Carlos Gassols: “La vida se descubre en el teatro, no en el cine”
El nonagenario maestro del teatro Carlos Gassols nos brindó una nueva y reveladora entrevista. Y entre las anécdotas vividas, nos contó que cuando interpretó al escritor Jorge Luis Borges en ‘Cita a ciegas’ nunca vio a tanta gente llorar en la sala, entre hombres y mujeres.
A los 96 años, Carlos Gassols Eizaguirre no interpreta ningún papel: es él mismo, sin telones ni aplausos, sin maquillaje ni focos, pero con la misma presencia escénica que ha llevado por décadas a los escenarios del país. Desde la comodidad de su casa en Miraflores, se refugia entre libros, periódicos y memorias. Viste como quien aún espera una función. Y en cierta forma, la espera: la vida, para él, sigue siendo un escenario.
En 1956, en el entonces desolado Pasaje García Calderón del centro de Lima, fundó el Grupo Histrión. El lugar, hoy perdido entre la sordidez y la amnesia de la ciudad, era entonces una trinchera para los artistas que creían en un teatro de resistencia. Gassols no solo dirigía obras: dirigía sueños. Actor, director, escritor, pintor y maestro, cuando hojea los diarios con atención y cierto desencanto rechina los dientes al ver a Dina Boluarte encaramada en Palacio de Gobierno, como si fuera un mal personaje mal interpretado. «Los políticos de hoy son más sátrapas que los de antes», murmura.
Aquí la conversa con el maestro Gassols:
Carlos quisiéramos tu testimonio sobre los gobiernos ¿qué presidentes fueron buenos o malos? nos interesaría el lado anecdótico.
Bueno, yo no lo puedo decir exactamente como tú quieres, desgraciadamente. Yo por ejemplo leí un artículo de José Luis Salinas, te digo ‘La normalización de lo inaceptable y de la capacidad de indignarnos’. Nos indignamos nosotros y por eso estamos como estamos, porque en realidad no nos hemos indignado jamás y nos han metido el ‘hombro’ hasta adentro, a todos, diciendo que somos “la gran persona” y sin embargo nos han engañado a todos.
¿Quiere decir que en todos los tiempos los presidentes les han dado la espalda a los peruanos?
Especialmente ahora. Bueno, entonces no te puedo contar más incidentes de ese tipo, porque en realidad yo siempre estaba en contra de eso perfectamente cuando yo podía hablar en el teléfono y hablaba en contra de eso. Pero en realidad yo no estaba de acuerdo cuando hablaban de la señora Boluarte, cuando decían que era la presidenta del Perú. Yo no creía que era la presidenta, en primer lugar.
No había firmado ninguna cosa para decir que era la presidenta; sin embargo, todos seguían diciendo la presidenta. Robaron todo lo que hicieron, robaron desde las cosas que tenían acá, las cosas, todo y además tenían al Congreso que era lo mismo que ellos y entonces el Congreso hacía todo lo que ella quería y se fueron a todas partes hasta el final. Y con estos miserables, incluso se han ido a lugares con altísimos precios, donde es más difícil de ir, donde va solamente la gente importantísima, de plata. Y aparece en Davos, en ese lugar en Suiza. Y se ha ido también gracias a ese Congreso desgraciado que lo había permitido. Eso es que lo que tengo que decirte.
Carlos Gassols recientemente en el calor de su casa. Foto: Luis Felipe Alpaca.
Carlos, se nota que estás indignado por la presidenta y por todo lo que sucede con los peruanos. ¿En algún momento de tu vida has sentido lo mismo con otros presidentes desde el siglo XX?
Cuando tuvimos a Velasco Alvarado, en esa época tuvimos a un hombre que en realidad mostraba lo que era el Perú, cuando metió a todo el aparato, allá por el sur del Perú, por el norte del Perú y metieron a todo el ejército y sacaron a todos los desgraciados que estaban extrayéndonos el petróleo durante 25 años y que con eso vivían ellos. Toda la vida vivían con la plata del Perú. Y Velasco Alvarado los sacó de ahí a todos.
Velasco no dejó que Rockefeller venga a Perú ¿Consideras que reivindicó al campesino?
Por supuesto. Y también puso a toda la gente que ya no tenían ni siquiera un sol.
¿Pero qué opinas de las expropiaciones?
Ellos fabricaban los soles, ellos hacían su moneda y les pagaban a los campesinos con lo que ellos hacían. Ellos mismos hacían lo que pagaban. Ellos construían y les pagaban con eso, porque manejaban todo. El Perú estaba manejado más que por ellos.
Entonces ¿Te consideras de izquierda?
De izquierda… Totalmente. Y además otra cosa quiero decir, y no me lo puedo perder. Eso lo van a tener que esperar todos. Todos los colegios desde primero, segundo y tercero, en todos esos colegios son ‘hombre y mujer’. ‘Hombre y mujer’. Pero ellos van a crecer y van a ser ‘hombre y mujer’ después. ¡Toda la vida hombre y mujer! ¡Todos los colegios tienen que ser hombre y mujer! ¡No… nada de que hay unos especiales que van a ser mujer!
Ahora le llaman género, no sexo.
¡Por acá! No. ‘Hombre y mujer’ tienen que ir a todos los colegios. Todos los colegios del Perú tienen que ser con ‘hombre y mujer’. Claro, todas las mujeres tienen que ir al mismo colegio que van los hombres. Muy bien. Y cuando quieran casarse, se casarán. Perfecto.
En el Congreso hay políticos que están impulsando el matrimonio de personas del mismo sexo ¿Qué opinas de eso?
Siempre… ‘hombre y mujer’, ‘hombre y mujer’ siempre juntos. Ahora, que entre ellos se entiendan, eso es cosa de siempre; ya. Pero ‘hombre y mujer’ siempre en el colegio.
En ese sentido ¿Consideras que la educación ha ido disminuyendo, se ha menoscabado?
Ha ido para atrás, ya. Ha ido para atrás. Además, ni siquiera saben hacer bien las cosas.
¿Qué se ha perdido?
La educación cívica, los valores, el respeto. Por eso lo han perdido todo, porque justamente, si son ‘hombre y mujer’, tienen más oportunidad de poder hacer bien esas cosas. Conocer bien cómo es el Perú, cómo ha sufrido, qué cosa es lo que tiene y que están desaprovechándolas. ¿Cómo es posible que haya, inclusive gente que se ha aprovechado de eso en la selva y aprovechárselas a las chiquitas? Ese desgraciado…
¿Te refieres al ministro de Educación Morgan Quero, que dijo que son ‘prácticas culturales’?
Por supuesto. Así es.
¿Inaceptable?
Claro que sí. Y encima son profesores universitarios con maestrías y posgrados. Y todo eso se acabaría si habríamos que solucionar todo.
Carlos Gassols en la puerta de su casa en 2019. Foto: WylOna.
Tú eres un hombre respetuoso; sin embargo, se te nota indignación.
Me indigno, pues. Me indigno realmente. ¡Hombre y mujer tienen que ser siempre! toda la vida, porque sino no se puede ser una buena persona. Y si no son ‘hombre y mujer’… Yo a veces las veo a las señoras que se quejan de lo que han hecho. ¿Cuántas personas se quejan de los hombres que hacen esto? Porque el feminicidio acabaría con eso. El feminicidio tiene que acabarse de esa manera. ¡Hombre y mujer siempre juntos!
Carlos, ya nos dijiste que la educación se ha menoscabado con las décadas ¿El teatro también ha perdido nivel en el siglo XXI?
Por supuesto, también ha perdido nivel.
¿En qué sentido? ¿Qué ha cambiado?
El teatro ha cambiado porque la gente es perezosa. Es muy incómodo para ellos no dejar una cerveza. ¿Cuánto cuesta el teatro? ¡No… qué voy a gastar yo en eso, para ir a ver teatro! Y hay gente que ni sabe qué es teatro.
Antes se llenaban las cazuelas
Antes, la gente mayor iba al teatro y veía una serie de actores. Porque en el teatro se ve la vida. Tú en el teatro descubres cosas. En el teatro puedes descubrir que tú eres una persona buena, mala, o perversa. O que tienes algunas cosas que podrías arreglar. O no te convendría, porque quedarías mal con tu familia o con las personas. Descubres la vida. La vida se descubre en el teatro, no en el cine.
Pero actualmente hay bastantes compañías que están haciendo teatro
Sí, gracias a Dios. Algunas sí hay, pero no en la medida en que hay, por ejemplo, en la Argentina. Mira, cuando yo iba al teatro en Argentina, me preguntaban. Iba yo con mi señora que ya falleció también hace tiempo. Nos preguntaban, ¿y cómo es el teatro en el Perú? Bueno, les decía lo que teníamos, pero también que nos faltaban todavía muchas cosas.
Generalmente, como no tenemos costumbre, no tenemos cómo poner tanta plata, porque hay que poner dinero para poner el decorado, para poner lo que se necesita, para dar al público la sensación de lo que se está haciendo. Y entonces, bueno, es difícil por eso. Y yo les decía a los argentinos, ¿y ustedes cómo hacen? Nosotros, en cada casa siempre acostumbramos a ir tres veces al teatro. Y podemos ir al cine, si queremos una vez nada más, me respondían.
¿Es más importante el teatro que el cine?
Mucho más el teatro.
Carlos Gassols en la película «Caídos del cielo» de Francisco Lombardi.
Nunca te gustó mucho participar en la televisión, a pesar de que estuviste en una serie.
No, estaba todavía muy… Recién estaba puesta. Muy poca televisión había. En ese momento había muy poca.
Pero pagan bien en la televisión.
Sí, claro. La televisión iba a quedar como el cine. Más o menos así.
Eres un actor que has tenido una formación rigurosa. ¿Ahora la formación del actor es la misma que antes?
Bueno, sí. Más o menos. La misma.
¿Cuál fue la última aparición que tuviste en teatro?
Mira, la última obra que yo he hecho, la hice con Osvaldo Cattone. Él hacía un personaje de un hombre sinvergüenza, mentiroso, que engañaba a todos y vivía feliz engañando.
Yo era un hombre que lo esperaba, sabía cómo era y lo aceptaba porque me convenía estar con él, porque cuando nos juntábamos en la banca, siempre había algo que comer. Yo no tenía plata y él sí. Ese era el personaje. La obra fue tan buena, que comenzamos a partir de abril, cuando nadie iba al teatro tanto, y con ese elenco de «Vivir es formidable”, estuvimos trabajando, hasta el último día de diciembre con lleno total.
¿Qué opinas del método de ‘memoria emotiva’ del maestro ruso Stanislavski?
Mira, con el teatro se hace mucho también. ¿Cómo te puedo decir?
Se hace mucha ‘exaltación’. Se hacen muchas cosas extrañas para llamar la atención.
Para hacerse ver como personas que han entrado mucho en esto. Y se le dan estos nombres de la memoria emotiva.
¿La memoria emotiva qué cosa es? Simplemente, tú te metes en un asunto que vas a hacer. Y en ese momento piensas demasiado en eso y te involucras mucho a pensar hasta qué punto debes hacer lo que estás trabajando, o estás exagerando. Hay interpretes que llegan a meterse en estas cosas extrañas que les dicen ‘memoria emotiva’ y terminan por hacerse daño. Yo he conocido gente que no les resultaba bueno y que se morían. Y también he visto muchachos que se han matado en el teatro. Porque se han metido tan adentro… y se han asesinado. Se han tirado por encima del puente.
¿El actor está dispuesto a todo para satisfacer al personaje?
Así es.
En tu caso ¿Te metías al personaje al punto de llegar a la obsesión?
No, yo no… yo no.
¿En todo caso prefieres la ‘memoria física’ en tu interpretación?
Sí, claro.
¿Por qué razón?
Por una sencilla razón, Comodidad. Quiero decir, comodidad, pero dentro de lo que estoy buscando, nada más. Y entonces metíamos lo que dicen morcillas. Las morcillas en el teatro son las bromas e improvisaciones que se hacen. Que no está en el texto, que se están mintiendo.
Carlos Gassols y su esposa Herta Cárdenas.
Carlos, se dice que en los ensayos del teatro no te gustaba hacer bromas porque te concentrabas demasiado.
Ah, por supuesto. Sobre todo, cuando yo dirijo ¿no? Por ejemplo, cuando dirigí ‘Los inquilinos del Buque’,
¿Recuerdas algún momento de una baja afluencia en el teatro en Lima?
En los ochentas la gente no salía. Nadie iba al teatro en esa época por culpa de ‘Sendero Luminoso’. Nadie, el público no iba al teatro, no salía. No salía a ninguna parte en esa época. Solamente iban a Miraflores y un poquitito corrían hasta la avenida Arequipa, hasta ahí nomás. No subían al teatro y nosotros sin público hicimos esa cantidad de gente y fue un éxito ‘Los inquilinos del Buque’. Esto lo logramos porque tuvimos suerte. En realidad, yo era muy amigo de Alfonso Barrantes Lingán. El mejor alcalde que había en Lima, siendo él quien creó el Vaso de Leche.
¿Qué recuerdos tienes de tu compañera de vida, Herta Cárdenas?
Bueno, trabajamos nosotros y nos fuimos a Arequipa y estuvimos en Argentina, Colombia y en Montevideo junto a Pepe Vilar. Y trabajamos juntos siempre. Íbamos a todas partes siempre, pero ella después prefirió más la televisión y yo el teatro. Anduvimos casi 50 años juntos.
¿Sigues escribiendo prosas y guiones?
Por favor, yo sigo escribiendo. ¿Cómo que no escribo? mira esto, es una obra completa, ‘Más allá de la vida’ escrita por mí y la tengo bastante tiempo. No sé quién la va a hacer. Hay dos personas que han querido hacerla, pero hasta ahora nadie la hace.