“Pedro y el Capitán” es uno de los mejores dramas del escritor uruguayo Mario Benedetti, que fue puesta en escena en un icónico teatro londinense -por vez primera-, y esto gracias a Blackborad Theatre, que la dirige el colombiano Miguel Torres Umba.
Esta obra teatral nos hace reflexionar sobre los estados de opresión y deshumanización que sufre una persona torturada.
«Dentro de un cuarto de interrogación dos hombres son llevados hasta sus límites. Pedro lucha por retener su humanidad frente al régimen opresivo y autoritario, y el capitán quien lucha por deshumanizar a Pedro sin saber que poco a poco él se convierte en víctima de su propio juego. Pedro es víctima de desaparición forzada y es sometido a torturas por parte del Capitán».
Aquí un breve resumen de la entrevista con el director Miguel Torres Umba, actor y director de teatro, guionista y dramaturgo que radica en Londres, ha participado en la producción de obras como: Dirty Dancing, Casablanca entre otras. Ha trabajado en Secret Cinema y, Tavarka Teatro. En sintonía con su producción anterior “Las cunetas florecen en Primavera”; ahora nos acaba de presentar su nueva obra teatral “Pedro y el Capitán”.
Teatro es…
“la comunión entre el artista y el público, no existe el teatro sin una historia que contar, la energía del espectador hace que el espectáculo crezca…”
¿Cuándo surge tu vocación por el teatro?
Empecé a hacer trabajo cultural desde que tenía 8 años, en la comunidad en que vivía, es una comunidad de Estrato 1, el barrio no existía, entre la gente que vino a apoyar, estaba un grupo de monjas, y crearon grupos culturales, y mi madre me inscribió en los referidos grupos. A partir de ahí, me metí al mundo cultural, realice diversas actividades como comparsas, teatro, coreográficas de folclor colombiano, entre otros. Siempre tuve clara de que quería ser actor de teatro, y afianzo mi vocación el haber estudiado en la Academia Superior de Artes de Bogotá, a los 17 años.
¿Cuándo pasaste de actor a director?
La idea de tener siempre mi propio grupo de trabajo ha existido desde que empecé, siempre entendí que para hablar de lo que quieres hablar tienes que hacerlo tú mismo. Me apasiona actuar, pero pensé que era el momento de dirigir.
¿Cómo es la industria del teatro en Inglaterra?
La industria de teatro es complejo y en especial Inglaterra, es muy difícil poder abrirte un espacio, de entrar, por ejemplo a mí no me van a ofrecer dirigir Hamlet en Royal Shakespeare Company, ya que yo no sueno como ellos quieren que suene. Ello me hizo comprender que tenía que ser yo quien liderara las ideas que pensaba y plantearlas en el teatro, a pesar de que a mí me atrae más el trabajo de actor. Por otro lado, hay poca gente que habla de estos temas, como “Pedro y el Capitán”. Como artista es importante hablar de otras problemáticas y temas distintos, ejemplo el hablar del tema de tortura, tema de migración, del costo humano de producción de la cocaína en las vidas de latinoamericanos y, la guerra de antidrogas en Latinoamérica que conlleva guerras y sufrimientos, comprender que estos temas no es de Latino América, sino de todos. Y a través de esta compaña BlackBoard Theatre que quiero plasmar mis ideas.
¿Qué es para ti Secret Cinema? ¿Qué obra dirigiste?
Con “Secret Cinema” tuve la posibilidad de ampliar mi experiencia, he dirigido varias de sus obras (performance scene), desde hace 3 años, y pensé si pude dirigir esas obras puedo hacer mis propias creaciones. He sido asistente de dirección de obras dirigidas a más de 4000 mil personas por función, como: Casablanca, Dirty Dancing, El regreso del futuro, La guerra de las galaxias, 28 días después, entre otras.
¿Cómo nació la idea de tomar ese drama de Benedetti “Pedro y el Capitán”?
Cuando lo leí por primera vez, me dije esta obra tiene que existir, tiene que armarse y exhibirse en un teatro, y después pasaron un par de años. En el momento de poner en escena una obra pienso que tiene esa obra, tiene que hablar de algo sumamente importante, y esta obra tiene ello, recordemos que Benedetti lo escribió como una situación personal, y es un tema que está ocurriendo en este momento, y se escucha todo el tiempo, ejemplo de ello es el tema de Guantánamo es bueno preguntarse qué es la tortura, puede sucederle a cualquier persona, además que mi interés con esta obra es dar a conocer el trabajo de Benedetti, es un escritor del que no se habla mucho.
La puesta en escena tiene varios objetivos: Dar a conocer al público local de Londres el tema de tortura, y a través de ellos dar a conocer al mundo que existe tortura; segundo, es difundir el trabajo de Benedetti, ¿por qué no enseñarles nuestra cultura y nuestros escritores?, eliminar esas brechas de diferencias entre diversas culturas. Que ellos sientan que nuestros problemas son de ellos y viceversa; y tercero, es traer obras de latinoamericanos a otro público, y hablar de derechos humanos a través de uno de los escritores más importantes.
¿Porque elegir estos temas y no otros de temática distinta?
Para mí es muy importante llegar al público local en Londres, y sensibilizarles sobre estos temas. Y lo hice a través de creación e integración de una narrativa paralela a la obra, Pedro fue un desaparecido forzado, y creamos la narrativa donde la esposa lo busca, solicitando a las autoridades que lo ayuden a encontrarlo, es así que creamos un interés y una conexión antes durante y después del espectáculo.
Es bueno preguntarse de dónde eres y adónde vas, ese sentido de pertenencia de muchos de los latinoamericanos aquí en Londres, Reino Unido. Y mi objetivo es crear conciencia sobre los temas que nos involucra a todos.
¿Tienes otros proyectos futuros?
Estoy pensando construir obras, con el tema de activistas políticos como Martha Cáceres, y traer obras de autores como Gabriel García Márquez. El objetivo es abrir los ojos de Europa con los ojos de los latinoamericanos, además, por qué no llevar esta producción a Latinoamérica y exhibirla.