Tras suspensión de la construcción del Aeropuerto Internacional de Chinchero, gobierno firmó nueva adenda
A pesar que el ministro de Transportes anunció que estaban acelerando la construcción, las obras se suspendieron porque el ‘Consorcio Natividad Chinchero’ pidió US$ 193 millones adicionales para que continúen con la ejecución, pese a que ello no estaba contemplado en el contrato original. Sin embargo, hoy el gobierno anuncia que ha firmado una adenda para supuestamente “destrabar” el proyecto suspendido.
La construcción del Aeropuerto Internacional de Chinchero en Cusco, ha significado un rosario de controversias que solo han contribuido a dilatar aún más dicho proyecto, que hasta el momento solo habría alcanzado el 12% de su ejecución.
Hace más dos meses, exactamente el 16 de agosto el ministro de Transportes Raúl Pérez Reyes se reunió en una mesa de diálogo en la cual se comprometió con el gobernador de Cusco, el alcalde de Urubamba, el alcalde de Chinchero y los presidentes de las comunidades campesinas, a solucionar las negociaciones con el ‘Consorcio Natividad Chinchero’ para que las obras no sean paralizadas. Sin embargo, el pasado 06 de septiembre el Consorcio envió una comunicación oficial dirigida al propio MTC anunciando la suspensión de todas las obras.
No obstante, el gobierno de Dina Boluarte Zegarra hoy anunció con “bombos y platillos” que acaban de firmar la adenda del proyecto del Aeropuerto Internacional de Chinchero en Cusco, con el fin de destrabar esta obra de gran envergadura.
“Este aeropuerto no es solo una obra de infraestructura; representa un motor para impulsar la conectividad, el desarrollo socioeconómico y la generación de oportunidades para más peruanos. Su construcción es una prioridad para nuestro gobierno, y nada detendrá esta obra”, refirió la presidenta durante el acto protocolar realizado en Palacio de Gobierno y explicó que, tras la firma de la adenda, esperan culminar el terminal de pasajeros y el cerco perimétrico, dentro de los plazos establecidos. Asimismo, anunció que la pista de aterrizaje y la torre de control pasarán por un nuevo proceso de licitación, que comenzará en 2025.
Además, la jefa de Estado subrayó que en su fase inicial el aeropuerto de Chinchero recibirá a más de siete millones y medio de pasajeros al año.
“Con ello, dinamizaremos el turismo nacional e internacional, así como la economía local. Más de cinco mil peruanos se beneficiarán con empleos directos, y más de un millón se verán favorecidos en sectores como el turismo, comercio y transporte”, culminó la mandataria.
Como se sabe, Cusco espera hace más de 20 años la culminación de la construcción de la obra del Aeropuerto Internacional de Chinchero; sin embargo, los lobbies, las componendas y las evidentes presiones políticas y empresariales originaron que este ambicioso proyecto no tenga fecha cierta de entrega; sin embargo, Dina Boluarte ha lanzado una noticia que pretende alentar a los que ya no creen en la culminación de este proyecto aeroportuario.
Consorcio Natividad encargado de construcción del Aeropuerto de Chinchero exigía US$193 millones adicionales para continuar con la obra
Recordemos que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), primero durante el gobierno de Martín Vizcarra y luego con su entonces titular Eduardo González, durante la encargatura de Francisco Sagasti brindó la adjudicación para la ejecución de esta obra mediante un contrato de Estado a Estado con el Gobierno de Corea, al Consorcio Natividad de Chinchero. El costo total de la obra era de US$427 millones; que incluía un terminal de pasajeros, que sería ocho veces más grande que el actual aeropuerto de Cusco Alejandro Velasco Astete, y debía ejecutarse en 47 meses; sin embargo, el “Consorcio Natividad de Chinchero” integrado por las empresas Hyundai Engineering & Construction CO. LTD (Corea), Sinohydro Corporation Limited (China), ICA Constructora S.A de C.V. (México) y HV Contratistas (Perú), pidió este año un adicional de US$193 millones para terminar y concluir la construcción del aeropuerto de Chinchero, argumentando que el cálculo inicial del presupuesto que realizaron no fue el adecuado, debido a la inflación y actualización de precios. Es decir, pidieron al gobierno―fuera del contrato―este excesivo incremento en el costo del presupuesto, sencillamente porque el Consorcio se encontraba desfinanciado para continuar con el proyecto. Sin embargo, el Ejecutivo anuncia el destrabe de dicha obra, pero no informa los detalles de la adenda firmada y tampoco explica si el Estado peruano desembolsará los US$193 millones adicionales.