MINCUL: Exministro Alejandro Neyra firmó el último día de su gestión una resolución que limpió a ex viceministro Luis Felipe Villacorta de un escándalo de corrupción

Mientras que el exministro de Cultura Alejandro Neyra en su último día de gestión salía en todos los medios anunciando la declaración de Chankillo como Patrimonio de la Humanidad, por otro lado estaba blindando al ex viceministro de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales, Luis Felipe Wenceslao Villacorta Ostolaza, implicado en actos de corrupción, porque su empresa Arqueo Andes SAC ganó la buena pro para ejecutar el saneamiento del evento Rally Dakar, en el proceso de Adjudicación simplificada N° 034-2018/MC, por un monto de S/359, 337,49 nuevos soles.

La resolución firmada por Alejandro Neyra el 27 de julio, limpia del proceso administrativo disciplinario a Luis Felipe Villacorta, además, ordena archivar el proceso. Esta acción de Alejandro Neyra representa un insulto a la lucha contra la corrupción.

Aquel nefasto favorecimiento a la empresa ligada al exservidor del Estado, Villacorta Ostolaza, y que en mayo del 2018 tuvo la venia de la hoy investigada exministra de Cultura Patricia Balbuena, se sumó a un rosario de escándalos y denuncias protagonizados por el Ministerio Cultura.

Aquí los antecedentes:

El 15 de mayo de 2018, Luis Villacorta Ostolaza fue designado por la exministra Patricia Balbuena y el expresidente Martín Vizcarra, como Viceministro de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales del Ministerio de Cultura; pero al mismo tiempo, desde el año 2009, era propietario y gerente general de la empresa Arqueo Andes SAC (Investigación, Gestión y Difusión del Patrimonio Cultural).

No obstante, a la semana siguiente, el 25 de mayo de 2018, Villacorta renunció a su cargo en el ámbito privado en la empresa mencionada y se abocó a su labor en el Mincul. 

Hasta allí, todo se desarrollaba de forma normal, pero luego de unos meses, lo sospechoso llegó cuando su empresa ganó la buena pro para ejecutar obras de evaluaciones arqueológicas y excavaciones, en el marco del evento deportivo Rally Dakar.

Esa situación, desde un principio fue irregular e ilícita, porque un funcionario del Estado o alguna entidad privada que estuviera ligada a él, no podía obtener una licitación, porque por ley estaba impedido de hacerlo. 

Lo extraño y curioso de este caso, es que, en plena licitación, para que todo se muestre “concebido”, los funcionarios del Ministerio de Cultura, después de haber realizado las evaluaciones pertinentes y calificaciones de otras ofertas, decidieron postergar la etapa de otorgamiento de la buena pro, dizque por complejidad en la evaluación y, por tanto, los miembros del Comité de Selección acordaron otorgarle la buena pro justamente, a Arqueo Andes SAC. Y se adjudicó la obra a esta firma, por el monto de casi S/ 360 mil soles, frente a otras tres empresas que también presentaron sus ofertas.

  

Así las cosas, luego de descubrirse esta irregularidad en aquel proceso de adjudicación por parte de la prensa, inmediatamente el Ministerio de Cultura liderado por la vizcarrista Patricia Balbuena trató de deslindar y lavarse las manos y el 22 de noviembre de ese año, emitió un comunicado declarando la nulidad de la buena pro de la Adjudicación Simplificada Nº 034-2018/MC otorgada a Arqueo Andes SAC, y separó al viceministro Villacorta Ostolaza de su cargo en el ministerio, obviamente, simulando una renuncia voluntaria.

Asimismo, a través de la Contraloría General de la República iniciaron una auditoria para sancionar a los responsables de aquel irregular proceso. 

La limpieza de Alejandro Neyra al caso de Luis Felipe Villacorta

Luego de casi tres años de desarrolladas las investigaciones contra Luis Villacorta Ostolaza; el ministro de Cultura saliente Alejandro Neyra Sánchez, justamente el último día de su gestión, el 27 de julio, exactamente hace dos semanas firmó la Resolución Ministerial Nº 000193-2021-DM/MC que RESUELVE. – Que no hay mérito para sancionar el procedimiento administrativo disciplinario contra Luis Felipe Villacorta Ostolaza.

Y, además, ordena ARCHIVAR dicho procedimiento administrativo disciplinario.  

El caso es que esta Resolución consta de 44º folios y entre ellos figuran una serie de argumentos inverosímiles, como el que se encuentra en el folio 33º, donde se lee que “El señor Luis Felipe Wenceslao Villacorta Ostolaza presentó sus comentarios mediante carta s/n de fecha 10 de enero del 2019, en virtud a la observación expuesta en el Informe de Auditoria Nº 003-2019-2-5765, a través de la cual concluyó en lo siguiente”:

CONCLUSION

1. El despacho viceministerial a mi cargo no tenía competencia técnica en la elaboración de los requerimientos y los Términos de Referencia Nº 5896-2018-DGPA-VMPCIC/MC toda vez que esta responsabilidad recae directamente en el área usuaria, es decir la DGPA (Dirección General de Patrimonio Arqueológico Inmueble).

Posteriormente, con respecto a la descripción de los hechos identificados producto de la investigación realizada, el 02 de noviembre de 2020, la Comisión Ad-Hoc otorgó a Villacorta Ostolaza una prorroga en el plazo para que presente sus descargos; y en ese sentido, el entonces Viceministro de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales presentó sus descargos y en su defensa incorporó 5 argumentos.

Y en el quinto argumento titulado: NO SE PUEDE SANCIONAR POR UNA DIVERGENCIA DE INTERPRETACION. – sustentó:

“Finalmente, deseo señalar que la apertura de un PAD a un servidor civil y eventual imposición de una sanción a este no puede hacerse sobre la base de elementos subjetivos, sino que requiere una efectiva demostración de su culpabilidad”. 

Posteriormente, pasan a fundamentar las razones por las cuales se archiva, y en su análisis de los medios probatorios existentes, en aquel procedimiento a través del Informe N° 0002-2021-COMISION AD-HOC de fecha 27 de julio del 2021, la Comisión Ad Hoc, en su condición de órgano instructor, recomendó declarar que no hay mérito para sancionar al señor Luis Felipe Wenceslao Villacorta Ostolaza, bajo una serie de criterios; entre ellos:

“Que, al respecto, el jurista Juan Carlos Morón Urbina, refiere que: “La norma exige el principio de personalidad de las sanciones entendido como, que la asunción de la responsabilidad debe corresponder a quien incurrió en la conducta prohibida por la ley, y por tanto, no podrá ser sancionado por hechos cometidos por otros (por ejemplo, la responsabilidad por un subordinado, o imputar responsabilidad a un integrante del cuerpo colectivo que no voto o salvo su voto) o por las denominadas responsabilidades en cascada aplicables a todos quienes participan en un proceso decisional. Por ello en principio, la Administración Pública no puede hacer responsable a una persona por un hecho ajeno, sino solo por los propios”.

Finalmente, argumentan la decisión del archivo, que dice:

“Este despacho en su condición de Órgano Sancionador en el presente procedimiento administrativo disciplinario seguido contra el señor Luis Felipe Wenceslao Villacorta Ostolaza, quien al momento de ocurridos los hechos asumió el cargo de Viceministro en el Despacho Viceministerial de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales, considera que no existe base jurídica suficiente para proponer sanción alguna en contra del precitado señor”.

En suma, con todas sus argumentaciones legales, consideran que no hay base jurídica suficiente para imponer sanción contra el exviceministro Villacorta Ostolaza, a pesar que él fue retirado de forma flagrante y de manera fundada del Ministerio de Cultura. Es decir, este señor salió por la puerta falsa de la cartera de Cultura y tal como señala el comunicado del propio Ministerio del 22 de noviembre de 2018, ellos procedieron y separaron de la cartera a aquel “elemento humano”, precisamente porque admitieron que hubo una irregularidad, entonces ¿Cómo es posible que, luego de casi tres años un ministro pusilánime como Alejandro Neyra firme una Resolución que declare que no hay mérito para sancionar a Luis Villacorta?   

¿Acaso no existe base jurídica cuando un funcionario incumple el artículo 11º de la Ley de Contrataciones con el Estado? que establece que hay un impedimento de doce (12) meses de antelación para los servidores públicos del Poder Ejecutivo, que asuman un cargo estatal, si pertenecen al ámbito privado, específicamente a una empresa, después de haber dejado el cargo por ese tiempo.

Precisamente porque se trata de evitar una probable influencia, poder de decisión y/o conflicto de intereses. Y en ese sentido, el señor Villacorta Ostolaza renunció a su empresa Arqueo Andes SAC a la semana posterior de haber sido designado Viceministro y peor aún su empresa ganó la buena pro apenas a los seis (6) meses de haber renunciado a su cargo en el ámbito privado, mientras era servidor del Estado.

En este sentido, resulta patético y una mera burla, leer el comunicado del Mincul solo por un grotesco afán de deslindar en ese momento, cuando mencionan que “El Ministerio de Cultura ratifica su compromiso con la política del gobierno de luchar frontalmente contra la corrupción y garantizará que las personas que se vean involucradas en estos actos, sean sancionadas conforme a las normas legales y éticas vigentes”.

Una burla realmente… ¿Qué han garantizado? ¿Acaso finalmente Villacorta Ostolaza ha sido sancionado?

A pesar, de que el Viceministro Luis Felipe Wenceslao Villacorta Ostolaza, renunció a su cargo de Gerente General en el mes de mayo de 2018, esta adjudicación de la buena pro que ganó su empresa, es ilegal. Ya que si revisamos el artículo 11º de la Ley de Contrataciones con el Estado, claramente establece que hay un impedimento de doce (12) meses para la empresa del cual el exviceministro fue Gerente General.

Esta noticia ha causado una gran indignación en el gremio de los arqueólogos que recurrentemente se esfuerzan en cautelar el patrimonio cultural material y una vez más nos pinta de cuerpo entero a toda esa insana cofradía que se asocia para alimentar la corrupción con el único propósito de mantenerse y seguir llenándose los bolsillos a expensas del Estado, y el exministro de Cultura Alejandro Neyra representa el grado más subalterno de un funcionario del Estado que solo ha tenido talante para hincarse en el charco que pisaron miserias humanas como el impresentable PPK, Martín Vizcarra y Francisco Sagasti. 

Aquí el reportaje de la denuncia de corrupción: