Los extraviados de la marcha del 19J: Manifestantes pedían la liberación de Betssy Chávez [VIDEO]

Cuando el ex presidente Pedro Castillo repetía su lema “no más pobres en un país rico” seguramente se refería a toda su cúpula familiar y personas de confianza, los cuales acabaron con unas abultadas cuentas bancarias y un innegable incremento en su patrimonio.

Las personas que salieron a marchar este último 19 de julio (19J) no vestían ropa de exclusivas marcas o las mujeres llevaban un cabello laceado y buen cuidado como lo tenía la ex primera ministra Betssy Chávez; tampoco se había arreglado las uñas ni mucho menos se habían hecho un tratamiento facial. Al contrario, muchas de esas personas venían del Perú profundo con la ropa que siempre acostumbran, pero aquella tarde se rompían la garganta exigiendo la liberación de una mujer que ya se encontraba habituada a la vida palaciega; aquella mujer que no dejaba de cobrar su sueldo como congresista hasta el último momento, olvidándose que todos los que votaron por Castillo y compañía aún siguen esperando que se haga realidad esa mentada frase del chotano que llegó al sillón presidencial.

La marcha del 19J tuvo como eje central el repudio hacia el Ejecutivo y el Legislativo, demandando que se convoque inmediatamente una asamblea constituyente; sin embargo, no pasó desapercibido a un grupo de manifestantes llevando entre sus manos banderolas que pedían la liberación de la incondicional de Pedro Castillo. Nos referimos a Betssy Chávez, la misma que estuvo hasta el final a lado del golpista.

De acuerdo a un informe del programa Panorama, Chávez Chino, a pesar de estar investigada como coautora del golpe de Estado perpetrado por Pedro Castillo, continuaba recibiendo su sueldo de hasta S/17,680 como congresista hasta el último día que fue desaforada. Lo increíble de todo esto es que seguía cobrando ¡por no hacer nada!

En el reportaje se muestra que la también ex primera ministra de Castillo, recibió S/3,120 como concepto de parlamentaria por haber laborado solo 48 horas antes de ser designada como jefa del Gabinete Ministerial. Semejante cantidad de dinero en tan solo dos días que sus defensores tal vez no verán en sus vidas. Eso, sin contar las jugosas gratificaciones que le permitían llevar una vida llena de lujos como los vestidos que usaba diariamente.

No cabe duda que aquellos que marcharon por la mano derecha de Pedro Castillo se preguntarán si fue correcto salir a protestar por una persona que jamás han estrechado la mano, o mucho menos se han topado en un evento social o una actividad política. Ellos solamente fueron a exigir la liberación de una mujer que sí se enriqueció con el lema de Castillo, pero que no dejó nada por aquellos que esa tarde gastaron las suelas inútilmente.