La gestión del incompetente Fredy Escobar Zamalloa como director de la DDC de Cusco ha sido una de las más nefastas en la historia de la institución. Su renuncia viene siendo celebrada por el Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Cultura.
El señor Escobar permitió que se vulnere gran cantidad de nuestro Patrimonio arqueológico. En octubre de 2020, mediante un comunicado firmado por diversos frentes de Cusco, se señaló: “consideramos que ya es hora que estas autoridades y funcionarios den un paso al costado para que nuevos profesionales idóneos asuman las tareas constitucionales que corresponden al Ministerio de Cultura como ente comprometido con la defensa de nuestro patrimonio arqueológico”. El pedido era válido, pero lamentablemente en el gobierno de Martín Vizcarra y Francisco Sagasti, los ministros de Cultura de turno protegieron la ineptitud del exdirector de la DDC de Cusco.
Los trabajadores del MINCUL denunciaron a la prensa que la DDC de Cusco se había convertido en la agencia de empleo de las amantes y los amigos de los trabajadores del Ministerio de Cultura. La mencionada gestión tiene diversas denuncias de corrupción, entre ellas resalta la del Hotel Sheraton de Cusco, donde vienen siendo investigados, arqueólogos, arquitectos y diversos funcionarios que hasta la fecha incluso viene laborando en la DDC de Cusco.
El sindicato de Trabajadores del Ministerio de Cultura de Cusco, en enero del 2020 fue enfático en señalar la crisis institucional de la DDC. Mediante un memorial dirigido a la exministra de Cultura Sonia Guillén (investigada por el caso Richard Swing) manifestó: “Nuestra institución cultural durante los últimos años viene atravesando por una crisis total de carácter administrativo, funcional y técnico, debido a la mala conducción del señor Fredy Domingo Escobar Zamalloa y sus directores de línea. Así está rodeado de funcionarios incompetentes e inmorales de anteriores gestiones hoy cuestionadas por la justicia, resultando por tanto totalmente nefasta su gestión en desmedro del interés supremo del Estado como es este nuestro caso, la conservación, preservación y puesta en valor de nuestro Patrimonio Cultural de la Nación, y sobre todo de la región Cusco”.
La limpieza de los malos elementos que estuvieron enquistados en el Ministerio de Cultura sigue en marcha. Se espera que el ministro Ciro Gálvez continúe restructurando una de las carteras que en la última década solo ha servido como una caja chica para la argolla caviar y para dirigir pagos para personajes como Richard Swing.
Hasta que no se designe a su remplazo, el señor Fredy Escobar seguirá en el cargo. Una fuente del Ministerio de Cultura nos mencionó que todavía no se ha elegido al nuevo director. Esperemos sea pronto.
El periodista Mario Carrión en su programa de TV que se transmite en la ciudad del Cusco, también comentó sobre la renuncia de Fredy Escobar.