Los peruanos, cuando son cautivados por una agraciada fémina, no dudan ni un segundo en compararla con la popular muñeca Barbie, así la fisonomía de su amada diste considerablemente de las perfectas curvas de la chica de plástico.
Ante el próximo estreno de la película del popular personaje de Mattel, el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) acaba de revelar que en el Perú muchos padres de familia han considerado nombrar a sus hijos e hijas como los personajes de ficción Barbie y Ken.
A lo largo de todo el territorio patrio, Barbie tiene una amplia comunidad de fanáticos, toda vez que hablamos de un producto con más de 60 años de antigüedad. Por ello, no es de extrañar que muchos peruanos hayan decidido nombrar a sus retoños con esos peculiares nombres.
Al respecto, Reniec detalla que en nuestro país hay 67 peruanas con el nombre Barbie, mientras que 2583 peruanos llevan el nombre del musculoso Ken, en alusión al interés amoroso de la muñeca.
“La fiebre Barbie se hace presente en los nombres de algunas peruanas y peruanos”, resaltó el organismo en sus redes sociales.
Pero la franquicia de Mattel no se limita a Barbie y Ken. Hay otros personajes que también han inspirado a los peruanos al momento de nombrar a sus hijos.
Así, de acuerdo a Reniec, hay 988 peruanas llamadas Chelsea, hermana de Barbie en la ficción); 62 nombradas Stacie, la otra hermana de la blonda muñeca de moda; y 8 bautizadas como Skipper, la cual viene a ser su tercera hermana. En tanto, también aparecen 3 ciudadanos con el nombre de Taffy, la mascota de la muñeca.
Historia de la muñeca de moda
Barbara Millicent Roberts es el nombre completo de Barbie, la cual un 9 de marzo de 1959 apareció por primera vez en unos grandes almacenes estadounidenses, haciéndose famosa rápidamente a nivel global.
Barbie fue un invento de la cofundadora y presidenta de Mattel, Ruth Handler, quien se dio cuenta de que muchas niñas se aburrían con las muñecas bebé que dominaban el mercado en ese momento. Inspirada en la muñeca alemana para adultos llamada ‘Bild Lilli’, la cual formaba parte de las tiras cómicas del diario Bild, Ruth y su marido Elliot compraron sus derechos y el resto es historia.