Literatura

Se metieron con la generación equivocada

Published

on

— ¡Bea, prende la tele! — Me dice Lito exaltado — ¡El Perú se fue al diablo!
— ¿Qué pasó?
— ¡El Congreso votó a favor de la vacancia del presidente!
— ¿Quéeee? — Sencillamente no podía creer que una sarta de impresentables congresistas, hayan enviado a nuestro presidente a su casa.

— ¿Sabes qué es lo que más me molesta? — Me dice Lito, indignado, mientras vemos en la televisión al presidente dando su último mensaje a la nación rodeado de todo su gabinete ministerial— ¡Que no pudieron esperar 6 meses a que terminará su gobierno para investigarlo!
Estamos en medio de una pandemia, la peor crisis económica en décadas y a esta gente se le ocurre vacar al presidente justo en este momento. No es floro. La Bolsa de Valores terminó en caída libre y el dólar registro uno de los picos más altos desde el 2008. Alucinante.
Esa noche Lito y yo no pudimos dormir, estábamos pegadazos a la televisión viendo llenos de rabia e impotencia cómo el congreso nombraba presidente a un completo desconocido, con estudios inconclusos y cuyo logro mayor era criar gallos de pelea en su pueblo.

— ¡Increíble! ¿Qué hace ese señor de presidente? — Me dice Lito histérico — ¡Otra vez nos metieron la rata!
—Y ahora, ¿quién podrá defendernos? — Le respondí en tono irónico, tratando de tranquilizarlo, resignada.

No pasó ni un minuto y en las redes comenzó a viralizarse los memes “Merino no es mi presidente” “Merino, no te reconoce ni tu vieja”, “Miedo solo a la chancla de mi mamá”. Asimismo, se estaba anunciando la concentración de marchas de protestas a nivel nacional, los gestores: la generación millennial y centennials, ¡Muchos no superaban los veinte años! Un slogan circulaba por todos lados “Se metieron con la generación equivocada”.

—¡No puede ser! ¡Estos chibolos pulpines están rompiéndola! ¡Qué capos! — Le digo a Lito emocionada hasta las lágrimas al ver a estos jóvenes tan bien organizados, algunos disfrazados de Pikachú, Gokú o Sailor Moon. Elmo marchando pacíficamente y coreando al unísono las letras del himno nacional, «Contigo Peru», «Sucio Policía» de Narcosis, «Triciclo Perú» de Los Mojarras, entre otros hitazos. Al otro lado, veíamos como los policías les metían palo y los gaseaban sin piedad hasta desde helicópteros, pero ellos lejos de asustarse iban documentando con sus celulares minuto a minuto todo en las redes para que todo el mundo observará. ¡Y no eran 200 como la prensa decía, eran miles!

La injusticia y el desproporcionado uso de la fuerza por parte de la policía despertó a todas las demás generaciones de nuestro letargo. Hemos visto cómo empresarios llegaban en sus camionetas para dejarles agua, medicinas o ayudar en lo que se pueda. Hasta las amas de casa salieron a marchar con sus cacerolas, las mascotitas se dejaban colocar carteles con frases “Merino me das rabia, aunque este vacunado”. Yo por ejemplo me bajé el aplicativo “cacerolapp” para hacer un bullón que salía como furia desde mis parlantes por el balcón de mi depa. Lito e Insecto se dedicaron hacer ilustraciones digitales que pasaban a los chibolos para que los viralizaran por las redes.

Esta mal llamada “generación de cristal”, a la que hemos injustamente menospreciado y hasta ridiculizado nos han demostrado con su valentía, el gran amor que tienen por nuestra patria. No solo hicieron que la primera marcha que se produjo el jueves pasado fuera considerada como una de las más concurridas de los últimos 20 años sino que se tumbaron al gobierno de turno en menos de una semana, y pusieron de nuevo la democracia en marcha con un nuevo presidente, un profesional destacado, de amplia trayectoria y que esperamos pueda dar la talla al cargo. —¿Ya ves que las marchas si funcionan?— Me dice Lito mientras me abraza sintiendo que todo ha vuelto de nuevo a su cauce, pero lamentando el fallecimiento de dos jóvenes y la desaparición de varios otros.

Ayer, saliendo del centro Bancario de la Residencial San Felipe luego de pagar unas detracciones y con la mente abstraída en los negocios encontré de golpe, un cartel con las fotos de los mártires de la marcha que lucía una de las frases más icónicas de las protestas:
“Mamá salí a defender mi patria si no regreso me fui con ella”.

Confieso que leer esa frase no solo me emocionó sino también me lleno de orgullo por esta nueva generación que de “cristal” no tiene nada sino que más bien ¡Valen un Perú!

Comentarios

Trending

Exit mobile version