Tras 24 meses de gestión municipal el “precandidato presidencial” Rafael López Aliaga engatusó a los limeños y endeudó con bonos por S/5 mil millones a la MML por obras que aún no se empiezan. Pese a que prometió austeridad, gastó S/1 millón y medio en consultorías y fracasó en la reubicación de ambulantes de Mesa Redonda. Y en su lugar, como si fuera un paliativo ha colocado rejas que impiden el libre tránsito en el Centro de Lima.
Pese al escozor que puedan sentir sus “amigos” y “aliados”, lo cierto es que el alcalde de Lima Rafael López Aliaga, sin la necesidad de que haya concluido su administración de 4 años, y solo con medio tiempo de su gestión edil hasta la fecha, ha significado un gran fiasco, decepción, burla, engaño, chasco y todos los sinónimos que se puedan enumerar. Porque simplemente engañó a todos sus electores y hasta el momento no ha cumplido con las promesas embusteras que lanzara durante su campaña municipal. Decía que Lima se iba a convertir en una ‘Potencia Mundial’; sin embargo, actualmente Lima sí se ha convertido en una potencia mundial, pero del caos, el desorden y la inseguridad.
López Aliaga candidato presidencial
Hay que recordar, que, a fines de mayo, se hizo viral la presencia del alcalde de Lima en un evento proselitista en Iquitos, donde, durante la actividad del ‘Movimiento Esperanza Región Amazónica’, Jorge Mera, presentó al burgomaestre López Aliaga como candidato presidencial. Y desde ese momento, a pesar que lleva la investidura municipal, no ha escatimado palabras para hacer campaña no solo en la capital, sino en diversas regiones del país. Incluso, utilizó las redes sociales de la propia MML para impulsar su campaña con miradas a las próximas elecciones presidenciales. Asimismo, en el mes de julio hizo proselitismo e impulsó la campaña presidencial de ‘Renovación Popular’ en el Callao, en lugar de atender los conflictos que había en las obras de la Estación Central de la Línea 2 del Metro. Y mientras en Paseo Colón, los fiscalizadores de la comuna metropolitana se trenzaban a empellones con los obreros de la empresa concesionaria para impedir el inicio de las obras, el alcalde de Lima realizaba proselitismo junto a Pedro Spadaro, para sumarlo al equipo celeste, con miras a las generales del 2026.
Alcalde López Aliaga publicó en Instagram de la MML su imagen con faja presidencial.
Prácticamente, y de acuerdo a sus planes, él tendría que abandonar la comuna en el primer trimestre del 2025, para que pueda postular a las presidenciales del 2026. Y para ello asumiría el teniente alcalde Renzo Reggiardo. Sin embargo, tampoco se trata de abandonar una alcaldía para la que se fue elegido. Por tanto, representa una falta de respeto y de compromiso con la ciudad capital y con los ciudadanos que residen en Lima.
Alcalde López Aliaga endeudó a la MML para que paguen las próximas cinco gestiones
Desde que se inició el año 2024, el alcalde Rafael López Aliaga difundía sus dotes como experto en finanzas. Y por ello, anunció que para poder realizar las obras que había proyectado tendría que endeudar a la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML), por los próximos 20 años, con cargo a la alcabala y al impuesto vehicular. En aquel momento, el exregidor metropolitano Jorge Valdez apuntó que la emisión de bonos será el factor del prolongado endeudamiento.
«Quizá se van a cumplir algunas metas gracias a la emisión de bonos. Que, dicho sea de paso, estamos endeudando a la MML a 20 años. Quiere decir que las siguientes cinco gestiones van a quedar endeudadas para que RLA pueda inaugurar obras durante su gestión. Nada es gratis. López Aliaga está emitiendo bonos a una tasa cara, porque si hubiera contado con el aval del Estado, pasando por el MEF, se habría encontrado una mejor tasa. Ellos han optado por la línea directa», reveló.
Actualmente podemos decir, que el burgomaestre, más allá de haber promocionado sus emblemáticas obras, aún no empieza a ejecutar las mismas. Es decir, todo ha sido un embuste, y ¿qué va a pasar con los miles de millones de soles que su comuna ha recibido?
Desalojó a ‘emolienteros’ y a ‘canillitas’ del centro histórico de Lima
Como se recuerda, primero los quiso vestir con ropa colonial para atraer turistas y luego mantuvo su inacción ante el masivo desalojo que sufrieron miles de emolienteros en diversos distritos de Lima. Durante los primeros días de julio el burgomaestre López Aliaga decidió sacarlos del centro histórico de la ciudad. Sin embargo, La Federación de Emolienteros del Perú pidió la inmediata nulidad de la arbitraria resolución subgerencial emitida.
“Ha reactivado Prolima con la finalidad de retirarnos a todos los trabajadores del Centro Histórico, a lugares en donde no se puede vender. Nosotros hemos sido reconocidos mediante resolución de alcaldía. (…) Ahora nos quiere sacar con resolución subgerencial, que es de menor rango que resolución de alcaldía”, afirmó el secretario general de la Federación de Emolienteros del Perú, Edgar Saénz Cunza.
Cabe recordar que hace 28 años el entonces alcalde de Lima, Alberto Andrade Carmona emitió una Resolución de Alcaldía que reconoce a los emolienteros como trabajadores emprendedores y dispuso su permanencia en sus puntos estratégicos de ventas; sin embargo, el alcalde Rafael López Aliaga, a través de su aliado de Prolima, Luis Martín Bogdanovich se zurró en dicho dispositivo y decidió desalojarlos arbitrariamente.
Emolienteros marcharon contra la medida del alcalde de retirarlos del centro histórico de Lima.
El mismo atropello vivieron los canillitas de la ciudad de Lima, que también por el mes de julio, como “Agremiados de la Federación Unión Nacional de Expendedores y Voceadores de Diarios, Revistas y Loterías” FEUNEVDRYL-UNIDIARIOS, rechazaron la Resolución de Gerencia de la MML, de fecha 14 de junio del 2024, que estableció su reordenamiento, sin antes haber sido consultados. El secretario general de dicha federación Eleonoro Garbo Gonzales aseveró que el alcalde López Aliaga atentó contra la libertad de trabajo y el derecho de difundir información a la ciudadanía. Los canillitas son trabajadores formales que están inscritos y registrados en el Ministerio de Trabajo, al amparo del artículo 28° de la Carta Magna, en concordancia con los convenios 87° y 98° de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
“No tiene en cuenta tampoco que los canillitas están considerados dentro de los grupos vulnerables de la población, por el factor precario socio-económico del trabajo que realizan los 365 días del año, siendo en su mayoría personas adultas mayores”, culminó Garbo Gonzales.
Gremio de canillitas fueron vulnerados por la MML en su derecho a la libertad de trabajo.
24 meses de gestión municipal embustera e ineficiente
Han trascurrido 24 meses de gestión y Lima no tiene indicios de convertirse en POTENCIA MUNDIAL. Sus propuestas populistas, no han sido más que una mera burla hacia los limeños. Cómo olvidar que la ciudad capital, durante el mes de junio y los primeros días de julio estuvo repleta de basura, debido a que la MML dejó sin trabajo a 860 trabajadoras de limpieza que tenían más de 20 años de servicio. Y hasta la fecha se encuentra abandonada y tomada por la delincuencia extranjera que ha infestado de meretricio a la Plaza Dos de Mayo y otros sectores de la ciudad.
Otro de los embustes del denominado Porky, son las 10 mil motos que prometió a la PNP. Él apenas, entregó 3600 motos y ha pagado S/166 millones con un costo sobrevalorado de S/18 millones. Pero, el mayor despropósito de este ultraconservador, aparte de haber endeudado a la Municipalidad —con su famoso plan de emisión de bonos— para que lo paguen los próximos cinco alcaldes; pese a que prometió austeridad, es haber desembolsado S/6 millones adicionales a los US$ 4 millones de dólares por asesoría legal en Rutas de Lima.
López Aliaga, quien gastó S/13 millones de soles en carruajes con caballos y que cerró ‘Las Cucardas’, ahora respira tranquilo porque prácticamente se salvó de la revocatoria, por no haberse alcanzado la cifra requerida de firmas; a pesar que miles de limeños firmaron planillones con la intención de revocarlo.
No cabe duda que alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, representa al sujeto egocéntrico que cree que el mundo gira en torno a él —insolente, malcriado, desatinado y necio en potencia— este sobreviviente de Solidaridad Nacional, ha demostrado ser un trepador político, porque primero quiso ser presidente y candidateó a las generales en 2021 y tras perderlas, postuló a la alcaldía de Lima, como si la comuna fuera un experimento y/o ‘premio consuelo’.
Y con una campaña millonaria, no por algo es dueño de ferrocarriles y de hoteles cinco estrellas; ganó las elecciones municipales y empezó a “desdecir” todas las promesas lanzadas cuando era candidato. Es decir, engañó a todos, con el cuento que durante cuatro años mejoraría la realidad de Lima; sin embargo, el alcalde defensor de “Chibolín” (“Envían a la cárcel a la persona más mediática. Han cargado la mano contra alguien que ha venido desde muy abajo”, lo dijo textualmente) a mitad de una gestión municipal y a pocos meses antes que la abandone, como lo hizo en diciembre de 2020 George Forsyth en La Victoria, ha convertido a Lima en “Potencia Mundial del Caos”.
Luis Felipe Alpaca es egresado de la carrera de Derecho y Ciencias Políticas y estudió Periodismo en la Universidad Jaime Bausate y Meza; asimismo estudió en la Escuela de Escritura Creativa del CCPUCP, y tiene un Diplomado de Especialista en Derecho Comercial por la Escuela Superior de Negocios. Ha sido Editor de Cultura del Diario 16, y actualmente es Editor General del Grupo Editorial Lima Gris, y es conductor del programa radial Lima Gris Radio por La estación Planicie 91.5 de la FM. Como gestor cultural ha organizado y curado exposiciones de arte y eventos ligados a los derechos culturales. Asimismo es corrector de estilo, y ha escrito más de 400 artículos relacionados a cultura, actualidad y política. Como activista social ha sido miembro de la Red del Patrimonio Cultural con el afán de defender patrimonios inmateriales y materiales como el desaparecido Palais Concert, y el Complejo Arqueológico Puruchuco. Actualmente es miembro del Colectivo Antropoceno Identidad, y ha recorrido distintas regiones del país para brindar apoyo, encuentros y conferencias en universidades con temas relacionados al arte ancestral y la cultura originaria.
Los maestros del Perú empezamos en marzo nuestra labor pedagógica, días más, días menos, según las regiones del país, y a menudo los nombres de insignes peruanos sirven de emblema a las instituciones educativas de Inicial, Primaria y Secundaria, cuando no a casas superiores de estudio, sean públicas o privadas.
Entre esos insignes compatriotas descolla el nombre de José Joaquín Inclán González-Vigil, y es necesario recordarlo para rendirle el homenaje que merece. Se trata de un militar peruano de carrera, paradigma del Ejército del Perú. Sus restos descansan en paz en la Cripta de los Héroes en el Cementerio Presbítero Matías Maestro de Lima.
Nació en Tacna el año 1818 y a la edad de 62 años ofrendó su vida a la patria durante la batalla de Arica, el 7 de junio de 1880. Es, pues, un patriota contemporáneo de nuestro héroe Francisco Bolognesi Cervantes, nacido el 4 de noviembre de 1816.
Recordemos que el coronel Inclán González – Vigil fue Comandante General de la 7.º División emplazada en las baterías del fuerte Este, en Arica, y junto a Bolognesi partieron a la eternidad defendiendo el Perú en la llamada Guerra del Pacífico. De modo que, en los últimos momentos de esa efeméride, las vidas de los coroneles, Inclán y Bolognesi, estuvieron estrechamente selladas por su patriotismo de acero, por sus valores morales y por su liderazgo ejemplar frente a las nuevas generaciones.
A partir del trabajo de los historiadores Alberto Tauro del Pino, con su “Enciclopedia Ilustrada del Perú”, y Jorge Basadre Grohman, con su “Historia de la República del Perú (1822 – 1933)”, podemos señalar que José Joaquín Inclán fue hijo de José Suárez Inclán y María del Carmen González-Vigil Yáñez. Por tanto, sobrino de Francisco de Paula González-Vigil, destacado clérigo, político e intelectual en los inicios de la vida republicana del Perú.
Líneas arriba dijimos que José Joaquín Inclán fue militar de carrera y esto porque luego de sus estudios primarios en su ciudad natal, en Tacna, pasó al Colegio Nacional de la Independencia Americana, en Arequipa, y de ahí ingresó como cadete al Ejército del Perú el año 1938, a la edad de 20 años.
Tres años después, en 1841, conocería el fragor del combate y el rugido de las armas, durante la denominada Confederación Perú – Boliviana. Posteriormente, se plegó a la revolución constitucional iniciada en Tacna por los generales Domingo Nieto y Ramón Castilla contra el Directorio encabezado por Manuel Ignacio Prado. Estuvo bajo las órdenes de Castilla (Batallón “Tacna”), y entre 1843 y 1844, combatió en la batalla de San Antonio (Moquegua) y en la batalla de Carmen Alto (Arequipa), donde saboreó la victoria en el lado de los constitucionalistas
Diez años después, en 1854, participó junto a la Revolución Liberal, liderada por Ramón Castilla y peleó contra el gobierno de José Rufino Echenique, cuestionado este por actos de corrupción.
En el segundo gobierno de Ramón Castilla fue nombrado intendente y después prefecto de Tacna. Y en 1858, a la edad de cuarenta años, al igual que su tío Francisco de Paula González-Vigil, llegó al Congreso de la República, pero como senador por Moquegua.
En 1863, ascendió al grado de coronel del Ejército y se le encomendó la instrucción de la Guardia Nacional en Tacna. Posteriormente, se unió a la revolución iniciada en Arequipa por el coronel Mariano Ignacio Prado contra el gobierno de Juan Antonio Pezet, acusado este de debilidad ante las pretensiones colonialistas de la “Escuadra Española del Pacífico”.
Para defender la independencia nacional, lograda en 1821 por don José de San Martín, luchó en el Combate del 2 de mayo de 1866, siendo comandante general del sector norte de las baterías del Callao. Trece años después, en 1879, cuando era prefecto del Callao, estalló la Guerra del Pacífico el 5 de abril. e inmediatamente se reincorporó al Ejército e integró una de las primeras divisiones que partieron al sur para organizar la defensa de Arica.
A este gran peruano, Crl José Joaquín Inclán, démosle nuestras oraciones y enseñemos su arrojo patriótico entre las nuevas generaciones y prediquemos su valor cristiano en defensa del prójimo. No olvidemos que en la batalla de Arica él tuvo una participación heroica, en el mismo campo de batalla donde estaba Francisco Bolognesi, resistiendo el embate de los regimientos chilenos, en Cerro Gordo, donde con un revólver en una mano y la espada en la otra, recibió las balas del enemigo y entregó su espíritu a Dios y a la Patria.
(*) Doctora en Gestión Pública y Gobernabilidad – Magíster en Problemas de Aprendizaje.
Ninguna universidad, sea pública o privada deja de tener problemas, y no por ello los mismos se resuelven con seudo reorganizaciones o intervencionismos.
Peor cuando existe una motivación vengativa, personalista, polítizada e ideologizada, como en el caso de sectores de Perú Libre y del cerronismo frente a la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión (UNJFSC), escenario promovido por el “lumpemproletariat” que agita diferencias internas ante la Comisión de Educación del Congreso, sobre todo desde el lobby de unos tres o cuatro docentes individualistas y ambiciosos que solo buscan sorprender a las autoridades con el objetivo de tomar dicha casa superior de estudios de cara a las elecciones del 2026.
Como se ha demostrado en medio de este debate, cualquier problema de la UNJFSC solo debería pasar por la labor de la Contraloría y la Fiscalía, porque se tienen individualizados algunos casos con faltas administrativas o ilícitos.
Empero ello no justifica “reorganizar” ni “intervenir” a la universidad faustiniana por mera ambición de poder, generando inestabilidad entre 13 mil alumnos y más de 700 familias de los trabajadores, a partir de asuntos internos motivados por una camarilla de malos docentes que se han apostado a la vera de la Comisión de Educación, presidida lamentablemente por una persona que solo quiere ser reelegida como senador, Segundo Montalvo, y que busca la comidilla mediática y las cámaras de la prensa pequeño-burguesa para atentar contra la autonomía universitaria.
Lo grave es que Perú Libre nada muy orondo con esa clase de desaguisados donde los peticionarios o promotores de una falaz “reorganización” en la UNJFSC son personas con procesos abiertos en la Fiscalía de Huaura, por diversos delitos y hasta con sentencias por falsedad genérica.
¿No se ha informado la Comisión de Educación del Congreso de esa realidad? ¿Están también entre esos promotores del intervencionismo personajes denunciados por cobros a estudiantes universitarios para aprobarlos? ¿No ha investigado acaso el presidente de la Comisión de Educación que hay documentos en el que los alumnos adjuntan capturas de pantalla de transferencias bancarias hechas a las cuentas bancaria de algún promotor de dicha “reorganización”?
Señores de Perú Libre, investiguen bien, porque con esa clase de dictámenes intervencionistas y con gente cuestionada como promotora de una “reorganización” en la UNJFSC no se hace ninguna revolución. Vean también desde la Comisión de Educación del Congreso, que los estudiantes señalan que su labor parlamentaria está siendo llevada de la nariz por gente que solo quiere la venganza al haber sido separada de dicha universidad por tener sentencias dolosas.
De modo que no debería de primar en el Congreso ese falso espíritu de cuerpo pues entre esas personas que promueven la cuestionada “reorganización” hay gente de la izquierda marxista que no garantiza transparencia, y que al final solo dejará mal parado a Vladimir Cerrón y al partido Perú Libre.
La comunidad faustiniana y el pueblo de Huacho están disconformes con el proceder de la Comisión de Educación y del cerronismo, porque ¿o les están vendiendo a Perú Libre cebo de culebra o se están haciendo los sonsos por cuestiones de mero poder político al interior de la comunidad universitaria sin pensar en los estudiantes y trabajadores?
Hace unos días se inauguró, en Barranco, la muestra Los Gentiles: por los 55 años de carrera musical de El Polen, emblemática banda hippie de folk rock, formada en Chaclacayo a fines de los sesenta por los hermanos Pereyra. Una fiesta para todos sus seguidores, melómanos y musicantes que han crecido bajo su amparo e influencia como la banda metal: Kranium o Del Pueblo, Los Cholos, Ushpa, Manuelcha Prado y el proyecto Kavilando y un largo etcétera.
En 1971, después de una presentación en la universidad de Lima se les propuso que telonearan a Santana. Todo estaba previsto pero el gobierno militar de Velasco canceló el concierto. Y los Polen continuaron en la brega llegando a tocar en Chile junto a Los Jaivas en diferentes escenarios y en la Quinta Vergara.
Aunque la banda ensayaba en Miraflores viajan al Cuzco a “buscar el soma de la espiritualidad” y después recalan por Chaclacayo donde junto a otros jóvenes de cabellos largos y sin zapatos se entregarían a la meditación y a la música. Fabiola de la Cuba sería también parte de este tiempo de flores y ensoñación al lado de quenas y pututos.
El Polen sería el encargado de ponerle música a la película del Cholo Sotil. “El director de la película estaba buscando música y mi hermano, que trabajaba en cine, le habló de El Polen. Nos llamaron para una audición, y apenas terminamos de tocar nuestro repertorio, Batievsky nos dijo ‘Esta es la música chola, mestiza, que necesito’. Así, llegamos a un acuerdo” dice Pereyra. El disco titulado “Cholo” saldría en 1972.
Al poco tiempo tocarían con Susana Baca en Berlín y producirían el disco “Fuera de la Ciudad” en 1973, editado por El Virrey. Después de eso vendría una pausa que duraría hasta 1998 cuando salió “Signos e Instrumentos”.
El fallecimiento de Raúl Pereyra, en 2010, considerado por Chano Díaz Límaco: como “la voz más grande de todo el rock peruano; no solo de la música fusión”, significó una baja considerable. Pero Juan Luis Pereyra ha sabido reponerse y sus hermosas canciones hoy son de culto. El tema “Orgullo Aymara” del poeta Dante Nava es un himno de la región sur: “Soy un indio fornido tengo treinta años y soy de acero cuando surja mi raza/ que es la raza más brava/ entonces va a saber el mundo/ lo que vale el aymara”.
Rodríguez Pastor y Fernando Zavala, ñatos de la risa: sus millones callaron a la prensa, opinólogos, al gobierno central y regional
Hasta los fiscales bajaron el tono. La tragedia más dolorosa provocada por negligencia en el Perú parece haberse diluido en el aire, como si las vidas perdidas fueran cifras intercambiables en un cheque. ¿Cómo es posible que, tras un desastre evitable, los titulares se apaguen, las cámaras se desvíen y los responsables caminen libres, protegidos por un manto de impunidad dorada? La respuesta, tristemente, parece resumirse en un viejo refrán: «Con la plata baila el mono».
En Trujillo, ingenieros de la municipalidad provincial identificaron fallas estructurales críticas en el techo del patio de comidas de Real Plaza, de propiedad de INTERCORP, el conglomerado de Carlos Rodríguez Pastor y Fernando Zavala. Las advertencias fueron claras, pero en lugar de corregir los errores, seis abogados de los empresarios amenazaron a los funcionarios. El resultado fue un colapso que cobró la vida de seis personas y dejó a más de ochenta heridas. Esto no es solo negligencia: es homicidio culposo. Sin embargo, tras la tragedia, INTERCORP ofreció 20 millones de soles para «cubrir deudas y responsabilidades penales», una cifra que, lejos de ser justicia, parece un intento de comprar silencio. Lo que mas indigna es la aparente facilidad con la que el caso ha sido silenciado. ¿Cómo es posible que, tras una de las tragedias más dolorosas del país, los responsables no enfrenten consecuencias .
Los medios, antes vociferantes, bajaron el tono. Opinólogos cambiaron de tema. El gobierno central y regional evadieron su deber. Hasta los fiscales, cuyo rol es perseguir la verdad, mitigaron su rigor. ¿Quién pagó por este mutis? La respuesta salta a la vista: el poder económico de dos magnates, cuyos millones ahogaron las demandas de justicia. Mientras las familias lloran, Rodríguez Pastor y Zavala, lejos de las rejas, siguen en sus palacios de cristal, ñatos de la risa, burlándose de un sistema que los protege.
En otros países, la negligencia de poderosos no queda impune.
Por ejemplo:
El caso de British Petroleum y el derrame de petróleo en el Golfo de México (2010): La negligencia de la empresa resultó en una de las mayores catástrofes ambientales de la historia. BP enfrentó multas multimillonarias y varios ejecutivos fueron procesados penalmente.
El escándalo de las emisiones de Volkswagen (2015): La manipulación de datos de emisiones llevó a la empresa a pagar miles de millones en multas y a la condena de varios ejecutivos.
El colapso del edificio Rana Plaza en Bangladesh (2013): Más de 1,100 trabajadores murieron debido a fallas estructurales ignoradas por los propietarios. Los responsables enfrentaron largas condenas de prisión.
Reino Unido (Grenfell Tower, 2017): Tras el incendio que mató a 72 personas por materiales inflamables, empresas y reguladores enfrentan cargos de homicidio corporativo.
Brasil (Brumadinho, 2019): El colapso de una represa de Vale mató a 270 personas. Ejecutivos fueron condenados a hasta 17 años de prisión.
Corea del Sur (Ferry Sewol, 2014): El dueño de la naviera, vinculado a fallas de seguridad, recibió una sentencia de 7 años antes de morir. Hasta la ex presidenta Park Geun-hye fue destituida.
EE.UU. (Crisis de Flint, 2014): Autoridades ocultaron la contaminación del agua con plomo. Funcionarios, incluido el gobernador, enfrentaron procesos por negligencia.
Estos casos demuestran que, aunque la justicia sea lenta, existe un límite para la impunidad.
Aquí, ni siquiera el dolor colectivo logra traspasar el escudo del dinero. Los 20 millones de INTERCORP son migajas frente al valor de las vidas perdidas. ¿Quién responde por el sufrimiento de las familias? ¿Acaso el sistema judicial peruano solo juzga a los pobres?
El mensaje es claro: en el Perú, la riqueza puede comprar silencio, pero no debe comprar dignidad. Exigimos que los fiscales actúen sin temor y que los responsables enfrenten la ley. Las víctimas merecen más que un cheque; merecen justicia. Que este dolor no sea en vano: transformemos la indignación en acción.
La justicia no puede ser un privilegio reservado para quienes tienen menos recursos. En un país donde la corrupción y la impunidad parecen ser moneda corriente, este caso debe ser un punto de inflexión. Las vidas perdidas no pueden ser olvidadas ni reducidas a un simple número en un balance financiero. Es hora de exigir justicia real, no solo para las víctimas de esta tragedia, sino para todos los ciudadanos que merecen vivir en un país donde de la vida humana tenga más valor que el dinero
Ucrania se encamina a ser un Estado fallido, disputado por los países europeos (Inglaterra y Francia), interesados en sus puertos; por Estados Unidos, que busca sus tierras raras y otros recursos naturales; y por Rusia, que ocupa más del 20% de su territorio. Los ucranianos creyeron en el cuento de que los europeos y los norteamericanos luchaban con ellos por la libertad y la soberanía de su pueblo. La guerra siempre ha sido un negocio para los ingleses y franceses; su pasado colonial y cruel lo demuestra. El espíritu de los norteamericanos se basa en los negocios con la guerra, el hambre y los recursos naturales de toda índole.
La primera lección es clara: no confiar en los países imperialistas. No creen en la libertad ni en la democracia, mucho menos en el derecho internacional. La ONU es un ente burocrático contingente.
La historia ha demostrado que todas las guerras tienen un trasfondo económico. En la Primera Guerra Mundial, se disputaba el control de los recursos naturales en África, Asia e Hispanoamérica. La guerra comercial y el nacionalismo económico fomentaron la carrera armamentística y desencadenaron una de las mayores matanzas en el viejo continente, que supuestamente era el faro de la cultura de la humanidad. La Segunda Guerra Mundial fue la continuación de esas disputas por el control del mundo y la humillación impuesta a Alemania con el Tratado de Versalles.
Segunda lección: Los países imperialistas o desarrollados no son amigos de los pueblos; solo buscan sus recursos y someterlos a sus intereses económicos.
Las ideologías más crueles nacieron en Europa: el fascismo, el nazismo, el racismo, el colonialismo y su expresión imperialista. Nada ha cambiado. El fascismo y el nazismo se han metamorfoseado en los partidos de ultraderecha europeos, que tienen un programa racista e imperial. Por su parte, chinos y rusos buscan, a través de la inversión en infraestructura y el comercio de armas, controlar el sur global para estar en una mejor posición de negociación con Estados Unidos.
El liberalismo, el socialismo y la democracia son valores que utilizan como herramientas para afianzar su dominación. No creen en ellos. No nos engañemos: para ellos, solo somos la mano de obra barata que necesitan por el momento.
Tercera lección: Nos consideran pueblos inferiores, destinados a ser su mano de obra barata.
Ni la historia, ni las guerras que hemos visto en Medio Oriente por el petróleo, ni la lucha de los pueblos de África por acabar con el neocolonialismo francés e inglés nos conmueven. Menos aún la masacre del pueblo palestino a manos de judíos y norteamericanos, que buscan convertir su patria en una ribera turística tras una limpieza étnica.
Los problemas económicos, sociales y políticos no les interesan a los europeos, mucho menos a los norteamericanos. Para los rusos y los chinos, solo somos una oportunidad política y comercial.
Cuarta lección: La guerra en Ucrania nos demuestra que, a pesar de los intentos de cooperación entre los países del sur global, estos no han sido suficientes para hacer frente a los imperialismos. La clave no está en la resignación, sino en fortalecer la unidad económica, comercial y política de nuestras naciones.
Los gobernantes de los países desarrollados e imperialistas representan los intereses de la oligarquía financiera mundial, de los grupos tecnológicos y de la industria armamentística. En Hispanoamérica, estamos gobernados por una clase ignorante y corrupta, incapaz de comprender el tablero de ajedrez mundial.
Esta es la lección más dolorosa que debemos aprender de Ucrania: no confiar en payasos ni en políticos ignorantes. Pero la alternativa no es el llanto, sino la acción. Si queremos dejar de ser peones en ajedrez de las potencias, debemos construir una autonomía real basada en la integración regional, el desarrollo tecnológico propio y una política exterior que priorice nuestros intereses antes que estar subordinados a las potencias imperialistas. Solo así podremos cambiar nuestro destino y dejar de depender de quienes nos ven como pueblos inferiores destinados a su servicio.
Hace unos días, los cinéfilos del mundo entero recibieron una de las noticias más inesperadas de principio de año. El dos veces ganador del Óscar, Gene Hackman (95 años), su esposa la pianista Betsy Arakawa (63), y su perro, aparecieron sin vida en su casa de Nuevo México.
El actor californiano construyó una gran carrera cinematográfica a partir de los 30 años, porque desde muy joven tuvo que ganarse la vida en distintos oficios; sin embargo, luego de que se alistó en la Armada para convertirse en un marine y servir como operador de radio en China, fue incentivado por el gobierno norteamericano para seguir estudios de periodismo en la ‘School of Radio Technique de Nueva York’. Aquello le valió obtener diversos puestos en emisoras radiales, aunque su pasión por el arte dramático hizo que lograra ingresar a la universidad ‘Pasadena Playhouse College of Theatre Arts’ en Los Ángeles; y el resto se convirtió en historia…
Alguna vez aseveró en una entrevista: «Pensé que tal vez podría alimentarme como artista, mientras esperaba convertirme en actor».
Hackman se hizo inmortal gracias a sus magistrales interpretaciones, como el legendario detective Jimmy ‘Popeye’ Doyle, en “Contacto en Francia” (1972), el criminal Buck Barrow en «Bonnie y Clyde» (1967), el fraterno reverendo Frank Scott en “La Aventura del Poseidón” (1972), y el villano Lex Luthor en “Superman» (1978).
Como buen amante de la literatura, le apasionó en demasía la novela de Thomas Harris “El silencio de los inocentes”, que no solo decidió producirla y dirigirla; sino, también protagonizarla. Sin embargo, tras leer el guion, retrocedió en la idea de caracterizar al psicópata Aníbal Lecter—uno de los villanos más espeluznantes del cine—debido a la carga violenta y patológica del personaje.
Tampoco se conformó con su faceta de lector incorregible y por ello decidió convertirse en escritor y publicó dos novelas, el thriller “Pursuit” y el western “Payback at Morning Peak”. Asimismo, coescribió tres títulos con otros autores literarios.
No cabe duda que el arte —en todas sus facetas— corrió por las venas de Gene Hackman, porque, así como sus colegas actores, Sylvester Stallone, Pierce Brosnan, Jim Carrey y Johnny Deep, él también sucumbió ante las artes plásticas, hasta convertirse en un sigiloso pintor.
En lo que va del 2025, la Biblioteca Nacional del Perú (BNP) ha sido testigo de un aumento alarmante en la contratación de personal externo, con un incremento del 52% en comparación con el año pasado. Abogados, comunicadores, administrativos y asesores han sido los principales beneficiarios de contratos que van desde los 9 mil hasta los 13 mil soles.
La Oficina de Comunicaciones, por ejemplo, cuenta actualmente con más de 20 empleados, un número que supera incluso a algunos ministerios. Las direcciones de Acceso y Promoción Cultural y Bibliotecas Desconcentradas han duplicado su personal, mientras que la Oficina de Administración ha incorporado a 10 asesores nuevos, con sueldos de 10 mil soles cada uno. Este aumento indiscriminado de personal no parece responder a una necesidad real de la BNP, sino al beneficio de una argolla.
El presupuesto para la BNP ha experimentado un aumento de más de 10 millones de soles en 2025, pero lejos de destinar esos recursos a proyectos culturales o bibliográficos, la gestión de Ana Peña Cardoza ha priorizado la contratación de personal. Según documentación a la que he tenido acceso, si esta tendencia continúa, la biblioteca podría quedarse sin dinero a mitad de año.
Lo más preocupante es la falta de coherencia entre el aumento en los gastos de contratación y la eficiencia en la gestión. En 2024, la BNP gastó 731,545 soles en contratos de servicios de terceros; en los primeros meses de 2025, esa cifra ya ha superado el millón de soles, alcanzando los 1,171,350 soles. Este incremento de casi medio millón no se ha traducido en mejoras visibles en los servicios de la biblioteca, lo que sugiere que el dinero se está utilizando de manera ineficaz.
El círculo cercano a Peña Cardoza parece estar compuesto por “reciclados” de instituciones como Indecopi —institución donde ella trabajó—, lo que lleva a la sospecha de un favoritismo descarado a costa de los fondos públicos. Este tipo de prácticas no solo son éticamente cuestionables, sino que se acercan peligrosamente a lo que muchos catalogarían como un “robo sistemático” del presupuesto de una de las instituciones culturales más importantes del país.
Los maltratos a trabajadores y la clara descoordinación entre la gestión y los objetivos de la institución deberían ser motivos más que suficientes para que Contraloría y Fiscalía investiguen a fondo la administración actual. Basta del despilfarro de dinero en la BNP.
En ciertos poetas, los ánimos poéticos se traducen como símbolos de la Naturaleza. Así, cuando Javier Heraud afirma que se siente un río, se propone darle “voz” al elemento agua. En tiempos modernos, los románticos, con Goethe a la cabeza, estimularon esa relación vital entre el humano y la natura: fusionar el yo con el universo.
En Trébol (2024, Voces Múltiples) de Liliana Flores Hilario, nos estremece por su sensibilidad libérrima y la sed de dialogar con el Otro Lado: la unidad perdida de nuestra condición. El proyecto se estructura en dos secciones generales (Anverso y Reverso) con divisiones interiores (Vita, Tristitia, Fidem, Fortuna). Ambos configuran un inventario de recuerdos, estados de ánimo, fragmentos de la experiencia lírica: todo ese vagar bajo la luz o sombra del poema, como un ritmo, o un trance o una conjura contra la nada: “Soy Flores/y no espero la primavera/Flor de lirio/y no hay temporal de melancolía/que marchite/mis pétalos de seda/ Vivo en campos de sequía a nieve/ renaciendo en poesía.” La victoria poética es habitar donde renace la palabra.
Entonces, la autora sea torna jardinera de su propia mente: corta, siembra, poda, busca el trébol de cuatro hojas. En otro verso, expresa que: “Mi tristeza tiene el color de los cerros de Lima” La tristeza como un color, un árbol, una ventana abierta. La joven escritora observa mucho, analiza y nos permite configurar los ánimos que se agregan al instante: así sus visiones no solo son de armonía, sino tristeza, o como decía Valdelomar (otro grande conectado con la Naturaleza): Tristitia. Con la ineludible “saudade” encima (maldita añoranza que da el no sentirse bien en ningún lado), y frente a ese caos, ¿qué hacer? Leer y leer.
En esa fiebre interpretativa, brota la savia elaborada, la fotosíntesis, el acto de repartición de la simiente del poema. Gracias esa luz, es posible resistir en medio del caos: la poesía se puede oír incluso en medio de los oleajes existenciales. En ese sentido, este poemario germina dentro de la lucha ecológica: la poeta sabe que se debe optar por un camino: arrojar la semilla o la palabra.