“Cállate pues hermano, déjame hablar”, dijo en un momento el congresista Edwin Martínez mientras el clima de la polémica se encendía en el hemiciclo. El Pleno del Congreso dejó en cuarto intermedio el dictamen de ley que propone crear incentivos fiscales para el fomento de las actividades cinematográficas y audiovisuales en Perú. Mientras tanto, la batalla cultural se volvió a levantar en el Congreso donde se habló de todo menos de lo esencial.
La discusión se fue por la tangente de la guerra cultural en torno a los contenidos ideológicos de algunas películas peruanas financiadas en parte por los estímulos del gobierno.
El congresista Alex Flores al respecto se pronunció advirtiendo:
“Estamos queriendo entrometernos dentro del arte (…) toda producción lleva una carga ideológica”.
El congresista conocido como El Niño que preside la Comisión de Economía refirió sobre la norma que el artículo 13.3 señala “no puede beneficiarse de los estímulos económicos señalados en el art. 13 y 14 obras cinematográficas o audiovisuales destinadas a pautas publicitarias, propaganda electoral o en beneficio de una organización política o aquellas que atenten al Estado de Derecho o contravengan la defensa, la seguridad o el orden interno del país o que vulneren los principios reconocidos en la Constitución”. Por lo mencionado según El Niño, podría haber una censura.
El congresista Ilich López Ureña (AP) afirmó que “se requiere tener un dictamen que no genere controversias y que vaya en beneficio del país”.
Por su parte, Ruth Luque señaló que la actitud que se viene llevando respecto al tema cultural “no permiten la contraposición de ideas ni de posiciones”.
En la misma línea retórica crítica a los estímulos al cine el parlamentario Edwin Martínez, quien avivó la polémica en su breve intervención.
“Todo cuesta poeta. Amar, vivir, soñar. Todo cuesta, nada es gratis en la vida”. Luego se refirió a las películas victimizadas que “pretenden cambiar la historia del Perú”. Y después el Congreso se encendió como no había pasado durante la intervención de Santiváñez en la mañana, cuando Martínez dijo:
“Cuando ustedes, los terroristas dinamitaban el suelo patrio…” haciendo un gesto con el brazo que parecía señalar a los congresistas de la bancada de izquierda. La bancada de izquierda se puso a gritar furiosa.
“Le pido retire la palabra” le exigió el presidente del Congreso Salhuana que presidía la sesión. El congresista Martínez respondió: “yo me refiero a los terroristas de los 80 y 90”.
Finalmente, retiró la palabra y continuó en el minuto que le estaba de tiempo para solo empeorar las cosas al ser un momento interrumpido y decir: “cállate pues hermano, déjame hablar”. Finalmente pidió un aplauso por el soldado peruano.
Ya al cierre, el presidente del Congreso mencionó que “Paddington se filmó en Colombia, tal vez por falta de incentivos al cine peruano”.
El proyecto de ley cayó en el limbo del cuarto intermedio antes de cerrarse la sesión de la tarde e irse todos a almorzar. La batalla cultural, va a continuar.