El lobby Pizarro está en modo activo. La prensa, algunos jugadores de la selección y hasta unos cuantos hinchas creen que Claudio Pizarro debe jugar en el mundial de Rusia 2018 (obviamente, si es que clasificamos). Pero lo que debe entender Pizarro es que su ciclo ya pasó. Porque El bombardero de los Andes, el 3 de octubre del 2018 cumplirá 40 años y ya tiene la polvora mojada.
Hay que ser bien atrevido e ingenuo para pensar que con su pésimo rendimiento en la selección y con los diversos problemas y escándalos que provocó su convocatoria en años anteriores, el profe Gareca lo convoque. No te necesitamos Pizarro, y eso creo que lo sabe muy bien Gareca. Porque lo que necesitamos, son delanteros que hagan goles.
La selección no es una cooperativa ni un tour de exploradores, y si Pizarro quiere ir a Rusia, pues que vaya a una agencia de viajes. Querer jugar por Perú a estas alturas, es una muestra más de su egoísmo, protagonismo, egocentrismo y lobbysmo, que por mucho tiempo le hizo daño a la selección.
Pizarro debe entender que esta viejo para jugar fútbol, y que detrás de él existen jóvenes de 20 años que sueñan con jugar en un mundial, como él hace 20 años lo soñó. Así que debe tener claro que el tiempo de la dedocracia ya pasó. En el fútbol no existen vacas sagradas, y eso lo debemos entender todos.
Intentar a estas alturas querer subirte al avión de la selección, es también querer pisar la cabeza de millones de jóvenes que buscan una oportunidad no solo en el fútbol, sino también en la vida. No te conviertas en lo que despreciamos. Tu tiempo ha caducado.
Y sobre los cuatro fantásticos, deben saber que fue un equipo ficticio, es decir, nunca existieron. Fue una ficción más del periodismo deportivo mediocre y mermelero, que nos engaña durante décadas, y que ahora nuevamente intenta resucitar a los muertos.
Para muchos hinchas la ilusión esta intacta, pero la realidad es dura. Por eso y por mucho más: Pizarro te queremos, pero lejos de la selección.