Carlos Lorenzo Amigo y Ana Bustinduy Amador son esposos, españoles, y libreros. La crisis española les impulsó para emigrar a otros esperanzadores horizontes, y el Perú ha sido el mejor destino para sus sueños guardados, abrir una librería para los amantes de la buena lectura, y las buenas tertulias.
El lugar, una casa del distrito de Barranco, justamente al costado de la que fue morada de una de sus emblemáticas poetas del cuarenta Nelly Fonseca Recavarren, que en aquella época firmaba sus versos como Carlos Alberto Fonseca.
Curiosamente en Barranco algunos bares culturales han fungido de librerías en los últimos años. Y hoy, La Libre podría ser considerada como la única librería del distrito. Como dice el eslogan de la librería: más libros, más libres.
¿Cómo fue la aventura de llegar al Perú?
Ana: Llegamos hace casi un año, y la aventura se dio por el mal momento que vive España, pues, todos sabemos que está en una crisis no solo económica, sino que es una crisis del todo. Y de pronto, por el trabajo de Carlos que es agrónomo tuvimos la oportunidad de venir acá.
Carlos: Fue así que decidimos hacer maletas y venirnos para acá.
¿Por qué abrir una librería?
Carlos: Y al ver la explosión de creatividad cultural que hay en Lima, la verdad es que nos animamos.
Ana: Al saber de todos esos autores y autoras, y de las editoriales independientes, salió la idea de decir: y por qué no intentamos abrir un espacio para que esos libros tengan un lugar.
Ustedes se han afincado en Barranco, que alberga múltiples leyendas literarias, al recorrer sus calles ¿Qué pensaron antes de abrir la librería?
Carlos: Lo primero que vimos es que no había librerías. Y todas estaban en Miraflores, y luego caminamos por Quilca, y el Centro, pero sentimos que en Barranco nos faltaba algo, nos faltaba una librería.
¿Por qué La Libre?
La Libre tiene ese juego, es un concepto libre, en cuanto a libertad de ideas de los libros.
Sobre los títulos ¿Qué van a encontrar aquí los lectores?
Queremos que sean géneros variados, pero siempre con un filtro; no vamos a tener los “superventas” por el hecho de que sean solo los “superventas”, y si en verdad lo merecen, pues, estarán aquí, pero también apostamos por las editoriales independientes peruanas, tanto por su filosofía, como por el nivel de susprecios. Lo que hemos observado es que el principal problema que hay son los precios. Los libros aquí son muy caros, pero vemos que se están editando cosas preciosas, y hay una serie de editoriales que son muy económicas, pero como ciertas librerías pertenecen a grandes grupos de distribución, no suelen darles el espacio que quizá merezcan.
¿Y los libros de contracultura?
Y claro que sí. Eso es lo que pensamos; la diversidad de ideas significa ser más libres, y aquellas cosas que están fuera del espacio aceptable, estarán aquí, y el mainstream, por así decirlo, más aporta que resta.
Además de ofrecer toda clase de libros ¿La Libre piensa ofrecer otras alternativas culturales?
Desde el principio, esa es la idea. Tenemos la suerte de contar con un espacio que está en la tercera sala en la que pretendemos organizar talleres, presentaciones, y conversatorios. Y aquellas personas que tengan una idea, pues, que vengan, las comentamos, y que sea un espacio vivo para hacer todo eso, ytambién queremos hacer red con los colectivos que hay en el barrio de Barranco.
Mucha gente dice ¿Abrir una librería acaso es negocio?
Nuestro objetivo desde luego es otro. Y rico no te haces, lo que queremos es vivir un poco el sueño. En España tenemos una tradición, yo llevé diez años trabajando en una librería, antes de empezar a trabajar en la construcción. Y siempre hemos sido apasionados de los libros.
Para terminar, ¿En qué horarios atenderán?
En principio vamos a estar de Lunes a Domingo, a partir del mediodía hasta las ocho de la noche, y los fines de semana como jueves, viernes y sábado, quizá un poco más tarde, porque aquí en Barranco es una locura.