Santiago Mitre codirige su segundo filme tras El estudiante, junto al coreógrafo Juan Onofri Barbato. Aunque hubiese resultado pertinente decir “su primer film-narración-aventura-película-peliculón tras El estudiante”, la palabra movimiento le queda pintada a Los posibles, el trabajo más arrolladoramente cinético que el cine argentino ha dado en muchos, muchísimos años.
«Se trata de la adaptación del espectáculo de danza alumbrado por Onofri junto a un grupo de adolescentes que llegaron a la Casa La Salle, un centro de integración social ubicado en González Catán, buscando resguardarse de alguna penuria.
Ya como Los posibles, la obra se estrenó en el Tacec de La Plata y luego llegó a la sala AB del Centro Cultural San Martín. Ahora deslumbra desde la pantalla al cine, con una musculatura extraordinaria y un corazón enorme: Los posibles es una rapsodia de cuerpos curtidos y emociones más rasgadas aún, precisa y emocionante, nuestra demorada, necesaria y resplandeciente Amor sin barreras.» Marcelo Panozzo.