Escribe Carlos Vargas
El capitalismo está mostrando su rostro más siniestro en dos de los países más pobres de América Latina. En Nicaragua el gobierno bolivariano de Daniel Ortega atacó directamente la jubilación de los trabajadores, con un pensionazo que era una versión “moderada” del ataque que le exigía el Fondo Monetario Internacional (FMI), un ataque esencialmente similar al impuesto por el gobierno de Macri a los trabajadores argentinos.
Ortega ordenó reducir en 5% la pensión de los jubilados (supuestamente para financiar otros servicios) y aumentar en casi 1% el aporte de los asalariados. Si bien también se propuso el aumento del aporte de los patrones, esto no afectaría sus ganancias por el contrario sí golpearía los ingresos de los trabajadores, ingresos que ya eran los más bajos del continente.
Daniel Ortega ya había dejado claro abiertamente que él representaba los intereses de los grandes banqueros y del imperialismo. En primer lugar, Ortega llegó al gobierno el 2007 en pacto con partidos burgueses de derecha y con la Iglesia Católica, aceptando tratados con EEUU como el DR-CAFTA y la penalización total del aborto.
El año pasado asistió a la AACCLA, un evento empresarial internacional donde fue aplaudido por los grandes capitalistas de la región y por la embajadora de los EEUU. En ese evento Ortega reconoció que “ahora toca [negociar con el FMI]…Hay que adoptar determinadas medidas que exigen aporte de diferentes sectores de la sociedad nicaragüense” y habló de que su modelo económico, basado en la “unidad de empresarios, trabajadores y gobierno”, hacía de Nicaragua un polo de atracción de inversiones. La embajadora de EEUU por su parte saludó su mensaje y dijo que “el modelo de Nicaragua…es algo muy especial, es algo muy distinto”[i]. Este es el verdadero rostro del gobierno “sandinista” de Ortega, muy diferente a las mentiras de Telesur y de los castro-chavistas.
Frente al pensionazo de Ortega, los trabajadores y estudiantes pobres respondieron con movilizaciones que se fueron radicalizando en la medida que el gobierno les ofrecía resistencia. Sin embargo, cuando Ortega se vio forzado a retroceder en su contrarreforma, las masas ya habían comprendido que para poder comer tenían derrocar al gobierno, gobierno que ahora identifican con la dictadura de los Somoza.
Ortega ha respondido con la represión policial y paramilitar y hasta el momento se cuentan más de 300 muertos y miles de heridos. Más allá de las críticas formales de EEUU y la derecha, lo cierto es que el conjunto de capitalistas respaldan en los hechos al gobierno de Ortega y quieren como él ahogar en sangre el combate de las masas hambrientas de Nicaragua. Por ejemplo, Ortega ha declarado tres días de luto ante el fallecimiento del jefe de la Iglesia Católica en Nicaragua, Miguel Obando, el mismo que Ortega había nombrado presidente de la “Comisión de Paz y Reconciliación”.
En el caso de Haití, tenemos un país que desde la invasión de EEUU de 1994 (que ya había ocupado el país de 1915-1934), ha hecho borrosa la diferencia entre una colonia y una semicolonia. El año pasado se retiraron gran parte de los soldados de la ONU que habían hecho el relevo a los estadounidenses que habían vuelto a ocupar Haití el 2004. Hay que destacar que la invasión de la ONU fue encabezada por el Brasil de Lula y respaldada por todos los gobiernos bolivarianos. Sin embargo, entre las disputas electorales coloniales, hace unos años irrumpió la movilización independiente de las masas que esclavizadas, hambrientas y sedientas de justicia han venido buscando acabar con la ocupación imperialista[ii].
El gobierno de Jovenel Moïse, a solo año y medio de su fraudulenta elección, está enfrentando un nuevo levantamiento proletario, esta vez contra el aumento del precio del petróleo, el diesel y el kerosene impuesto por órdenes del FMI, en un país que fue golpeado por un terremoto el 2010 y por un huracán el año pasado. Moïse ha retirado el gasolinazo y su primer ministro se ha visto obligado a renunciar, sin embargo, el gobierno no termina de salir de su crisis que expresa la crisis general del dominio colonial capitalista.
[i] https://confidencial.com.ni/empresarios-aplauden-ortega-evento-aaccla/
[ii] http://nrci.org/blog/2016/04/16/haiti-la-farsa-electoral-de-la-ocupacion-imperialista/