Sigrid Bazán critica a parlamentaria Amuruz por romper los protocolos sanitarios, pero la captan asistiendo a reunión social sin mascarilla

Conducta antiética. Bien pareciera que para la congresista Sigrid Bazán ser ético corresponde a todos a excepción de ella misma, pues las fotos difundidas por el diario Correo desdicen todo lo que pregonaba últimamente.

En las imágenes del 24 de julio de este año se aprecia a la todavía no juramentada congresista participando de una reunión en el local Fuego ubicado en el distrito de Miraflores, sin respetar las normas de bioseguridad, olvidándose, en todo momento, de la mascarilla, y que nos encontramos a puertas de una tercera ola.

Vistiendo un jean, zapatillas y polo negro, la parlamentaria de Juntos Por el Perú, conversaba despreocupada con sus amistades, incluso, apoyando su mano en el hombro de uno de los presentes a la reunión. ¿Distancia social? Cero.

Diario Correo escribe en su nota que intentó ponerse en contacto con la parlamentaria treintañera, pero ésta no respondió llamada alguna. Fue su personal de prensa a través de WhatsApp que informó que por el momento no podía atender consultas. Y claro que no iba a atender si la legisladora no es congruente con lo que dice.

No es necesario retroceder tanto en el tiempo cuando la ex conductora de televisión criticara fuertemente a la congresista Roselli Amuruz, de la agrupación Avanza País, por haber asistido a una reunión con motivos de su onomástico.

“Y es que incapacidad moral debería ser, más bien, no respetar las reglas a puertas de la tercera ola”, escribió la legisladora de izquierda en su cuenta de Twitter.