La tildan de altanera, irascible o poco paciente. De carácter fuerte y una mirada penetrante, Yenifer Paredes, hermana menor de la ex primera dama Lilia e hija putativa de Pedro Castillo, ahora no descarta la posibilidad de que su rostro se vea próximamente en una campaña electoral, pues en una reciente entrevista ofrecida para Latina ha indicado que lo viene pensando y no tiene una decisión firme.
“Es una pregunta muy general que me haces. Lo estoy analizando, posiblemente. Lo estoy pensando, me estoy centrando ahorita en ver mi caso”, reveló al periodista Carlos Hidalgo.
Asimismo, resaltó que el exmandatario Castillo no se siente culpable de las muertes que se registraron en las protestas de las diferentes regiones del país. Sin embargo, mencionó que las autoridades actuales deben “estar preocupadas”.
“Él no está gobernando para sentirse responsable sobre estos hechos. Los que estarían preocupados serían los que están a cargo. Si uno asume un cargo tienen que asumir las consecuencias”, aseguró.
Su gran error
La cuñada del expresidente Castillo mencionó que el proyecto de Chadín, donde se le grabó ofreciendo un expediente técnico, pero “quedó en nada, solo en una visita de campo”, resalta. Además, volvió a ratificar que no tenía conocimiento de que no debía laborar en una compañía que contrata con el Estado.
“Eso tengo que asumir, eso fue mi error, no sabía (trabajar en una empresa que contrata con el Estado). Yo no debí trabajar en esa empresa si es que hubiese tenido conocimiento. Solo tenía conocimiento que no podía ser contratada en una entidad pública”, declaró.
La menor de los hermanos Paredes también manifestó que se encuentra “ansiosa” a que las investigaciones culminen. Además, aseveró de que todas las indagaciones fueron “ataques” a su círculo familiar, porque buscaban “tumbar” el gobierno de Pedro Castillo. “No es que me preocupe, porque nunca se han dado esas cosas”, agregó.
Por otro lado, contó que su hermana Lilia Paredes junto a sus hijos pasan por una situación “complicada”, debido a que su padre se encuentra en cumpliendo prisión preventiva por 18 meses en el penal Barbadillo.
Asimismo, negó haber pedido asilo político a la embajada de México, pero también rechazó que viajaría al país azteca en caso no tenga impedimento de salida. “Me quedé en el Perú por respecto al Poder Judicial y las restricciones que me ha impuesto. Yo nunca fui ni pisé la embajada de México como se señaló”, acotó.