Vladimir Cerrón se encuentra próximo a cumplir un año en la clandestinidad

Resulta difícil de creer que el sistema de Inteligencia de un país no tenga las herramientas necesarias para dar con el paradero de un simple sujeto que no tiene la capacidad de volar, ni de volverse invisible, ni tampoco de teletransportarse y aparecer caprichosamente en una remota ciudad. Y es que para situaciones similares en cuestión de días o semanas se dio con la captura de peligrosos terroristas. O al menos se tiene algún indicio donde podría estar aquella persona, pero para el caso del fundador de Perú Libre pareciera que cuando se les consultase a los investigadores todos respondieran al unísono “desconozco mayormente”.

De corroborarse esa triste realidad, la cual daría a entender que los delincuentes están mejor implementados que nuestras instituciones encargadas de velar por la seguridad del país, entonces cabe preguntarse qué se está haciendo con todo el dinero que millones de peruanos le dan a las arcas del Estado.

La otra posibilidad, la que tiene mayor asidero, es que el propio gobierno de Dina Boluarte se esté encubriendo estratégicamente al prófugo ex gobernador regional de Junín. Las declaraciones del capitán PNP Junior Izquierdo, alias ‘Culebra’, mencionaron que el mismísimo ministro del Interior, Juan José Santiváñez, le confesó que Cerrón Rojas se encuentra protegido por militares cubanos.

“Él me dice que el señor Cerrón estaba custodiado, enchalecado, por ocho militares cubanos. Esas son las palabras”, señaló el policía a la comisión que preside el congresista Juan Burgos de Podemos Perú.

Así también, resulta increíble que un vehículo presidencial, denominado ‘Cofre’, se encuentre en el mismo lugar donde se habría estado escondiendo Vladimir Cerrón, hecho que la propia jefa de Estado ha salido a declarar que en realidad ella se encontraba por ahí debido a una reunión familiar.

O el hecho que el médico cirujano se estaría escribiendo con congresistas de su bancada, según conversaciones de WhatsApp, sobre todo con una particular cercanía con la parlamentaria Kelly Portalatino, a la cual le habría confesado su amor incondicional luego de una larga noche de copas. Ante esto último, ¿qué tal complicado era geolocalizar el dispositivo utilizado por Cerrón?

Hasta que realmente el Gobierno se anime a capturar a Vladimir Cerrón, este continuará apareciendo, cual espectro, en ceremonias de su partido, o escribiendo cómodamente desde algún lugar paradisiaco del norte del Perú, mientras los supuestos cubanos que lo protegen se ríen con él por las explicaciones que van soltando de tanto en tanto los ministros de Boluarte.