En un principio, la Policía Nacional del Perú (PNP) y la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) anunció el retorno de Alejandro Sánchez Sánchez, dueño de la casa del jirón Sarratea, ubicada en Breña-Lima, inmueble donde el expresidente Pedro Castillo Terrones mantenía reuniones extraoficiales antes y durante el inicio de su mandato, tras emitirse una medida de expulsión de Estados Unidos.
Sin embargo, Sánchez Sánchez, por el momento no será expulsado de Estados Unidos, porque presentó una medida cautelar para evitar su deportación. En esa línea, la justicia norteamericana deberá resolver el recurso en un plazo aproximado de 15 días.
Cabe referir que el empresario y amigo de Pedro Castillo fue capturado por efectivos de migración estadounidenses en Texas en septiembre del 2023 cuando intentaba cruzar la frontera y tras siete meses de proceso de expulsión, retornaría al Perú, por una orden de captura vigente emitida por la Policía Nacional.
En el documento protocolar que detalla el traslado de Sánchez Sánchez a nuestro país, se menciona que iba a ser parte de un grupo de 142 personas, entre ellos, 116 varones y 16 mujeres, y arribaría en un vuelo chárter que iba a aterrizar en el Grupo N° 8 de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), del Callao; sin embargo, dicho traslado aéreo fue suspendido.
Alejandro Sánchez, que también se encuentra implicado en el caso ‘Asesores en la sombra’, en el momento que pise suelo peruano, inmediatamente deberá cumplir con los 30 meses de prisión preventiva que le impuso el Poder Judicial por el presunto delito de organización criminal.
