Favor con favor se paga, según la ley no escrita de los ‘otorongos’. El dominical Punto Final puso al descubierto que los congresistas Darwin Espinoza y Kira Alcarraz tendrían un acuerdo verbal en cuanto a la contratación de sus allegados en cargos públicos dentro del Congreso de la República, además de apoyarse mutuamente en la Comisión de Ética cuando se trata de blindarse en una investigación.
Tras un trabajo de seguimiento de un par de meses, se descubrió que Alcarraz, titular de la Comisión de Inclusión Social y Personas con Discapacidad, empleó a Stephania Cuya Bezzolo, una joven de 31 años.
Según las imágenes reveladas por el dominical, Cuya y Espinoza tendrían una relación muy cercana desde la campaña electoral del 2021, que tuvo como escenario la región de Áncash. Esto fue confirmado por testimonios de extrabajadores del despacho del parlamentario.
Luego de ganar una curul en el Legislativo, la joven trabajó dos meses como auxiliar en la Comisión de Vivienda y Construcción del Congreso, cuando el grupo de trabajo era presidido por Darwin Espinoza, en el 2021.
Al dejar esta comisión, Cuya siguió frecuentando el despacho de Espinoza, al que acudió al menos ocho veces. Hasta que fue contratada el 17 de agosto del 2023 como asesora en el grupo de trabajo de Alcarraz.
Esta acción fue solo tres días después de que Espinoza le cediera a Alcarraz el cupo que tenía Acción Popular en la Comisión de Ética.
Un excolaborador del parlamento proporcionó un testimonio al referido dominical que sugiere que Alcarraz no solo logró un puesto en la Comisión de Ética, sino que también solicitó a Espinoza que contratara a una antigua trabajadora de su despacho.
Se trata de Myrna Mosso Carmona, quien desempeñó el rol de coordinadora en la oficina de Alcarraz desde 2021 hasta 2022. Posteriormente, en agosto de 2023, fue empleada como asesora por la bancada de Acción Popular.
Cabe destacar que la estrecha relación entre Espinoza y Alcarraz se ha evidenciado también en varias fotografías compartidas en redes sociales, donde se les ve juntos participando en actividades de ayuda social y representación parlamentaria.
En la sesión del jueves pasado, Alcarraz fue la única que optó por abstenerse cuando la Comisión de Ética aprobó una denuncia de oficio contra Espinoza. Esto ocurrió después de que se le acusara de utilizar recursos públicos y personal del Congreso para inscribir al movimiento regional Adelante Áncash.