El premier Adrianzén se presentó hoy en la Comisión de Presupuesto del Congreso, y afirmó que como consecuencia de la reducción de conflictos las «mesas de diálogo se hacen menos necesarias».
El premier destacó el desarrollo de políticas de alerta para conflictos sociales refiriendo que en 2023 llegaron a 68% de prevención y el 2024 «vamos a terminar con 74% y esperamos que en el año 2025 llegar al 80%». Esto en cuanto a prevención de conflictos.
En el caso de las Bambas, citó como ejemplo mientras lanzaba una mirada sin pensamiento a su hoja, «en el año 2023 el corredor de las Bambas tuvo una paralización de aproximadamente cuatro meses en conjunto, mientras este año 2024 solo hemos tenido 8 días de paralización en el corredor de las Bambas. Lo que es sin duda una muestra significativa que la política preventiva está dando sendos resultados».
Sobre este punto mencionó que mientras en 2023 hubo 2079 reuniones de diálogo, se proyecta para el 2024 concluir con solo 1900 reuniones. Y que la meta para el 2025 es de 1700. «¿Por qué disminuyen?» dijo mirando torvamente a algún congresista ausente en la atención, «Porque la situación de conflictividad va mejorando de una manera significativa. En consecuencia, estas mesas de diálogo se hacen menos necesarias».
En su participación en la comisión referente al presupuesto del próximo año, comunicó entre otras cosas logros como el aumento en la erradicación de cultivos de hojas de coca (de 22 mil hectáreas erradicadas en 2023, a 25 mil hectáreas en este año y con una proyección de 30 mil para el próximo año). Lo cual refirió así «siempre hemos estado erradicando mucho menos y ahora estamos erradicando más».
Para el próximo año el mayor aumento presupuestal será el referido a INEI por motivo de tres censos, de vivienda, comunidades y población, que se llevará a cabo el próximo año. Ahora bien, el presupuesto para el próximo año de Osiptel será de -1,2%, Osignermin será de -13,9%, y habrá ligeros aumentos como en Sunass de un miserable 1,7%, Indecopi se incrementa a 6,6% y la DINI aumenta su presupuesto a 37,9%.
El hecho que el presupuesto de Sunass sea tan bajo hace pensar que no hay grandes planes de llevar el servicio de agua a las zonas que más lo necesitan, o al menos no está en los planes del gobierno. Porque de haber un proyecto serio, repercutiría en el presupuesto del ente encargado de supervisar y un 1,7% de aumento dice todo sobre un plan de agua para el Perú en 2025. Simplemente no es prioridad en este gobierno.