La educación en el Perú se ha vuelto un mercado en donde lo regular es que uno pague para recibir un servicio y enseñanza de calidad. Sin embargo, muchos de los compatriotas no tienen el sustento económico para dotar a sus hijos de una educación superior. La excepción sería que el joven consiga ingresar a una universidad o instituto de prestigio por medio de sus notas, y de bajar en su calificación perdería dicho beneficio.
Bien dice la Constitución Política del Perú en su capítulo II artículo 14 el deber del Estado de promover una educación íntegra y de calidad sin hacer distinción alguna de que dicho fin se consiga en una institución privada o pública.
Lamentablemente, durante estas últimas décadas ha surgido una brecha en donde la educación superior tiende a ser ofrecida con mejor infraestructura en universidades privadas. Claro está, hay algunas casas de estudios estatales en donde salen notables profesionales. Los factores pueden ser relativos para el éxito del estudiante, pero lo que sí no es discutible es la ventaja que encuentran en una privada.
Ante este contexto, el Consejo de Ministros aprobó hoy el proyecto de ley que permite el ingreso libre a las universidades, institutos y escuelas tecnológicas y pedagógicas.
Fue el ministro de Comercio Exterior y Turismo, Roberto Sánchez, el encargado de explicar las medidas que se irían implementando paulatinamente, indicando que la iniciativa legislativa aprobada en el Consejo de Ministros será enviada mañana al Congreso de la República a fin que sea incluida en su agenda de manera prioritaria.
El ministro de Comercio Exterior explicó que el proyecto de ley de acceso libre a la educación superior mira este derecho constitucional de manera progresiva.
“Somos conscientes que la educación peruana en su globalidad necesita mayores y mejores estándares de competitividad y calidad”, subrayó.
Sánchez reconoció que la reforma de la educación tiene en el presupuesto público su principal reto; sin embargo, resaltó que la mirada progresiva de la norma permitirá una cobertura de 5 mil estudiantes en el primer año.
Cinco requisitos para que sea factible este proyecto
El primero es atender la demanda universitaria porque actualmente las universidades públicas solo atienden un porcentaje menor de ella”, indicó Américo Guevara Pérez, presidente de la Asociación Nacional de Universidades Públicas del Perú (ANUPP).
El segundo requisito a atender es el fortalecimiento del sistema escolar básico para reducir las brechas educativas de los jóvenes, de modo que éstos lleguen a la universidad con las capacidades apropiadas y no registren tantas frustraciones, además de la temida deserción.
“En tercer lugar, el Ministerio de educación tiene que determinar la gradualidad que se tendrá en la implementación de esta propuesta. Creemos que se podrían dar ciclos básicos de nivelación para los jóvenes”, precisó.
El cuarto aspecto necesario para dar sostenimiento a esta propuesta, y tal vez el más crucial, es invertir mayor presupuesto en las universidades públicas y así mejorar su infraestructura y ampliar los espacios para la investigación.
Como quinto requisito figura aumentar el número de plazas para docentes, así como para el personal administrativo. “Se tiene que abrir más vacantes para docentes calificados, quienes se dediquen a la investigación, así como mayores fondos para hacerlo. En este momento dependemos de concursos nacionales e internacionales”, indicó.
