Actualidad
Municipalidad de Chiclayo recibió 220 toneladas de comida el año pasado y aún no lo reparte a las familias más necesitadas
Según los regidores el retraso se debe a que el alcalde “quiere poner el logo del municipio” en las bolsas.
Indignante. La Municipalidad Provincial de José Leonardo Ortiz, ubicado en Lambayeque, gestionó en noviembre del año pasado una donación de 450 toneladas de alimentos con el programa Qali Warma. Sin embargo, hasta el día de hoy, alrededor de 220 toneladas de productos de primera necesidad se encuentran almacenados y corren el riesgo de sobrepasar su fecha de vencimiento.
Según manifestaciones del regidor James Prado, el día 20 de noviembre se realizó un acuerdo con el Colegio Nicolás La Torre para el almacenamiento de los alimentos solo para una semana, sin embargo, ya han pasado casi cuatro meses y aún no hay fecha para su distribución a las familias más pobres del sector.
“Las canastas están desde el 20 de noviembre. Se supone que en el mes de diciembre se debieron entregar todas las canastas, pero por el interés de imprimir unas bolsas para que salga el logo de la municipalidad -a pesar de que estos productos son de Qali Warma- la entrega se ha retrasado tres meses”, indicó Prado.
Sobre el inminente vencimiento de los productos el regidor mencionó que, los productos como las menestras están a punto de vencer este 20 de marzo.
Asimismo, el presidente de la Confederación de Asociaciones de Padres de Familia del Perú, José Ramos Rojas, indicó que, según inventario, se detectó que los productos se encuentran empolvados y con deficiencias por la falta de cuidado.
“Aquí nadie retira esto (…) estamos preocupados, ¿Cómo es posible que a pesar de que no tenemos qué comer hayan tantos alimentos a punto de perderse?”, lamentó Ramos.
En esa misma línea de cuestionamientos la regidora Pamela Mairena Fox, encargada de haber gestionado el pedido con Qali Warma, detalló que el retraso se debe porque el alcalde aún no firma un documento. La regidora criticó que los funcionarios pierdan tiempo y dinero en mandar a realizar las bolsas con los logos del municipio.
“No se distribuyó porque no tenían logo (…) el presupuesto que se había gastado para los logos son de S/13 000 a S/20 000 por 50 000 bolsas. El logo no se come, hacer un gasto excesivo de este tipo, para mí, es ‘figuretismo’”, enfatizó Mairena Fox.
Por su parte, el municipio señala que el retraso se generó porque aún no han identificado a los “grupos de riesgo”.