El ministro de Cultura se presentó en la comisión correspondiente a su sector. Lo que comenzó como una disertación de la situación de los museos y bibliotecas, termino siendo una oportunidad desperdiciada en pos del figuretismo congresal.
«Tenemos 28 mil zonas arqueológicas en todo el país, ni todo el presupuesto general de la nación alcanzaría para intervenir todas las zonas prehispánicas. Eso no significa que no prioricemos el caso», refirió el ministro ante reclamos de la situación de zonas arqueológicas en provincias por motivo de las lluvias, como es el caso de Vilcashuamán.
Refirió también que México tiene un mayor presupuesto, en el mismo sector, de 3200 millones de dólares, mientras Perú solo tiene 740 millones de presupuesto para cultura.
Víctor Flores «si los museos no son visitados, son almacenes»
El congresista Víctor Flores mencionó la necesidad de que se busque autofinanciamiento, también refirió haber visitado el museo de Pachacamac al ingresar como congresista y haber regresado este año sin haber habido ningún cambio.
También refirió Flores haber visitado las bibliotecas públicas y su conclusión fue dilapidante sobre el futuro de las bibliotecas, “he ido y me parece conversar con una especie en extinción”. También mencionó una inquietud a raíz de la emisión del programa Rey con Barba según el cual el MINCUL estaría “promocionando películas sobre acciones terroristas y un libro específico. ¿Por qué se continúa esa política de favorecer a cineastas que no compiten en el mercado?” Luego hizo referencia al libro «Violencia del Estado en el Perú” del año 2024. “El título del libro ya me parece violento “señaló Flores, luego defendió el monopolio de la violencia en tanto efecto de seguridad de parte del Estado. “No podemos hacer una exaltación del terrorismo. Las películas [en cuestión] son «Arde Lima» y [ininteligible] que exalta la cofradía LGTB”.
LGTB, Terruqueo y cinefilia congresal. ¿Qué es una película filo terrorista?
De inmediato por participación virtual se pudo oír a la congresista Susel Paredes reaccionar apasionadamente e intervenir diciendo:
“Por alusión sr. Presidente, soy congresista y lesbiana”.
A partir de aquí la dinámica de la sesión de la comisión de Cultura tomó el camino de la tangente y comenzó una discusión castrocobiana sobre cinefilia.
En el turno de Susel, ella refirió el aporte y reconocimiento de películas que reivindican el sufrimiento de la comunidad LGTB, así como del cine de memoria histórica sobre la dictadura de Franco, Videla o la recientemente ganadora del Oscar sobre la dictadura en Brasil en los años 70.
“Cómo es de atrevida la ignorancia” mencionó Susel en su defensa al cine y el teatro, “el arte denuncia lo que está mal, es parte de la memoria histórica de los pueblos. Al final esas obras son mas vistas (…) Para el que habla de cofradía LGBT, referir que la comunidad LGBT es la más perseguida. Somos ciudadanos y no una cofradía y tenemos derechos, tenemos DNI”.
Por su parte, el ministro de Cultura no perdió la oportunidad de mencionarse sobre las películas cuestionadas por el parlamentario Flores:
“En efecto existe una película, Río profundo sobre Hugo Blanco que ganó un premio de incentivos en 2019, y la Revolución y la tierra también ganó en 2016. Arde Lima ganó otra en 2021. Y hay también una obra que se menciona en redes, un proyecto en Arequipa donde se menciona la violencia de Estado y a la que se entregó un estímulo económico a la librería Fabla Salvaje, Pero a la que no se autorizó el uso del logo del MINCUL, a razón de esto se interpuso una denuncia penal contra el representante de Fabla Salvaje por hacer uso del logo de permiso (…) Nosotros no avalamos ningún tipo de película o actividad que sea filo terrorista.”
También hizo una aclaración el ministro sobre las premiadas películas que mencionaba Susel, en tanto estás son premios de organizaciones privadas y no forman parte de una política de Estado. Luego mencionó un ejemplo de política del Estado alemán como propaganda anterior a la Segunda Guerra Mundial, para finalmente aclarar a la comisión respecto a supuestas películas filo terroristas “desde el MINCUL no podemos avalar conductas de esta naturaleza porque asumiríamos tener un rol rector”.
Ministro de cultura: «Soy el único museólogo abogado en el Perú»
El ministro aclaró que también venía al Congreso a responder las preguntas que no había podido o sabido debidamente responder la directora general de museos. Sobre ello mencionó que el Museo Nacional de Arqueología y Antropología actualmente “atiende parcialmente” y que “estas piezas van a ser trasladadas a almacenes en el mismo museo. Es decir, no van a abandonar la delimitación del museo (…) No hemos realizado ninguna mudanza (…) el sector Cultura tiene 56 museos en su competencia, 7 de ellos con certificado de inspección técnica y 9 están en trámite”.
También respondió sobre la situación a nivel de póliza de seguros de los museos, señalando el ministro que de los “56 museos, 23 cuentan con pólizas vigentes y el resto se están requiriendo las contrataciones de sus respectivas pólizas”.
Reformas sobre la dependencia de Cusco
El ministro también se refirió acerca de la dependencia del Ministerio de Cultura en el Cusco, la cual, según él, tiene una situación sui generis. Esta dependencia es la más grande fuera de Lima y tiene una deficiencia, “no tiene una estructura normativa organizacional aprobada. El modelo Cusco se regula solo al director de Cusco y a tres subdirectores, Pero debajo de estos nadie más, y debajo hay 3 mil personas que trabajan en dependencias sin reconocimiento de cultura”. Luego anunció, “por primera vez en el sector se ha aprobado el manual de operaciones de Cusco, un documento de gestión con el fin de obrar de manera eficiente.”
También mencionó reformas de aspecto legal como el referido al arqueólogo. “Los arqueólogos tienen una limitación. Una vez han solicitado un permiso al MINCUL para hacer un proyecto arqueológico no pueden tomar otro proyecto sin terminar el anterior”. Por lo que el ministerio está tomando medidas de corte normativo. También mencionó una reglamentación de la norma que estará lista en 48 horas la cual “va tener impacto en toda la economía peruana porque el certificado de inexistencia de restos arqueológicos es un requisito para buena parte de los proyectos de inversión pública en el país, con un procedimiento más acotado que es el diagnóstico arqueológico de superficie, lo cual facilitará la inversión pública”.