El último miércoles, el periodista y ufólogo mexicano Jaime Maussan presentó dos restos momificados de presunto tamaño infantil y de procedencia ‘alienígena’, hallados en el año 2017 en Nazca -Perú, aludiendo que son prueba suficiente para respaldar la existencia de vida extraterrestre. Al lugar asistieron varios especialistas de diferentes países, incluido un piloto militar que señaló que en el aire “se pueden observar estos fenómenos”, refiriéndose a las naves extraterrestres.
“Son seres no humanos que no son parte de nuestra evolución terrestre y que, después de desaparecer, no hay una evolución posterior”, dijo Maussan en el Congreso. “De acuerdo con la Universidad Autónoma de México, quien realizó los análisis de carbono 14, estos seres tienen alrededor de 1.000 años de antigüedad, es decir, no se trata de seres que fueron recuperados en naves que son estrellamientos, sino que son seres que estaban sepultados en minas de diatomea, un alga fosilizada con 17 millones de años de antigüedad, es fitoplancton que abundaba en aquel tiempo, y, al desaparecer se fosilizó”, mencionó Jaime Maussan.
Sin embargo, el hallazgo de esos especímenes de supuesta procedencia extraterrestre fue desmentido por el World Committee on Mummy Studies, una de las organizaciones más importantes en el estudio de momias, así como por otros expertos en el tema.
Por ejemplo, el Ph.D. Rodolfo Salas-Gismondi, experto afiliado a la División de Paleontología del American Museum of Natural History en Estados Unidos, quien explicó que las manos y los pies de estas momias son en realidad restos humanos a los que les amputaron los dedos en los bordes para lograr esa peculiar apariencia ‘alienígena’.
Además, en el año 2020, el arqueólogo forense Flavio Estrada, quien investigó los cadáveres en nombre del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Perú, ofreció una detallada conferencia en la que argumentó que los supuestos extraterrestres eran en realidad restos de seres humanos prehispánicos que habían sido sometidos a alteraciones con fines de lucro.
De igual forma, el médico y antropólogo físico Guido Lombardi, quien ha estudiado momias en Perú y en el mundo, indicó que los individuos de tamaños adultos son seres precolombinos “que han sido modificados con fines comerciales, y las supuestas momias pequeñas son estructuras que han sido armadas”.
En tanto, la astrónoma y divulgadora científica Julieta Fierro dijo a Wired que el proceso de traslado de las momias también resulta cuestionable debido a que se deben aislar y no ser exhibido al público.
Por su parte, el paleoantropólogo Miguel Botella, director del Laboratorio de Antropología de la Universidad de Granada, mencionó que el tema es una “farsa” debido a que ya se han investigado previamente las supuestas “momias alienígenas de Nazca”.
Finalmente, la ministra de Cultura peruana, Leslie Urteaga, señaló que ninguna entidad científica peruana ha corroborado que estos sean restos no humanos, como señala el experto mexicano.