Solo en Lima y Callao se pierde una hora y treinta minutos al día por persona a causa del congestionamiento. Perdidas rondarían alrededor de 20 mil millones de soles anuales. Hoy se reunió el gremio empresarial de transporte en la comisión del congreso con la congresista Juárez.
Mientras Perú ya está implementando el mejor transporte marítimo, tiene por otro lado el peor transporte terrestre posible. Como dijo la congresista Juárez hoy: «Creo que sí bien no estamos en el límite, sí creemos que estamos próximos en que esta situación sea insostenible. Hoy en Lima cualquier hora es hora punta».
Falta de fiscalización, gestión ineficiente del tráfico y proyectos viales paralizados fueron los puntos señalados por el gremio de transporte en la comisión del congreso.
El parque automotor en Lima tiene un promedio de edad de 14 años, el cual incide en la contaminación del aire y en la reducción de la expectativa de vida de los limeños, 2.3 años.
Javier Marchese Quiros quien preside el gremio de Unión Nacional de transportistas señaló en la mesa de la comisión la necesidad de un estado de emergencia del transporte terrestre. También se refirió a un mayor congestionamiento de Lima ante la presencia de Chancay, esto respecto a las cargas que provendrán del megapuerto y a la falta de una modernización vial.
Jaime Graña, Gerente general de la asociación automotriz del Perú y representante de la Alianza empresarial de transporte terrestre, enfatizó la crisis actual de transporte que «nos ha llevado a un proceso de involución. Hemos pasado de tener buses a estar movilizados por colectivos (…) y en una inseguridad que amenaza a nuestros chóferes».
También mencionó que la situación es tal que «tenemos una congestión vehicular que nos lleva a una velocidad promedio de 13km/h y en hora punta puede llegar a 7km/h , el equivalente al paso de un peatón».
Por tal motivo junto a la diputada Juárez, han elaborado una moción de orden del día que se verá en el último pleno (si Dios quiere), el cual solicita al poder ejecutivo declare estado de emergencia al sistema de transporte de Lima y Callao, esto por 60 días con el objeto de implementar urgentemente medidas concretas para transformar el parque automotriz, así como el sistema vial.
El gremio se mostró en contra de la legalización en la circulación de autos colectivos, y se mostró a favor de subsidios y beneficios fiscales para su sector en cuanto a una repotencialización del sistema de buses por uno híbrido (eléctrico y de gas).