Imponer barreras en pleno siglo 21 resulta ya descabellado si se trata de construir muros como si se tratara de la edad media. El Tribunal Constitucional (TC) cerró el año con una sentencia sumamente importante sobre un tema que ha estado dando vueltas durante cuatro años sin que se tome una decisión. El magistrado Gustavo Gutiérrez Ticse señaló que de manera unánime se decidió que el muro que divide los distritos Villa María del Triunfo (VMT) y La Molina tiene que ser derribado en un plazo de 180 días.
“¿Por qué razón? Porque lo que muestra no solo es un atentado a la libertad de tránsito, sino, sobre todo, es un muro discriminatorio, porque divide dos clases sociales, y eso es inadmisible en una democracia contemporánea”, señaló para RPP.
Señaló que desde el TC vienen tratando de contribuir a la paz social, pero dejó en claro que esta decisión no significa que van a dejar margen para las invasiones. “Todo lo contrario, exhortamos a que dicten leyes represivas al tráfico de terrenos, y que en esos espacios públicos haya parques, espacios de recreación”, apuntó.
Gutiérrez Ticse recalcó que el libre tránsito es un derecho constitucional, pero más que todo es el mensaje de vulneración a la igualdad, porque no puede ser que los peruanos se dividan por clases sociales, lo que calificó como inadmisible.
“Esto ya no ocurre en ninguna parte del mundo. Esta sentencia creo que va a dejar un precedente importante y más bien diríamos que los poderes públicos, y la sociedad civil, deben enrumbar en busca de diálogo, paz social, entendimiento, tolerancia y respeto a las instituciones”, precisó.
En efecto, tal como se pueden apreciar en distintas pistas de la ciudad, los propios vecinos de diversos distritos vienen enrejando calles enteras, con el argumento de que se están protegiendo de la delincuencia, sin embargo, muchas veces, cierran el único acceso para otros vecinos, quienes tienen que bordear largos trayectos para llegar a sus domicilios. Con la sentencia venidera, miles de ciudadanos que se sientan perjudicados podrán aducir que se les está vulnerando la libertad de tránsito.
El magistrado dijo que solo falta que se publique la sentencia. Lo que ocurre es que la tradición en el Tribunal Constitucional ha sido que, por una cuestión de transparencia para que la opinión pública no piense que se cambian los votos, se adelanta el sentido de los votos, pero la sentencia se publica después que se colectan las firmas. Pero confirmó: “El plazo para el retiro del muro es de 180 días una vez que se publican la sentencia”.
Agregó que esos son los temas que tenemos, “con un país dividido desde los inicios de la República, tenemos una postergación de los aspectos sociales de la lucha por la igualdad, y lo postergamos”.
De cara al próximo año, Gutiérrez Ticse dijo que ese aspecto social es algo que el TC quiere cambiar. “Eso es lo que esperamos hacer el próximo año en el TC. Tenemos muchos casos sociales donde vamos a guardar la absoluta independencia y fortaleza para poder resolver”.