La reciente visita a nuestra ciudad del Prof. Cayetano Villavicencio Wenner, Director del Museo de los Descalzos de Lima y especialista en patrimonio eclesiástico como también en Filosofía y Ciencias Sociales, ha despertado grandes reflexiones sobre la cultura, el arte y el espíritu que retrataron nuestros pueblos y que se encuentran resguardados en los principales templos y museos del Cusco. Entendamos el patrimonio eclesiástico como aquellos bienes muebles e inmuebles que se encuentran en custodia de la Iglesia Católica y que al mismo tiempo en ciudades como la nuestra, retratan la vida, pensamiento y talento de hombres y mujeres consagrados a Dios pero al mismo tiempo, a la historia.
Del Cusco Incaico, ya nos
hemos ocupado en otras oportunidades y aquellas lecturas nos permitirán afirmar
que luego de la caída del Tahuantinsuyo, en el Perú Virreinal, nuestra ciudad
siguió siendo un eje y centro de desarrollo intelectual, memoria cultural y
difusión artística. Prueba de ello, es la Escuela Cusqueña de Pintura donde los
grandes maestros, entre ellos descendientes incas, dejaron su firma indeleble
como Diego Quispe Tito, Diego Cusi Huamán, Basilio Santa Cruz Pumacallo, Antonio
Sinchi Roca y Melchor Huamán Mayta sólo por citar algunos. Estudiar, valorar y
difundir su obra es una tarea de los investigadores cusqueños y cusqueñistas
como también una cruzada que debemos emprender como colectividad.
El Prof. Cayetano Villavicencio, brindó brillantes exposiciones en la Escuela Nacional de Bellas Artes Diego Quispe Tito y en el Museo Inka de la UNSAAC, donde gracias a su generosidad y don de comunicador pudimos conocer a figuras sumamente particulares como Manuel Chili (1720-1796), también conocido por el nombre artístico de “Caspicara”. Éste fue un afamado escultor y tallador indígena perteneciente a la Escuela Quiteña de Arte del siglo XVIII, de la cual fue uno de sus más importantes representantes. Su obra es el símbolo del arte virreinal en Ecuador y su natal Quito alberga notables piezas de arte custodiadas en el Museo Nacional, la Catedral Metropolitana y múltiples espacios religiosos de su país. Sus esculturas de entre 2 y 50 centímetros despertaron sorpresa ayer como también admiración hoy.
En la ponencia: “Procesionando
en la fe con el Señor de los Milagros” develó con lujo de detalles e
información el origen del culto, trascendencia y vigencia de su devoción y la
religión popular peruana. Con el objetivo de visibilizar la cultura viva y la
valoración de nuestra historia y patrimonio, la Biblioteca Cultural Qhapac
Yachay y el Área Cultural de la Corp. Educativa Khipu venimos realizando
conferencias en diferentes centros culturales y académicos de nuestra ciudad.
Junto a Rosa Canasa de Amado, quien antes ya trabajó con nuestro conferencista
en el Convento de San Francisco, estamos convencidos de que el público joven y
la ciudadanía, para amar nuestra historia y cultura, debe conocerla. Para ello
todo esfuerzo suma y por eso no podíamos dejar que el Prof. Villavicencio deje
nuestra ciudad sin una última conferencia donde realizará una descripción
iconográfica de: “El huerto de San Antonio Abad / irradiación de la sabiduría
divina”.
La cita es hoy por la tarde a
las 6:30 pm en el auditorio del Museo Machupichu de la Casa Concha en la Calle
Santa Catalina N° 320. No sólo profundizaremos en diferentes reflexiones sino
también aprenderemos de este gran investigador que en cada conferencia se deja
la vida como también el corazón. Debemos preguntarnos en qué estado se
encuentran, por ejemplo, las obras de arte del Museo del Palacio Arzobispal y
otros recintos entre tantas obras maestras que se concibieron en esta ciudad y
a las cuales alcanzó, el olvido, el tráfico e incluso el fuego. No es necesario
ser católico para entender el valor cultural de muchas piezas y el trasfondo
que guardan como un misterio que en estos días damos a conocer de la mano del
Prof. Cayetano Villavicencio, para quien solo tenemos palabras de gratitud.
Como siempre la entrada es libre y la lectura liberación.