Con voz de acero la parlamentaria Yarrow dijo hoy en una tediosa sesión del pleno del Congreso:
«A ver señora presidenta, esto me parece más una comisión para poner puestos de trabajo. Nosotros estamos creando muchísimas comisiones solo para colocar a amigos dentro de las comisiones las cuales no dan resultados. Tenemos una comisión ordinaria de descentralización, una comisión ordinaria de fiscalización, a parte la contraloría les generó un presupuesto y no hacen nada. Y ahora en el congreso queremos hacer una extensión más para controlar a los gobiernos regionales. Entonces ¿Para qué tenemos la comisión de descentralización con asesores y personal? No creo necesario crear más comisiones especiales cuando ni siquiera las hemos cerrado. Pido a los congresistas que no creemos más burocracia en el congreso. Hay muchas comisiones que ni siquiera han presentado informes y esto cuando los mismos congresistas no se presentan. Ayer hemos pasado vergüenza, teniendo ministros para la interpelación y con los sillones vacíos, pero para firmar el pedido de interpelación, ahí si que estamos presentes porque hay cámaras».
Inmediatamente después de su participación y una breve ovación, intervino el congresista Elías Varas quien dijo:
«Veo aquí en el congreso un ánimo de desacreditarnos a la institución de parte de un grupo, pero hay una motivación». Luego el parlamentario refirió que las sesiones del pleno “distraen a los congresistas de sus comisiones”. También refirió que tienen en las comisiones mucha carga de trabajo. «¿Qué hacemos en tantas sesiones del pleno donde se aprueban tantas leyes y el ejecutivo no las reglamenta?». Añadió que a las sesiones que se vienen realizando los martes «y a veces los miércoles» podrían en cambio hacerlo todo solo los jueves. Comunicativamente, si el parlamentario buscaba defender a la institución pues déjeme decirle que el resumen de su participación se resume en una frase: “para que sesionar tanto”.
La comunicación es importante y en este toreo me queda claro que la congresista Yarrow se llevó sin necesidad de responder un par de orejas, rabo y pata.