Connect with us

Opinión

¿Sólo Porky salvará al Perú?

Avatar photo

Published

on

Rafael López Aliaga está imbatible y la ola celeste crece a ritmo de coronavirus. Sus adversarios, al ver esta repentina subida, lo ridiculizaron motejándolo como Porky; pero López Aliaga chapó el guante y desde sus redes se autodenominó “El Tío Porky”. Sin embargo —fuera de la apariencia porcina, que el candidato ha sabido capitalizar— no hay nada más lejos de Porky que López Aliaga. Porque el cerdito bonachón, apocado y tartamudo poco tiene en común con el candidato celeste. Además, López Aliaga no quiere ser Porky sino Donald Trump. Y —como Trump— está arropado por cónclaves religiosos, cuenta con el respaldo de empresarios inescrupulosos y es defendido por turiferarios que se alucinan escuadristas. Y, tal como Trump, ya encontró a su único enemigo: el comunismo.

(Para escribir sobre López Aliaga hay que utilizar el lenguaje memo: es decir, las clasificaciones que se han vuelto moneda corriente en el discurso político contemporáneo: progres, caviares, fachos, religiosos, DBA, comunistas, etc.)

La arremetida celeste en las encuestas va generando sinsabores, disneas, subida de presión y amargura en los sectores progresistas del país. Las banderas de alerta —contra la ola celeste— se izan con temor. Los bien pensantes, la avant garde, la crema y nata del pensamiento progresista no se explica cómo ni cuándo ni el porqué. ¿Qué hicimos mal, dicen? ¿En qué momento, susurran? Y hacen lo que mejor saben hacer: enfrascarse en discusiones absurdas, en reivindicaciones estúpidas, en polémicas cojudas refundidas en revistas indexadas.

Causa gracia la línea estratégica que ha seguido la progresía nacional ante este fenómeno: han pasado de la ignorancia olímpica y de la burla condescendiente a la sorpresa, al terror, a la indignación. Y es que ahora comienzan las recriminaciones: no debimos ignorarlo, dicen. Como todo virus, la ola celeste va tomando cada vez más fuerza.

¿Por qué sube López Aliaga en las encuestas?, se preguntan los politólogos asalariados, los imitadores de Duverger, los discípulos de Norberto Bobbio. Es el pensamiento facho, el retorno a la Edad Media, el regreso de Jurassic Park sin Spielberg, declaran. La era Mezosoica ad portas del bicentenario, dicen los corifeos de lo políticamente correcto. Y quizás estos académicos de balcón encontrarían la respuesta si abandonaran sus mullidos asientos y se dieran un par de vueltas por la realidad. Ahí donde prolifera el votante de López Aliaga, ahí donde se encuentra el germen de su arrastre popular.

Se ha hablado hasta la saciedad del cambio de Constitución. Y las motivaciones para llevar a buen puerto este mecanismo —que no es reivindicado por López Aliaga— tienen mucho que ver con el endose a su pensamiento. En el Informe de Opinión llevado a cabo por el IEP, en diciembre del 2020, se veía claramente que el grueso de la población no tiene ideales progresistas. Muy por el contrario, los principales cambios que haría el ciudadano peruano —con relación a un cambio de Constitución— según la encuesta, están referidos al empoderamiento de la política de mano dura, más intervención en la economía y el fortalecimiento de los valores cristianos y de la familia tradicional. La agenda ideológica del común de los peruanos es más conservadora que progresista, como se puede deducir. Es obvio que darse cuenta de esto no necesita —necesariamente— de una encuesta: basta salir a la calle y comerse un ceviche. El dinosaurio siempre estuvo ahí. Así las cosas, sólo a quienes no conocen la realidad peruana —excepto por documentales y revistas académicas— podría parecerles extraña la subida de López Aliaga en los sondeos.

Y es que López Aliaga es la encarnación del hombre pragmático:

¿Qué, hay políticos corruptos? Tenemos que meterlos a la cárcel, inmediatamente. ¿Qué, Odebretch le robó al estado? Inmediatamente se pide su expulsión. ¿Pero y las colaboraciones eficaces que comprometen a políticos? No interesa, se les mete presos. ¿Pero cómo se les mete presos si se expulsa a Odebretch y ya no hay colaboración eficaz? Es que se tienen que crear mecanismos.

¿Qué, alguien quiere que se le practique la eutanasia? ¿Por qué tanto trámite? Que ponga buena música, que se corte las venas y se mate. O mejor aún, que se tire de un edificio.

¿Qué, hay niñas violadas? Entonces yo las llevo a mi hotel, las cuido nueve meses y luego vemos qué se hace con el niño. Y van a tener piscina y lujos.

En conclusión: López Aliaga se pasa las instituciones por el forro.

Esta encarnación de hombre pragmático conecta bien con los electores que —a diferencia de López Aliaga— no han tenido el tiempo ni los recursos para profundizar en el conocimiento y práctica de las instituciones. Y esto es algo que López Aliaga sabe capitalizar muy bien. El pensamiento facho, autoritario y conservador arma su orgía con esta clase de insumos: de ahí se explica su repunte en las encuestas. Le da al pueblo lo que quiere, conecta con el pensamiento popular: si el pueblo fuera un zapato, López Aliaga sería la horma.

¿Y los progresistas? Se saben divorciados del pueblo, pero quieren escuelearlo, decirle qué está bien y qué está mal. No podría ser de otro modo. ¿De dónde salen los proyectos, las consultorías, los estímulos a la cultura? Hay un tipo de progresismo que necesita del pueblo —aunque reniegue de él— porque medra a su costa. Y López Aliaga es solamente la encarnación del hombre pragmático. Si este tipo de progresismo fuera sincero afirmaría —sin ambages— que el pueblo tiene un componente facho, conservador y autoritario. Pero no lo harán porque el bitute se los impide, porque viven y engordan del pueblo. Para piñata tienen a López Aliaga, que es el pueblo materializado en la figura de un empresario inescrupuloso y avieso.

Porque el ciudadano común es un López Aliaga en pequeño; esa es la única ideología de nuestra sociedad: la pendejada. Y López Aliaga es el pendejo máximo: el inescrupuloso. La derecha autoritaria ya fichó por él y su maquinaria de campaña quiere convencer a los indecisos que él es la voz del pueblo. Que el comunismo ha destruido todo, que los ideales del progreso son pamplinas, que el darwinismo económico está insertado en los genes. Que solamente él puede sacar al país del atoro. Como si el Perú fuera su sucursal y los peruanos sus peones. Como si el Perú se apellidara Rail. Como si ser asquerosamente rico fuera credencial de honestidad. Y López Aliaga se siente el Donald Trump peruano, un Bolsonaro chiclayano, Le Pen de Miraflores. Solamente un desavisado podría considerar que López Aliaga representa el cambio, el juego limpio de la economía o el progreso de la sociedad. Solamente alguien que cree que los chanchos vuelan podría creer en el verbo atolondrado de López Aliaga. Y Porky no necesita un Red Bull, sino una manzana en la boca.

Comentarios

Opinión

Los Rolex del comunismo

Así siempre fueron los comunistas-socialistas. Siempre envidiaron los lujos y las exquisiteces del capitalismo a expensas del pueblo y ya instalados en el poder, llegan a exhibir la indolencia que “traen de fabrica”. Ellos alardean y muestran los artilugios de lujo que desde su perspectiva se merecen porque dizque lucharon para eso.

Avatar photo

Published

on

¡Su verdadera ideología es la contradicción, el embuste y la incoherencia!

Se erigieron como los salvadores del mundo y utilizaron su incesante lucha por la igualdad de sus pueblos, y no pararon hasta llegar al poder con su embustero mensaje de justicia social.

En pleno siglo XXI no es novedad que las teorías de Marx y Engels nunca se pusieron en práctica por los señores de izquierda que llegaron al poder en los gobiernos de Latinoamérica en el siglo XX y XXI.

El trasnochado manifiesto comunista se basó en la abolición de la propiedad privada; es decir, la expropiación; los impuestos productivos para poder vivir del Estado; la abolición del derecho a herencias; la confiscación de la propiedad a inmigrantes y no dejar que venga la inversión extranjera; la centralización de créditos, es decir, solo podías endeudarte con el Estado; la centralización de los medios de comunicación; la expansión de empresas estatales; la distribución igualitaria del trabajo; y la educación gratuita.

Así es la ideología de izquierda, en su fase socialista.

Por lo tanto, ¿Alguien puede ver la relación de un reloj costoso de procedencia extranjera con la ideología austera de compartir el bien común?

Desde hace algunas décadas se les cayó la careta a los justicieros sociales que hablaban en contra del capitalismo mercantilista; pero que en sus vidas cotidianas y a escondidas, rendían tributo y gozaban de los placeres y lujos como consumados capitalistas.

Así siempre fueron los comunistas-socialistas. Siempre envidiaron los lujos y las exquisiteces a expensas del pueblo y ya instalados en el poder, llegan a exhibir la indolencia que “traen de fabrica”. Ellos alardean y muestran los artilugios de lujo que desde su perspectiva se merecen porque dizque lucharon para eso.

La historia nos lo ha restregado; sin embargo, se sigue eligiendo a aventureros populistas que solo pretenden el robo, el poder desmedido y el enriquecimiento ilícito, tal como sucedió en el mundo entero, en diversos regímenes durante las décadas del 50, 60 y 70. Desde África del norte, hasta América del Sur.

Estos revolucionarios de turno interpretaron la mejor de sus “dramaturgias” en sus vidas, hasta lograr el objetivo deseado: el poder, para así restregarles en la cara a los más incautos, de que el confort obsceno que sostiene sus vidas ha sido gracias a la compra de multitudinarias almas que coadyuvaron a sus investiduras, porque al final es y siempre será el pueblo quien les costee las onerosas cuentas. 

En tanto, los lujosos relojes Rolex, se han convertido en la marca de los comunistoides

Fidel Castro (exdictador de Cuba)

Fidel Castro, fue el más explícito, porque ocasionalmente, siempre se le vio portando relojes de la marca Rolex. Primero utilizaba un Rolex GMT-Master referencia 6542. Posteriormente, mostró su Rolex GMT- Master referencia 1675, con un bisel completamente en color negro.

El Che Guevara (exguerrillero de la revolución cubana)

Cuando el Che Guevara fue capturado el 8 de octubre de 1967, por varios soldados del ejército boliviano comandados por el general Gary Prado; luego de trasladarlo a la escuela de La Higuera, antes de que lo ejecutaran, el Che le confesó al general Prado que tenía dos relojes Rolex, (uno del guerrillero cubano Tuma y el otro de él) y Prado se los guardó.

Con el paso del tiempo Prado confesó que el reloj de Tuma lo entregó a un militar boliviano y él se guardó el Rolex del Che Guevara.

Hugo Chávez (exdictador de Venezuela)

El crítico de modas que presidia el Salón de la Moda de Caracas, Roland Carreño, siempre mostraba las tendencias de moda de los venezolanos ricos y tampoco pudo omitir la riqueza que ostentaba la revolución bolivariana.

”Chávez es el presidente más narcisista que hemos tenido”, sostuvo Carreño, como editor de las páginas de sociedad del diario El Nacional de Caracas.

Entre los relojes preferidos de Chávez están Vacheron Constantin, Rolex y Audemars Piguet.

Nicolás Maduro (dictador de Venezuela)

Nicolás Maduro, nunca ocultó sus gustos exquisitos. Él apareció en la cumbre de la Celac, realizada en septiembre de 2021 en México, luciendo un reloj Rolex.

Rafael Correa (exdictador de Ecuador)

Rafael Correa, ante la evidencia que mostraba la prensa internacional sobre sus exquisitos gustos de lucir costosas joyas, tuvo que subastar en $ 15.550 dólares el reloj Rolex Oyster de acero y oro amarillo, que le obsequió el Emir de Qatar.

Andrés Manuel López Obrador (presidente de México)

Pese a que AMLO predica la igualdad entre los mexicanos y pide austeridad, él fue captado utilizando un reloj suizo de IWC Schaffhausen. La pieza hecha en suiza, incluye 25 rubíes dentro de la caja de acero fino y cuesta alrededor de de 4 mil 700 euros.

Cristina Fernández de Kirchner (expresidenta de Argentina)

En plena crisis económica en el país del sur, la exmandataria Cristina se presentó el 18 de julio de 2021 en los tribunales con un Rolex Pearl Master, de oro blanco de 18 kilates, bisel engastado de diamantes y esfera embellecida con diamantes y cuyo costo es de US$35 mil dólares.

En aquella ocasión, ella fue a declarar en un proceso judicial por corrupción con el costoso reloj incrustado en diamantes en su muñeca.

Evo Morales (expresidente de Bolivia)

Evo Morales, tampoco desaprovechó de mostrar su Rolex con correa de finísimo cuero de Cocodrilo.

Dina Boluarte (presidente de Perú)

La señora Dina Boluarte, manifiesta que colecciona relojes costosos; sin embargo, desde 2018 hasta 2021 en sus declaraciones juradas no incluyó el Rolex Datejust que actualmente ella luce en las ceremonias protocolares y que estaría valorizado en US$15 mil dólares.

A pesar que la Ley N° 27482 establece que todo servidor público del Estado está obligado a presentar una declaración jurada de ingresos, de bienes y rentas que superen las 2 UIT; sin embargo, la aún mandataria habría mentido, porque señala, que su joya es de antaño, y según, el representante de Perú Watches, David Sun, el Rolex que luce Boluarte es moderno; es decir, es un modelo que surgió desde el año 2013 y está manufacturado en acero y oro y con correa Oyster.

Comentarios
Continue Reading

Opinión

Presentan los dos tomos de “Las mujeres en el Perú”

Lee la columna de Edwin Sarmiento

Avatar photo

Published

on

Por Edwin Sarmiento (*)

Este miércoles 20 de marzo, se presentará los dos tomos de “La mujer peruana a través de los siglos” de la pionera del feminismo, Elvira García y García. Será a las seis y 30 de la tarde, en la Galería de Artes Visuales del Centro Cultural Ccori Wasi de la universidad Ricardo Palma, Av. Arequipa 5198, Miraflores. En los párrafos que siguen me ocupo de esta verdadera joya bibliográfica. La cita es imperdible.

Tengo en mis manos una joya bibliográfica. Se trata del libro “La mujer peruana a través de los siglos” de Elvira García y García. Es una publicación en edición facsimilar en dos tomos (867 pp.) Realmente un lujo no sólo por la belleza y pulcritud de su diseño, responsabilidad de la poeta Marita Troiano, sino por su contenido. Elvira García y García fue una eminente educadora y escritora que nació en Lambayeque en 1862 y murió en Lima en 1951. Fue una mujer luchadora para su tiempo, logrando romper con muchos mitos que sobre la mujer existía en una sociedad fuertemente machista como fue la nuestra. Como educadora introdujo conceptos y principios que ya empezaban a ser liberadores para la enseñanza de las mujeres. Se recuerda que ella incorporó el curso de educación física en la enseñanza de sus alumnas, provocando el inmediato rechazo de los padres de familia por considerarlo inconveniente y peligroso para sus hijas, optando por retirarlas del colegio.

Ella, sin embargo, no se dio por vencida. Continuó con su lucha por ver a las mujeres de su época, liberadas de esa especie de esclavitud mental que les reservaba sólo tareas del hogar, dentro de un contexto de sumisión al varón a quien no debían contradecir. Su prédica de una pedagogía liberadora no sólo se limitó a las aulas en los centros educativos, sino que saltó, en forma de alegatos, comentarios, semblanzas, biografías y opiniones, a las páginas de los diarios y revistas que entonces se publicaban en Lima. Y luego vendría una larguísima radiografía del aporte de valerosas mujeres en esta línea de empoderamiento de la mujer que forman parte de esta galería de escritoras, poetas, educadoras, académicas, científicas, en fin.

Los artículos y publicaciones sobre la mujer peruana de Elvira García y García, han sido publicados por la Universidad Ricardo Palma y el capítulo peruano National Museum of Women in the Arts con la edición de Carpe Diem, bajo la dirección editorial de la notable poeta Marita Troiano. Mención aparte se merece la participación del exrector de la Ricardo Palma, Iván Rodríguez Chávez, quien, en vida, alentó este valioso esfuerzo editorial que resulta un lujo tenerlo con uno. Quien lo pueda adquirir, en las principales librerías del país, no se arrepentirá de haberlo hecho.

“A través de ‘La mujer peruana a través de los siglos’, Elvira García y García, docente y estudiosa de a realidad nacional, cumplió con la titánica labor de compilar y observar trescientas biografías de mujeres peruanas pertenecientes a diversas épocas, distintos espacios y diferentes clases sociales en nuestro país. Y en cada una de las páginas de sus dos volúmenes podemos reconocer su dedicación y el principio moral que en todo momento la asistió al revocar cualquier tipo de exclusión, además de un genuino interés por dejar constancia que la mujer peruana siempre tuvo una valiosa y decidida presencia en cada período de nuestra historia”, señala Marita Troiano, responsable de esta pulcra y bella edición.

(*) Periodista, cronista.

Comentarios
Continue Reading

Opinión

Dina y el retroceso cultural

Lee la columna de Edwin Cavello

Avatar photo

Published

on

La presidente Dina Boluarte cometió un grave error nombrando a la abogada Leslie Urteaga Peña, como ministra de Cultura el 21 de diciembre de 2022. Sus asesores se aprovecharon de la notable ignorancia cultural de la mandataria para meter al gabinete de contrabando a un personaje cuestionado por Contraloría. En la larga lista de informes contra Leslie Urteaga, se detalla que, como funcionaria del Ministerio de Cultura, omitió sistemáticamente la protección del patrimonio e inclusive el cobro de las multas a las empresas privadas.

También Urteaga Peña, se hizo famosa tras aparecer en un video bailando con Richard Swing, luego de haber negado días antes que lo conocía. Su permanencia en el MINCUL se asentó durante el gobierno del investigado Martín Vizcarra, cuando fue nombrada viceministra por la exministra Sonia Guillén, —también involucrada en la contratación de Richard Swing—.

Tras 14 meses como ministra de Cultura, Leslie Urteaga Peña ha logrado un retroceso cultural para el país. Además, sigue demostrando su favoritismo hacía las empresas privadas. Como ministra —a pesar de no dar la talla para el cargo—, fue la que impulsó y defendió la oscura contratación de la empresa Joinnus de Credicorp. También pretendió eliminar el Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos (CIRA) y aún no logra inaugurar el Museo Nacional del Perú (MUNA), un elefante blanco que costó casi 600 millones de soles. Ese museo durante la gestión de Leslie Urteaga, sufrió sustracción de baterías por casi un millón de soles, inundaciones, apagones y el desplome de los baños. A pesar de eso, Dina la sigue sosteniendo en el gabinete.

Y si recordamos lo de Cusco, la ministra provocó una de las más grandes crisis en el sector turismo de los últimos años pretendiendo implantar a la fuerza la venta de boletos a través de Joinnus. No solo el país se ha dado cuenta de la mediocre gestión de Leslie Urteaga en la cartera de Cultura. El jueves pasado el Congreso de la República mediante una interpelación, fue testigo de la ineptitud de la ministra de Cultura.

Ya le han dicho al premier Gustavo Adrianzén que, si quiere pedir la confianza, tendrá que cambiar a los ministros interpelados, de lo contrario Adrianzén se convertirá en ‘el breve’. Lamentablemente, Dina Boluarte no sabe elegir ministros, sus neuronas no le dan para tanto. Queda claro que con este gobierno seguiremos viviendo un retroceso cultural.

(Columna publicada en Diario UNO)

Comentarios
Continue Reading

Opinión

Dos décadas sin el humor de Sofocleto

Recordando al periodista, escritor y caricaturista más leído del siglo pasado.

Avatar photo

Published

on

Luis Felipe Angell de Lama, bajo el seudónimo de Sofocleto (Paita, 12 de abril de 1926-Lima, 18 de marzo de 2004) le dio al periodismo lo que actualmente los egresados de las facultades de comunicaciones no aprenden —esa pluma insolente, poética y humorística—. La ironía de los artículos de Sofocleto, nos reveló que el peruano promedio es más pacato que el cura de la esquina.

Aquella extirpe de citadinos que se autodenominaban “criollos”, no eran más que una tira de cojudos que se ufanaban de ser los mas pendejos. Su publicación “Los cojudos”, es un acertado libro que define con agudeza al cholo cojudo de profesión, mucho antes de que surgieran los actuales cojudignos.

El periodismo nació en la calle ¿qué facultad ni qué ocho cuartos? y cómo no, si aprendió a leer a los tres años y cuando ingresó casi adolescente a la redacción del otrora decano, tuvo que ir a comer anticuchos con los faites del Rímac enfrente de la plaza de Acho, o a comisionar con la tombería la “cosida” de un nuevo “frío” en el Llauca. Incluso, recogió la cabeza de una mujer decapitada para entregársela a los peritos forenses. El joven Sofo era una especie de Carl Kolchak que resolvía el misterio de los sucesos más insólitos que luego plasmaba en sus textos. —Qué tal mano para llegar a escribir hasta ocho crónicas diarias—.

“Yo he vivido muy intensamente el periodismo de muchacho, de modo que a los 17 años yo tenía una experiencia descomunal en la vida”.

Eso sin contar, las incursiones a los legendarios burdeles de Lima. Sofocleto y Jorge Veguita, pisaron Huatica, el corralón de México y otro chonguito de Breña, antes de que Novella inaugure el Trocadero. De ahí el “cayetano” y la “canchería” adquirida, no por haber buscado sexo, sino, por las interesantes conversas con las damas del relajo y las partidas nocturnas del “golpeado” que jugaba con la “gente” del cerro El Pino.

Sofocleto decía que “el humor es una de las cuatro patas de la sociedad” y con ese oficio escribió más de 12 mil sonetos, 2.538 décimas y 50 mil sinlogismos. Él falleció en Lima, un día como hoy, hace 20 años, el 18 de marzo de 2004.

(Columna publicada en Diario UNO)

Comentarios
Continue Reading

Opinión

Partido Cívico Obras a puertas de inscribirse en el ROP

Lee la columna de Rafael Romero

Avatar photo

Published

on

Por Rafael Romero

Hay un extraordinario valor diferencial en el Partido Cívico Obras respecto de otras organizaciones políticas que quieren participar formalmente en los procesos electorales. Pero ilusiones aparte, no todas esas organizaciones son originalmente partidos políticos tal como la teoría y la praxis democráticas definen y aconsejan.

Es más, aquellas proto-organizaciones políticas, por más buena voluntad que pongan sus promotores, no tienen un líder de masas, carecen de un fundador auténtico y tampoco exhiben un ideólogo con reconocida trayectoria en por lo menos la historia política del último medio siglo. El Partido Cívico Obras, por fortuna, no tiene esos problemas.

El punto es que los grandes procesos políticos, históricos y de Estado requieren de visión y misión claras, de filosofía, ideología y doctrina, así como exigen elaborar y ejecutar un plan máximo o mínimo, pero plan al fin sobre el Perú, pero esas cualidades no las tienen los advenedizos así hayan llegado a puestos de poder, como los Vizcarra, los Boluarte o los Acuña.

El Perú ya no está para “calichines”, como esos ex funcionarios de tercer nivel que hoy corren firmas y que se creen con las mejores credenciales para llegar a Palacio, incluso acumulando a cuestas denuncias tras su paso sinuoso por la administración del Estado. Ya decía Haya de la Torre, a Palacio llega cualquiera, comprándolo con dinero o conquistándolo con fusiles, pero lo más difícil es llegar a la conciencia del pueblo.

Ahora bien, más allá del legalismo, de la burocrática letra chiquita y la tramitología del registro, como bien lo sabe Fernando Miguel Rodríguez Patrón, funcionario que lo ha visto todo en sus más de 20 años que lleva en el Jurado Nacional de Elecciones, tras egresar de la Pontificia Universidad Católica del Perú, y conoce mucho más no solo a través de su larga trayectoria al frente de la Dirección Nacional de Registro de Organizaciones Políticas (ROP), sino también porque es autor del libro “Partidos Políticos y Reforma Electoral. Perspectivas y propuestas frente a la realidad peruana”, donde precisamente pone de relieve la esencia, el valor y la primacía de la realidad que definen a una organización partidaria y su existencia.

Bajo ese contexto, Rodríguez Patrón resalta la importancia de los partidos políticos y una urgente e inteligente reforma electoral, pero elaborada frente a una realidad tan diversa como la peruana, “a efectos de contar con organizaciones políticas que se comporten como verdaderos canales de mediación de las demandas de la población y que estas se traduzcan en políticas públicas, una vez que sean elegidos sus representantes”, y recalca que los partidos tienen que establecerse como un referente para la ciudadanía.

Por tanto, su planteamiento lúcido busca encontrar “las razones por las que es necesario no solo reformar, sino establecer los aspectos centrales de aquello que se debe reformar, con el propósito de mejorar la calidad de los partidos y movimientos políticos, para generar de este modo condiciones óptimas para el establecimiento de reglas efectivas para la competencia entre ellos, y que estas reglas de juego incidan, positivamente, en la calidad de la democracia y, en consecuencia, posibiliten una mejor calidad de las autoridades electas, así como un escenario con condiciones de gobernabilidad para el desarrollo de una democracia con equilibrios”.

El tema es simple, pero a veces por muy sabido se olvida en la sociedad, sobre todo cuando debería ponerse de relieve que -más allá de los formalismos nacidos en sabihondos escritorios-, la academia caviar erró al presentar, mediante generosas consultorías, una serie de seudo modificaciones a la ley electoral, dizque para evitar que proliferen numerosos partidos, sin prever que el resultado sería opuesto al que esperaban. De modo que se fueron de bruces, pues si sus reformas buscaron reducir la enorme cantidad de organizaciones políticas, la foto final es que su número va a sobrepasar las tres decenas.

Sea como fuere, cualitativamente diferente a esa triste realidad del primer cuarto del siglo XXI, sucede que hoy vuelve, regresa, el Partido Cívico Obras, remozado pero con la misma coherencia que marcó la ruptura con la “casta política” mucho antes que el argentino Milei dijera “pío”, cuyo discurso gaucho parece nuevo para algunos cuando, salvando las distancias de espacio-tiempo, fue Ricardo Belmont quien se constituyó en el fenómeno político que -irónica o paradójicamente- prepararía el terreno en el cual apareció Alberto Fujimori. Es decir, “El Hermanón” inició el concepto “outsider”, derrotando en 1989 a los partidos mesocráticos del FREDEMO (Acción Popular, PPC y el Movimiento Libertad de Vargas Llosa), entre otros.

El hecho concreto hoy, entre el 2023 y lo que va del 2024, es que no se ha visto una experiencia más democrática, más transparente y más respetuosa de la ley que el paso de los espartanos llevando la buena nueva por costa, sierra y selva. Ellos han recorrido los distritos y las provincias de nuestra patria abrazando al hermano, comunicándole las 10 vigas maestras y recibiendo las firmas que la ley exige.

También los espartanos han activado los comités provinciales que la norma legal obliga, y lo han hecho con absoluta probidad a diferencia de otras organizaciones políticas perversas que chantajean al ciudadano y le faltan el respeto cuando le entregan bolsas de fideos o gaseosas heladas a cambio de una firma. Eso es horroroso, tramposo, y los ciudadanos no deberían caer tentados frente a esa clase de politiquería que solo llevará a la nación al despeñadero.

Empero, lo positivo es que, en armonía con la ley, más temprano que tarde el Partido Cívico Obras estará inscrito en el ROP, y su participación electoral, política e institucional será valiosa porque elevará la cultura política y el nivel del debate, sobre todo a través de su compromiso serio que busca la palingenesia nacional, auténticamente popular, liberal y republicana.

El sistema de partidos en el Perú necesita calidad y no cantidad.

Comentarios
Continue Reading

Opinión

Perú pierde 4,4 % de terreno por deforestación

Lee la columna de Raúl Allain

Avatar photo

Published

on

El Perú ha perdido más de 3,4 millones de hectáreas de bosques y selva del 2000 al 2020 debido a la deforestación, lo que significa una reducción de un 4,4 % de su superficie forestal, alertó un informe académico publicado este miércoles.

“Según los mapas de cobertura forestal, la pérdida total de bosques en Perú entre 2001 y 2020 fue de 3.464.829 hectáreas (el 4,4 % de la cobertura forestal peruana en 2000) para todo el país y 114.220 hectáreas en áreas protegidas”, concluye el estudio realizado por Maricel Móstiga, Dolors Armenteras, Jordi Vayreda y Javier Retana.

El informe, “Dos décadas de deforestación acelerada en los bosques peruanos: un análisis nacional y regional” fue publicado por la editorial alemana Springer y alertó que la tasa de pérdida de cubierta forestal peruana aumentó de 115.000 hectáreas por año de 1990-2000, a 125.000 en 2000-2010, y a 172.000 en la última década.

Detalló que las pérdidas de bosques por regiones en estos 20 años se han incrementado progresivamente y que han sido muy diferentes en cuanto al tipo de áreas. La zona más afectada ha sido la denominada como selva no inundable, donde se han perdido 1,9 millones de hectáreas (4,5 % de la región), 649.889 hectáreas en la región de selva inundable (4 %), 817.834 hectáreas de selva alta (4,9 %), 83.134 hectáreas en la región andina (4,4 %) y 9.299 hectáreas de la zona costera (2,2 %).

El Perú tiene la novena área de bosques más grande del mundo, en 2020 contaba con 72 millones de hectáreas, y la pérdida de la superficie forestal se considera la principal fuente de emisiones de carbono en el país. Los departamentos más afectados por este fenómeno son los ubicados en el centro-interior del país y que cuentan con territorio amazónico, Ucayali, Huánuco, Pasco y San Martín, y también la región sureña de Madre de Dios.

El informe alerta que las sequías y los incendios forestales han aumentado en la última década debido al cambio climático y que el desarrollo de infraestructuras viales cerca de las áreas protegidas aumenta las tasas de deforestación y anula parcialmente los efectos protectores.

“El incremento en las tasas de deforestación podría estar relacionado con variaciones en las condiciones ambientales y climáticas, intensificación de eventos climáticos que influyeron en la alteración de la cubierta forestal y aumento en la accesibilidad de los bosques”, concluyó al añadir que también podría estar relacionado con el incremento de las actividades antrópicas (aquellas donde el ser humano interviene haciendo modificaciones a la naturaleza).

Destacó que la deforestación de los bosques tropicales es un problema global importante porque estos bosques albergan un alto porcentaje de la biodiversidad terrestre y desempeñan un papel fundamental en los ciclos globales del carbono y el agua.

“La conversión de los bosques tropicales a otros usos de la tierra contribuye aproximadamente al 20 % de las emisiones de gases de efecto invernadero del mundo y, por lo tanto, la aceleración de las tasas de deforestación tiene impactos dramáticos en el cambio climático global”, afirmó.

Cero deforestación

El ministro del Ambiente, Manuel Pulgar-Vidal, afirmó que el Perú apunta a lograr la meta de “cero deforestación” a 2021, para lo cual implementa una política con diversas medidas, a fin de lograr un equilibrio entre la tala de los árboles y la reforestación.

“Hay una meta que el Perú planteó en 2009 y con ella nos manejamos: que a 2021 tengamos deforestación cero, es una meta neta, es decir, que se reponga aquello que se deforesta”, subrayó.

Comentarios
Continue Reading

Opinión

El corazón indómito de Wong

Lee la columna de Julio Barco

Avatar photo

Published

on

Julia Wong ha muerto. Y se ha ido con ella, uno de los corazones más generosos que conocí en mi vida literaria. Se trata de la gestora del proyecto Festival de Poesía Chepén Chepén y de una de las voces más notables de poesía de los últimos tiempos, pero también de una amiga cómplice, entrañable, que jamás tuvo titubeos a la hora de apoyar mi obra, considerando que cuando nos conocimos yo era un escritor muy joven y ella ya era respetaba en este país. Y por eso, año a año, unía todos los multiversos para poner en acción este trabajo de promoción cultural en el norte del Perú.

     Nuestro último encuentro tuvo lugar en el colegio Juana Infantes Vera, en el barrio de El Agustino, donde yo daba un taller de Creación Literaria. Wong me contó que llegó en microbús, procurando no perderse en las arterias salvajes de Lima. Yo sabía que ya estabas enferma, y me sorprendió tu talante para dar una charla a un grupo de jóvenes de mi barrio, que te oyeron atentos y luego te pidieron, por favor, una firmita. Teníamos el plan de iniciar unos talleres de libros cartoneros y editar dos de nuestros nuevos libros. Me acuerdo que me dijiste que podíamos llevarlos a un espacio en el Callao. Yo encantado. Esto quedó como proyecto.

     Su poética no era para nada una poética lírica, ni un refugio de alguna ideología, era, en esencia, una personalidad. Era, en esencia, la obra de una mujer inteligente, sensible y con el arte en las venas. Sus poemarios “Pessoa en Wong“, título que dejó herido a tantos escritores envidiosos, es un camino nuevo, de hibridez literaria; “Tequila Prayets“, ya demuestra que su obra era una mezcla de lenguajes; “Un vaso de leche fría para el bardo” es un notable cuadro de gelidez alemana; tu último trabajo, “11 palabras” apareció junto a mi obra “El nuevo fuego” en el recuento del 2023 de Ricardo González Vigil.

     Te vas Julia, un año de largo verano. Y nos dejas en esta ciudad caótica y hermosa como tu corazón indómito.

Comentarios
Continue Reading

Opinión

A cuatro años de la cuarentena más larga de la historia en nuestro país a causa del Covid-19

El lunes 16 de marzo del 2020, el ex mandatario Martín Vizcarra anunciaba lo que sería una de las mayores catástrofes sanitarias en todo el planeta.

Avatar photo

Published

on

Un día antes que el planeta entero ingresara a un estado de coma permanente, los peruanos disfrutaban lo que sería el último domingo del año 2020 en libertad; yendo al parque con sus hijos, recibiendo visitas, o pasando una agradable tarde en la playa. Las noticias sobre un mortal virus iban rondando por los países vecinos y era cuestión de horas o días en que el Perú empiece a tomar precauciones.

Fue el ex presidente Martín Vizcarra, acompañado de todos sus ministros, quien anunciara cerca del mediodía el inicio de la cuarentena a nivel nacional. En un principio por 15 días, luego otros 15 días más, y así sucesivamente hasta que ya se volvió cotidiano verlo desde nuestros televisores, protegidos entre cuatro paredes.

Ese 16 de marzo, horas después de que se decretara la cuarentena, miles de personas corrieron a los supermercados o bodegas del barrio para abastecerse de alimentos y sobre todo de papel higiénico. Colas interminables se veían en las calles, o a personas vaciando los estantes de conocidas tiendas por departamento.

Personas entraron en pánico ante un posible desabastecimiento. Lo primero que fueron a comprar fue papel higiénico. Foto: archivo diario Correo.

Los días pasaban y el pánico fue en aumento cuando los noticieros pasaban imágenes de personas desvaneciéndose a mitad de la calle; decenas de cuerpos desparramados sin que nadie se atreva a tocarlos por temor a contagiarse. Todo parecía una película de ciencia ficción.

En los hospitales la gente rogaba por una camilla para algún familiar convaleciente. Ya adentro el calvario no terminaba porque se requería de un balón de oxígeno, los cuales eran vendidos a precios estratosféricos, haciendo millonarios a muchas personas de la noche a la mañana. Se podía lucrar con el dolor y el sufrimiento, y eso no es ajeno el ser humano.

Ir a una clínica era como colocarse una soga al cuello. Se podía salvar la vida del ser querido, pero uno terminaba con una cuantiosa deuda imposible de pagar a corto plazo. Muchos de esos centros privados de salud supieron sacar hasta el último centavo a los desesperados familiares del paciente, vendiéndoles un sencillo panadol a un precio hasta cien veces por encima de su valor. Todas esas investigaciones quedaron convenientemente en el olvido.

Las calles lucían desérticas, como olvidadas en el tiempo. Los automóviles no circulaban, el aire se sentía más puro, y los animales empezaban a recobrar lo que por derecho natural era suyo. En tanto, millones de familias peruanas intentaban matar el aburrimiento contando historias o descargándose algún juego de Internet. Todo era rutina y muchas parejas terminaron por divorciarse.

Así lucían las calles de la ciudad durante la cuarentena. Foto: archivo Andina.

Las semanas pasaban, los meses, las noches de los cacerolazos y los días donde hombres y mujeres se tenían que turnar para ir al mercado, para que luego de las compras sean sometidos a una depuración sanitaria a base de jabón y alcohol.

Miles de personas perdieron la vida, y ahora, en menor cantidad, la siguen perdiendo solo que ya no resulta impactante ni relevante. Ahora nos encontramos relativamente a salvo gracias a las vacunas, hasta que aparezca una nueva cepa más letal que nos obligue a encerrarnos nuevamente, como hace cuatro años.

Comentarios
Continue Reading
Advertisement

LIMA GRIS TV

PUBLICIDAD

PRNEWS

PARTNER

 

CONTACTO

Síguenos en Twitter


LIMA GRIS RADIO

Trending