Veo Octubre. No en gran pantalla. No rodeado de gente emocionada que va a cambiar el mundo y va imponer una era nueva de justicia sobre la faz de la Tierra. Veo Octubre. No rodeado de autistas hiper conectados en una sala oscura pero usando masturbando su celular… Estoy en mi compu. En Youtube. Veo Octubre. Solo, en mi cuarto de podrido pequeño burgués individualista. Y me digo: ¡Cataluña! Pero… esta película fue hecha… no por un pueblo sino por un hombre, ¿un hombre-pueblo? Oh, la autodeterminación de los cines… Y no la determinación del Partido, El Estado, Las Élites, Los Ricos, El Libre Mercado y Las Transnacionales.
Oh, y qué pasó, díganme ustedes, cineastas acomodaticios de hoy, con el hermoso sueño de hacer la revolución también dentro del cine… Y ahora, con ustedes, ¡MTV! Eisenstein es contemporáneo de todos nosotros, y en especial de Guy Maddin. (¿Hay un ‘principio femenino’ en Octubre, como en The heart of the world, de Maddin?). Quién es quién, donde andará la ‘sustancia’ de la revolución. Cuando la podías tocar, o eso creías. Sergei, te hubieras divertido como chancho mirando MTV. Ambos son: pro-pa-gan-da. En el placer de armar con pequeños pedacitos… hermanos.
Dorsky, sin embargo, hablaría de montaje polivalente, y entonces… Oye, veo Octubre y veo figuritas. Una expresión de Eisenstein, la recuerdo mucho: pensamiento sensual. El origen del arte es el placer sexual que sientes cuando re-haces el mundo… Cuando haces un mundo. Cuando el mundo es algo que haces. Cuando eres libre para hacerte tu mundo.El mensaje ‘subterráneo’ de Eisenstein es: la revolución del placer. Y él padeció más bien ‘el placer de la revolución’ en aplastarlo, como a tantos otros tipos extraordinarios que eran lo mejor de Rusia.
La bota de Stalin, el ‘ingeniero de hombres’. Sí pues, veo Octubre, y sé que la revolución, en Eisenstein, es erótica. Materia plástica que amasa como le viene en gana. Si el sexo, como dicen, es el lujo de los pobres, el arte ese ese lujo que te dice que hay otro mundo posible, donde la libertad no sea una película que ves y luego olvidas, como si todo fuera un sueño, incluida tu existencia.
Cuarta película del Ciclo Octubre Ruso 100 años que revolucionaron al mundo, en la Universidad de Cienacias y Humanidades, hoy a las 7:15 pm (A. Bolivia 537 Breña).
