Iniciamos el mes de Halloween con la precuela de un clásico que ha arrasado entre los lectores hace un par de años: «Drácula, el origen», lectura indispensable para completar el panorama del vampiro que ha poblado nuestras historias de terror desde siempre. Pero también tenemos estrenos, como el que nos entrega Luis Moncada Vigo con «Mirada de poeta», una novela donde lo cotidiano aterriza en los problemas y el drama provocado por un accidente entre un grupo de amigos que sobreviven a un país que aún no termina de componerse. Retomamos el terror y el suspenso con «El Golem», otro clásico poblado de misterio y leyenda. Terminamos la semana con un clásico editado por Godot: «Tres Guineas», de Virginia Woolf, una lectura necesaria en estos tiempos que corren.
Un clásico de la literatura de terror que aborda el origen del vampiro que durante décadas a atormentado los sueños de sus millones de lectores. «¿Por dónde empezar? Hay tanto que contar y un tiempo tan escaso y valioso para contarlo… pero yo sé cuándo cambió todo. Llegado el final de una semana en concreto, yo habría sanado, nuestra querida Nana Ellen se habría ido y una familia estaría muerta. Comenzó de un modo bastante inocente, escuchando un poco a hurtadillas. No éramos más que unos críos —yo tenía siete años; Matilda, ocho—, y, sin embargo, aquella temporada otoñal jamás caería en el olvido. Y empezó con tan sólo dos palabras: ENTERRADO VIVO.»
Mirada de poeta Luis Moncada Vigo Planeta S/49.99
Primera entrega de Luis Moncada Vigo, monólogo que aspira a ser novela, novela que va emergiendo como la humedad en ciertas superficies conforme el fluir de una conciencia crítica del statu quo, avanza inapelable abordando cada uno de los temas sociales y políticos de nuestra realidad nacional. En medio, un grupo de amigos obreros intenta resolver la enigmática pregunta de cuándo se jodió el Perú alrededor de una mesa provista de botellas de cerveza que habrán de apurar después de cada pichanga de fútbol semanal. Ellos se reunen en torno al llamado de Alonso, un poeta inédito que les hará soñar con fundar una nueva república en la que ellos por fin serán considerados ciudadanos. Sin embargo, un accidente lo trastocará todo.
El Golem Gustav Meyrink Alianza Editorial S/43 soles
Novela de culto, El Golem se ha convertido en un clásico del caos y del miedo. Bienvenido, lector, al mundo del sueño. Del sueño que empapa desde su primera línea a esta novela hipnótica. En ella Athanasius Pernath, sumido en una atmósfera crepuscular que envuelve el sombrío gueto judío de Praga, se ve mezclado en peripecias propias y ajenas. Athanasius es dos personas separadas por treinta años de distancia. O tal vez no. O tal vez más de dos. En su febril ensoñación se mezclan personajes incómodos, amores diversos y leyendas judías como la del Golem, una criatura de barro alumbrada por un rabino y que ahora permanece encerrada en una celda del gueto de la que sale cada 33 años para sembrar en él la muerte y la destrucción.
Tres Guineas Virginia Woolf Godot S/51 soles
Hacer a un lado todas las preocupaciones y estudios terrenales y delegarlos a otra persona constituye una motivación muy atractiva para algunos; pues indudablemente hay quienes quieren retirarse y estudiar, como demuestran la teología con sus refinamientos y la erudición con sus sutilezas; para otros, es cierto, esa motivación es una motivación pobre, mezquina, el motivo de la separación entre la Iglesia y el pueblo, entre la literatura y el pueblo, entre el marido y la mujer, y que ha desempeñado un papel importante en sacar de quicio a la totalidad de la Commonwealth. Pero cualesquiera sean las motivaciones fuertes e inconscientes que subyacen a la exclusión de las mujeres del sacerdocio -y es evidente que aquí no vamos a enumerarlas, mucho menos escarbar hasta sus raíces-, la hija del hombre instruido puede confirmar, a partir de su experiencia, que “es común, e incluso frecuente, que dichas concepciones sobrevivan en el adulto a pesar de la irracionalidad que las caracteriza y traicionen su presencia debajo del nivel del pensamiento consciente a causa la fuerza de los sentimientos que despiertan.