Han transcurrido 11 meses desde que se instauró el gobierno de Pedro Castillo, y desde ese tiempo la inflación en Perú hoy muestra un crecimiento del 8,62%, según el INEI. Este vertiginoso incremento se ha reflejado más en los precios de los alimentos, el transporte y los combustibles. Eso sin contar la disminución de extracción pesquera y una ligera caída del sector minero y de hidrocarburos. Aunque algunos sectores progresistas mencionan que este negativo impacto solo se debe al alza de los precios internacionales y a la guerra entre Rusia y Ucrania.
Sin embargo; sumado a la crisis económica que padece el país, se ha agudizado una crisis política que tiene enfrentados a tres poderes del Estado y al resto de la población que vive polarizada y que se ha dividido en dos sectores: los proizquierdas y los proderechas.
Mientras tanto, el Perú se desmorona y aún no vemos al mandatario chotano salir a responder ante los peruanos.
¿Cuál es su rol o participación? con respecto a las denuncias que lo involucran como cabeza de una organización criminal que ha festinado el erario nacional.
¿Acaso los prófugos Bruno Pacheco, y los sobrinos del presidente, Fray Vásquez Castillo y Gian Marco Castillo Gómez son un invento de la prensa?
Se ha corroborado que estos personajes acompañaron de cerca a Castillo Terrones durante la campaña electoral. En ese sentido, ¿es posible entonces que el presidente desconozca los presuntos actos delictivos de sus sobrinos, de su exsecretario general, y del exministro Juan Silva?
¿Acaso la irregular concesión del Puente Tarata realizada por el MTC es otra imaginación?
¡Y qué decir de los audios difundidos por el investigado Zamir Villaverde; y de las revelaciones de la colaboradora eficaz Karelim López!
El silencio se ha apoderado de Palacio de Gobierno, y cada día que pasa vemos que el entorno del jefe de Estado está más involucrado en presuntos actos de corrupción… pero él se mantiene inmutable.
Por lo pronto, el fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, ya notificó al presidente Castillo para que responda una serie de preguntas, justamente por la investigación que le abrió por ser presunto cabecilla de una organización criminal que ha orquestado ilegales licitaciones en el Estado desde el Ministerio de Transportes y Comunicaciones; y tendrá que asistir el 13 de junio al Ministerio Público a brindar su declaración. Porque la tesis de la Fiscalía presume que Castillo y Silva serían cómplices, de acuerdo a lo manifestado por Zamir Villaverde, que declaró que el exministro Silva le pidió S/ 30 mil soles para que se los entregue al presidente Pedro Castillo.
Sin embargo, el exministro Juan Silva luego de dictársele prisión preliminar, hoy se encuentra como no habido, y ya pasó a conformar el grupo de prófugos que son allegados al jefe de Estado.
Entre tanto, el mandatario no se ha cruzado de brazos y hace lo imposible para que no se le investigue; porque primero a través de su defensa, interpuso un recurso de nulidad ante el Fiscal de la Nación y como éste fue rechazado, han solicitado al Poder Judicial una tutela de derechos por violar la inmunidad presidencial. Dicha audiencia será el 15 de junio en el Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria.
No obstante, el abogado del presidente, ha declarado que, si no se anula la investigación preliminar de la Fiscalía, recurrirán como última instancia al Tribunal Constitucional, vía una demanda de amparo.
Finalmente, más allá de las estrategias legales de la defensa de Pedro Castillo, sin duda, su régimen cada vez se encuentra más involucrado en actos de corrupción y si la Fiscalía cumple a cabalidad su rol como el titular de la carga de la prueba, quizá en menos de lo sospechado, el país verá una luz en medio de este oscuro túnel que mantiene a todos los peruanos en zozobra y tendremos la oportunidad de elegir a un mandatario competente y honesto que sacará al Perú del cadalso.