Hace dos días el mundo de la literatura se preocupó debido a que el novelista peruano Mario Vargas Llosa había dado positivo al coronavirus, siendo inmediatamente aislado en una clínica de Madrid, donde viene siendo tratado de “complicaciones relacionadas con el covid”, según lo manifestado por su hija Morgana, a través de sus redes sociales. De acuerdo con sus hijos, el escritor de 86 años se encuentra fuera de peligro y viene evolucionando favorablemente.
El diagnóstico positivo de COVID-19 por parte del novelista se dio a conocer a mediados de esta semana y causó que Mario Vargas Llosa tuviera que posponer un evento que tenía programado en la Real Academia Española (RAE) junto al director de la institución, Santiago Muñoz Machado en honor a la Semana Cervantina. Ahora el evento tendrá lugar el próximo lunes 25 de abril, aunque no se sabe si la condición del autor le permitirá acudir en esta nueva fecha.
Pero el covid no sería lo único que aqueja su estado de salud. Según fuentes cercanas a la familia, el Nobel peruano tendría también complicaciones cardiacas que viene arrastrando desde algún tiempo. Esto viene siendo evaluado por la familia que sugirió el uso de un marcapasos para regular su ritmo cardiaco pero la propuesta fue rechazada por Mario Vargas Llosa.
Asimismo, el escritor arequipeño hace tan solo unos días ofreció una entrevista de manera virtual para un medio chileno, en donde criticaba la postura del presidente Pedro Castillo y la izquierda en toda la región de Latinoamérica.
Este mismo mes, Vargas Llosa había presentado en Madrid La mirada quita (Alfaguara), su último libro y su octavo ensayo literario. El texto es el fruto de una investigación que empezó en los meses del confinamiento y que analiza la literatura de Benito Pérez Galdós. En el acto, Llosa se mostró fatigado.
«¿Fue Pérez Galdós un gran escritor? Creo que lo fue», dijo entonces el Nobel peruano. «Fue irregular. No corregía o corregía algo pero, desde luego, no como el mismo Flaubert, que rehacía cada frase una vez tras otra para escuchar cómo sonaba. No. Él tenía una idea, así y cómo salía, él se quedaba contento. Por eso tiene obras desiguales: algunas son obras maestras y otras bastantes imperfectas. Pero cuando acertaba era muy notable».
Vargas Llosa, el último sobreviviente del “Boom Latinoamericano”
Cuestionado en la política, respetado a nivel mundial por sus obras literarias. Mario Vargas Llosa puede ser amado u odiado, pero nunca pasado desapercibido. Su pluma e ingenio lo ha llevado a ser parte de la famosa generación dorada de escritores latinoamericanos, esa misma en donde se encuentran Gabriel García Márquez, Julio Cortázar, o los mexicanos Carlos Fuentes y Juan Rulfo.
Todos ellos atravesaron el umbral de los vivos, a excepción de Vargas Llosa quien continúa publicando ensayos, cuentos o libros, como si se tratara del mero hecho de respirar, pero con una maestría que lo hace destacar sobre los demás.
Su larga carrera literaria despuntó en 1959, cuando publicó su primer libro de relatos, ‘Los jefes’, con el que obtuvo el Premio Leopoldo Alas. Pero cobró notoriedad con la publicación de la novela ‘La ciudad y los perros’, en 1963, seguida tres años después por ‘La casa verde’. Su prestigio se consolidó con su novela ‘Conversación en la Catedral’ (1969).
Siguieron después ‘Pantaleón y las visitadoras’, ‘La tía Julia y el escribidor’, ‘La guerra del fin del mundo’, ‘¿Quién mató a Palomino Molero?’, ‘Lituma en los Andes’ y ‘El pez en el agua’ (memorias de su campaña electoral), ‘La fiesta del Chivo’ o ‘El sueño del celta’, publicada poco antes de recibir el Nobel.
Ya entonces advirtió el autor peruano que quería seguir escribiendo hasta el último día de su vida y cumplió con su palabra con la publicación de obras como ‘El héroe discreto’ o ‘Tiempos recios’, sobre la agitada historia reciente de Guatemala que le valió el Premio Francisco Umbral de Novela.
Con su obra traducida a 30 lenguas, Vargas Llosa ha sido galardonado con los premios Cervantes, Príncipe de Asturias de las Letras, Biblioteca Breve, el de la Crítica Española, el Premio Nacional de Novela del Perú y el Rómulo Gallegos.