Sentado y con el celular en la mano, así uno se imagina que el líder y fundador de Perú Libre, Vladimir Cerrón Rojas, recibe mes a mes un sueldo de S/12,500 que sale de todos los peruanos, sin que este mueva un solo dedo. El Financiamiento Público Directo (FPD), programa creado por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) para entregar dinero a los partidos políticos para sus campañas, en un principio era una buena idea pero que a la larga los partidos hacen lo que les da la gana, y no precisamente lo utilizan para promover sus candidaturas.
Un reportaje del programa Punto Final ha puesto al descubierto que gran parte del dinero recae en supuestos ‘asesores’ por sus ‘servicios’ hacia los partidos.
Desde 2017, el FPD se entrega a los partidos para actividades como la formación, capacitación y cobertura de gastos de organización; sin embargo, esto es letra muerta.
Según los reportes enviados a la ONPE los únicos beneficiados son las cabezas de los partidos.
Según informó Latina, Cerrón Rojas posee un sueldo por las actividades que realiza dentro de la agrupación izquierdista, y por el cual habría obtenido la cifra de 12.500 soles como salario durante los meses de marzo, abril y mayo, mientras que en febrero se le dio 3500 soles.
Asimismo, se conoce que la ONPE entregó más de un millón de soles al partido del lápiz por su representación legislativa, del cual no se ha usado por completo, ya que no hay ningún reporte como tal, únicamente la más reciente información que coloca al neurocirujano como el destinatario con el gasto más alto de la cifra en mención.
Otro ejemplo es el de Rosa Patricia Li Sotelo, presidenta de Somos Perú, quien gana S/15,000 mensuales, desde hace varios años. Ella, al igual que Cerrón, también fue sentenciada por corrupción.
Pese a esto, la norma por la que se rige el uso de este fondo monetario es flexible, por lo que cada organización puede considerar de distinta manera qué significa para ellos un “gasto ordinario”.
Renovación Popular, por su parte, utiliza los S/843,000, provenientes del Estado, para pagar la asesoría del excongresista fujimorista Julio Gagó.
El servicio de coaching de Gagó le cuesta S/226,650 al erario nacional. Pese a que está todo documentado oficialmente, el asesor y el candidato a la alcaldía de Lima, Rafael López Aliaga, negaron lo revelado por Punto final.
“¿Contrato? Hermano, esa palabra no se usa. Renovación Popular no es una mafia”, dijo López Aliaga sin dar más explicaciones.
Esta organización política también pagó al productor de televisión de Andrés Hurtado –conocido como ‘Chibolín’–, la cifra de S/207,000.
Coincidentemente, López Aliaga, según el programa, asiste recurrentemente al programa que Hurtado conduce. La ONPE está encargada de supervisar el buen uso de estos recursos para que no sean desviados a intereses privados.