Emblemática escultura del «Petiso» fue retirada por la Municipalidad de Lima

La Municipalidad de Lima retiró la escultura del “Petiso” que formaba parte del patrimonio monumental de Lima. La obra dedicada al niño fallecido estaba ubicada entre la intersección del jirón Conde de Superunda y el jirón Camaná, frente al Convento de Santo Domingo en el centro histórico de Lima.

El sábado 23 de octubre, trabajadores encargados de la remodelación de la Plazuela Pérez Araníbar, quitaron la escultura con su base y solo atinaron a mencionar: «hay una orden de retirarlo”. Cuando se les preguntó si el Petiso iba a retornar al lugar, no hubo respuesta.

La escultura en bronce fue realizada por el escultor peruano Humberto Hoyos Guevara en 1984, luego de enterarse de la trágica muerte de un niño en 1993. El menor de edad era conocido como «Petiso» por sus compañeros y trabajaba como lustrabotas en la Plaza San Martín. Una noche de llovizna el pequeño de aproximadamente 7 años buscó refugio en una de las cajas reflectoras de la plaza pero el cableado estaba expuesto y mientras dormía el niño chocó con sus pies los cables eléctricos y falleció electrocutado. Al día siguiente se encontró el cuerpo pero nadie lo reclamó.

El artista Hoyos Guevara en su taller creó la obra del Petizo que en un primer momento participó de un concurso en la Galería Forum pero la obra no ganó ningún premio o mención honrosa. Luego de eso la escultura fue parte de la primera exposición individual del escultor en la Galería Sol. Ese momento fue clave, ya que se hizo público el monumento del Petiso. “En ese acto la intención era recuperar su espíritu”, menciona el artista.

La obra dio un salto a las páginas de la prensa, fue así que el exalcalde de Lima Alfonso Barrantes Lingán adoptó la escultura en 1984; para la recepción se hizo una ceremonia donde estuvo presente Henry Pease y Barrantes. “El Petiso fue recibido por las autoridades de la Municipalidad de Lima, desde ahí viene un poco el respeto. Para hacer la escultura la municipalidad pagó la fundición, yo no cobré un centavo, no era mi intención hacer negocio”, comenta Humberto Hoyos.

Curiosamente el creador de la escultura vive solo a tres cuadras del jirón Conde de Superunda y el jirón Camaná.  Cuando se acercó a preguntar dónde será trasladado el monumento, no tuvo respuesta por parte de los trabajadores. La preocupación del artista Humberto Hoyos radica en que también ha sido retirado el pedestal, una señal que indicaría que la escultura no volverá al lugar.

Ante lo sucedido, conversamos vía telefónica con el escultor Humberto Hoyos, él nos señaló: “En ningún momento PROLIMA se comunicó conmigo. Eso que algunos de ellos me conocen. En una oportunidad les dije que, si tienen que hacerle alguna intervención a mi Petiso, que por favor me avisen y me pidan participación. Y eso lo dije porque lo que están haciendo con otros monumentos a mí no me gusta, esa no es la técnica. Yo voy a aplicar la verdadera técnica como experto para obtener la recuperación. Lamentablemente el sol a reventado el barniz y está carachoso”.

El escultor toca un punto importante sobre los trabajos en restauración que viene realizando la Municipalidad de Lima. Estos trabajos lamentablemente no usan la técnica adecuada para la recuperación de esculturas y monumentos. Pero lo sorprendente es que la empresa Qhapaq Ñan S.A.C cobró un millonario contrato de S/. 1,495,000.00 de soles, por el Servicio de Restauración de Monumentos Emblemáticos en el Centro Histórico de Lima. Es decir, casi 1 millón y medio de soles. La empresa mencionada tiene como Gerente General a Erika Lorena Anticona Peche. Curiosamente esta misma empresa tiene otros jugosos contratos con distintas instituciones del gobierno. Sin duda, un tema de interés público que será abordado en otro informe.

El retiro de la escultura resulta penoso para el artista Humberto Hoyos, ya que con la obra del Petiso inició de su carrera escultórica. Pero a unos metros del Petiso también se encontraba otra escultura que fue retirada, se trata del busto de Augusto E. Pérez Araníbar, recordado médico y filántropo que gestionó grandes obras de alcance social como director de la Sociedad de Beneficencia Pública de Lima.

Para el maestro Humberto Hoyos, la Municipalidad de Lima debe corregir estos hechos: “Las esculturas tienen que volver. Busquemos la forma de poder resarcir para continuar gozando de la tranquilidad social, artística y cultural en beneficio de Lima”.

La Asociación de Artistas Plásticos del Perú “Trascenderes” publicó un comunicado donde se lee: “La Asociación insta a las autoridades que una vez terminada la remodelación de la Plazuela, instale nuevamente dicha escultura en su lugar de origen. También pide a la comunicad estar atentos a dichos pedidos”.

Conversamos con Florentino Díaz, regidor de Cultura de la Municipalidad de Lima, y nos informó que se comunicó con PROLIMA, y le señalaron que la escultura del Petiso se encuentra en restauración y lo van a reponer apenas concluyan la recuperación de las calles del sector de Conde de Superunda. No hay una fecha fija para su retorno, y esto debido a que los restauradores y conservadores tienen procedimientos especiales.

Esperemos que la escultura del Petiso regrese a la plazuela. Ojalá que la gestión del alcalde Jorge Muñoz no cometa un nuevo error desterrando y ocultando las dos obras antes mencionadas.

Ministerio de Cultura

Para el artista Humberto Hoyos el MINCUL en este momento se encuentra sumergido en un proceso de inoperancia debido a los continuos cambios de ministros.

“El Ministerio de Cultura ha sufrido una especie de “desorden”, porque hubo cambios y recambios. Con esa política no se puede hacer ni esperar nada. El Ministerio de Cultura no está ensamblada como para atender estos asuntos minúsculos pero que no dejan de ser importantes. Si se tiene que pronunciar el MINCUL, tendría que ser señalando que se respete el patrimonio monumental de nuestra ciudad de Lima. Otra cosa, para el bicentenario no se ha hecho lo que se tendría que hacer en el tema de monumentos escultóricos representativos y alegóricos”, expresa el artista.

Además, cuando fue consultado si alguna vez el Ministerio de Cultura lo convocó por su gran experiencia, el maestro Hoyos Guevara mencionó: “Nunca. Porque incluso cuando nos acercamos con la Fundación Víctor Humareda para colocar un busto mío de Humareda en calidad de donación para el espacio del Ministerio de Cultura, no nos aceptaron, cruzamos cartas y oficios, pero nunca se hizo efectivo. Al final, esa escultura de Humareda lo tienen en el Museo de Guayasamín en Ecuador”.

La realidad es que el Ministerio de Cultura desde su creación no cumple con una de sus principales funciones: realizar acciones de conservación y protección del patrimonio cultural. Esperemos que la viceministra de Patrimonio Cultural Claudia Ruiz, se pronuncie sobre lo sucedido con las esculturas del centros histórico de Lima.