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¿Racista yo? ¡Fuera, cholo de m#$&@! La patética historia de Fiorella Ras Viani [VIDEO]
En pleno siglo 21 aún existen personas que se sienten superiores a otras por su color de piel, su cuenta bancaria o su apellido.
De acuerdo a nuestro Código Penal, en su artículo 323, se puede leer claramente que aquel que cometa actos de discriminación como los cometidos por la ciudadana Fiorella Elisa Ras Viani en plena Semana Santa en la ciudad del Cusco, recibirá una sanción equivalente a 3 o 4 años de pena privativa de la libertad, sin embargo, como en otras ocasiones, ninguno de los denunciados por racismo ha pisado el frío suelo de una celda.
Y es que como dicen “el papel lo aguanta todo” y tal parece que esa ley termina resultando solo un ‘saludo a la bandera’ para aquellos que se encuentran en una buena posición social y económica. Tal es el caso de la señorita Fiorella Ras Viani, quien entre empujones y gritos insultó a un portero de un local nocturno en la calle Teqsecocha, en la ‘Ciudad Imperial’, ante la pasiva mirada de varios espectadores.
Fiorella Elisa Ras Viani
— @𝑶𝒋𝒐𝒇𝒊𝒔𝒈ó𝒏 (@MAVR1963) April 21, 2025
Es el nombre de esta racista
Busquenla y manden saludos a la malcriada
pic.twitter.com/nE8Xc545lY
Resulta sumamente preocupante que una mujer que probablemente haya recibido una privilegiada educación, muy superior a la de millones de peruanos, no haya interiorizado aquellas enseñanzas humanísticas básicas que bien dicen que todos somos iguales ante la ley. A propósito de ello, nuestra Carta Magna, en el artículo 2, inciso 2, indica que se encuentra terminantemente prohibido discriminar. Y no es que eso se encuentre a mitad del texto para que cueste encontrarlo, sino que está ¡en la primera página! Que no se haya tomado la molestia de haberlo revisado ya dice mucho sobre sus intereses.
Ya en las redes sociales se hablará durante las próximas horas de su mala conducta y su lengua viperina, sin embargo, el gran ejemplo que se daría a toda la sociedad es que la justicia finalmente caiga a todos por igual, incluyendo obviamente a la privilegiada Fiorella Ras Viani, quien ya cerró todas sus redes sociales y hasta el momento tiene paradero desconocido. Tampoco se le ha visto pidiendo disculpas públicas o al menos enviando un video reconociendo que en ese momento estaba completamente ebria y que cometió un error; lo único que ha hecho es esconder la cabeza y desaparecer cual roedor de un depredador.