La historia que narra la película Sound of Freedom viene sacudiendo los cimientos de la cinematografía y política norteamericana. En su momento y según el productor del filme, Netflix, Disney y Amazon le dieron la espalda, pero luego de su estreno realizado el Día de la Independencia de Estados Unidos (4 de julio) el filme dirigido por Alejandro Monteverde, producida por Jorge Verástegui, protagonizada por Jim Caviezel (La pasión de Cristo) y recomendada por Mel Gibson, se ha convertido en un éxito de taquilla recaudando el día de su estreno más de 14 millones de dólares.
La trama de la cinta aborda el submundo del tráfico de personas y la pedofilia en América Latina y los Estados Unidos. La historia, basada en hechos reales, detalla las operaciones de Tim Ballard, un exagente del gobierno estadounidense que renuncia a su trabajo para adentrarse en el sórdido mundo del tráfico humano con la única finalidad de salvar la vida de miles de niños. Por más horrorosa que parezca la historia, es una asquerosa realidad que incluso nos hace recordar a políticos y multimillonarios como el magnate Jeffrey Epstein, abusador de niños que misteriosamente murió en prisión en agosto de 2019.
El rechazo de plataformas como Amazon, Disney o Netflix para proyectar Sound of Freedom no es una casualidad: Estados Unidos es el país número uno en el consumo de pedofilia. Según un informe del FBI, en EE.UU. se trafica gente de México, Centro América y Sudamérica. La gran mayoría de esas personas son niños que se compran y venden por sexo. A esta espantosa realidad se suma que el 90% de victimas jamás aparecen.
Esta red de explotación sexual contra niños y adolescentes continúa expandiéndose por distintos países, uno de ellos es el Perú. Según el Ministerio del Interior, entre enero a mayo de 2023 han desaparecido 3,614 niños y adolescentes. Y de aquella escalofriante cifra 2,890 son mujeres.
La película Sound of Freedom todavía no tiene fecha de estreno en los cines peruanos, pero en las redes sociales los usuarios vienen escribiendo y preguntando cuándo será el estreno. Ni Cinemark ni Cineplanet se han pronunciado sobre el filme. El mensaje de la película es claro: “Los niños de Dios no están a la venta”. Nuestra moral tampoco.
