Internacionales
Trabajadores de una fábrica de Iphone en China huyen de las nuevas medidas laborales impuestas por Foxconn
Apple recurre a los servicios en China de Foxconn debido a los bajos costos en mano de obra, sin embargo trabajar ahí muchas veces se asemeja a estar en una prisión.
Trabajar casi 60 horas a la semana, muchas veces de pie y haciendo el mismo movimiento repetitivo durante toda la jornada laboral hasta que las articulaciones empiezan a dolerte, todo para que tengas en tus manos el nuevo Iphone del mercado.
Por norma, dentro de las instalaciones de la compañía taiwanesa Foxconn, principal abastecedor de la marca Apple, se tiene instaurado el “modo silencio”, lo que significa no poder hablar con tu compañero solo que se trate de temas netamente laborales. El stress, la fatiga, y una visible alteración mental para recibir a fin de mes un sueldo de aproximadamente 220 euros, hacen que muchos de sus trabajadores tengan que escapar horrorizados por las condiciones laborales, esto sumado a la drástica medida adoptada por la compañía por un nuevo brote del Covid-19 en Zhengzhou (China).
Según informó Bloomberg, los problemas incluso llegaron a la alimentación debido a que solo los trabajadores que se mantenían en la línea de producción fueron provistos de meriendas. Los trabajadores que hacían aislamiento en dormitorios debido a que tenían COVID-19 solo recibían pan y fideos instantáneos.
Es común que los trabajadores vivan en complejos instalados junto a este tipo de fábricas en China. Sin embargo, una vez en sus domicilios la pesadilla no termina; las condiciones de higiene y salubridad brillan por su ausencia, según la narración de un reportero del Shanghai Evenining News quien ingresó de infiltrado. Los trabajadores pernoctan en habitaciones con literas donde seis u ocho personas conviven hacinadas, por las que pagan un alquiler de unos 13 euros al mes.
Aunque parezca increíble, la compañía viene obligando a sus empleados a firmar un contrato con una cláusula que les impide suicidarse. La condición contractual hace prometer al trabajador que no se suicidirá y que eximirá de toda responsabilidad a la compañía en «el caso de heridas producidas por causas no accidentales».
Y ese mensaje no es gratuito ya que desde el año 2008 se han reportado más de 30 suicidios dentro de sus instalaciones. El motivo es solo uno: las inhumanas condiciones laborales.
Escapar del infierno
Recientemente, a través de las redes sociales logra apreciar a sujetos subiendo las cercas de seguridad de la fábrica para huir, pues no soportan estar un día más estar sujetos a jornadas nada alejadas a la esclavitud.
El éxodo se produce después de informes de que Foxconn puso en cuarentena a varios trabajadores tras un brote de COVID-19 en la fábrica.
Apple’s iPhone plant run by Foxconn in Zhengzhou, has grappled with a COVID-19 outbreak and placed under lockdown. In this video uploaded on WeChat with a hashtag “The Great Escape in real life(现实版大逃亡),” workers are escaping from the Foxconn campus and trying to return home pic.twitter.com/HDdMdmMUGk
— Munkyoung Shin (@munkyoung_s) October 30, 2022
La instalación de Foxconn en Zhengzhou puede acomodar hasta 350.000 trabajadores, pero no está claro cuántos había allí actualmente o cuántos de ellos se vieron afectados por las restricciones por el coronavirus.
A principios de esta semana, la prensa local informó que se había implementado un sistema de “bucle cerrado” en la fábrica que restringía los movimientos de los trabajadores entre su residencia y la planta.