecedentes históricos de este vigoroso, moderno y vigente partido político peruano:
1.- La visión peruanista de Ramón Castilla y Marquesado, antepasado de Ricardo Belmont Cassinelli.
2.- La crítica patriótica de Manuel González Prada y la mística militante de las luchas sociales del siglo XIX y XX.
3.- La laboriosidad de Alejandro Belmont Marquesado y la responsabilidad social de Augusto Belmont Bar.
4.- El programa periodístico “Habla el Pueblo”, los principios de RBC Televisión y la gestión municipal del alcalde Belmont (1990-92 y 1993-95).
5.- La filosofía estoica (naturaleza – ciencia) y la disciplina espartana.
En exclusiva, desde la Revista Lima Gris, en próximas ediciones abordaremos puntual y exhaustivamente cada uno de estos antecedentes históricos. Por ahora, y a modo de introducción, solo quiero dar una visión de conjunto sobre el PCO, auténtica y completa organización partidaria, que tiene todos los pergaminos y requisitos de un partido político para el Perú y que invita hoy a otras denominaciones a dejar atrás la condición de clubes electorales, vientres de alquiler o clisés caudillistas.
El regreso del PCO encarna y representa un hecho refundacional del sistema de partidos políticos en el Perú, frente, precisamente, al vacío, cierre y a la claudicación de los partidos tradicionales. Paradójicamente este proceso de recambio en los partidos políticos se inició con el triunfo electoral de Ricardo Belmont en noviembre de 1989, quien lideró al entonces Movimiento Cívico OBRAS, y fue el primer outsider en América Latina, venciendo en las ánforas al APRA, Acción Popular, el PPC, al Movimiento Libertad de Mario Vargas Llosa (FREDEMO) y la Izquierda Unida, casta de políticos trasnochados del siglo pasado.
Pero ese proceso de regeneración partidaria se frustró con el golpe del 5 de abril de 1992, pues este atentado contra la democracia sirvió para que el fujimontesinismo instalara una mafia en el poder, con un “nuevo perfil” de “político” y un “nuevo perfil” de “partido”, hechos a la medida para corromper al Estado peruano, a sus funcionarios, a los medios de comunicación, a las encuestadoras y gobiernos locales. Ese “nuevo perfil de político” se promovió por el fujimontesinismo y sobrevive hasta el presente, por más de 30 años, y debe acabar.
En efecto, entre otros hechos, esa dictadura mafiosa destruyó totalmente el sentido, el concepto, la definición y la institucionalidad de los partidos políticos, los que fueron reemplazados por los actuales clubes electorales, por los vientres de alquiler, por las camarillas y las argollas burocráticas dentro del Estado peruano, logrando negativamente que no haya líderes en la nación sino jefes de mafias, seudo señores feudales y capitostes que con su ambición y codicia han causado el caos del presente, la delincuencia callejera y la corrupción generalizada.
Para acabar con el actual sistema corruptor, que hace del Estado un ente fallido, se requiere, entre otras cosas, el liderazgo de verdaderos partidos políticos y es en este trance en el que reaparece OBRAS, partido político nuevo (y viejo a la vez), lo cual lo hace más interesante y experimentado al portar las banderas de una gran transformación en el Perú y el inicio de una segunda República.
En suma, es justo y oportuno que las nuevas -y las pasadas generaciones- pongan su granito de arena para acabar con los politicastros metidos en la res publica, aquellos que hoy regentan un poder abusivo y que llegaron después del golpe del 5 de abril de 1992, pues ese perfil de “político” es el que ha destruido las instituciones y dentro de ellas quedaron desfasados los partidos políticos.
Por eso, con el PCO se abre un camino a los líderes de verdad, a los emprendedores y a las organizaciones sociales responsables y serias, aquellas con antecedentes históricos, con doctrina, filosofía, ideología y planes programáticos, donde el Perú esté primero y no los falsos caudillos o “señores feudales”, porque estos solo han defraudado y traicionado a millones de peruanos.
Un día como hoy hace 244 años el curaca de Tungasuca y Pampamarca Túpac Amaru II fue el pionero de una revolución que le dio un duro golpe al sistema virreinal en lo que hoy es Perú. Fue como un anuncio preliminar a la Revolución Francesa que estalló nueve años después, en 1789. José Gabriel Condorcanqui, Túpac Amaru II como descendiente de la nobleza inca, vivía en confort y gozaba de bonanza económica como un prominente comerciante de transportes. Su niñez tuvo los privilegios de la buena educación y estudió en la universidad San Marcos, enfatizando la predilección por lo criollo, pero también tuvo destreza para los protocolos españoles que sabía complementar con glamorosos vestidos ibéricos.
Sin embargo, cuando la corona española a través del corregidor Antonio de Arriaga intervino sus prósperos negocios y le impuso un excesivo incremento de los pagos de rentas, el curaca reclamó con vehemencia, aunque sin mayor éxito, porque de todas maneras se elevaron las alcabalas y se incrementó el abuso hacia los indios con trabajos forzados en las minas. Ante la indolencia de Arriaga, el 4 de noviembre de 1780 Túpac Amaru se levantó en armas y lo envió a la horca y tras meses de batallas, él y su esposa fueron capturados y ejecutados el 18 de mayo de 1781 en la Plaza de Armas de Cusco, en presencia de una muchedumbre.
Se dice que aquella rebelión marcó el destino de nuestras tierras y que reivindicó al indio por enfrentar a un sistema colonial con feroz despotismo; incluso luego se incorporaron más precursores de la “libertad” que con el costo de sus vidas supieron poner los pilares de la ansiada independencia. Ha transcurrido más de un bicentenario de esta heroica muerte, y al parecer ya no significa un aliciente para las nuevas generaciones y tampoco genera inspiración. Atrás quedó el surgimiento de precursores comprometidos con su patria y actualmente, por lo menos en el ámbito político, el siglo XXI nos ha dado una cantera de oportunistas y vendepatrias. Evidentemente, este tipo de canallas siempre existieron, durante la colonia, incluso en la coyuntura independentista y también con la instauración de la república; sin embargo, hoy proliferan en serie, e incluso se cobijan en Palacio de Gobierno.