El congresista Oscar Zea, del Bloque Magisterial, quiere regresar a ser ministro de Desarrollo Agrario y para ello promueve la interpelación de la actual titular, Nelly Paredes, con el concurso de Fuerza Popular y de Perú Libre, su ex partido político.
Zea pretende regresar al Midagri pese a que el año pasado fue cesado tras una revelación periodística donde quedó al descubierto que había montado una red de corrupción junto a su asesor y entonces secretario general, Paul Jaimes, quien junto a sus allegados cobraban jugosas comisiones en la designación de funcionarios.
A ello se suma que en su gestión no pudo comprar ni un kilo de urea pues siempre se descubrían irregularidades en las licitaciones pues no ganaban sus favoritos. Zea trae consigo una lista de cuestionados exfuncionarios del gobierno de Pedro Castillo que pretenden volver a dirigir nefastos procesos de licitación como el de la urea y otros en beneficio de sus propios intereses y postores cuestionados.
En la lista se encuentra María Carolina Israel Palacios, quien llegó a cobrar S/ 723 mil en los últimos 8 de dicho portafolio: S/ 504 mil en AgroRural (en 05 años) y S/ 219 mil (en 03 años) como funcionaria del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor).
Ella es allegada el extitular del Midagri y congresista del Bloque Magisterial, Óscar Zea, quien la nombró asesora de la Alta Dirección y, por consiguiente, directora ejecutiva del Programa de Compensaciones para la Competitividad (Agroideas) sin experiencia para el cargo. Solo con la complacencia del entonces secretario general, Paul Jaime. La condición: que contrate a todos los «suertudos».
Otro integrante de esta estructura es Rómulo Antúnez, títere del falso rondero Marino Flores y de Lourdes Huanca, activistas del hoy reo Pedro Castillo Terrones, quien tiene además denuncias por acoso sexual, apropiación ilícita, secuestro, abuso de autoridad y disturbios.
También aparece Rogelio Huamani Carbajal, que, pese a ser solo un bachiller fue designado jefe de Agrorural en la gestión de Zea, con el padrinazgo del sentenciado por corrupción Vladimir Cerrón, exgobernador regional de Junín.
Otro que está en carrera es Luis Sirlopú quien pretende regresar como director ejecutivo del Programa sub sectorial de Irrigaciones (PSI), y en cuya gestión contrató a enfermeras y profesores en puestos diseñados para ingenieros agrícolas y agrónomos.
Estos son solo un ejemplo de los cuestionados ex funcionarios que están detrás de la campaña de desprestigio de un ministerio que debe servir a agricultores y no convertirse en una agencia de empleos y de licitaciones a dedo como en la época de Pedro Castillo y sus ministros secuaces.
