SE PRESENTÓ NI PUTA NI SANTA «UNA GUÍA PARA TIRAR MEJOR»

Ayer sábado 02 de noviembre se presentó en el auditorio Antonio Cisneros de la 34 Feria del Libro Ricardo Palma, el libro Ni Puta ni Santa, de editorial San Marcos, y que tiene como autora, nada menos que a la polémica ex -vedette, hoy convertida en periodista, Mónica Cabrejos.

Dentro de la mesa de presentación, los más intervinientes y figurativos fueron Carla García y Beto Ortiz, que manifestaban sus desenfados sexuales, entre diálogos picantes y provocadores como: «Éste libro es una guía para tirar mejor».

La sala se mostró colmada con más de ciento cincuenta personas que atentas ante el dialogo de los amigos mediáticos Ortiz-García, más parecía un reality de la televisión.

Posteriormente, Mónica intervino en calidad de autora, admitiendo que el titulo proviene de una frase de una activista francesa que luchaba contra los abusos del machismo imperante hacia las mujeres. Por eso ella, inspirada en esa lucha, abrió su blog hace algunos años, acuñándole así el nombre “Ni Puta Ni Santa” en el que hasta el día de hoy confronta a los mitos sexuales existentes. Hablando sin tapujos sobre el punto G, o si el tamaño del pene importa en un encuentro sexual, o de lo normal que es para ellas fingir orgasmos falsos, y que también, una mujer que colecciona hombres tiene derecho a escuchar una proposición decente de matrimonio, entre otras cosas.

Lo cierto es que esta chica, al empezar su carrera de vedette, despegó meteóricamente por el hecho de mostrar sus carnes, en innumerables performances streaptiseros, hasta culminar en un calendario mostrándose como vino al mundo.

Pero, curiosamente, mucha gente no le perdona que de tener un pasado ligero, y haber trabajado en clubes nocturnos, y el haber ostentado innumerables parejas de turno;  ella haya decidido abandonar esa lides, para incursionar en el terreno “pensante”, pues, empezó a estudiar la carrera de periodismo, y al parecer se volvió lectora (debo reconocer que ingresé a su blog, y la verdad sus textos están medianamente construidos), porque a simple vista, con el pasar del tiempo mejoró su dicción, y capacidad expresiva, aunque posteriormente ingresó a conducir programas televisivos sin contenido trascendente.

Lo raro es que, en la presentación de su libro de doscientas páginas, Mónica a pesar de sus treinta y siete años, mostró un reparo al conversar con el público, no parecía esa chica que busca pelearse con el mundo, y trató de mantener esa postura de “lady”, aunque dejó entrever que está cansada del acoso de los hombres para con las mujeres; en las calles, en la televisión, y en los puestos de trabajo. Es por eso que en su libro, destapa muchas taras, y complejos de ellos, y ellas, invitando a tener que ser más libres. Aunque “El Chavón” la desmentía, afirmando que lo que se encuentra en sus páginas, no es otra cosa que su historia personal, y sexual; pero ella desmentía, respondiendo que en su libro solo ha plasmado las vivencias de cuatro amigas personales.

Si bien es cierto que en las ultimas ferias de libros se han presentado publicaciones de gente que no tiene nada que ver con la literatura (“Yo Pedro” de Suarez-Vértiz; “El club de la muerte” de Aldo Miyashiro; “Yo puedo Sé que puedo” de Alejandra Baigorria) y que han sido records de ventas (hablo de los dos primeros), es importante que la oferta editorial sea más abierta e inclusiva al público, porque los verdaderos textos culturales, de historia y literatura esencial, cada vez más se van por las nubes, y hacen que el mediatismo editorial vaya cobrando más fuerza, ganando de esa forma, a más adeptos de los inconsistente, trivial, y farandulero; por ejemplo, Planeta, una de las editoriales más importantes, con tal de obtener jugosos réditos financieros, en los últimos años se ha encargado de publicar cualquier cosa.

Beto Ortiz (que de un tiempo a esta parte, pareciera que quisiera aprender más del mundo del arte y la cultura, pues, se le ve seguido en exposiciones, y eventos culturales. Pero como dicen: “La cabra siempre tira al monte”) al iniciar su intervención, y con su típica actitud desafiante y atravesada dijo: Solo espero que en la puerta no estén Iván Thays y Alonso Cueto protestando por la presentación de este tipo de libros.