Los negocios del Gobierno chino en el Perú: De las vacunas a la electricidad
China se ha convertido en el socio comercial más importante de nuestro país, si tomamos en cuenta que, sus inversiones en suelo patrio superan los US$ 30 mil millones de dólares, repartidos en 170 empresas. Un poder económico que hoy se encuentra en el ojo de la tormenta por el escándalo de las vacunas. Pero un nuevo escándalo podría comenzar en el sector eléctrico.
En los últimos años, se ha construido una práctica nociva contra el propio Estado; es decir, entre gobernantes, altos funcionarios del aparato estatal y representantes del empresariado, se han formado cofradías oscuras que incluso deciden los destinos políticos del país. En esa línea, las denominadas puertas giratorias se han convertido en pan de cada día, en medio de nuestra estructura política.
Sin duda, el avance del gigante chino en Sudamérica ha sido vertiginoso; en especial con el financiamiento de mega proyectos en los sectores energéticos y de transportes. “China se ha convertido en un proveedor de capital clave para la región en los últimos años”, señaló para BBC Mundo, Margaret Myers, directora del Programa Asia-América Latina del Centro de Estudios Diálogo Interamericano. Asimismo, refirió: “Veremos un crecimiento de la presencia de bancos comerciales chinos que hasta ahora no habían entrado a la región”.
Los negocios de la República Popular China en Perú
Ya se cumplieron 11 años desde que se firmó el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre China y Perú y desde aquella vez, China se ha convertido en el socio comercial más importante de nuestro país, si tomamos en cuenta que, sus inversiones en suelo patrio superan los US$ 30 mil millones de dólares, repartidos en 170 empresas.
Dichas inversiones fueron diversificadas en diferentes rubros; sin embargo, los más importantes son el sector extractivo, como la minería, pesquería e hidrocarburos. Y aunque, las asimetrías económicas entre ambos países son enormes debido a nuestra políticas comerciales e industriales que se muestran desfasadas en el tiempo, a diferencia de China que tiene un marco legal claro y avanzado; el Estado peruano ha recibido con los brazos abiertos a las millonarias inversiones chinas, desde los quinquenios de Alan García, Ollanta Humala y PPK.
Sin embargo, durante el gobierno de Martín Vizcarra se construyó una especie de romance peruano-chino. Recordemos la reunión del exmandatario en mayo de 2018 en Palacio de Gobierno con el embajador chino Jia Guide, donde anunció que su país invertirá US$ 10 mil millones adicionales en los sectores telecomunicaciones, energía y minas, construcción, infraestructura y finanzas.
La alianza peruano-china, se ha afianzado mucho más desde que el 70% de las exportaciones de cobre nacional tienen como destino a China. Eso significa que el país asiático es el primer socio comercial de Perú. Recordemos que el embajador Guide, era recibido por varias personalidades, como el expresidente de Petroperú Humberto Campodónico, la exministra de Salud Patricia García, el expresidente del Congreso Luis Galarreta, la excanciller Cayetana Aljovín, el exministro de Transportes Bruno Giuffra; incluso, en marzo de 2018 con la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori; asimismo, la televisora estatal TV Perú lo visitaba a su residencia para hacerle entrevistas.
¿Qué implicancias tienen las inversiones chinas en el país? ¿Por qué el expresidente Vizcarra hablaba por teléfono con su amigo el presidente Xi Jinping?
Evidentemente, durante la pandemia iniciada en marzo de 2020, las relaciones bilaterales con el país asiático fueron más fuertes, debido a que ellos apoyaron al pueblo peruano con asistencia y donaciones; tanto así que el propio Martín Vizcarra afirmó: “La inversión china ha contribuido a la infraestructura y al desarrollo económico y social de Perú”.
Vizcarra se refería a inversiones que obedecen al sector energía, a través de centrales hidroeléctricas, transportes, mediante la hidrovía amazónica, carreteras, ferrocarriles, puertos, y telecomunicaciones, en lo concerniente a instalaciones de banda ancha en varias regiones peruanas.
Además, el gobierno chino realizó importantes donaciones a las Fuerzas Armadas. En enero de 2019 otorgó vehículos y equipamientos militares valorizados en 120 millones de yuanes o US$ 17.5 millones de dólares americanos y en cuya ceremonia de entrega en el Cuartel General del Ejército, asistió Martín Vizcarra y también donaron otro lote de materiales y equipos militares valorizados en 50 millones de yuanes, o US$ 7 millones de dólares.
Asimismo, luego de iniciarse la pandemia, en el mes de mayo de 2020, la República Popular China donó al Ministerio de Salud: ventiladores mecánicos, escáner ultrasonido, monitores de pacientes, desfibriladores y ventiladores no invasivos para la atención de pacientes graves por el covid-19, valorizados en US$ 1.5 millones de dólares. Lo curioso es, que esta donación que fue recibida por el exministro Víctor Zamora, fue otorgada por la empresa estatal China Three Gorges Corporation, la misma que hoy es dueña de Luz del Sur y de otras empresas del sector energético.
En el mes de enero de este año, también hubo otra donación en el Minsa. La República Popular China donó 170 concentradores de oxígeno, 1,200 oxímetros, 50 mil mascarillas N95, 200 mil mascarillas quirúrgicas y mil termómetros infrarrojos, entre otros implementos de protección personal. La exministra Pilar Mazzetti estuvo en la ceremonia de entrega y reconoció: “El buen nivel de relaciones entre ambos países”. Incluso, en una noticia emitida por el Ministerio de Salud, transcribieron: “La República Popular China se ha convertido en el mayor donante para el Perú, a lo que se suma un equipo de médicos chinos que llegó para aportar con sus conocimientos de la enfermedad”.
Sin duda, la República Popular China ha brindado gran ayuda al gobierno peruano. En este sentido, ¿Cuánta influencia ha cobrado el gobierno asiático en nuestro país?
Recordemos, solo como si fuera la punta de un iceberg, aquella muestra de arte denominada: “El Arte de la verdad, benevolencia, tolerancia”. Dicha exposición fue inaugurada el 04 de enero de 2019, en la Sala Paracas del Ministerio de Cultura, por la Asociación Falun Dafa del Perú y luego sucedió algo insólito. La muestra fue cancelada a los cuatro días de inaugurada; es decir el martes 08 de enero, se cerró al público y el Ministerio de Cultura no cumplió con la fecha programada para la permanencia de la exposición, tal como se había redactado en un acuerdo escrito: hasta el 30 de enero.
Lo más lamentable, fue la cobardía de los funcionarios del ministerio que no dieron una explicación veraz de los motivos por lo que la muestra fue cerrada. Sin duda, se trataba de una burda y arbitraria censura dirigida desde la embajada china en Perú.
Para ponernos en contexto, la muestra censurada mostraba pinturas de los miembros del Falun Dafa, que hacían referencia a su práctica en el país asiático y a través de los trabajos artísticos cuestionaban lo que ellos denominan: “persecución, intimidación y violencia cometida por el gobierno de China”. Cabe señalar que, en 1999 el gobierno chino prohibió la práctica del Falun Dafa, señalando que era una secta nociva para el Estado. En esa línea, la asociación afectada, comunicó que ya existían antecedentes del gobierno chino para interferir en sus actividades en el resto del mundo y que en esa ocasión según su portavoz Renzo Gómez, el motivo de la cancelación de la muestra se debía a la injerencia que la embajada china ejerció en el Ministerio de Cultura para que ésta sea censurada. Gómez, aseguró que vio un comunicado interno de la embajada de China donde se pide que se “Retire la exhibición inmediatamente”. En aquel momento, el ministro de Cultura era Rogers Valencia.
El negocio de la vacuna y la electricidad
Ahora bien, es paradójico mencionar los efectos que han provocado las influencias chinas durante el contexto de la pandemia.
Primero, en lo que se refiere a la tenaz pretensión del alza de la luz (costo de la energía eléctrica) debido al monopolio eléctrico que vienen ejerciendo, y como ahora son dueños de Luz del Sur, continúan presionando al gobierno peruano para que se incrementen las tarifas eléctricas y luego trascendió el escándalo de las vacunas.
Es decir, hoy podemos entender, porqué la señora Pilar Mazzetti, desde un principio, desechó otras propuestas y contratos de otros laboratorios de vacunas, como Sputnik, y Pfizer y se empecinó en las vacunas chinas Sinopharm. (Cabe mencionar, que la China National Pharmaceutical Group Corp; es decir, la Sinopharm es una empresa estatal china); evidentemente, ella como ministra era una pieza más en este tinglado estatal. No obstante, aún quedan preguntas sueltas ¿Por qué el gobierno peruano adquirió vacunas chinas Sinopharm? ¿Qué hay detrás de esas negociaciones?
No cabe duda, que detrás de las negociaciones y de las compras de vacunas chinas hubo algo extraño y aunque hoy Martín Vizcarra y Francisco Sagasti opten por el silencio y eviten trasparentar los procesos de dichas negociaciones, e inoculaciones secretas de vacunas; tampoco cabe duda, que detrás de las presiones de la empresas Luz del Sur (que ahora pertenece a los chinos) se pretenda subir el costo de la energía eléctrica y establecer un monopolio que afectaría a todos los peruanos.
Varias empresas incluyendo a las Mypes, han mostrado su descontento ante la pasividad de los entes reguladores y del propio Gobierno Central, por no tomar interés ante el paulatino incremento de la energía eléctrica por parte de Luz del Sur.
Hasta la fecha ni el Ministerio de Energía y Minas, ni el propio Osinergmin se han pronunciado ante este fehaciente atropello que solo trae incertidumbre para miles de empresarios que no podrían solventar más un incremento de ese elemento de necesidad primaria para que ellos continúen laborando.
Es por ello que hacen un llamado a las autoridades del Estado para que tomen en consideración la sentencia de la Acción Popular N° 28315-2019, y sean revisadas esas nuevas tarifas que pretende imponer esa compañía china.
El negociado del gobierno peruano por la vacuna china nos ha llevado al escándalo del caso Vacunagate que involucra directamente al Ministerio de Salud. El gobierno debe actuar y no esperar un nuevo escándalo en el sector eléctrico que ahora involucre al Ministerio de Energía y Minas. Ya que como es de conocimiento público que la inversión de la República Popular China viene presionando a los diversos funcionarios de las instituciones del gobierno como el COES, mediante la empresa china Luz del Sur.