Zona recuperada. Aproximadamente a las 5 de la mañana de ayer, pasadas las celebraciones navideñas, un contingente del Comando Especial Vraem, del Ejército y de la Policía Nacional del Perú (PNP) ingresaron en la planta de gas natural ubicada en Kepashiato, provincia de La Convención, Cusco, para desalojar a 127 pobladores que ocupaban dicha sede exigiendo el cierre del Congreso.
“Se pide apoyo a los hermanos de Kiteni e Ivochote, los tienen de rehenes a nuestros compañeros (…) ¡A sumarse, compañeros de emergencia!”, se escuchó decir a uno de los pobladores.
Las fuerzas del orden antes de intervenir pidieron a los manifestantes que se retiren del lugar y que no los obligaran a utilizar la fuerza. Sin embargo, los ocupantes opusieron resistencia, lo que ocasionó un saldo de dos heridos. Ninguno de ellos con armas de fuego.
Cabe resaltar que el presidente de la Sociedad Peruana de Hidrocarburos (SPH), Felipe Cantuarias, advirtió que la toma de más estaciones podría paralizar completamente el sistema de distribución y dejar al país sin su principal fuente de energía.
El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas informó, mediante un comunicado, que a las 5:15 horas un contingente de fuerzas integradas de la 33a Brigada de Infantería del Comando Especial Vraem y de la PNP logró desocupar la planta compresora de gas TGP (KP -127) que permanecía tomada por más de un centenar de personas desde hace doce días.
En el documento refiere que, “pese a la actitud hostil mostrada por los manifestantes, las fuerzas del orden lograron controlar la situación sin que se hayan registrado daños en el personal civil, militar o policial, tampoco en la sensible infraestructura de este activo crítico, ubicado en Kumpirushiato, La Convención, Cusco”.
También señala que en la refriega resultaron dos policontusos leves que fueron atendidos en el centro de salud de Kepashiato, los mismos que ya fueron dados de alta.
Asimismo, descarta la existencia de personas heridas por arma de fuego e invocan a la ciudadanía “a no dar crédito a versiones malintencionadas que tienen como objetivo azuzar la violencia en la zona”.
En tanto, la Gerencia Regional de Salud del Gobierno Regional del Cusco también emitió un comunicado al respecto.
Dijo que en el enfrentamiento resultaron dos personas heridas: M.C.T.Q., de sexo femenino, de 45 años, policontusa leve., y N.S.C., de sexo masculino, 39 años, policontuso y con herida en la región craneal. Menciona que los pacientes estuvieron en observación durante tres horas y luego salieron de alta.
Precisa que el Centro de Salud de Kepashiato no reportó atención a heridos de bala —como falsamente circuló en las redes sociales— y que no había fallecidos debido a la intervención del Ejército.
Por su parte, el ministro de Defensa, Jorge Chávez, resaltó que “era una necesidad” recuperar la planta de gas natural que había sido tomada por manifestantes en la localidad de Kepashiato, manifestando que gran parte de la población estaba resultando afectada por dicha medida de fuerza.
“Era una necesidad, no solamente por recuperar un activo crítico, sino que esa toma equivocada, desde mi punto de vista, de esa planta en Kepashiato de las transportadoras de gas […] estaba afectando a gran parte de nuestra población”, declaró ante la prensa.
En esa línea, precisó que se estaba perjudicando el suministro de energía eléctrica, no solamente en el Cusco, sino a nivel nacional en aquellos sectores donde se utiliza el gas.
“Estaba afectando la labor denodada de nuestros taxistas, que transportan a nuestro personal y que es una fuente de generación de trabajo a nivel nacional”, agregó el ministro Chávez.