Triunvirato Guzmán-Humala-Mendoza se junta para defender al gobierno

El fustán de color morado que se les nota a Verónika Mendoza y a Ollanta Humala, cada vez es más notorio. Si bien, ellos son rivales políticos en este proceso electoral que culminará en poco más de un mes; al parecer, se han percatado que probablemente no pasarán ni siquiera la valla el próximo 11 de abril y ante ese desalentador escenario, probablemente, les resulte más auspicioso unir fuerzas con Julio Guzmán, así como lo hicieron en noviembre de 2020, donde cada uno de ellos, desde sus linderos en la Plaza San Martín protestaban por la vacancia del corrupto y mentiroso Martín Vizcarra.

Aquel triunvirato Guzmán-Mendoza-Humala, desde las calles logró jugar en pared con el Congreso y finalmente colocaron en la presidencia interina a Francisco Sagasti.

De Julio Guzmán ya nada sorprende. Él no tiene otra cosa qué mencionar en su discurso y llama: “golpistas” a todos sus opositores. Lo mismo hizo en las protestas de noviembre, cuando aseveraba que el Congreso estaba tomado por 105 golpistas. Y ahora, con un escenario distinto, sale con el mismo discurso y llama “golpistas, criminales y desestabilizadores” a los que ponen al descubierto al gobierno morado de Sagasti y a sus “secretos mejor guardados”.

“Estamos hartos de que un grupo de golpistas y fábricas de mentiras como Willax conspiren contra la salud pública y la democracia. No se cansan de desestabilizar. Willax, López Aliaga y Ernesto Bustamante deben responder penalmente. Son unos crimínales”.

Su insolencia, al defender la indefendible gestión transitoria de Francisco Sagasti hasta cierto punto es razonable, porque todos ellos son parte de un mismo “saco morado”, aunque hoy se han convertido en todo un despropósito.

Sin embargo, las defensas a la gestión de las vacunas chinas que ejerce el gobierno morado que resultan sorprendentes, son las que realizan los candidatos presidenciales Verónika Mendoza (ex secretaría de Nadine Heredia) y Ollanta Humala.

La primera, cuando afirma:

“Son tan miserables que no les importa mentir y desinformar sobre la vacuna -la única esperanza que tenemos para acabar con la pandemia- para hacer sus negociazos, para generar caos y poner a su gente en el poder por encima de la voluntad del pueblo. No se saldrán con la suya”, en alusión al informe periodístico que propaló el periodista Beto Ortiz este fin de semana, con respecto a la poca efectividad de la vacuna china de Sinopharm.

Otra de las defensas al gobierno morado, que tampoco resulta sorprendente, es la del expresidente y candidato presidencial Ollanta Humala.

Y no resulta sorprendente, porque todos sabemos que él con Nadine Heredia fueron los “Frankenstein” que crearon a la criatura que se corre de los incendios y que durante el quinquenio nacionalista ocupó el cargo de viceministro de Mype del ministerio de la Producción.

Evidentemente, tampoco sorprende que Humala defienda la gestión de Sagasti, porque el hombre de “ciencia” que recitó a Vallejo en su juramentación, también figura en las agendas de Nadine Heredia y por eso, desde el 17 de octubre de 2011, le dieron un alto cargo en Concytec, del ministerio de Educación.

Aquí, la dura frase que esbozó el candidato Ollanta Humala el último fin de semana, luego de conocerse la denuncia periodística de Beto Ortiz:

“Boicotear el plan de vacunación, para desestabilizar al gobierno, es propio de golpistas que aún permanecen desde los 90 en el espectro político. No debemos permitir más conspiraciones contra la democracia”.

Así las cosas, es preciso recordar que tanto Verónika Mendoza y Ollanta Humala no critican ninguna acción del gobierno morado de Francisco Sagasti y en su defecto, han guardado un silencio sepulcral.

Ambos candidatos, sumados a Julio Guzmán, solamente tienen bríos para salir rabiosos desde sus redes sociales para atacar a todo aquel que ose meterse, o critique la encargatura de Francisco Sagasti.

Estaremos atentos y veremos cómo termina todo esto.